El fantasma de la existencia de grupos armados recorre México
Por i de sarandí - Sunday, Dec. 19, 2004 at 7:56 PM

- Alentado por informes oficiales y afirmaciones de expertos, el fantasma de que grupos armados actúan en algunas regiones de México recorre el país desde el linchamiento en la capital de tres policías federales, dos de los cuales murieron.

DPA, Fecha: 17/12/2004 03:53:00 p.m.
Titulo: El fantasma de la existencia de grupos armados recorre México
Por Nelson Keiman (dpa) =
Ciudad de México, 17 dic (dpa) - Alentado por informes oficiales y
afirmaciones de expertos, el fantasma de que grupos armados actúan en
algunas regiones de México recorre el país desde el linchamiento en
la capital de tres policías federales, dos de los cuales murieron.
Las versiones oficiosas de la existencia de esos grupos comenzaron
inmediatamente despúes de que el 23 de noviembre pasado los tres
policías, atacados por una multitud, fueran golpeados y dos de ellos
quemados hasta la muerte.
La sospecha de la actividad de grupos armados fue reafirmada por
las autoridades, quienes al principio lo negaban, a medida que avanzó
una investigación que se realiza para determinar porque ninguna
autoridad, ni de la capital ni federal, pudo evitar el linchamiento.
Los investigadores aseguran que el linchamiento tiene autores
intelectuales que querían con esa acción enviar un mensaje a la
Policía Federal Preventiva (PFP) a la que pertenecían los tres
policías agredidos.
El mensaje de los grupos armados a los policías fue el de la "zona
de control, donde las fuerzas de seguridad que no estén coluidas con
ellos no pueden entrar", según afirma uno Jorge Fernández Menéndez en
una columna periodística.
El mismo comentarista afirma que el linchamiento fue porque ese
día habría en la zona vigilada por los policías federales una reunión
del órgano de dirección del Ejército Popular Revolucionario (EPR),
una organización que opera desde el 28 de junio de 1996.
El EPR hizo su presentación pública en el primer aniversario de la
matanza de CAMPESINOS que hicieron policías del sureño estado de
Guerrero en el vado de Aguas Blancas, en ese estado.
Luego ese grupo apareció en el también sureño estado de Oaxaca y
según el ex secretario de Gobernación Francisco Labastida (1998-99),
los servicios de inteligencia del gobierno habían detectado su
presencia en esa época en las zonas campesinas del Distrito Federal
(Ciudad de México), en Guerrero, en Oaxaca y en el Estado de México.
Por otra parte, en diversos medios, citando fuentes del Centro de
Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), se afirmó que células del
EPR u otros grupos armados afines operan en por lo menos la tercera
parte de las delegaciones (municipios) del Distrito Federal.
Sin embargo, el actual secretario de Gobernación, Santiago Creel,
ante la afirmación de Labastida sostuvo que "durante los cuatro años
de la administración del presidente Fox, no ha habido actos de
subversión".
Tampoco el Secretario de Seguridad Pública Federal, Martín Huerta,
quien es el jefe de la PFP, ha querido confirmar si tienen
información de la existencia de grupos armados en la zona u en otros
puntos del país.
Sin embargo, la PGR en sus informes de la investigación ha tenido
que admitir que una mujer que es señalada como la instigadora del
linchamiento "pertenece a grupos radicales", aunque no ha querido
precisar a cuál.
Por otra parte, la presunción de que el linchamiento fue un acto
premeditado contra los policías quedó casi demostrada, según las
autoridades, en un video que habría grabado la mujer que fue
presuntamente la instigadora y que muestra los hechos previos al acto
que costó la vida a dos policías y tiene grave al tercero.
También, según académicos y analistas políticos mexicanos el video
demuestra que existen grupos clandestinos y en algunos casos armados
que tienen una gran influencia y que están en contra del gobierno.
Hace unos meses un video enviado a las televisoras mostró a un
grupo de unos 20 hombres, encapuchados, vestidos con uniformes y
portando armas largas, que detenían vehículos en una carretera
ubicada en el sureño estado de Morelos, cercana al sur del Distrito
Federal, y que proclamaban una lucha contra el gobierno.
Sin embargo, oficialmente los organismos de seguridad del estado
mexicano, así como las policías se niegan a admitir la existencia de
esos grupos.

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