EL GOBIERNO DE JUJUY “ENTREGA” TIERRAS A ABORÍGENES
Por Asunción Ontiveros Yulquila - Sunday, Sep. 05, 2004 at 1:02 AM
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En un ambiente de estrictas medidas de seguridad, el 30 de agosto, en horas de la noche arriba a la provincia de Jujuy, la Ministra de Desarrollo Social de la Nación y presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, Alicia Kirchner. La primera actividad desarrollada el 31 de agosto, último día del mes de la Pacha Mama, fue ejecutada en la localidad de Súsques, capital del Departamento homónimo, ubicada sobre los 3.675 m.s.n.m. y a una distancia de 194 kilómetros de la ciudad de San Salvador. Participa en la ceremonia de ofrendar a la Pacha Mama, y luego, en la entrega de títulos de propiedad sobre 300.000 hectáreas de espacios territoriales situados en los parajes de Huancar, Pastos Chicos y Puesto Sey, situadas en ambas márgenes de la Ruta Nacional Nº 40. Antes de regresar a la ciudad Autónoma de Bs. As., en San Salvador hizo entrega de 700 pensiones.

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PRINCIPALES ACTORES DEL ACONTECIMIENTO “INDIGENISTA”:

Eduardo Alfredo Fellner, gobernador de la Provincia de Jujuy; Alicia Kirchner, Ministra de Desarrollo de la Nación y presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales; José Ramos, kolla y presidente de la Comisión Municipal de Susques; Oscar Jorge Rodríguez, presidente designado del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas; Pedro Olmedo Rivero, Obispo español de la Prelatura de Humahuaca, designado por el Vaticano; Rubén Cruz, kolla y cura católico, ex vocal de la Comisión Municipal de Susques; René Calpanchay, Comisario activo de la Policía de la Provincia de Jujuy y dirigente-asesor del “consejo acatama” y del Foro Aborigen auspiciado por los claretianos españoles de la Prelatura de Humahuaca; representantes de las comunidades de Huancar, Pastos Chicos y Puesto Sey. También estuvo presente el senador nacional “justicialista” Guillermo Jenefes, quién en su declaración jurada para asumir su mandato sostuvo poseer activos por el orden de los 13 millones de dólares americanos.

LA JURISDICCIÓN DEL DEPARTAMENTO DE SUSQUES:

Lo que actualmente constituye el espacio territorial del Departamento de Susques, antes de 1535, formaba parte de la jurisdicción del Kollasuyu (region Sur). Antes de la cruenta visita del genocida español Diego de Almagro, de principios de 1536, la región que estaba registrada en los kipus de Cusco con le nombre de K`asaWinku (Casabindo). En 1540, el genocida Francisco Pizarro otorga la merced de la encomienda de “Casabindo y Moyo” al Martín Monge, quien no pudo materialiazar la conquista respectiva en los hechos. La región formaba parte del archipiélago de pisos ecológicos de Chala, Yunka o Yunga, Janka, Puna, Kishwa, Yunka, Rupa Rupa y Umawa. La sal, el principal producto de Susques era comercializada en el archipiélago. La Costa de Pacífico, la Puna jujeña, la Quebrada de Humahuaca, la zona Yunga y los Valles constituían el mercado de la sal y de otros productos como el chuño, el huevo de suri, el charqui, y derivados de la llama, alpaca y vicuña. La región era una zona de producción de disecados y de insumos para el mismo proceso a realizarse en tros regiones.
Desde 1570, la región era parte de la jurisdicción del Corregimiento de Atacama La Alta, que dependía de la Audiencia de Charcas (Sucre). En 1776, con la creación del Virreinato del Río de la Plata, queda incorporada a Potosí. En el periodo republicano, desde 1825, era territorio de Bolivia, situación que se prolonga hasta la Guerra del Pacífico de 1979. Culminada la “guerra de las salitreras”, lo que es Susques (más lo departamentos de San Antonio de los Cobres y Pastos Grandes, Salta, el Departamento de Antofagasta de la Sierra, Catamarca) pasa a depender de la jurisdicción de la República de Chile. En 1898, mediante la firma de un tratado entre Argentina y Chile, la región es anexada a la Argentina con el nombre de la Gobernación de los Andes, que comprendía la Puna Alta de las provincias de Jujuy, Salta y Catamarca. En 1943, Susques para a formar parte de la Provincia de Jujuy como Departamento.

El Departamento de Susques posee una superficie de 9.199 kilómetros cuadrados, es decir 919.900 hectáreas. De acuerdo al Censo del INDEC de 2001 tiene 3.581 habitantes, siendo la mayoría descendientes de los pueblos prehispánicos de la región del altiplano del Tawantinsuyu. Antes y durante el Tawantinsuyu, la zona de Susques estaba comunicada a traves de una red vial de envergadura, hacia al Norte hasta Quito, hacia el Sur hasta Mendoza y Chile, hacia al Este hasta la selva subtropical y hacia el Oeste hasta la costa del Pacífico. Susques posee enormes recursos salares, como también yacimientos de oro, plata, cobre, plomo, estaño, bórax, hierro y aguas termales.

SUSQUES EN EL CONTEXTO POLÍTICO DE JUJUY:

Desde 1943, hasta principios de la década de 1990, el Departamento era un región marginal. El servicio de la salud pública se proyectaba desde la localidad de Maimara; las políticas educativas llegaban por rebote y a través de docentes con vocación altruista. En el campo político, el partido que todas las elecciones desde 1983, y además gobierna, es “justicialista”. Igual preponderancia tiene el “justicialismo” en ciudades kollas como La Quiaca, Abra Pampa y Humahuaca, con la excepción actual de Tilcara que está gobernada por un representante de la UCR. Para el binomio PJ y UCR ganar cualquier elección en la Provincia de Jujuy, significa extorsionar al elector cautivo del empleador Estado, persuadir compulsivamente con promesas al costa del Estado y distribuir dádivas: chapas de cartón, zapatillas, bolsas de alimentos, bebidas alcohólicas, mortadela, madera para techos de viviendas y ropa. El electorado de la Puna, Quebrada y Valles no tiene derecho a ejercer la libertad de conciencia: el derecho a elegir la mejor propuesta. A Susques, en tiempos proselitistas, arriban camionetas y camiones cargados con dádivas, no llegan proyectos políticos. En las elecciones de 2003, la empresa llamada “Agua de los Andes S.A.” era la distribuidora logística del “justicialismo”: combustible, camionetas, cemento, postes de cemento y madera.

El “libre mercado” y la “globalización capitalista” hicieron posible que el territorio del Departamento de Susques fuera incorporado en la agenda de lo gobiernos de la Argentina y de Chile. Se construyeron dos gasoductos, el “Atacama” y el “Nor Gas” que conducen millones de metros cúbicos, desde la provincia de Salta hasta los puertos industriales de Chile. Los gasoductos atraviesan el territorio de Jujuy, y de Susques en particular, sin aportar peaje alguno porque las obras de los capitales importados deben “tener vía libre”, como también la exportación de las ganancias. Para la construcción del camino asfaltado que comunica la localidad de Purmamarca con la línea de frontera del Paso de Jama, visitaron la región los ex presidentes Carlos Saúl Menem, Fernando de La Rúa y Eduardo Duhalde; sus respectivas administraciones inyectaron “fondos frescos” para la concreción de la obra vial, y que aún no concluye. Por su parte, el gobierno de Chile tiene inauguradas sus obras, para convertir el Paso de Jama en el más importante del Cono Sur.

Durante el periodo de la “convertibilidad” e “ingreso virtual de la Argentina al primer mundo”, tanto los habitantes de Susques como del resto de la región Puna se dedican a importar productos terminados y servicios, y a exportar recursos naturales y capitales. Electromésticos, caldo de gallina, chocolate, ropa y pastores de llamas ingresaban al “primer mundo argentino”, y salían, de contrabando llamas y carne ovina, dos productos renovables preciosos de la ganadería puneña. El abogado y gobernador Eduardo Alfredo Fellner, no sólo es testigo de los efectos del “uno a uno”, sino también es parte activa del sistema feudo corrupto que significa la administración provincial desde 1983.

La Comisón Municipal de Susques, a finales de 2001, cuando agonizaba la “convertibilidad”, recibía mensualmente como producto de la coparticipación 15.483,97 pesos o dólares USA; sumado los 13.981,37 pesos o dólares USA de la Comisión Municipal de Catua, el Departamento de Susques de 3.581 habitantes percibía mensualmente 29.375,34 peso o dólares USA. En ese mismo periodo, la Municipalidad de la ciudad de La Quiaca, de 15.000 habitantes, percibía mensualmente la suma de 209.763,08 peso o dólares. Los gobiernos locales de Susques y Catua percibían por cada habitante 8,20 pesos o dólares, mientras que el gobierno de La Quiaca recibía 13,98 peso o dólares. La distribución de los fondos de coparticipación es injusta, se la puede tipificar de discriminatoria en extremo. ¿Cuál es la diferencia cualitativa y específica entre un habitante de Susques y otro de la ciudad de La Quiaca?

El intendente de la Comisión Municipal de Susques, por Ley, sólo puede gobernar durante un año, y puede ser reelegido por un año consecutivamente. El Intendente de La Quiaca puede gobernar cuatro años y ser reelegido. El sistema es para “entretener indiecitos en peleas internas desgarradoras”. En las comisiones municipales de Jujuy, cada año se producen campañas proselitistas salvajes para mantener el poder político de la presidencia de la Comisión. La industria del juicio, desde 1986, en las municipalidades es una fuente inagotable de riquezas de los abogados residentes en la ciudad de San Salvador de Jujuy. Actualmente, casi todos los gobiernos locales son objetos de embargos resueltos en los Tribunales de Jujuy. Los municipios están en bancarrota.

“ENTREGA DE PERSONERÍAS JURICAS Y TITULOS COMUNITARIOS”:

Las “personerías jurídicas” que otorga el INAI, o por derivación algún organismo de gobierno provincial, en el contexto de la provincia de Jujuy y la realidad de los habitantes aborígenes, 60 por ciento de la población total, son “espejitos” o “cascabeles” para asimilar o “disponer la integración étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos”; así los expresan los abogados Eduardo Menem (senador nacional) y Roberto Dormí, los “ingenieros” de la Constituyente de 1994, autores de la “Constitución Reformada” (1994). Evitar la organización y las reivindicaciones organizadas de los pueblos indios fue y es la estrategia geopolítica del Estado, sea nacional o provincial. Las “personerías jurídicas comunitarias” atentan contra los derechos de la Libre Determinación de los Pueblos. Sólo servirán para que las comunidades dependan de las políticas asistencialitas del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, del aparato “indigenista” INAI, o de los gobiernos provinciales.

Los “títulos comunitarios”, en un Estado Nacional que alienta la propiedad privada mediante la Carta Constitucional, son productos derivados de un romanticismo y paternalismo racistas expresos. Ninguno de los “indigenistas” que estaban presentes en Susques, en el acontecimiento del 31 de agosto de 2004, tienen prácticas sociales y culturales de la vida comunitaria. No comparten sus derechos e intereses privados, en forma comunitaria, con los habitantes de Susques. Lo que reivindican los pueblos aborígenes de la Provincia de Jujuy es la devolución de territorios y la regularización de los títulos de propiedad de las posesiones que se están ocupando.

VIOLENCIA SIMBOLICA DEL “INDIGENISMO” NEOCOLONIAL:

La Carta Constitucional reformulada en 1994, suprime “la conversión al catolicismo” de los pueblos indios en todo el territorio de la Argentina, como también, la competencia del Estado de admitir órdenes religiosas. Sin embargo, en la ceremonia para OFRENDAR A LA PACHA MAMA, en Susques, el Obispo español de la Prelatura de Humahuaca, el cura Rubén Cruz y un miembro de la Pastoral Aborigen presidieron la CEREMONIA específica de los pueblos del mundo andino. Los representantes del clero católico no toleran la práctica ecuménica entre religiones, menos el respeto a los dueños de casa. En la Puna, Quebrada y Valles, en cada escuela estatal hace su presencia “pedagógica” la “maestra de catequismo”. Un profesor o maestro que sigue un curso de catequesis católica, obtiene de la Junta de Calificaciones tres (3) puntos, mientras que un docente que sigue un curso especial de informática recibe la calificación de cero punto veinte cinco (0,25).

La terrible presión que hace la “ingeniería” católica sobre la población kolla o aborigen en la Puna y Quebrada es violatoria al Artículo 1) de la Carta Universal de los Derechos Humanos, aprobada en las Naciones Unidas en 1948. Una actitud etnocentrista aún màs radical e intolerante es la de los miembros de la iglesias evangélicas; atacan frontalmente todo signo y símbolo de la cultura del pueblo kolla, hasta destruyen imágenes que constituyen fundamentales representaciones de la simbiosis para la resistencia cultural kolla.

Por ùltimo, es llamativa la presencia del Comisario activo de la Policía de la Provincia de Jujuy, René Calpanchay, en el mundo de Foro Aborigen que funciona bajo el paraguas de la Prelatura de Humahuaca. El Comisario Calpanchay es miembro de los servicios especiales de inteligencia de la Policía de Jujuy. ¿Puede el Comisario Calpanchay denunciar las violaciones diversas que se producen en la comisarías de la Puna y Quebrada en contra de determinados habitantes kollas? ¿Puede el Comisario Calpanchay sugerir que el 60 por ciento de la población aborigen de Jujuy debe luchar por el poder político, como alternativa para dirimir las injusticias actuales.
Señora Alicia Kirchner, Ministra de Desarrollo Social, es importante conocer el pasado de la Provincia de Jujuy, para entender el presente. Si llegamos a apreciar el pasado podemos corregir los defectos del presente. Los kollas o los mapuches, o los guaraníes, en la Argentina somos percibidos como “eslabones perdidos” de la “evolución del ser humano”, nos consideran “prepolíticos”, es decir “estúpidos” que hay que “integrarlos o asimilarlos” mediante programas de “salvación”: eso se llama “indigenismo”, cuyo paradigma se comienza a desarrollar en México, a partir de 1940.

Asunción Ontiveros Yulquila; Av. Remedios de Escalada Nº 425; Barrio 25 de Mayo; (4612) PALPALA; Jujuy.

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