Julio López
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Del GAN a la transversalidad. Los años setenta.
Por PaBLo ANaRKo PaTRioTa - Thursday, Dec. 23, 2004 at 8:01 PM
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Tumini es DIOS

Del GAN a la transve...
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Los años setenta

Una experiencia a tener en cuenta para el presente
La dictadura instalada en junio de 1966 y comandada por el general Juan Carlos Onganía era la avanzada del intento de transformación en un sentido retrógrado del capitalismo dependiente argentino en crisis (planificada ya desde ese entonces por el gran capital multinacional y la oligarquía nativa, cuyas consecuencias están hoy a la vista); tarea que cumpliría a medias producto de la resistencia popular. El Cordobazo fue el principio del fin de ese gobierno militar puesto a la defensiva por la rebelión de trabajadores y estudiantes. Pretendió recuperarse a través del interinato del general Levingston, convocado a la presidencia desde su puesto en la Junta Interamericana de Defensa con sede en Washington, pero el Viborazo, nuevo levantamiento popular en Córdoba, cortó en apenas 9 meses esa maniobra de "cambiar algo para que no cambie nada". Ya para ese entonces a las movilizaciones y las luchas antidictatoriales se les había agregado la irrupción de la lucha armada protagonizada por aún incipientes organizaciones revolucionarias.

Las clases dominantes contemplaron el riesgo de profundización de ese estado de cosas si insistían en continuar con su proyecto dictatorial en los marcos de un desprestigio cada vez más marcado. Optaron entonces por un repliegue táctico, de manera tal de poder regresar con renovados bríos y con más consenso a la implementación de dicha reconversión reaccionaria de nuestro país; algo que materializarían algunos años más tarde, un nefasto 24 de marzo de 1976.

El plan de repliegue de la dictadura, presidida ya por el general Agustín Lanusse, se llamó Gran Acuerdo Nacional (GAN), y consistió en negociar con los partidos políticos tradicionales y en particular con el peronismo una salida democrática lo más condicionada posible. Esto desembocó en el triunfo de Cámpora primero y el de Perón meses después. La segunda parte de la estrategia de las clases dominantes para abonar el camino de su regreso consistió en presionar al nuevo gobierno constitucional, al que sabía débil, para que se fuese corriendo a la derecha y perdiera así el consenso obtenido inicialmente en la sociedad. Esto fue logrado plenamente luego de la muerte de Perón y la llegada a la presidencia de Isabelita, la que al adherir a esa derechización de la peor manera fue desplazada sin pena ni gloria por el golpe de Videla.

La otra cara del plan para el retorno de la derecha fue hostigar a las organizaciones revolucionarias, sin mostrar los militares sus manos tras de esto, de forma tal de llevarlas a retomar el accionar armado en un marco de cierta vigencia de las instituciones; y hacerlas así aparecer como agresoras, como atentadoras de la democracia, poniéndose ellos, los futuros golpistas, como víctimas.

También en esto tuvieron éxito, y cuando el golpe del ’76, una parte de la sociedad los apoyó pensando que así terminaría la violencia que adjudicaba a la guerrilla; y otra no los avaló pero se replegó, tanto por confusión como por miedo. Una tercera porción del pueblo argentino salimos a enfrentrarlos con heroicidad, pero no alcanzó y fuimos duramente derrotados.

En resumidas cuentas, en los años setenta, las clases dominantes, después de haber sido puestas a la defensiva y haber perdido la iniciativa estratégica producto de la resistencia popular y del accionar de sus organizaciones revolucionarias, lograron revertir esa situación y retomar la iniciativa para reformular el país acorde a sus intereses y los del imperialismo. En este éxito de la reacción jugaron un papel destacado tanto su experiencia, habilidad y recursos, como los errores que se cometieron desde las fuerzas revolucionarias.


LOS ERRORES DEL PRT


Los errores a que hago mención los cometimos las dos principales organizaciones revolucionarias y también una parte sustancial de la combativa dirigencia social surgida en esos años e influenciada fuertemente por aquellas. No obstante, entiendo que los más severos en ese período fueron los del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), que incluso terminaron influenciando en la política de Montoneros a partir de 1975. Por tanto a ellos me referiré.

El PRT caracterizó al GAN de Lanusse como una maniobra de la burguesía en su conjunto, sin diferenciar sus sectores dentro de ella y sus distintos intereses, destinada a abortar el incipiente proceso revolucionario que se había abierto en el país a partir del Cordobazo. En esa maniobra de salvar el capitalismo argentino estaban, de acuerdo a esa visión, involucrados tanto la dictadura como el general Perón. La llegada de Cámpora al gobierno, y luego la del propio líder justicialista, conllevaba para el PRT el riesgo de que la burguesía engañara al pueblo, lo apartara del camino emprendido y, una vez más, lo condujera a un callejón sin salida, mientras en las sombras se preparaba el sangriento retorno militar.

A partir de esta caracterización, la táctica después del 25 de mayo del ’73 fue una frontal oposición al gobierno justicialista; incluyendo esto la continuidad del accionar armado en particular contra las FFAA, como supuesta forma de impedir que se blanquearan y recuperaran consenso como para intentar el regreso. Esta oposición se llevó al terreno ideológico planteando que el problema central de Perón, y lo que lo igualaba de hecho a la derecha, era que su proyecto era burgués, mientras que la única salida progresista para nuestro país era el socialismo. Graficaba el PRT esto en una consigna con una frase del Che: "Revolución socialista o caricatura de Revolución". A partir de esto se descalificaban inclusive las medidas favorables al pueblo que dicho gobierno tomaba, se entendía que eran sólo engaños destinados a ocultar lo esencial y reaccionario.

Las consecuencias de esta táctica fueron que una parte importante del movimiento de masas no entendió esa confrontación en vida de Perón (aunque no la repudió nunca porque el PRT tenía un gran prestigio por su lucha antidictatorial) y no se sumó a ella; que en el gobierno, hostigado fuertemente por izquierda, fueron predominando los sectores más de derecha, con lo que perdió rápidamente consenso y apoyo popular, que era lo que buscaban los sectores dominantes (Perón vio eso poco antes de morir e intentó cambiar el rumbo en su último discurso de junio de 1974, pero ya era tarde); que se dividieron las aguas entre las fuerzas populares y también con los sectores nacionales de dentro y fuera del gobierno, afectándose así la indispensable unidad para hacer luego un frente común al ataque de la derecha que inexorablemente sobrevendría; que los militares pasaron a ser ante una parte significativa de la sociedad supuestas víctimas de la agresión guerrillera, y que al interior de los mismos fueron rápidamente arrinconados y desplazados aquellos sectores que no adherían al proyecto imperialista; por último, que se acortaron los tiempos del interregno institucional (que de todos modos hubiera sido interrumpido, como sucedió en toda Latinoamérica, por la aplicación de la Doctrina de Seguridad Nacional elaborada por los yanquis, pero en plazos más largos) en perjuicio de la acumulación política del campo popular, fundamental para luego poder resistir con éxito los embates de la reacción.


LAS RAZONES DE DICHOS ERRORES Y QUÉ TÁCTICA SE DEBIÓ HABER TENIDO


Estos errores cometidos por el PRT frente al proceso abierto en 1973 tuvieron tres razones fundamentales: en primer lugar, una incorrecta caracterización del papel de Perón, del peronismo y de la burguesía nacional en esos momentos. No era verdad que expresaran los mismos intereses que el imperialismo y la oligarquía. Por el contrario, éstos tenían entre sus planes terminar la tarea de derrotarlos iniciada en 1955, como luego se demostraría de Martínez de Hoz en adelante. Por lo tanto, era un error equipararlos y enfrentarlos de la misma manera. Lo cierto era que la decisión y la fuerza de esa burguesía, del movimiento político que la expresaba y del propio general para llevar adelante un proceso como el del ’45 ya no existía; por ende, tampoco era correcto generar expectativas en el pueblo de que ello sucedería.

Con respecto a que el objetivo de Perón era apartar a los trabajadores y el pueblo del camino revolucionario que incipientemente habían empezado a recorrer bajo otra conducción, es probable que ello haya sido así en ese entonces; pero también era absolutamente seguro que no tenía ya a esa altura ninguna posibilidad de tener éxito al no poseer ni de cerca su proyecto la fuerza que alcanzó en los años ’50. Ya no tenían la decisión de recortarles seriamente los ingresos a la oligarquía y al gran capital, y redistribuirlos a favor de los trabajadores y las mayorías buscando un nuevo despegue productivo del país. Esto, en el contexto concreto de auge que se vivía en esos momentos en el movimiento de masas, le ponía un techo insalvable a cualquier intento de llevarlo en el tiempo a la desmovilización, aislando a las organizaciones revolucionarias. Por ende, con la derecha real acechando por detrás, no se justificaba una demoledora confrontación política e ideológica con un proyecto sin viabilidad y que haría agua a poco andar.

En segundo lugar, era incorrecto para esa etapa histórica del país y en plena ofensiva imperialista en Latinoamérica plantear un proyecto socialista como salida a la crisis del modelo de sustitución de importaciones. Eso fracturaba la sociedad de manera tal que empujaba sectores que debían ser parte de una alianza con el campo popular, o por lo menos neutralizados, hacia la derecha. Al proyecto de las clases dominantes de profundizar la dependencia había que oponerle un proyecto de soberanía nacional, patriótico y antiimperialista, como planteó el propio PRT después de la muerte de Perón, cuando ya era tarde; proyecto que necesitaba por sobre todo una conducción más consecuente que la que podía brindarle la burguesía nacional expresada en el justicialismo.

En tercer lugar, la realidad demostró lo que ya habían advertido antes muchos líderes revolucionarios: las organizaciones políticas que buscan conducir al pueblo en una gesta liberadora deben acompañarlo en su práctica, que es donde hace su aprendizaje; y allí, mirando más lejos y entreviendo el cauce profundo de las cosas, ganarse la dirección del proceso. El PRT no dejó que la propia experiencia fuera abriendo el paso a la comprensión en el seno de las masas de las limitaciones insalvables del gobierno peronista para romper con la dependencia; y que fuera también la práctica lo que mostrara al pueblo que la derecha y los militares preparaban el regreso sangriento, que eran los agresores y no las víctimas.

¿Qué se debió, en nuestra opinión, haber hecho en una situación tan compleja pero también tan favorable como la que hubo en l973, para poder darle más vigor al proceso revolucionario que se había iniciado en la Argentina; para retener la iniciativa y, en definitiva, para entreabrir las puertas a las posibilidades de triunfar? Fue correcto no ser parte del gobierno justicialista advirtiendo que no estaba destinado, por su debilidad, heterogeneidad y las vacilaciones de su conducción, a plasmar un nuevo proyecto libre, justo y soberano como rezaban sus banderas históricas; e incluso haber sido opositor desde el principio en todo aquello en que ostensiblemente se apartaba de esas promesas realizadas al pueblo, movilizando y organizando a éste en defensa de sus derechos y conquistas. Pero todo ello sin poner a ese gobierno en un mismo plano con la derecha proimperialista; e incluso apoyando las medidas -que las hubo- que beneficiaban al pueblo, defendían la nación o promovían la unidad latinoamericana. Se debió también, rápidamente, haber levantado un programa patriótico y antiimperialista que fuera el punto de referencia para juzgar el accionar del gobierno; y además, para promover a partir del mismo la unidad de los sectores nacionales y populares en perspectiva de un proyecto de poder con una conducción consecuentemente revolucionaria. Por último, había que tomar las banderas democráticas muy firmemente (que en ese momento pasaba sobre todo por no retomar la lucha armada con vigencia de las instituciones) y desenmascarar de esa manera a la derecha y a la cúpula de las FFAA como los sectores decididos a violentarlas y conculcarlas, para evitar así que confundieran a muchos de nuestros compatriotas y reconstruyeran consenso en una parte de la sociedad.

Es posible que una táctica como la mencionada hubiera contribuido a evitar la derrota y a permitir la continuidad en un nivel superior de los proyectos revolucionarios de aquellos años.



HUMBERTO TUMINI

Secretario General de la Corriente Patria Libre

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bravoooo! bravoooo!!!!
Por F. - Friday, Dec. 24, 2004 at 1:13 AM

al fenómeno de lucidez llamado Humberto Tumini, alias "pelado", alias "Dios" no se le escapa una: se le escapan todas!!!!!

Obviamente este engendro está hecho pura y exclusivamente para justificar sus propias "vacilaciones" (como él mismo las llama) del día de hoy. Quizás se olvidó que como responsable de la Regional Tucumán (te acordás Pelado cuando te decías revolucionario? Qué tiempos aquellos!) él fue uno de los responsables de los supuestos errores que él menciona.

Entre muchas cosas que se "olvida", se olvida que Perón orquestó un golpe de estado contra el mismo Campora, que creó la Triple AAA para asesinar y reprimir clandestinamente, que permitió a los burgueses que hoy tanto ama Tumini aumentar sus ganancias en forma sideral y bajar los sueldos y el poder adquisitivo en proporción inversa (uia! como K!!!!)

Y como si fuera poco, acorde a su nueva costumbre de traición a todo lo que se le cruce en el camino (ideales, amigos, compañeros, historia, proyectos, etc) atribuye el 100% de la culpa de lo que pasó en los 70 al... PRT!!!!!! Acá no hubo milicos, no hubo gobiernos fascistas "democráticos", no hubo Triple A, no hubo burocracia sindical, no hubo maniobras imperialistas, no hubo errores gigantescos de la mayor organización revolucionaria del país (Montoneros, que apoyaba a quién había ordenado su aniquilación), no hubo apoyo y órdenes de países imperialista (Plan Cóndor) sino que todo se reduce... a la caracterización (100% correcta) de Perón que hizo el PRT!!!! La mierda que debe haber sido el partido más importante e influyente en la historia de la humanidad si con sólo una caracterización de un fascista ya logra lo que sucedió aquí.

En síntesis, erró en los 70, erra hoy, y erra en el análisis (que convengamos que es mucho más fácil a la distancia) de lo que debió haberse hecho en los 70. Por supuesto que el PRT cometió errores, y algunos de ellos están levemente tocados de cerca por este opúsculo, pero Pelado, leíste mal, no servís ni para chorear "tus" textos. Y lo siento, no te pienso dar ninguna pista, arreglatelas vos y tus "equipos técnicos", que se ganen el sueldo.

No, si siempre dije que el problema del Pelado es que tiene el nivel de análisis político de un enano de jardín. Ahora tengo que decir que simplemente su nivel es enano. Y fascista.

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segui traicionando
Por cordobes - Friday, Dec. 24, 2004 at 12:03 PM

Hijo de Puta!!!..hacete cargo de tus vacilaciones y tu giro a la derecha sin buscar justificaciones con autocriticas que involucran la experiencia de lucha de los compañeros del PRT que en su gran mayoria hoy no comparten con Ustedes la caracterizacion del momento ni las alianzas con la burocracia peronista.
te recuerdo la alternativa al GAN: Comite de Base con programa democratico,antidictatorial y ANTIIMPERIALISTA.".....


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pelado!
Por lo único que faltaba - Friday, Dec. 24, 2004 at 2:00 PM

siempre fuiste un pe-ladobotón!

ahora en serio... que lumpen descompuesto traidor kirchnerista cipayo hijo de remil putas!

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F. tiene razón
Por Coco - Saturday, Dec. 25, 2004 at 4:27 AM

Básicamente lo que dice el pelado hijo de puta es que la cupla no es de los genocidas, sino de las víctimas, configurando el último toque que le restaba para definirse como netamente de derecha. Mucho juntarse con el PJ y terminás así, que van a decir la renga, o el negrito, o Cacho allá por los pagos. Supongo que no te vas a enterar porque tus viejos amigos ya ni te abren la puerta, qué tristeza, ¿no?

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Increíble
Por René - Tuesday, Dec. 28, 2004 at 10:42 PM

si algo le faltaba a este forro es escupir esta sarta de pelotudeces fundada en la teoría de los dos demonios o como dijeron más arriba para justificar las "vacilaciones" de Tumini mismo. Y al que dijo que Patria Libre está perdiendo militantes le digo que está equivocado en parte, porque no pierde militantes, sino barrios enteros, porque algunos elegimos estar de pie hace bastante tiempo, no transamos con estar de rodillas.

René - San Vicente - Córdoba

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¿Che, y los K?
Por ¿k pachó? - Wednesday, Dec. 29, 2004 at 11:31 PM

¿postearon esta pelotudez y ahora se borraron?

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tres tristes troscos
Por perro cristiano - Thursday, Dec. 30, 2004 at 2:28 PM

tres tristes troscos estan mas perdidos que menem en la argentina de k

este documento tiene mas de 3 años, y es un analisis sobre las tacticas del prt en los 70 a la luz de la experiencia actual de ese momento, ni existia k, y por eso solo critica al prt

se supone que lo unico que hacen es leer libros y documentos, y ahora veo que no sirven ni para eso, porque sino no se sorprenderian de que apoyemos a k, porque hace desde el 96 que planteamos esta linea en el 2do congreso

veo que el ciguismo esta a full

ademas el pelado puede criticar lo que quiere del prt porque era de la direccion y puso los huevos cuando habia que ponerlos, y no se escondio echandole la culpa de la dictadura a los revolucionarios en el momento de la represion como tantos de uds

me acuerdo que habia incluso algunos presos politicos troscos, creo que porque eran tan bestias los milicos que se equivocaron

obvio que ellos estaban legales, no clandestinos, y en las celulas les planteaban a los pendejos que ni se les ocurriera espcaparse de la carcel, porque ellos eran la garantia de que les envien plata del exterior para mantener a los jefecitos concienzudamente escondidos leyendo el capital

ninguno de todos los jefes de ningun rejunte de izuqierda tiene galones para poner encima de la mesa porque estaban todos cagados todos escondiendose, desencillando o apoyando a videla

sus jefes se hacen los zurdos pero no hicieron un zorete, eso es lo que en el fondo los mueve al resentimiento, tantos caretas que tienen de jefes mariquitas

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ghffghghhjh
Por yutgjuy g hgjkhjk - Thursday, Dec. 30, 2004 at 4:09 PM

iuyuiyboiuyiuy iuhlknhb ijyuh iou lhj

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che mogólico cristiano
Por F. - Thursday, Dec. 30, 2004 at 5:04 PM

1) Hasta donde yo sé, el 99.99% de lso desaparecidos eran de izquierda, principalmente del peronismo revolucionario (Montoneros, aquellos de "Perón, Evita, la patria socialista") y del PRT-ERP (más izquierda y socialismo que esto imposible)

2) Tumini jamás formó parte de la dirección del PRT y mucho menos del ERP. Fue responsable de la Regional Tucumán y responsable de su caída en masa en 1973 o 1974 (ya no recuerdo bien) debido a sus fallas de seguridad y a vivir boqueando. Lo cual no quita que haya sido un compañero valioso en esa época, sólo que muy descuidado y por su culpa cayó una regional completa. Acerca de los huevos, si hablás de combatir, el pelado no combatió, a lo sumo algún desarme.

3) Los presos políticos podrán o no ser troscos, yo no lo soy pero tampoco le ando enrostrando al trostkismo si tuvo presos políticos o no (no sólo presos, tuvo desaparecidos, pero vos qué sabrás)

4) No sé a qué llamás los "jefes de algún rejunte de izquierda", pero sé de varios cuadros de partidos de izquierda (no de los grandes, por supuesto) que conocieron las mazmorras de la dictadura, la tortura, la cárcel y que tienen muchísimos más galones (ya que te gusta medir en sangre, por supuesto, siempre la ajena) que todo Patrial Libre y Barrios de Pie junto.

5) En mi familia hay dos de las/los que fundaron CPL, hoy una de ellas se fue asqueada y otro trata de dar la discusión adentro (como si pudiese). Pero excepto Tumini, no hay NADIE del núcleo original de CPL que hoy esté en el partido o que no esté por irse. NI UNO SOLO. Por qué será?

6) La persona que ya no está en CPL, empleada municipal ex-Compañia de Monte (ya que te gustan los galones) fue reprimida en Tucumán por la policía y... CPL!!!!!!!!!!

7) Informate antes de hablar, salame

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