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Guaraníes exigen transparencia en el manejo de la ayuda para desnutridos
Por Territorio Digital (env. x Guillermo Riguera) - Friday, Sep. 03, 2004 at 10:00 PM
riguera@gmx.net

Se instalaron en Posadas después que el Gobierno intentara frenar la movilización. Aseguran que no les llega la ayuda que les corresponde El escándalo por los dineros de Bienestar Social, en la mira.

Territorio digital. Posadas, 27 de Agosto de 2004.
Representantes de varias comunidades aborígenes se instalaron anoche en
la Rotonda de acceso a la capital provincial, mientras muchos otros
quedaron varados en San Ignacio por intervención de la Policía, en el
inicio de un reclamo por más transparencia en el manejo de los fondos
destinados a la asistencia a guaraníes. Según denunciaron, el programa
alimentario para las comunidades “debería estar funcionando desde abril
y no funcionó nunca”, lo que ya causó -aseveraron- varios casos de
muertes y enfermedades por desnutrición, e incluso el cacique Lorenzo
Ramos dijo que el reclamo también está relacionado con el escándalo que
se desató tras la investigación en el Ministerio de Bienestar Social por
el presunto desvío de más de un millón de dólares.

La intervención de la Policía en San Ignacio, que trajo a la memoria los
incidentes que se produjeron en Leandro N. Alem durante una
manifestación yerbatera que marchaba hacia Posadas, se produjo debido a
que los aborígenes eran transportados en las cajas de los vehículos en
condiciones extremadamente inseguras, dijeron fuentes policiales.

El director de Asuntos Guaraníes, Arnulfo Verón, dijo a su vez que eran
camiones de las comunas de Santo Pipó y Campo Grande, y atribuyó la
autoría intelectual de la manifestación a los opositores a Rovira, a
quien -dijo- buscan “desgastar”.

Lo cierto es que los aborígenes que lograron llegar a la Rotonda
(después de que en la Garita policial del kilómetro Diez también
debieran bajar de un camión) fueron duramente críticos para con Verón,
de quien pidieron la renuncia al mando de la Dirección de Asuntos
Guaraníes.

“Que Arnulfo Verón renuncie, con todos los empleados de la Dirección de
Asuntos Guaraníes, y que el director sea un aborigen propuesto por
nosotros”, reclamaron los caciques Julio Villalba (Perutí), Daniel
Chamorro (Cuñá Pirú) y Juan Duarte (Kaaguy Porá, Andresito).

En cuanto a los problemas con la asistencia, dijeron que “el programa de
alimentación comunitario, que debería estar funcionando desde abril en
todas las comunidades, no funcionó nunca”, lo que relacionaron con la
“muerte de nuestros niños por falta de atención y por desnutrición”.

“Estamos enterados de que llegan fondos para que por lo menos se compren
los medicamentos a todas las comunidades”, lamentaron, y agregaron que
“también reclamamos por los planes sociales que eran sólo para los
aborígenes y que se les dio a los parientes de los empleados de Asuntos
Guaraníes”.

En cuanto a Verón y el incidente de San Ignacio, dijo que “por más que
tenga poder de decisión o lo que sea, no lo puede hacer por un
aborigen”, y aseguraron que el funcionario “no está sabiendo el
problema, no está sabiendo nada”.

Además, lo acusaron de “manipular” el Consejo de Opyguá (guías
espirituales). “El Opyguá es nuestro líder religioso, no político. La
autoridad política es el cacique”, dijeron, y aseveraron que Verón “no
nos deja participar”.

Verón acusa a los opositores:
El director de Asuntos Guaraníes, Arnulfo Verón, aseveró que la
responsable de la detención de la caravana de aborígenes en San Ignacio
“no fue la Policía. Fue la imprudencia y la absoluta falta de respeto y
perversidad que tiene el transportar en camiones, que transportan tierra
y piedras, a mujeres, niños y bebés mojándose. Es una violación a los
derechos humanos, una absoluta aberración”.

Asimismo, indicó que “ellos no sabían por qué (se movilizaban). Los
bajamos, le preguntamos al chofer, que contestó con evasivas”.

Verón indicó que la movilización “no tiene que ver con lo de Bienestar
Social”, en alusión al incierto destino de más de un millón de dólares
enviados por la Nación para asistencia alimentaria.

Verón consideró que los motivos de la marcha están relacionados “con las
elecciones” y estarían orientadas a “desgastar a un Gobierno que quiere
acompañar” a los guaraníes.

“Estamos poniendo a un pueblo humilde en función de un interés
partidario, para desgastar al Gobernador y al ministro (Ricardo)
Escobar. Esto hace a la campaña del 30 (de enero), no seamos ingenuos”,
advirtió Verón.



La protesta se politiza aún más y los guaraníes siguen sin respuesta
Unos 200 aborígenes, incluso con bebés, pasaron la jornada a la
intemperie
Los caciques repudian el uso político de sus costumbres y la
manipulación de los guías espirituales

Territorio digital. Posadas, 28 de Agosto de 2004.
Mientras el Gobierno dedicó la jornada a insistir con que la protesta de
las comunidades mbyá por mejoras en la asistencia alimentaria y de salud
está fogoneada por el arco político opositor, cerca de 200 aborígenes
amanecieron ayer en la Rotonda y se instalaron al mediodía en la plaza 9
de Julio, donde -con mujeres y niños- soportaron el persistente mal
tiempo que reinó en la capital provincial. Mientras, los cruces de
opiniones que se dieron durante todo el día entre los caciques apostados
frente a la Rosadita y los funcionarios de gobierno dejaron al desnudo
fuertes tironeos por la representatividad de la nación guaraní, que
incluso abrieron entre los aborígenes fisuras que ahora el Gobierno
intenta capitalizar.

La apuesta comunicativa de la administración de Carlos Rovira fue ayer
mostrarse junto con los referentes guaraníes que integran el Consejo de
Ancianos y Opyguá, guías espirituales del pueblo mbyá. De hecho, los
conductores de ese consejo compartieron al mediodía la mesa en que el
ministro de Bienestar Social, Ricardo Escobar, y el director de Asuntos
Guaraníes, Arnulfo Verón, brindaron una conferencia de prensa en la que
acusaron a la oposición, y en forma particular al justicialismo, de
“usar a la gente necesitada en función de sus intereses políticos de
seguir manteniéndose en el poder”, según palabra de Escobar.

Sin embargo, la presencia de los líderes espirituales de los guaraníes
junto al ministro no sorprendió a los dos centenares de aborígenes que a
la misma hora comenzaban a instalarse frente a la Casa de Gobierno. De
hecho, los líderes de la protesta, entre quienes se destacaron los
caciques Lorenzo Ramos, Julio Villalba y Daniel Chamorro, ratificaron el
reclamo de que se derogue el decreto que reconoce como único
representante válido de los guaraníes al Consejo de Ancianos y Opyguá.

La posición de los caciques va más allá de la puntual cercanía que
mostró el Consejo de Ancianos y Opyguá, con el Gobierno. Es que, en el
fondo, subsiste una fuerte disconformidad por razones culturales. Es que
el Opyguá es precisamente un guía espiritual, mientras que la autoridad
política, por tradición, recae en los caciques, que ahora son obviados
por el Gobierno. Es más, los caciques plantearon ayer con fuerza su
disconformidad por las oportunidades en que, en actos públicos, se
hicieron cantos y danzas religiosas que -aducen- están reservadas para
la intimidad del ámbito de la comunidad.

Los caciques repitieron asimismo los reclamos de que Verón y sus
empleados renuncien, al tiempo que denunciaron nuevamente “la falta de
cumplimiento del Programa de Alimentación Comunitario” y el “desvío de
planes que eran exclusivamente para aborígenes”.

Por otra parte, exigieron que con las próximas elecciones se realice el
referéndum establecido por la ley para incorporar al texto
constitucional la última enmienda a la Carta Magna provincial, en la que
se incluyeron a la Constitución los derechos de los mbyá. Según manda la
ley, sólo con el resultado afirmativo de un plebiscito quedan
confirmados los cambios al texto constitucional.

“Una especulación política”:
Por su parte, Escobar y Verón se encargaron ayer de vincular a la
protesta mbyá con una jugada de la oposición. “Están muy preocupados por
las elecciones del 30 de enero (...). Acá no cabe otra explicación más
que una especulación política”, señaló el ministro de Bienestar Social,
aunque admitió que los reclamos son “las consecuencias de tantos años de
olvido y de desocupación. Esto es una realidad, nadie lo niega. No somos
ciegos ni sordos”.

Escobar cargó directamente contra la oposición y se preguntó, por
ejemplo, “si alguna vez Lucho Viana (por el presidente de la
Legislatura) en todos estos años, salvo en sus años universitarios, ha
recorrido los barrios o está en condiciones de ir a una picada”.

Tras reiterar que “no existe ningún tipo de irregularidad” en el manejo
de fondos, el ministro sentenció que “quienes fueron derrotados en las
urnas no asumen que ya no tienen el poder. Y se van a quedar también sin
la Legislatura el 30 de enero”, pronosticó.



Los aborígenes denunciarán ante la Justicia Penal el desvío de planes
Los mbyá guaraní empiezan a temer que la situación termine dividiendo a
su nación
Presentarán planillas con casos de personas que percibirían
irregularmente la ayuda destinada en forma exclusiva a las comunidades
El Inadi comenzó a mediar para acercar a las partes

Territorio digital. Posadas, 31 de Agosto de 2004.
La protesta de los aborígenes que reclaman la renuncia del director de
Asuntos Guaraníes, Arnulfo Verón, comenzó a ingresar en un terreno
escabroso. Una asociación chaqueña que llegó con representantes de otras
culturas indígenas anunció ayer que esta mañana presentará una denuncia
penal por la entrega irregular de planes sociales destinados a
aborígenes, que según una planilla exhibida en la plaza 9 de Julio
estarían siendo percibidos por personas que no pertenecerían a esa
comunidad.

Paralelamente, representantes del Instituto Nacional contra la
Discriminación (Inadi) realizaron hasta entrada la noche gestiones de
mediación para lograr un acercamiento entre las partes, pero los
caciques apostados frente a la Casa de Gobierno, encabezados por Lorenzo
Ramos, ya adelantaron que cualquier reunión estará supeditada a la
dimisión de Verón, y la asunción, en su reemplazo, de una persona de
origen mbyá.

El Gobierno, a su vez, volvió a defender la transparencia del manejo de
fondos destinados a ayuda alimentaria y, respaldado por el Consejo de
Ancianos y Opyguá (guías espirituales), advirtió que de sostenerse el
conflicto podría llegarse a una verdadera escisión en el pueblo guaraní.

Una protesta que va al Juzgado
Ayer por la tarde, la concentración de mbyá frente a la Casa de Gobierno
sumó el respaldo de la Coordinadora de Pueblos y Organizaciones
Indígenas de la Región Chaqueña (Copirecha). Ariel Araujo, que se
presentó como un mocoví de Santa Fe, adelantó allí que hoy acudirán a la
Justicia Penal, para radicar una denuncia por el desvío de planes
sociales.

Araujo denunció que en las planillas de beneficiarios de planes de 150
pesos destinados a aborígenes aparecen personas que no pertenecen a esa
comunidad. “Dentro de la investigación que hicimos desde la semana
pasada descubrimos la existencia de beneficiarios no indígenas”, dijo
Araujo, antes de repartir planillas en las que aparecen como
beneficiarios personas que residen, por ejemplo, en la chacra 32-33 de
Posadas, en la chacra 178 y en otros barrios. “Son personas que están
vinculadas con funcionarios públicos”, aseguró Araujo, e indicó que se
descubrieron entre 25 y 30 casos irregulares sobre un total de 172
beneficiarios en el plan “Apoyo a la Cultura y Educación Mbyá”, y otros
nueve casos en el programa “Los conocimientos ancestrales”. Según la
documentación, que hoy será elevada a la Justicia para que determine
responsabilidades en el caso, hay incluso personas que aparecen más de
una vez en la misma lista.

La puja por evitar el cisma:
En tanto, la delegada local del Inadi, Graciela Franzen, y el jefe de
Relaciones Institucionales de esa entidad, Omar Ozorio, realizaron
durante todo el día gestiones para lograr un acercamiento entre las
partes.

La eventual mesa de concertación, que se seguiría gestionando hoy,
plantea por un lado el acercamiento entre los aborígenes apostados en la
plaza y el Gobierno, y por el otro busca evitar un fuerte quiebre en la
comunidad guaraní, que se insinúa debido a que el Consejo de Ancianos y
Opyguá, con algunos caciques, ya manifestó su respaldo y agradecimiento
al gobernador Carlos Rovira, al ministro de Bienestar Social Ricardo
Escobar y al cuestionado Arnulfo Verón.

Anoche, las autoridades del Inadi alcanzaron a entrevistarse con el
vicegobernador Pablo Juan Tschirsch, pero los caciques liderados por
Lorenzo Ramos pusieron en claro que la intención es hablar directamente
con Rovira, quien pese al agravamiento del conflicto se negó a atender a
los aborígenes.

Asimismo, los mbyá apostados en la plaza advirtieron que sólo la
renuncia de Verón y el reconocimiento de los caciques como
interlocutores válidos (el Gobierno sólo acepta al Consejo de Ancianos y
Opyguá) abrirá la posibilidad de una concertación con las autoridades
gubernamentales.

“No importa si tenemos que esperar meses acá en la plaza. Después de
todo, ya vamos casi por los 600 años esperando en el monte”, disparó con
precisión Lorenzo Ramos. En cuanto a la discusión interna entre Consejo
de Ancianos y Opyguá y los caciques de la plaza, desde ambas esferas
ayer se enviaron señales de búsqueda de unidad, porque ambos
coincidieron en que la continuidad de la intervención del blanco
(incluyendo así al Gobierno y a la oposición, a la que se acusa de
fogonear la protesta) terminará llevando a la nación guaraní a un estado
de quiebre.

El Gobierno y los planes
A todo ello, ya al mediodía Ricardo Escobar y Arnulfo Verón se habían
encargado de mostrarse nuevamente rodeados de una fuerte manifestación
de respaldo por parte de los dirigentes aborígenes conformes con la
acción gubernamental, al punto que hicieron resaltar la presencia de
Francisco, el hijo de Lorenzo Ramos, entre los opositores a la protesta.

Escobar presentó en la reunión una nota en la que la directora nacional
de Seguridad Alimentaria, Karina Yarochevski, informó a Misiones que los
3.237.638 pesos cuya utilización se desconoce están en una cuenta del
Banco Macro. La misma nota dice que la información se confirmó “mediante
auditorías realizadas por parte de este plan”, aunque Escobar negó que
la Nación haya auditado las cuentas.

Una polémica que ¿termina?
El ministro Ricardo Escobar dio ayer por terminada toda la polémica con
respecto al planteo de ciertos dirigentes opositores sobre desvío o mal
manejo de fondos públicos”, al ampararse en la nota que enviaron desde
Buenos Aires.

Asimismo, agregó que “dejamos la responsabilidad absoluta a todos los
dirigentes opositores” por las nuevas acusaciones que puedan surgir. En
la misma conferencia, el Consejo de Ancianos emitió un fuerte
pronunciamiento en el que reclamó al pueblo mbyá guaraní “que esté unido
en paz, para que Dios nos proteja, y que no lograrán que el espíritu
malo nos confunda”, al tiempo que volvió a advertir que “no permitiremos
que ninguno que no pertenezca a nuestra nación hable por nosotros o nos
represente”.

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