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"El peronismo nunca va a ser de centroizquierda
Por Antonio Cafiero -
Wednesday, Jan. 19, 2005 at 8:46 PM
nota
EL REPORTAJE DE VERANO: ANTONIO CAFIERO, SENADOR DEL PJ "El peronismo nunca va a ser de centroizquierda" -------------------------------------------------------------------------------- Marcelo Helfgot. mhelfgot@clarin.com —Dos de sus nietos acaban de perder la interna peronista en San Isidro. ¿Qué pasó, no siguieron sus consejos? —Hicieron buena elección. Era el debut. Yo no intervine ni para aconsejarlos, es otra generación. Mis juicios podrían estar teñidos de valores que ya no son útiles a la vida política. Mejor que empiecen perdiendo, para que no crean que es fácil. —Supe que un nieto le cuestionó la alianza que hizo con Menem en el 99 para pelearle la interna a Duhalde. ¿Quién tenía razón? —Depende... En las internas no se conjugan variables ideológicas. Son totalmente oportunistas y electoralistas. Y admiten las alianzas más inverosímiles que uno pueda imaginar. Esa interna fue contra el dedo de Duhalde para poner a Ruckauf. —Se lo recuerdo porque otra vez Duhalde aparece alambrando la Provincia... —La pregunta podría ser: ¿Duhalde alambra la política o no hay dirigentes con capacidad de enfrentarlo en Buenos Aires? —El apoyó a Solá y ahora le quita margen para gobernar... —Son matices. Duhalde representa el núcleo duro del peronismo histórico, sin el cual no habría peronismo nacional, al no existir una figura carismática con capacidad de conducirlo. Se habla de aparatos corruptos, de clientelismo, de hegemonía. Es ficción. Ya hemos perdido elecciones. —¿A Kirchner no le ve uña para ese liderazgo? —Siempre hubo intentos de cooptar al núcleo duro del peronismo. El Presidente intentó armar una estructura con capacidad de derrotarlo y disolverlo. El sueño de nuestros rivales. Ahora se dio cuenta de que los transversales no se alineaban y quiere articular con el peronismo, no coparlo. —¿La interna peronista volverá a ser batalla nacional? —Espero que no, lo cual no quiere decir que sea imposible. Solá y Duhalde tienen formas no antagónicas, pero sí distintas de concebir el peronismo. Esto siempre ocurrió. El duhaldismo tiene virtudes pero no se renueva. Solá viene con una propuesta que suena renovadora. Si estas corrientes se sintetizan, los argentinos podríamos tener una democracia más genuina. Falta un arquitecto que sepa hilar. —¿Borges tenía razón? —¿Por eso de que el peronismo no es ni malo ni bueno, es incorregible? Afortunadamente es incorregible. ¿Quién lo quiere corregir? Los ideólogos, los sectarios. Los que jamás consiguieron votos ni se embarraron los pies. —¿Chiche o Cristina, quién será candidata a senadora? —Esa será la madre de todas las batallas. Ahí tendría que actuar Kirchner como arquitecto, para unir al PJ de forma incruenta. Con tradición y modernidad. —-¿Admite a Cristina? —Si viene a cumplir este rol, bienvenida sea. Pero si viene a doblar la balanza, vamos a entrar en un proceso de enfrentamientos que no quisiera. Kirchner hizo muy bien en desensillar de la aventura transversal y dialogar con el peronismo histórico. ¿Con qué lo vamos a reemplazar: con esos políticos intelectualoides que piensan en un peronismo como variante de la socialdemocracia? El peronismo nunca va a ser de centroizquierda. El peronismo es nacional y populista. —¿Qué debería hacer Kirchner si se sale del default? —Tiene que poner el acento en la distribución del ingreso. —¿En qué falló la dirigencia para caer en tamaña crisis? —Se deshicieron muchas ilusiones. El menemismo creó un estado de ilusión colectiva con un hecho falso: que el dólar equivalía a un peso. Y todos lo creímos, queríamos que fuese así. —¿Lo dejaron solo por denunciar sobornos en el Senado? —Sí. La dirigencia política argentina... sufre la misma crisis que vive el país. Está devaluada. —¿Faltan líderes? —Los que apuntan a conquistar la voluntad popular utilizan una pirotecnia política que no es la más adecuada. No surgen fenómenos como los de Alfonsín en el 83 o los de la renovación peronista. —Después de la tragedia de Once se habla de derogar la ley Cafiero. ¿Va a reconciliarse con los porteños? —No tengo problemas. Si quieren la Policía, que la paguen.
www.clarin.com/diario/2005/01/19/elpais/p-01001.htm
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