Julio López
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Referéndum en Bolivia: record mundial de abstencionismo
Por Pro Bolivia - Monday, Jul. 19, 2004 at 7:39 AM

Jamás en el mundo, se observó un abstencionismo mayor al 40 % de los votantes en un referéndum obligatorio. Ayer, en Bolivia, se alcanzó esta tasa extraordinaria de abstencionismo, a pesar de las amenazas de sanciones drásticas prometidas para los infractores.

Pero lo más extraordinario no resulta ser este abstencionismo record para un voto obligatorio, sino el hecho que el Presidente Carlos Mesa se permita afirmar que « el Referéndum ha sido una fiesta democrática » y que « el grado de abstencionismo fue mucho menor que en Europa o en otros países de América Latina ». Ayer, Mesa citó el caso de los referéndums realizados en la región (refiriéndose claramente al último plebiscito realizado en Colombia), ocultando el hecho que, en Colombia, como en varios países europeos, el referéndum no es obligatorio.

Además, en Bolivia, ese país tan pobre, para las personas que decidieron no participar, el Presidente Mesa prometió una sanción económica equivalente al sueldo mínimo de un medio mes (150 Bs). Por no participar del referéndum, estas mismas personas serán, además, castigadas con el impedimiento de acceder a cargos públicos, efectuar trámites bancarios y obtener o actualizar sus documentos de identidad (pasaporte y carnet de identidad).

Se entiende aún mejor el carácter vergonzoso de esta escandalosa manipulación de la información, observada al finalizar el referéndum, si añadimos que el Gobierno de Bolivia reconoció, hace pocos días, que sus encuestas, supuestamente independientes, y varias de sus autoridades fueron financiadas por empresas petroleras como la TotalFina. A pocos días del referéndum, los resultados de las encuestas en cuestión, evidentemente favorables al Presidente Mesa, fueron ampliamente publicitados por medios masivos de comunicación controlados por el Grupo Prisa de España (periódicos La Razón y Nuevo día, el canal de televisión ATB, etc…); grupo estrechamente vinculado a empresas españolas interesadas en el gas boliviano, como son la petrolera Repsol y el Banco BBVA.


Estos hechos permiten entender mejor la posición radicalmente opuesta el Referéndum de Carlos Mesa, asumida por la Federación de Periodistas de La Paz y expresada mediante un comunicado oficial al pueblo de Bolivia:

La Paz, julio 17, 2004.- La Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz denuncia la emergencia de un peligroso esquema orientado a liquidar la libertad de prensa y expresión y destruir los sindicatos. Este es su comunicado:

Al pueblo de Bolivia y sus trabajadores

MONSTRUOSO APARATO POLÍTICO-COMUNICACIONAL
PRETENDE CONTROLAR Y ACALLAR SINDICATOS DEL PAÍS

A finales de enero de 2003, el Sindicato de la Prensa de La Paz (STPLP), ahora Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz (FTPLP) fue uno de los primeros organismos gremiales que se enfrentó al gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, Carlos Sánchez Berzaín, el MNR y sus socios, MIR, NFR, ADN y UCS, debido a la intromisión política en los medios de comunicación. "La Prensa" y "Unitel" (Canal 2).

Ya en ese entonces confirmamos el carácter soberbio, altanero y lo peor, ajeno al pueblo del Vicepresidente constitucional de la República y Presidente Nato del Congreso, Carlos Mesa; pero al mismo tiempo constatamos el accionar servil de nuestros dirigentes nacionales.

Rápidamente comprendimos que habíamos empezado una batalla que amenazaba con dejarnos solos. Sin embargo, no nos arrepentimos de la decisión tomada, porque el proceso político de decantación que vive el país, se está trasladando al gremio de los periodistas y trabajadores de la prensa.

Está empezando la batalla y algunos de los nuestros ya eligieron estar con la derecha, inclusive con la extrema derecha, otros apoyan y aceptan el chantaje que se resume en la cita de "después de Mesa qué".

Los más prefieren, las comodidades de la clase media, la libertad y paz de la oligarquía, del sistema político y de esta democracia de ricos para poder vivir tranquilos y seguir acumulando dinero y bienes sin importarles lo que ocurra con el resto de la sociedad.

Los otros estamos con las mayorías y analizamos la coyuntura desde esa perspectiva y no en función de intereses personales o de grupo.

Al gobierno, a los partidos parlamentaristas, a los empresarios y a todos los que apoyan el sistema les advertimos que "el Quijote de los trabajadores de la prensa vuelve a cabalgar, lanza en ristre, dispuesto a no ceder, pese a los ladridos de los que apuran nuestro corcel".

Al pueblo le pedimos que nos permita acompañarlo en su lucha, porque nosotros nos identificamos con él, con su hambre, su desesperación y su bronca, pero también con sus ansías de libertad y dignidad.
Octubre y los "mesistas"

Corrían los días de "octubre y de la guerra del gas". El gobierno de Sánchez de Lozada y sus socios en la explotación de Bolivia, caía pedazo a pedazo, marcha tras marcha, grito tras grito.

En esa coyuntura los que ahora son autoridades gubernamentales, que gozan de espacios de poder y distribuyen cuotas de poder, y pegas para sus familiares y amigos, pidieron a los dirigentes del Sindicato apoyar a Mesa "porque no había otra".

La respuesta fue unitaria y con convicción, "no creemos en salvadores, sino en procesos", con lo que señalamos que había que ir en búsqueda de un mejor destino para el pueblo.

No nos equivocamos. A más de nueve meses de gestión, el "colega Mesa" nos muestra su verdadera identidad. Luego de engañar a los alteños en la Ceja, a los paceños en San Francisco y a los bolivianos en todo el país, decidió traicionar las banderas de octubre y arrimarse a las transnacionales, los intereses extranjeros y a las oligarquías regionales, antes que al pueblo que reclama por pan, trabajo, educación, salud y vivienda.

El grito es el mismo en La Paz, El Alto, Sorata, Achacachi, la Ceja, Oruro Pando, Beni, Santa Cruz, Montero, Pananti, Tupiza, Uyuni, Potosí, Montero. Cochabamba, el Chapare o Pocitos.

Aquellos que apoyaron a Mesa en octubre, le pasaron la factura y ahora son autoridades que le colaboran sumisamente desde diversos sitios de la sociedad, reemplazando lo que los anteriores gobiernos conocían como el "cuoteo político" para envidia de los partidos que desde el Parlamento ven achicarse sus cuotas de poder.

El huevo de la serpiente

Sin embargo, eso no es todo, la FTPLP denuncia ante el pueblo boliviano la gestación de un monstruo mucho más manipulador que la Unidad de Comunicación (UNICOM) de Sánchez de Lozada, Mauricio Balcázar y Mauricio Antezana.

Mucho más cruel, cínico y vendepatria que Carlos Sánchez Berzaín, Oscar Eid Franco, Manfred Reyes Villa, Jaime Paz Zamora, Jorge Quiroga Ramírez, Jhonny Fernández y otros que viven de la democracia y la política.

Y es que los "mesistas de octubre" se están uniendo con los politiqueros, la oligarquía y los intereses extranjero conformando un aparato para amordazar, engañar y distraer la atención del pueblo.

"Se están uniendo diversas entidades que respaldan a Mesa, entre las que se tiene a organizaciones religiosas, empresarios privados, los capitalistas de la comunicación, las transnacionales petroleras y los organismos internacionales e inclusive los que por mandato de Ley deben defender al pueblo, en función de sus intereses".

Ya en el gremio somos testigos de cómo en todos los medios de comunicación eclesiásticos se "imparte línea" sobre la necesidad de apoyar la gestión del actual gobierno.

Periodistas y reporteros críticos son objeto de seguimiento y hasta despedidos de sus fuentes de trabajo por cuestionar la labor del presidente Mesa y sus ministros supuestamente apolíticos.

Inclusive, los "mesistas" que apoyaron al ex periodista desde sus revistas y sus programas geométricos de televisión son desplazados por representantes de la ultra derecha como los miembros del "Clan Molina".

Pueblo de Bolivia, la FTPLP denuncia la rearticulación de un aparato político informativo que empieza a trabajar en función de los intereses de las transnacionales, del imperialismo y de la oligarquía nativa.

Es por eso que algunos amigos del "mesismo" atacan a la Federación de Trabajadores de la Prensa de La Paz. Precisan controlarla y dominarla para cerrar el círculo antipatria ya que es uno de los pocos espacios pluralistas de vida democrática y debate político.

Pueblo de Bolivia, queremos que esta alerta no se quede solamente en eso, como trabajadores que somos, les invitamos a fortalecer nuestra Central Obrera Boliviana (COB) y nuestras Centrales Obreras Departamentales (CODs) para luchar por la liberación del país e iniciar el camino hacia un gobierno obrero campesino.

Ese monstruo político comunicacional empieza a trabajar para volver a amordazar al pueblo y enterrar las banderas de octubre. Sin embargo, la respuesta la tenemos todos nosotros.

TRABAJAR PARA CAMBIAR LAS ESTRUCTURAS DEL PAÍS.

POR LA FEDERACIÓN DE TRABAJADORES
DE LA PRENSA DE LA PAZ

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