Julio López
está desaparecido
hace 6428 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

recien ahora no a la mina de tambo grande
Por un mapuche cualquiera - Wednesday, Dec. 17, 2003 at 6:29 PM
lonkobaigorrita@mapuche.zzn.com

a un año y medio del referendum por el no a la mina en tambogrande el gobierno de peru dice no

El ministro peruano de Energía y Minas, Hans Fleury, confirmó este
viernes (12/12/2003) que la minera canadiense Manhattan quedó descalificada
inesperadamente para explotar la concesión de una mina de oro y cobre en
>el norte de Perú, donde su presencia sembró feroz resistencia entre la
población.

De este modo debiera cerrarse un capítulo importante en el pleito
que
mantiene la minera canadiense contra el pueblo de Tambograde, una comunidad
agrícola que hace muy poco provocó, por medio de protestas y movilizaciones,
la postergación de los talleres para la aprobación en audiencias públicas
del Estudio de Impacto Ambiental que la MMC presentó al Ministerio de Energía
y Minas. La decisión del gobierno peruano de cancelar el proyecto minero
de Tambogrande es fruto de la presión de esa comunidad.

No hay que olvidar que hace año y medio, con motivo del referéndum
convocado por el municipio de Tambogrande sobre la aprobación o rechazo
a
la presencia de la MMC en el valle, acudieron a votar 21,290 electores,
de

los cuales 19,996, es decir, el 98,6%, rechazaron a la minera. Es verdad
que el Estado no reconoce esta consulta por no haber participado la ONPE,
pero observadores internacionales y cuatro ONG garantizaron su transparencia.

A pesar del contundente rechazo, la MMC ha seguido adelante con su
proyecto y propaló hasta hace poco una millonaria campaña de publicidad,
anunciando supuestos beneficios del mismo y ofreciendo que la ecología
y
productividad de las tierras no serán afectadas. Pero los habitantes de
Tambogrande
desean continuar siendo un valle agrícola, sin la potencial amenaza de
una
explotación minera.

Por lo demás, es imposible asegurar que no habrá daños ambientales,
puesto que el yacimiento se encuentra debajo del lugar en que está ubicado
el pueblo, que deberá ser trasladado hasta en un 70% -lo que implica la
mudanza
de 9000 familias- a otro lugar. La MMC garantiza correr con el traslado
y
mejorar casas e infraestructura, pero este ofrecimiento no convence a los
agricultores.

Nadie podría asegurar que la presencia de una explotación minera
no
alterará de modo durable las condiciones del subsuelo. Ningún técnico pondría
las manos al fuego respecto a que, en una zona sometida cada cierto tiempo
al gran cataclismo que es el Fenómeno del Niño, una explotación a tajo
abierto
no sea inundada y los relaves arrastrados.

Hace año y medio, los representantes de la Manhattan Mineral Company
no pudieron convencer a la población de que una coexistencia tan próxima
entre la mina y un valle agrícola era viable. Otro argumento decisivo es
que la capacidad de creación de empleo de la mina -350 empleos directos-
es mínima frente a las 15,000 personas empleadas por el agro.

Siguiendo con las cifras, la agricultura del valle de San Lorenzo
deja
US$ 41 millones anuales y da trabajo a 6,546 familias. Las labores de la
mina generarían US$ 4 millones anuales al Estado y 350 empleos. Lo restante,
es decir, 900,000 onzas de oro y algo de plata y zinc, irían a la MMC a
lo
largo de 30 años; nada comparable al agro, que no destruye el medio ambiente
y puede continuar su utilización de la tierra por tiempo ilimitado.

Una versión interesada de los publicistas de la MMC intenta presentar
a los defensores del valle como una suerte de utópicos sostenedores de un
paraíso ecológico, una arcadia anticapitalista sin relación con el mercado.
No hay un ápice de verdad en esa caricatura. Con su rica producción de
mangos,
limones y otras frutas, Tambogrande está plenamente incorporado al circuito
de producción moderno.

Ahora la MMC, que podría retirarse con elegancia, anuncia que recurrirá
a un arbitraje y que tomará acciones legales para defender su opción y
otras
presentadas en la zona. Sería preferible que no lo haga, pues ninguna imposición
logrará su ingreso en el valle, aunque el coro de neoliberales alegue que
"se ahuyenta la inversión". Nadie cree ese viejo disco rayado.

Lo que es
de veras funesto para la inversión es pretender imponer a un pueblo un
cambio
de destino que no desea

agrega un comentario


ES UNA PENA
Por PATRICIA CARRASCO - Monday, May. 01, 2006 at 9:02 PM
patycarrasco@hotmail.com

ES UNA PENA QUE LAS PERSONAS DEL PUEBLO DE TAMBO GRANDE, EL CUAL ESTA ATRAVEZANDO POR UN PERIODO DE POBREZA EXTREMA, TENGAN QUE SEGUIR ASI, DEBIDO AL INTERES DE UNAS POCAS PERSONAS, QUE DISFRASADOS DE DEFENSORES DEL MEDIO AMBIENTE OCASIONEN LA FALTA DE INVERSION MINERA EN LA ZONA, LA CUAL CONSIDERO, SERÍA LA SOLUCIÓN PARA LA POBREZA DEL PUEBLO TAMBOGRANDINO.
YO SOY UNA SIMPLE PERSONA QUE A TENIDO LA SUERTE DE PODER VIAJAR POR ALGUNAS PARTES DEL MUNDO Y HE PODIDO DISFRUTAR EN DOS OPORTUNIDADES DE APRECIAR LA FELICIDAD QUE EMANA LA OPERACION MINERA EN UNA CIUDAD COMO LA DE VALD'OR EN QUEBEC. EN DICHA CIUDAD NO EXISTE LA FALTA DE EMPLEO, NO LA CONTAMINACION DEL AMBIENTE. PIENSO QUE CUANDO UNA EMPRESA MINERA RESPONSABLE HACE SU TRABAJO BIEN, LA CIUDAD Y EL PUEBLO PUEDEN CONVIVIR EN ARMONIA Y SIN ENEMISTADES.
PARA TERMINAR, SOLO RECOMENDARÍA AL PUEBLO TAMBOGRANDINO QUE NO SE DEJEN ENGAÑAR PO GENTE QUE DICE ESTAR AYUDÁNDOLOS Y QUE LO ÚNICO QUE OBTUENEN ES GANANCIA PARA UNOS POCOS.

agrega un comentario