Julio López
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QUE SIGNIFICA "PAZ" PARA LOS ISRAELIES?
Por Abrabanel - Thursday, Jan. 27, 2005 at 3:10 PM

ISRAEL HA PERDIDO LA NOCIÓN DEL SIGNIFICADO DE LA PALABRA "PAZ'

Lo que “Paz” significa realmente para los israelíes


Avigail Abarbanel

Traducido para Rebelión por Germán Leyens


Hace dos meses volví de una visita familiar de dos semanas en Israel. Aunque soy activista por los derechos palestinos, decidí que esta visita sería enteramente privada. La vida durante una quincena con mi hermano, su mujer y sus dos pequeñas hijas en su pequeño departamento en un suburbio al norte de Tel Aviv, me dio la oportunidad de observar y ver lo que es la vida diaria de los israelíes en la actualidad.

No hice nada especial. Hice largas caminatas por las calles de Tel Aviv y visité muchos sitios que conocí en el pasado. Compré en el supermercado local y tomé café en el centro comercial cercano. Miré la televisión local e incluso fui al gimnasio. Durante dos semanas viví la vida ordinaria de Tel Aviv. En lugar de hablar, escuché mucho. Hablo fluidamente hebreo, desde luego, así que me fue fácil mezclarme y la gente habló libremente en mi presencia. Los medios australianos gustan de subrayar lo dura que es la vida de los israelíes, y quería comprobarlo personalmente.

Lo más obvio en la sociedad israelí es lo profundamente inseguros que se sienten los israelíes. Están nerviosos y agitados y viven con niveles extremadamente elevados de ansiedad. No es que esto haya sido algo nuevo para mí, pero parecía haber un ángulo nuevo. Cuando estalló una bomba en el Mercado Ha’carmel en el centro de Tel Aviv, yo estaba en el gimnasio. Miré alrededor y dentro de instantes todos estaban usando sus teléfonos móviles informando a, o viendo como estaban, sus seres queridos. Una joven a mi lado en el área del levantamiento de pesas suspiró angustiada: “no de nuevo”.

Desde mi adolescencia, estuve acostumbrada a que me revisaran las bolsas cada vez que entraba a un edificio público como ser un cine o un supermercado, por todas partes en Israel. A pesar de mis 13 años en Australia, el reflejo de abrir mis bolsas sigue vivo. Lo que fue diferente esta vez es que ahora los guardias de seguridad también tienen un detector electrónico para escanearte el cuerpo. En la actualidad, hasta los pequeños negocios como los restaurantes y los cafés tienen delante su propio guardia de seguridad. Hay un “coste adicional de seguridad” de 2 NIS que suman a la cuenta para ayudar a que el negocio pague por el guardia de seguridad, pero no exigen que lo pagues.

Los israelíes han hablado siempre de paz, han cantado de paz, han producido arte y poesía al respecto, como si fuera algo casi sobrenatural, una especie de paraíso que ansían pero que no tiene nada que ver con la realidad de cada día, y que no tienen idea cómo crear. Pero lo que la paz significa realmente para estos israelíes exhaustos, ansiosos, es que los dejen solos. Fue triste e inquietante ver cuán desesperadamente se adhieren los israelíes a lo que creen que es la “normalidad”. Están desesperados por “ser como todos los demás” en cualquier otro país occidental, ir a trabajar, ir de compras, ir a bares y cafés con amigos. Sienten indignación y desesperación cuando ocasionalmente militantes palestinos interrumpen esa rutina de “normalidad”. Hasta cierto punto puedo comprenderlo. Y después de todo, una de las principales razones por las que me fui de Israel fue que consideré insoportable ese modo de vida.

Cuando la vida es tan difícil supongo que es humano si deseas que desaparezcan tus dificultades. Pero ése es precisamente el problema real. Cuando un individuo, un grupo o toda una sociedad viven con un oscuro secreto o niegan algo importante en sus pasados, no pueden vivir en paz. Es simplemente imposible vivir una vida “normal” o pacífica basada en mentiras y secreto. La denegación de la limpieza étnica de los palestinos en 1948, el que se trate de no pensar en las consecuencias de largos años de una ocupación brutal, y desear simplemente que todo desaparezca no es otra cosa que una fantasía.

En la terapia familiar es un principio aceptado, que a menos que se estudien las injusticias graves, no puede haber una verdadera paz. Las familias que protegen secretos oscuros siempre pagan un precio elevado. Vi a intelectuales israelíes en la televisión, involucrados en una genuina discusión en la que trataban de analizar y comprender por qué las cosas van tan mal en Israel. Presentaban todas las razones posibles para la situación, fuera de la más obvia – la historia de Israel. Era espantoso presenciar, pero también era algo familiar. Nunca he visto una sociedad tan profundamente envuelta en la denegación como la sociedad israelí.

Todo el espectro de la política israelí niega la historia de Israel y por eso no tengo mucha fe en la izquierda israelí. El puñado de personas que no niegan, como el doctor Ilan Pappe que visitó Australia el año pasado, o el doctor Uri Davis, existen fuera de este espectro. Su investigación de los eventos de 1948 y de las circunstancias que rodearon el nacimiento del Estado de Israel, no es discutida en la televisión pública y no se encuentra en los libros de historia israelíes. El israelí promedio ni siquiera sabe quién es. Aunque han sido publicados por editores tan reputados como Cambridge University Press, hasta ahora se han negado a publicar los libros del Dr. Pappe en hebreo. La razón ofrecida es que carecen de mérito académico... La manera como los israelíes perciben su propia historia es como si siempre hubieran sido las víctimas débiles. El tema de si fue o no moralmente correcto, o siquiera sabio, crear un Estado a costa de otro pueblo jamás se discute. Nadie, en los medios dominantes, cuestiona la validez de la democracia en un país en el que el derecho de ciudadanía se basa en la raza (sólo se puede llegar a ser ciudadano israelí si se puede probar que su madre es judía).

Cuando los israelíes participan en “conversaciones de paz” es importante comprender su posición básica. No tienen un interés real en una solución que llegue al núcleo de su problema. Son como un individuo que quiere que sus síntomas desaparezcan pero que se niega a hacer algo respecto a sus causas reales. Un deseo de que “lo dejen solo” no es una base efectiva para una paz sostenible, por lo menos no sin otro acto de limpieza étnica. Seis millones de palestinos están allí, para recordarle a Israel su pasado, y no se irán a ninguna parte.

Si llega el día, y espero que así sea, en el que los israelíes decidan que van a dejar de vivir en la denegación, tendrán que comprender que la verdadera paz sólo llegará a través de la justicia. La justicia, en este contexto, significa una cosa: que el ideal de un Estado exclusivamente judío a costa de todo un pueblo tendrá que ser abandonado. Sólo un Estado binacional y el derecho al retorno de los refugiados palestinos se aproximará a rectificar algunas de las injusticias cometidas en 1948, y desde entonces. Por haber sido sometidos a la limpieza étnica, los palestinos también tienen derecho según el derecho internacional y la decencia humana más elemental a que así sea.

Podría significar la expiación de Israel. También sería la oportunidad de que Israel se libere del peso de esa culpa que creo que hace que sus vidas y las vidas de los palestinos sean una pesadilla. Sí, será un desafío. Pero ofrecerá la posibilidad de una paz real y sostenible tanto para los palestinos como para los israelíes, posiblemente para toda la región. La continuación de la mentalidad y la política de la denegación no llevará a ninguna parte, y continuará costando las vidas y el bienestar de muchas más personas y comunidades.

Enero de 2005
* Ex israelí y ex sargento superior del ejército israelí. Es psicoterapeuta/psicóloga con práctica privada en Canberra, Australia, y activista por los derechos palestinos. Contacto: avigail@netspace.net.au URL: http://avigail.customer.netspace.net.au/
http://peacepalestine.blogspot.com/2005/01/avigail-abarbanel-what-peace-really.html




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DOS ESTADOS PARA DOS PUEBLOS
Por RESPETO MUTUO Y FRONTERAS SEGURAS - Thursday, Jan. 27, 2005 at 6:30 PM

Hace dos meses volví de una visita familiar de dos semanas en Israel. Aunque soy activista por los derechos palestinos... ...la gente habló libremente en mi presencia.... ...Cuando estalló una bomba el en el centro de Tel Aviv... ...todos... ...como estaban, sus seres queridos. Una joven a mi lado... ...suspiró angustiada: “no de nuevo”. ¿COMO QUIERE QUE RECONOZCAMOS LA JUSTICIA DE LA CAUSA DE LOS QUE NOS HACEN ESTO?

Los israelíes han hablado siempre de paz, han cantado de paz, han producido arte y poesía al respecto, como si fuera algo casi sobrenatural, una especie de paraíso que ansían pero que no tiene nada que ver con la realidad de cada día, y que no tienen idea cómo crear...
...Cuando la vida es tan difícil...
¿COMO QUIERE QUE RECONOZCAMOS LA JUSTICIA DE LA CAUSA DE LOS QUE NOS HACEN ESTO?

La denegación de la limpieza étnica de los palestinos en 1948,... ... FUE UNA GUERRA NO UN GENOCIDIO, EL 80% DE LA POBLACION PALESTINA HUYO TRAS LOS EJERCITOS ARABES DERROTADOS POR ISRAEL LA VIDA DEL 20% QUE SE QUEDO COMO ISRAELIES FUE ES Y SERA RESPETADA, SI GALILEA ELIGIERA UN GOBERNADOR AHORA MISMO ESTE SERIA ARABE PUES LA MAYORIA DE LA POBLACION DEL NORTE DE ISRAEL ES ARABE IGUAL QUE EN 1948...

Todo el espectro de la política israelí niega la historia de Israel y por eso no tengo mucha fe en la izquierda israelí. PODES BUSCAR FACILMENTE EN INTERNET LAS POSICIONES DE LA IZQUIERDA ISRAELI QUE NO NIEGA EN ABSOLUTO LOS CRIMENES DE LA OCUPACION ISRAELI SINO QUE LOS DENUNCIA CONSTANTEMENTE... ...los eventos de 1948 y de las circunstancias que rodearon el nacimiento del Estado de Israel, no es discutida en la televisión pública y no se encuentra en los libros de historia israelíes...HAY UNA NUEVA HISTORIA ISRAELI CON SOLIDA BASE ACADEMICA EN LAS UNIVERSIDADES DE TEL AVIV Y HAIFA QUE DENUNCIA CLARAMENTE LOS ATAQUES DE UNIDADES PARAMILITARES ISRAELIES CONTRA POBLACION CIVIL PALESTINA COMO LA CAUSA PRINCIPAL DE QUE EL 80% DE LA POBLACION PALESTINA HAYA HUIDO DE SU PATRIA...NINGUN ISRAELI LO IGNORA PERO NO SE RECONOCE LA JUSTICIA DE TU ASESINO... ...La manera como los israelíes perciben su propia historia es como si siempre hubieran sido las víctimas débiles. El tema de si fue o no moralmente correcto, o siquiera sabio, crear un Estado a costa de otro pueblo jamás se discute.NO DECIDIMOS LOS JUDIOS POR NOSOTROS MISMOS LAS DOS GUERRAS MUNDIALES MAS LA RECESION DE 1929 QUE LLEVO A QUE LA MAYORIA DE LOS PAISES CERRARA SUS FRONTERAS NOS EMPUJO A PALESTINA Y LA OPCION ERA POR EJEMPLO VOLVERNOS A LA ALEMANIA NAZI... ... Nadie, en los medios dominantes, cuestiona la validez de la democracia en un país en el que el derecho de ciudadanía se basa en la raza... TAMBIEN LOS NAZIS NOS ELIGIERON POR LA RAZA

Cuando los israelíes participan en “conversaciones de paz” es importante comprender su posición básica. No tienen un interés real en una solución que llegue al núcleo de su problema. Son como un individuo que quiere que sus síntomas desaparezcan pero que se niega a hacer algo respecto a sus causas reales. Un deseo de que “lo dejen solo” no es una base efectiva para una paz sostenible, por lo menos no sin otro acto de limpieza étnica. ESTAMOS DISPUESTOS A NEGOCIAR RESPETO MUTUO Y FRONTERAS SEGURAS Seis millones de palestinos están allí, para recordarle a Israel su pasado, y no se irán a ninguna parte... ...SE IRAN A PALESTINA

Si llega el día, y espero que así sea, en el que los israelíes decidan que van a dejar de vivir en la denegación, tendrán que comprender que la verdadera paz sólo llegará a través de la justicia. La justicia, en este contexto, significa una cosa: que el ideal de un Estado exclusivamente judío a costa de todo un pueblo tendrá que ser abandonado.ES JUDIO O MUERTO NO ADMITIMOS OTRA OPCION PORQUE LOS NAZIS NO ADMITIAN OTRA... ... NO IGNORAMOS LA JUSTICIA DE LA CAUSA PALESTINA SOLO QUE ADMITIRLA PARA NOSOTROS SIGNIFICA RECONOCER LOS DERECHOS DE QUIENES QUIEREN ARROJARNOS AL MAR... Sólo un Estado binacional... ...¿COMO YUGOSLAVIA O RUANDA? y el derecho al retorno de los refugiados palestinos se aproximará a rectificar algunas de las injusticias cometidas en 1948, y desde entonces. Por haber sido sometidos a la limpieza étnica, los palestinos también tienen derecho según el derecho internacional y la decencia humana más elemental a que así sea. LOS PACIFISTAS DE AMBOS BANDOS PELEAMOS POR UNA PAZ JUSTA BASADA EN DOS ESTADOS PARA DOS PUEBLOS,

Podría significar la expiación de Israel.... ...Y LA DE PALESTINA... ...También sería la oportunidad de que Israel... ...Y PALESTINA... ... se libere... ...N... ...del peso de esa culpa que creo que hace que sus vidas... ...sean una pesadilla. Sí, será un desafío. Pero ofrecerá la posibilidad de una paz real y sostenible tanto para los palestinos como para los israelíes, posiblemente para toda la región...
DOS ESTADOS PARA DOS PUEBLOS RECONOCIMIENTO DE TODOS LOS REFUGIADOS PALESTINOS DE SU DERECHO DE VOLVER AL NUEVO ESTADO PALESTINO RESPETO MUTUO Y FRONTERAS SEGURAS

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Ven?
Por Yo - Thursday, Jan. 27, 2005 at 8:36 PM

Nadie, en los medios dominantes, cuestiona la validez de la democracia en un país en el que el derecho de ciudadanía se basa en la raza... TAMBIEN LOS NAZIS NOS ELIGIERON POR LA RAZA

Es como yo digo. Los sionistas son como los nazis, pero "al revés".

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Engaña-pichangas del progre-sionismo
Por Ari Burbiski - Friday, Jan. 28, 2005 at 9:49 AM

“Dos estados para dos pueblos” fue, precisamente, la decisión que tomó la ONU cuado decidió la fundación del estado de Israel. O sea que no es la solución, sino más bien el problema. Insistir en ello sin mayores análisis es lo mismo que pretender apagar el fuego echándole nafta.
El punto es que, una vez que se ha admitido que la separación territorial de ambos pueblos es producto de una expulsión violenta de uno de ellos (y habría que hablar también de la subvención de la acelerada colonización sionista en el período anterior a la fundación de Israel, siempre en función de la política británica/aliada en la región), hablar de dos estados para dos pueblos es borrar con el codo lo que se había escrito con la mano. Si la “transferencia” en masa de los palestinos en 1948 fue la semilla de la injusticia, no se entiende cómo ahora la justicia podría emanar de la admisión sin cortapisas de la situación resultante de aquella “transferencia”. Quienes vivimos en la Argentina durante los ‘70s y los ‘80s sabemos bien que no es amnistiando a los responsables de los crímenes contra un pueblo como se puede alcanzar la justicia.

Al que pregunta cómo es posible reconocer la justicia del reclamo de quienes cometen atentados contra civiles, habría que recordarle varios puntos importantes: 1) Israel, y antes de su fundación las organizaciones sionistas armadas, ha cometido no pocos atentados contra civiles; 2) no pocos de los actos violentos cometidos por organizaciones árabes, ahora y antes de 1948, más que oponerse al ala derecha sionista tienen el objeto de fortalecer las políticas sionistas duras y se han cometido más de una vez con el aval de la inteligencia sionista y de una o más potencias imperialistas (como nos recuerda muy bien el atentado contra la AMIA en nuestro propio país, donde el Mossad bloqueó la investigación, y podría incluso señalarse que esta táctica parece haberse vuelto ya habitual a escala mundial, después de los atentados “terroristas” a las Twin Towers o los ocurridos recientemente en una escuela rusa); 3) si bien los pueblos no son lo mismo que sus gobiernos, tratándose en muchos casos de colonos sería mucho decir que son lo contrario: es como si dijéramos que a la clase media porteña no le cabe ninguna responsabilidad por la persecusión policial a los “negritos” que ponen en riesgo su “seguridad”, por más que esta maniobra sea orquestada desde ariba (y con “desde arriba” comprendo también a las organizaciones terroristas árabes); 4) ningún opresor (o beneficiario o cómplice de la opresión) tiene derecho a quejarse de la injusticia de quienes reaccionan contra la opresión que ejerce mientras él mismo siga ejerciendo la opresión.

No es la separación de los pueblos sino la unidad lo que puede dar una salida al conflicto, pero no la unidad platónica, sino aquella que encuentre su expresión política. Mientras esta última no tenga lugar, no hay perspectivas de justicia para los pueblos de la región. El ejemplo de la ex Yugoeslavia se vuelve contra el que lo citó, precisamente porque los conflictos étnicos habían dejado de existir bajo el régimen titista: la unión de los pueblos es alcanzable cuando no existen intereses desde arriba en enfrentarlos unos con otros. Así también fue en Israel: más allá de las relativamente minoritarias ortodoxias derechistas árabes y judías, no existía odio entre los pueblos hasta que las necesidades del imperialismo, especialmente británico, empezaron a incentivar ese odio en función de su control de la región después de la derrota del Imperio Otomano por los aliados. Más tarde se producirían nuevas disputas entre otras potencias por la influencia en la región, hasta el día de hoy en que el estado de Israel es una pieza fundamental de la hegemonía norteamericana en Oriente Medio. La creación de un estado sionista, no más que la tesis de “dos estados para dos pueblos” son hechuras del imperialismo y, por eso mismo, no pueden solucionar nada sino que existen para ser un factor constante de conflictos. No es con el visto bueno del imperialismo ni con maniobras entre potencias como los pueblos de la región tendrán justicia y libertad, sino con la erradicación de los intereses imperialistas en la región, lo que no se logra sólo con bellas palabras, ni tampoco con atentados terroristas, sino con la unidad antiimperialista -y socialista- de los pueblos. Puede que esto resulte difícil, pero más difícil resulta cuanto más se insista en buscar la solución en la dirección contraria.

Naturalmente, decir que no hay denegación histórica y sostener a la vez que en 1948 hubo una guerra y no un genocidio (la transferencia y la violencia en masa fueron hechos que, a esta altura, están recontra documentados), es más o menos como cuando alguien dice que aquí, en Argentina, en los ’70s hubo una guerra... Desde luego, esa sería la versión predominante si los militares no hubieran tenido una retirada ignominiosa. En Israel más bien ha sucedido lo contrario, los criminales han salido vencedores. Mientras el sionismo esté en el poder no habrá verdad, sólo habrá denegación.

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...FABIÁN,FABIÁN,FABIÁN!!!!
Por Gorilón - Friday, Jan. 28, 2005 at 10:25 AM

No te hagas rogar...este foro esta diseñado a tu medida!!!!
....DAAALEEEEEEE!!!!!!!

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Yo también...
Por Anarqui - Friday, Jan. 28, 2005 at 11:15 AM

... lo estoy esperando a Fabián. Sólo para comprender alguito más.


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¿algún parentesco?
Por Sal Ame - Friday, Jan. 28, 2005 at 1:23 PM

¿"Anarqui" es un apellido del mismo género que "Gorqui", "Trosqui" o "Derqui"?

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ja
Por Anarqui - Friday, Jan. 28, 2005 at 1:56 PM

que apellido? me gustaría saber cuál es tu duda?
si querés que me identifique con un "alguien" histórico, alguna "tendencia", "partido", "oficial", "no oficial", etc, tonces lo lamento por vos.
Porque la verdad es que mi falta de "identificación" de ese tipo se debe a varias cuestiones, pero la primera y más importante es el desconocimiento sobre estos temas.

El Alias se debe a una de las frases que emiten sobre mi persona funcionando grupalmente, pero podría haber sido también (y te doy las opciones, elegí la que te guste)

"loca de mierda"
"pará un poco"
"picasesos"
"no respetás las jerarquías"
"te metés en todo"
"irreverente"
"irrespetuosa"
"siempre cambiando todo"
"quisquillosa"
"mal c......"

Yo elegí el mas liviano.

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Ahhh
Por Anarqui - Friday, Jan. 28, 2005 at 2:04 PM

Me olvidaba, lo de "Gorqui" y sal ame, si te referís a mi ingenuidad, es probable, prefiero pensar en gente digna del otro lado, personas "frontales" y apelo a ello desde mi expresión y pensamiento, el resto corre por cuenta del "otro".

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Ah!
Por Bolud el cotur - Friday, Jan. 28, 2005 at 2:27 PM

Ya sé! ¡Anarqui es como Burbaqui o Bolonqui! :-D

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otro marco
Por NN - Friday, Jan. 28, 2005 at 3:02 PM

Completamente de acuerdo en que la solución óptima sería un estado "binacional", en realidad óptimo lo que se dice óptimo sería un estado "uninacional" donde la nacionalidad no se defina en función de parámetros identitarios (religiosos, culturales, "raciales" o lo que sea), y, ya que estamos, más óptimo todavía sería la extinción de todo estado y el establecimiento de la ciudadanía universal definida por la pertenencia a la especie (nada de hijos de Israel, Ismael o Cristo: todos homo sapiens hijos de la Eva Mitocondrial). Desgraciadamente las cosas no son tan sencillas.

Chomsky (nada sionista él) ha señalado (en una discusión publicada en rebelión.org con el extraño israelí converso al cristianismo Israel Shamir) que en los diarios norteamericanos hegemónicos (en líneas generales pro-israelíes) se suele dar a la propuesta binacional un espacio mucho mayor que el que realmente tiene entre israelíes y palestinos. La razón, según él, es que la imposibilidad de llevarlo adelante permite afirmar la no-solución ("nos quieren tirar al mar", "no hay con quien negociar" y ese tipo de cosas). El estado binacional es una postura histórica de comunistas y anarquistas (minoritarios ambos entre israelies y palestinos). Algunos históricos "binacionalistas" como el periodista Ury Avneri (que en los 50' dirigió el movimiento canaanista que buscaba un estado único para todos los "descendientes de cananeos") han girado a la posición de dos estados en función de lo que perciben como alternativa realista.

La discusión sobre si el sionismo es o no hijo del imperialismo es de larga data por aquí (lleva más de un mes y participaron Fabián, Xor, Antonio, Carolina, yo y otros más intermitentes). Mi opinión:

Para los árabes palestinos: El sionismo es la continuidad del colonialismo. La idea de que los judíos siempre desearon volver a su tierra les parece absurda (Bizancio prohibía la instalación de judíos en el actual israel, los musulmanes levantaron esta prohibición y durante mil y pico de años pudieron emigrar allí libremente si no lo hicieron es por que nunca les interesó, el deseo de retornar es un chamuyo imperialista). La nacionalidad se define por el territorio, las "raíces"palestinas están en todos los que antes vivieron allí. Habría una línea histórica a partir de la cual se articula el Relato Nacional Palestino que termina en los actuales palestinos (cristianos, musulmanes y judios no europeos) y que se remonta al Canaan y aún antes (todos los que vivieron en Palestina). La división por religión o "raza" sería arbitraria y el sionismo un movimiento separatista.

Para los judios israelies: Los judios fueron expulsados por los romanos y vivieron como extranjeros en todas partes. Ir a Israel no fue una emigración sino un retorno. La continuidad (la línea histórica a partir de la cual se articula el Relato Nacional) no la da el territorio sino la pertenencia al pueblo judio. Los palestinos serían un invento, nunca existió un Estado Palestino, los palestinos no son un pueblo sino un rejunte de varios (son "árabes")

Lo anterior es por supuesto una simplificación (muchos israelíes o palestinos no se reconocen en estos relatos o difieren en varios aspectos) pero la idea es más o menos esa. Cada hecho histórico es articulado por cada uno de los Relatos Nacionales en función de ese esqueleto general: ¿Declaración de Balfour? (apoyo del gobierno británico a la inmigración de judíos europeos a Palestina) Para los árabes: prueba del carácter de invento imperialista del sionismo; para los judíos: declaración ambigüa de una aliado necesario en ese momento pero poco confiable. En rigor, la DdB no es más que la vieja táctica británica de mantener en sus colonias movimientos políticos nacionalistas enfrentados para beneficiarse de la suma cero (en la India esto llevo a la triple partición en Paquistán, India y Bangladesh). El sionismo fue, en mi opinión, independiente de los intereses británicos, en un momento fue aliado y en otro enemigo, es un actor independiente. La oposición pueblos oprimidos/imperialismo tiene un valor heurístico indiscutible pero también lleva a una sobresimplificación. Algo similar sucede con reducir todo a contradicciones de clase. Para que lo anterior tenga sentido es necesario por supuesto tener clara la distinción entre las cosas y las categorías que utilizamos para entender las cosas (no reificar). En este caso nos quedaremos con las interpretaciones menos contradictorias y con mayor valor explicativo (cualquiera que busque el viejo debate en Indymedia puede observar las "anomalías" a que llevan la posturas antes señaladas o, al menos, esa es mi opinión).

Propongo una explicación "darwiniana" (se trata, por supuesto, de un darwinismo cultural del tipo de Marvin Harris, no de ese pseudo darwinismo neoliberal). Estamos en europa de fines del siglo XIX, y surgen "mutaciones" entre los proyectos políticos de las personas de origen judio (al azar como toda mutación pero siempre dentro de las combinaciones posibles de la época, así como en biología siempre son combinaciones de determinados genes). La desaparición de los guettos donde la cultura judia se autorreproduce (y el correlativo surgimiento de un violento antisemitismo en la mayor parte de Europa, o en toda bah) constituyen "presiones ambientales" que favorecerán a una u otra mutación/ideología. Una mutación es la llamada "asimilación", que soporta presiones contradictorias (las indiscutibles ventajas económicas y sociales de la asimilación por un lado, y el rechazo de los antisemitas por otro), la opción por la asimilación se expresa en la participación de miles de judios en movimientos politicos universalistas (socialistas, comunistas o liberales, raramente conservadores dado que estos solían ser antisemitas, hoy esto último ha hido cambiando), el "asimilacionismo" (asumido o no como tal) es sin duda la ideología dominante en toda la diáspora judía, y consiste en la reducción al mínimo de las diferencias culturales (lo que no implica, por supuesto, el abandono de la identidad judia, sino su articulación con otras, por ejemplo argentina). La "mutación" opuesta está expresada por el fortalecimiento de una religiosidad ultra-ortodoxa (no-socialismo, no-liberalismo, no-nacionalismo judio) que aún existe aunque minoritaria y permite una autorreproducción cultural que reproduce (en menor escala) las condiciones de aislamiento de un guetto. Otra mutación es el BUND (nacionalismo Idish combinado con socialismo e internacionalismo proletario), el Bund fue el movimiento político hegemónico entre los judios pobres de Europa del Este, fue alternativamente reprimido y cooptado por los comunistas y se diluyó, en Rusia, con el PC. En Polonia, los países Bálticos y otros la desaparición del Bund se vincula también con el exterminio físico de sus militantes reales y potenciales (en otras palabras no resistió las "presiones ambientales"). La última mutación es el sionismo, cuyas características no difieren gran cosa de la mayoría de los nacionalismos europeos (romántico, policlasista, irracionalista, etc), a diferencia del Bund, las "presiones ambientales" favorecieron al sionismo. Los pogroms, que al ser llevados a cabo por gente humilde debilitaban el internacionalismo bundista favorecían la idea sionista de que solo habría paz en un Estado judío. La partición de Palestina no refleja simplemente intereses imperiales (EEUU la aceptó sin entusiasmo, GB se abstuvo, la URSS la apoyó para perjudicar a Inglaterra), es el contexto favorable (la imposibilidad de los imperios del XIX de mantenerse, la existencia de millones de judios aún en campos de refugiados que pocos países estaban dispuestos a absorver, etc.) que fortaleció una ideología que existía entre otras. (Una mutación favorecida por las presiones ambientales).

El mismo marco podríamos utilizar para pensar el nacionalismo palestino (la lucha de EEUU contra el nacionalismo árabe laico por ejemplo, fue una "presión ambiental" indudablemente importante para el fortalecimiento del Islamismo).

Espero que este marco breve (y algo caóticamente) esbozado les parezca útil. En todo caso me parece fundamental huir como de la peste de cualquier interpretación esencialista que busque en características de uno u otro grupo humano el origen de los problemas. Los Relatos Nacionales arriba esbozados son mutuamente excluyentes y ninguno es, en rigor, "verdadero". No existe un criterio racional para darle prioridad lógica a la apelación a la territorialidad sobre la "pueblidad" (o como se llame). Ni, obviamente, viceversa.

Últimas mutaciones: En ambos pueblos ha surgido la convicción/mutación que tiende a fortalecerse de que la creación de un Estado Palestino en Ccisjordania y Gaza llevará a la paz. El interés de algunos estados árabes (otrora en guerra con Israel) de beneficiarse del desarrollo económico (especialmente en tecnología) constituye una presión ambiental positiva. Hay grandes presiones ambientales en el sentido contrario.

uNN gusto
NN

PD: El ataque a los judios en general por parte de presuntos defensores de los palestinos es una "presión ambiental" favorable a ciertos sectores
del sionismo (ese de los burgueses asustados ¿se acuerdan?)

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Un enfoque marxista
Por Xor - Friday, Jan. 28, 2005 at 5:38 PM

Es verdad que este debate no es nuevo. Pero me gustaría discutir algunas de las ideas planteadas por N.N.
Una de ellas es que la de evitar “sobresimplificaciones” como la explicación por la teoría de la lucha de clases, o la oposición entre potencias imperialistas y naciones coloniales o semicoloniales, etc. La verdad es que, si algo se parece a una “sobresimplificación”, creo yo, es la explicación por los relatos nacionales. Está bien, el relato (el mito, para decirlo en griego) es el pan de cada día de los antropólogos, pero eso sólo habla de lo pegados que pueden permanecer los cientistas sociales formados en el ámbito académico (burgués) a sus categorías profesionales.
La verdadera sobre simplificación empieza cuando se habla del “relato árabe” (o palestino) o del relato “judío israelí” (siempre que por israelí no se entienda sionista, ya que el sionismo sí constituye un relato o, mejor, un grupo de relatos que coinciden en puntos estratégicos).
En verdad, tanto los árabes como los judíos de Palestina no constituían comunidades sin clases. Por el contrario: existían desde las castas religiosas y las oligarquías feudales hasta los campesinos y los proletarios, pasando por las burguesías y sus diversas fracciones.
Puede ser cierto que las tendencias “universalistas” o “internacionalistas” no fueran profesadas por corrientes mayoritarias. Eso no alcanza para restarles viabilidad. De hecho, el propio sionismo fue un conglomerado de grupos que considerados aisladamente eran también grupos minoritarios, y muchos de los miembros de sus expresiones de izquierda se pasaron, desencantados, al Partido Comunista de Palestina cuando este se fundó. Se equivoca N.N. al menospreciar esta corriente, que llegó a protagonizar importantes movilizaciones y huelgas de masas en las que trabajadores árabes y judíos marcharon unidos. Nunca fue fácil, pero eso no se debe al ningún odio natural entre los pueblos, sino a cómo ése odio era fomentado desde arriba, no sólo por las potencias imperialistas sino por los sectores religiosos, las burguesías, las oligarquías feudales y todo aquél cuyo poder dependía de la división y pasividad de las masas. Por lo demás, en este tipo de cuestiones el ser mayoritario o minoritario es un resultado y no una causa, no puede usarse para evaluar sino que debe ser explicado. Los nazis eran una minoría lunática, hasta que dejaron de serlo. En términos generales, los fundalementalismos carecían de la fuerza y masividad que hoy ostentan, contando con mayor predicamento los movimientos laicos (y esto incluso dentro del sionismo!). Así como no puede explicarse el nazismo alemán por una concepción nacionalista y racista congénitamente mayoritaria en el pueblo alemán (sino que debe explicarse cómo y por qué una banda de lunáticos pudo conquistar una mayoría), no puede explicarse la evolución política del medio oriente por el carácter minoritario de las tendencias universalistas.
En este sentido, las explicaciones culturalistas no explican nada. Desde que no son las identidades nacionales por sí mismas las que explican la función política que estas lleguen a cumplir, sino que es la instancia política (como expresión de pugnas económicas ó, en un sentido más general, de la lucha de clases) la que explica el desenvolvimiento, en una u otra dirección, de las comunidades nacionales y los conflictos entre ellas.
La supuesta independencia del sionismo con respecto a Gran Bretaña es casi un juego de palabras. En realidad, era principalmente a Gran Bretaña a quien le convenía la independecia del sionismo, independencia que más de una vez arguyó para declararse “atada de manos” en situaciones en que le convenía la pasividad. Desde luego que el sionismo no es un mero sirviente del imperialismo britáico, pero otra cuestión es su funcionalidad. Como se vé, lo que es una “sobresimplificación” es la idea que N.N. parece tener sobre la “independencia” y la “dependencia”. Un buen ejemplo de la inutilidad de hacer distinciones maniquéas, la da la posición de Argentina en la segunda guerra (y sin entrar a la existencia de fracciones pro-germanas). Los pro-norteamericanos planteaban que Argentina debía declarar la guerra al eje. Bien ¿era una expresión de independencia la resistencia de Argentoina a hacerlo? ¿Reflejaba simpatías hacia el eje? Sería superficial creer que, porque esa simpatía existió a un nivel ideológico, fue eso lo que determinó la actitud de la Argentina. Pero a eso conduciría el tipo de análisis que todo lo considera en términos de relatos, doctrinas, etc. En verdad, los primeros interesados en que Argentina no entrara en guerra eran los británicos, que no necesitaban nuestras armas ni nuestra sangre, sino nuestro trigo y nuestra carne. Y Argentina era, en ese entonces, una semi-colonia británica, una colonia económica, por así decirlo. Esto da la pauta de hasta qué punto no se puede comprender los hechos sin tomar como puntos de partida y como ejes la naturaleza imperialista de los lazos económicos entre naciones y la lucha de clases. De ese modo se comprenderá, incluso, buena parte del ascendiente que llegó a ganar el peronismo en la clase obrera, ya que los sindicalistas socialistas y comunistas se negaban a impulsar huelgas que debilitaran la ayuda económica al esfuerzo de guerra “aliado” contra el fascismo. Pero un culturalista llenaría páginas y páginas “explicando” el viraje de las masas hacia el peronismo a partir de asunciones e identificaciones culturales, etc.
Lo cierto es que durante un larguísimo período el sionismo no tuvo ninguna otra alternativa que apoyar a los británicos en medio Oriente, y esto fue rabiosamente explícito por parte de la propia dirigencia sionista (que ya durante todo el siglo XIX anduvo revoloteando diplomáticos y estadistas británicos) como para querer discutirlo ahora. La independencia del sionismo se volvió algo relativamente más concreto en la medida en que Gran Bretaño entró en declive como potencia militar y económica, pero ese declive fue acompañado por el encumbramiento de los USA y de la URSS, lo que otorgó un rol estelar por un breve período a Israel.
Sobre la declaración de Balfour, cabría decir que de ningún modo expresa posiciones independientes de los sionistas, sino que fue una pieza en la táctica que los británicos se dieron cuando desalojaron de Palestina a los turcos, cosa que lograron en alianza con Francia y con Rusia, entente a la que estaban desde ya deseosos de integrar a los USA (en donde estimaban que la comunidad judía tenía peso político, y ése sí es un componente fuertemente ideológico en relación al sionismo y que jugó un rol de alguna importancia en la decisión británica de producir una declaración favorable al sionismo). Es un tanto suave decir que la declaración Balfour representa la táctica de mantener movimientos nacionalistas enfrentados: Expresamente Gran Bretaña no quería una nación árabe en la frontera con Egipto, pero sabía que sus aliados, especialmente los franceses, no le permitirían ejercer su sólo dominio incondicionadamente, por lo que necesitaba un comodín “independiente”. Como se vé, esta “independencia primero del sionismo palestino y luego del estado de Israel, tiene un contenido inequívocamente pro-imperialista. Si algo constituye una “sobresimplificación” en este caso, es negarlo sólo porque existe una mediación (lo cual es la cosa más natural del mundo: ¡el mundo real no es un dibujito!).
N.N. señala que la partición fue aceptada a desgano por Gran Bretaña. Es verdad, primero porque se relacionaba con su pérdida de influencia en la región, pero sobre todo porque sus diplomáticos habían tenido en carpeta varios otros proyectos para el “hogar nacional judío”, siproyectos que nada concedían a los palestinos. Digamos que la partición refleja un precario consenso entre las potencias del momento, tan precario como fue la situación, que en breve lapso decantó hacia la completa hegemonía norteamericana, al menos en el campo “capitalista” (por oponerlo, sin rigor, al entonces llamado “campo socialista”).
Finalmente, es verdad que, incluso desde la izquierda, se ha reconsiderado, no sé hasta qué punto ni con cuanta razón, el tema del estado único, por su irrealizabilidad. Un judío tan universalista como el propio León Trotski se hizo este tipo de planteos en sus últimos años, sin conceder nada al sionismo.
Puede ser que haya alguna otra solución, pero si parte de amnistiar los crímenes genocidas del sionismo y de dejar intactas las condiciones políticas, sociales y económicas (llámese dominación imperialista) que permitieron su desarrollo, la creación de dos estados no será menos irrealizable ni menos infeliz que la presunta utopía de un solo estado. Pero, en el fondo, no se trata de si un solo estado, dos estados o cinco, y mucho menos de ridiculizar el planteo extremándolo, como sugiere N.N., sobre todo porque ese planteo se ha realizado ampliamente en lugares y momentos concretos de la historia, como evidencia el caso Yugoeslavo que mencionó Burbiski. Es enteramente posible la unidad sin odios entre individuos de diferentes nacionalidades (un elemento de juicio más en contra de las explicaciones culturalistas de los choques entre nacionalidades).
El punto es siempre el contenido de esa unidad pluri-nacional, no la forma. Y el contenido pasa por la expulsión del imperialismo de la región, tarea que sólo pueden realizar las masas actuando unidas, y no con cualquier programa político.
Como N.N. niega que la causa primera de la violencia nacional-racial-religiosa en Medio Oriente sea el imperialismo, susólo le cabe suponer que lo “realizable” es que el imperialismo arbitre, mediante algún acuerdo “humanitario”, la constitución de dos estados nacionales, condiciones “razonables” de paz, etc. etc. A mí, en cambio, me parece que, detrás de tanto supuesto saber sobre las comunidades y los sentimientos nacionales, lo que que hay en realidad es una gran ignorancia (no lo digo en un sentido peyorativo) sobre lo que es verdaderamente el imperialismo, un régimen de dominación para el cual la violencia es el pan de cada día. En ese sentido, el utópico es N.N. y no los que defendemos la hermandad internacional de los pueblos y, en particular, de los trabajadores.

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¿culturalista yo?
Por NN - Friday, Jan. 28, 2005 at 6:56 PM

Xor:

Por supuesto que al referirme a lo que llamé Relato Nacional Palestino (o israelí) estoy simplificando (creo además haberlo escrito). Señalé algunas lineas generales que parecen notables y que creo percibir en los discursos sionistas y nacionalistas palestinos.

No menosprecio de ninguna manera el internacionalismo, sino todo lo contrario (por mi parte lo profeso sin reserva alguna y esa es una de las razones por la que amo mi ciencia burguesa, única en su perspectiva totalizadora de la experiencia humana). El punto en todo caso es si Hoy es viable un estado binacional (o "mononacional" no identitario en Palestina/Israel).

Está claro que no se debe a un odio natural entre los pueblos, completamente de acuerdo (si dije algo que se entendió en ese sentido pido disculpas por mi falta de claridad). Sin embargo disiento en que el odio sea fomentado siempre desde arriba. El racismo puede ser tanto desde abajo como desde arriba. El racismo puede, de hecho, ser funcional a la lucha contra el imperialismo (como afirman los fanonianos). Sea o no funcional a uno u otro es un error. Es un error porque la ciencia burguesa a demostrado una y otra vez algo que, de todas maneras ya se sabía por otros medios: La especie humana es una sola.

Con lo que de ninguna manera puedo estar de acuerdo es en el presunto carácter "culturalista" de mi post. Todo lo contrario. El culturalismo es una postura relativista e idealista. No se en que momento nada de lo que he escrito puede llegar a acercarse a ninguna de las dos cosas. Quizás se trate de un prejuicio porque soy antropólogo (en las últimas décadas con la hegemonía académica norteamericana el culturalismo es la corriente principal de la disciplina). No te lo digo de mala leche, he leído a muchos ridiculizando posturas clasistas en Indymedia y creo que parten también de prejuicios (subrayo que yo no he hecho eso, por el contrario tengo mucho respeto por el marxismo, de ahí a que sea marxista...).

Acuerdo con tu análisis de la posición argentina en la segunda guerra, durante esa misma época GB prohibió la emigración de judíos a Palestina (sus intereses pasaban por evitar un apoyo masivo de sus colonias árabes al eje), esto, por ejemplo, sería una anomalía en tu esquema. Lo que yo propuse Xor, es un marco, diferente para pensar el mismo fenómeno, sobre el cual no emitís opinión alguna. Si lo considerás "culturalista" es por que o no fui claro, o no lo entendiste. Marvin Harris, a quien mencioné, es (era) un antropólogo marxista norteamericano situado en la corriente que ha dado en llamarse "materialismo cultural", busca articular el evolucionismo (de Darwin, no de Spencer) con algunas categorías marxistas. Mi enfoque no niega la existencia de clases ni de imperios, y mucho menos la subsume a "ideas sobre". Simplemente tengo en cuenta que los intereses a partir de los cuales los grupos construyen su ideología no solo son de clase. Trato de articular (quizás fallidamente) la existencia de intereses contradictorios (y sus correspondientes ideologías o "relatos" como yo dije) en un marco darwiniano.

Un estado palestino en paz con Israel no es una utopía en modo alguno. Confío en que sea una realidad en breve. Por supuesto que va a ser un estado capitalista. La (inevitable) interdependencia económica entre ambos estados va a crear las condiciones donde sea posible una lucha de clases unitaria del tipo de la que vos esperás. Hoy es mucho más difícil, justamente por la guerra explicada/justificada en la cabeza de cada árabe o israelí a partir de relatos/ideologías que le "explican" el mundo en que viven.

Un abrazo burgués
NN

PD: No fue mi intención ridiculizar ninguna idea, creo que los debates pueden ser interesantes cuando esto se evita y tratamos de entender al otro.

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Varios puntos
Por Xor - Friday, Jan. 28, 2005 at 10:38 PM

En realidad, yo creo que sí tu enfoque es, en un sentido general, culturalista. No conozco a Harris, pero sí conozco historiadores marxistas, como Thompson, o Hobsbaum que tienen un enfoque culturalista (y la llamada "historia desde abajo" en general), enfoque que yo no comparto en los más mínimo, precisamente porque muestran una tenaz incapacidad para considerar la política como factor explicativo clave (una vez más se aplica mi crítica a la ciencia social académico-burguesa). En su mayoría, y tradicionalmente, estos historiadores son ex stalinistas desencantados.
Es más, sobre la base de tus planteos, si no sos culturalista, no sé qué otra cosa podrías ser. Para vos las determinaciones últimas no se hallan duera del ámbito cultural: jamás en el ámbito económico, ni en la lucha de clases. Tratás la política como un dato subalterno y no como el factor decisivo. Lamento tener que admitir, en definitiva, que no emití opinión sobre el marco que proponés porque lo encuentro ininteligible. Quizás puedas explicarte mejor...

Sobre la ridiculización: no veo de qué otro modo considerar la expresión "todos homo sapiens hijos de la Eva Mitocondrial". En fin, qué se considere "sobresimplificar" depende, evidentemente, de quién haga las estimaciones. A su vez ¿de qué depende el valor de quién haga las estimaciones? Del lugar real -social y político- en que esté parado, digo para recalar una vez más en la teoría posicional (marxista) del conocimiento.

No representa ningún problema para mi concepción el hecho de que los británicos hayan desalentado durante un período la inmigración judía a Palestina (en términos generales la incentivaron), ya que lo hicieron, igualmente, en defensa de sus intereses imperialistas. No se trata, por mi parte, de defender un esquema, sino de determinar el contenido de los esquemas. Si el contenido es el mismo, bien podemos desechar el esquema, y más aún si no es el que yo estuve defendiendo. Es sabido que el Mufti de Jerusalem terminó en Alemania al servicio de los nazis ¿Y? Una suma de anécdotas no vale ni la mitad de un esquema con valor heurístico. Lo único que revela eso es que no se puede hablar, como de algún modo sugeriste vos, de "los árabes de Palestina" en general, como yo señalé, sino que hay que considerar las clases y, por ende, la lucha de clases. O recaer en el culturalismo.

El ejemplo de Franz Fannon es interesante, porque confirma mi posición. Una vez más, las actitudes nacionalistas no pueden ser valoradas fuera de su contenido político concreto. El odio nacional y racial de colonizado hacia el colonizador no puede entenderse sino es en clave política, como una expresión antiimperialista. El mismo odio en dirección inversa, tiene un contenido completamente diferente. Precisamente por eso yo no hago tanto hincapié en el eventual "antisemitismo" de los palestinos (que no apruebo, naturalmente), pero sí lo hago en el racismo sionista. El primero representa, aún de modo desfigurado, una causa antiimperialista, el segundo expresa (también de un modo indirecto) la opresión nacional por parte de un aliado histórico del imperialismo. De todos modos, incluso las expresiones racistas antiimperialistas podrían ser superadas, como señalé, si existiera una dirección clasista internacionalista. En su ausencia, la lucha de clases se expresa con lo que hay a mano, y eso si logra escapar a la completa manipulación "desde arriba". En otro post yo ya hablé de lo que viene "desde abajo" y de cómo debería ser considerado si se desea comprenderlo, al menos en el terreno polìtico.

Es posible (mucho no me interesa) que los factores que configuran una ideología "no sean sólo de clase". Pero a mí, que no soy antropólogo, no me preocupa la configuración de las ideologías por sí misma (por mucho que pueda respetar la ciencia que las estudia) sin la función que cumplen en la lucha política a lo largo de la historia, y a qué intereses de clase se asocian. Y creo que lo que aquí está en debate es esto último, no la configuración de las ideologías en general.

No puedo admitir la idea de estimar lo que HOY es viable. Lo que hoy parece viable mañana puede ser el infierno o, mejor dicho, sin duda lo será. Toda la historia de Israel lo dice a gritos. El punto es si de una vez vamos a reparar en cuáles son las causas de ello. Por lo demás: lo viable hoy es, ni más ni menos, lo que está ocurriendo hoy: asesinatos y opresión. Imagino que vos te referís a un futuro cercano, lo que ya es más difícil de puntualizar. Ahora bien ¿cuánto demorará, y cuánto durará, tu futuro cercano? Eso depende, justamente, de cuestiones de fondo que tienen que ver con la naturaleza de las bases sobre las que se establezca el acuerdo que vos llamás "viable". No creo que en los '50s nadie hubiera supuesto, en Yugoeslavia, que en los '80s iban a estar a los tiros por motivos nacionales. La cuestión de fondo es que no habrá paz mientras el factor de organización del mapa en Medio Oriente sea el imperialismo, y ello es debido a la propia naturaleza del imperialismo.

Creo que deberías tomar nota de que, de acuerdo a tu modo de considerar las cosas, el imperialismo -la ONU, etc.- podría ser el agente de paz en la región (lo que para mí es un completo absurdo, similar a querer negar el rol pro-sionista de los británicos a partir de su desincentivación de la inmigración judía durante algunos años de la segunda guerra mundial).
Veremos, pues, qué pasa con tus "dos estados para dos pueblos", pero seguiré pensando que no se habrá hecho justicia y que el imperialismo es la fuente de la violencia en la región y que, en la medida en que los pueblos o las naciones árabes busquen sacudirse su yugo, asumirá nuevas formas (en las que el rol del sionismo dudo que varíe con respecto al actual).

Para conciliar, te mando un abrazo pequeño-burgués de izquierda.

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Argel encore
Por Xr - Friday, Jan. 28, 2005 at 10:58 PM

Apagué la PC (se me colgó, en realidad) y me dí cuenta de que mi respuesta en lo relativo a Fannon no fue todo lo a fondo que debería.
Puede resumirse en esta pregunta ¿A vos te parece que la opresión colonial francesa (u holandesa, o lo que sea) en Africa no es una motivación "desde arriba" al odio racial???
Que un ideólogo antiimperialista de orientación tercermundista (es decir, limitado a un horizonte nacionalista) planteé concentrar y canalizar ese odio (recontra justificado!) contra el opresor, no significa que no sea la opresión lo que lo generó ó, en todo caso, generó las condiciones para ese odio. Y la opresión se ejerce, casi por definición, "desde arriba".

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Encore encore
Por Xr - Friday, Jan. 28, 2005 at 11:24 PM

Más sobre el "fannonismo": Yo había señalado en algún post anterior (a propósito de Alemania) que propaganda antisemita había existido siempre, pero que fueron necesarias determinadas condiciones políticas, sociales e históricas, para que la propaganda racista prosperara y se conviertiera en uno de los rasgos distintivos de un movimiento político de masas.
En ese sentido, si el "fannonismo" es considerado meramente como doctrina, le caben las mismas consideraciones. El punto clave es por qué una doctrina de odio nacional o racial puede prosperar, y cuál es el contenido político del movimiento social en que se encarna.
Quiero decir que si lo considerás desde el punto de vista del relato, del discurso racista, etc., el odio racial viene impulsado desde arriba, desde abajo, desde los costados, o desde donde prefieras. Pero yo no me refería a eso, que me parece irrelevante. A mí lo que me importa no es el discurso del odio racial o nacional en sí, ni su genealogía, sino el contenido que asume al ser adoptado por una expresión política con relevancia histórica, o las causas que amplifican una doctrina hasta investir ideológicamente con ella a un movimiento social de grandes dimensiones.

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mais trop c'est trop, Mr. XOR
Por ¡buaaahhh! - Saturday, Jan. 29, 2005 at 12:34 AM
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ESCRIBIR LO QUE YA ESTA ESCRITO NO VALE LA PENA


"HAY QUE ASPIRAR A CAMBIAR LAS COSAS"

dice el narrador y critico literario Noel Jitrik contando su busqueda por no repetir lo hecho.

Por Angel Berlanga


LA FICHA:
Noé Jitrik nació en La Pampa en 1928, es profesor en Letras, investigador y escritor. En los años ’50 participó de la revista Contorno y en la actualidad dirige la monumental Historia crítica de la literatura argentina. Durante la dictadura militar estuvo exiliado en México. Tiene una extensísima trayectoria como ensayista, es Doctor Honoris Causa de la Universidad de Puebla y Caballero de las Artes y las Letras en Francia. Limbo, Citas de un día, Mares del sur y Evaluador forman parte de su obra narrativa, a la que ahora suma Long Beach.


“Escribir lo que ya está escrito no vale la pena”, dirá Noé Jitrik y ese argumento, esa pretensión que enarbola para encarar su obra narrativa, abarca por supuesto a Long Beach, su último relato.
El postulado inicial excede de lejos a tal o cual tema: “Lo que ya está escrito puede ser una literatura de trama, de anécdota, de suspenso, de estímulo de la lectura”, explica. Nada de eso, entonces, se propone como dinamizador de este texto, en el que el narrador, un profesor universitario latino y exiliado que se instala por unos meses en la habitación de una casa de aquella ciudad norteamericana, reflexiona y explica sobre sus percepciones de una quietud cotidiana en la que tiene una presencia predominante la dueña del lugar, más joven que él y mucho menos “culta”, desocupada o casi, que sale a andar en bicicleta durante los fines de semana, que cree que la verdad está en la Biblia y que poco a poco se asoma al extraño universo que le representa ese otro personaje.

Mientras toma lentamente una copa de pisco, Jitrik dice: “Yo creo que la literatura está hecha de los intentos por hacer algo diferente”.

–¿Qué confronta entre los dos personajes?

–Una especie de analogía con un esquema de construcción: el personaje femenino se asoma a un mundo muy diferente, del que ni sospechaba su existencia, y el masculino puede conocer lo que sabía, apenas de oídas, de California. Como en todo proceso de construcción, lógicamente, hay una confrontación de pensamiento, de ideología, pero al mismo tiempo hay un punto de sutil comprensión: al menos encuentran necesidades recíprocas. Yo creo que en el relato hay una herencia de El extranjero de Camus, por un lado, en cuanto a la extrañeza: un sitio en el que no hay nada y en el que hay que ir encontrando una lógica de existencia; por otro lado la insistencia en el detalle, en hacer algo de la casi nada en materia narrativa, viene más bien de la vieja idea de Flaubert.

–Entre la reflexión constante de él y la tendencia a la acción de ella, ¿plantea una confrontación de géneros literarios?

–Son, más bien, dos vías diferentes en relación con la vida. En una la inquietud por el detalle es la razón de vivir: cada sonido o movimiento dice algo; mientras que el personaje femenino es pura acción hacia el exterior y su angustia, precisamente, viene porque de allí no recibe ninguna respuesta satisfactoria.

–¿Qué se pone en crisis en cada uno de los personajes?

–Lo que saben; el personaje femenino cree saber todo del mundo que la rodea y qué tiene que hacer, su modo de vida, y el encuentro con este otro sujeto le hace tambalear esas convicciones: intuye que hay otros modos de vida que pueden tener consistencia, que pueden interesarle; en cuanto al personaje masculino, la búsqueda de sentido en la auto-observación, en la minucia, en la cosa aparentemente trivial que cobra importancia en el relato.

–Usted postula bastante seguido una pretensión de originalidad, una búsqueda de no repetir. ¿Cómo juega eso en su escritura?

–Podría decirlo de una manera muy radical: escribir lo que ya está escrito no vale la pena. Quizá no sea posible escribir algo diferente, pero creo que la literatura está hecha de intentos de hacer algo diferente. Si a eso lo llamamos deseo de originalidad, estoy de acuerdo. Pero no a la manera del desafío surrealista, de la búsqueda de la originalidad a cualquier precio, sino con la calma de quien dice “esto lo puedo hacer y no estoy haciendo lo mismo que ya está hecho”. Repetir lo hecho sería la idea de la tradición, para mí conformista, aunque pueda ser ingeniosa, o pueda ser mejor o peor. Por las noches, antes de dormir leemos con Tununa algunos capítulos del Quijote: qué diferente es de las novelas de caballería. Cervantes consideró que esa enorme burla que hace era una manera diferente de hacerlo y que por lo tanto le valía la pena. En Flaubert, también: ¿por qué se encierra y corrige como un maniático todo? Porque no quiere repetir lo que ya está hecho. Y así, siguiendo, podríamos pensar en la vanguardia, como deseo de... originalidad es una palabra un poco viciada; un deseo de entender la literatura como una propuesta de lo que todavía no existe.(...) hasta que no encuentro un enfoque diferente, no puedo escribir. No puedo contar nada si no es diferente de lo que se cuenta y de lo que yo mismo he contado.

–Picasso incitaba a la copia, decía que eso más la personalidad del artista daría la obra propia.

–Sí, pero es un pensamiento tradicionalista, una línea que concibe al arte y la literatura como un continuo en el cual hay variantes. Pero a mí me parece que eso descarta la noción de ruptura epistemológica. No podía Picasso pensar en esto, pese a que él no roza nada, no repite casi nada, aunque didácticamente supone que así tiene que ser. Es la ruptura epistemológica la que cambia el giro en los discursos, lo que modifica. Yo creo que hay que aspirar a eso; que no se logre es otra historia. Quien lo perciba dirá “se trata de eso”, de un intento de esta naturaleza, que las cosas no sigan siendo las mismas de siempre.

* De Pàgina 12 - 22 Diciembre 2004

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Algunas consideraciones sobre el “marco” de N.N.
Por Xor - Saturday, Jan. 29, 2005 at 11:50 AM

No había podido (y sigo sin poder) establecer nítidamente las cualidades precisas del marco “darwiniano” que proponés, que parece una serie de afirmaciones algo nebulosas, de índole histórica, a la que se superponen algunas categorías más bien abstractas, imprecisas.
En mi opinión, por ejemplo, la conformación o disolusión de los ghettos no tiene una época precisa. Mientras en Alemania habían dejado de existir, en Rusia y Polonia seguían existiendo. Tampoco es la desaparición de los ghettos, a mi manera de ver, la que generó una ola de racismo, sino más bien a la inversa: fue la cultura racista la que impuso la segregación de los judíos, en una amplia gama de modalidades, que iba desde el chisme prejuicioso sin consecuencias (o la condición más bien formal de conversión religiosa para poder prosperar sin trabas), hasta el confinamiento defensivo en ghettos y la realización de agresiones pogromistas, pasando por el “numerus clausus” y otras normas discriminatorias por el estilo.
Yo creo que, en realidad, en la misma medida en que el régimen social capitalista se desenvuelve por fluctuaciones, y los problemas nacionales sólo pueden hallar en su seno soluciones precarias que establecen las condiciones para nuevos conflictos, la aparición o desaparición de ghettos (judíos o no) es un flujo histórico pulsante y no un dato histórico fijo.

Naturalmente, los individuos de origen judío respondieron de diversos modos a diversas condiciones “ambientales”. Pero decir eso, es tanto una abstracción com una obviedad. Es una asbtracción porque engloba a los individuos de origen judío, sin distinciones de clase, el mismo modo que deja de lado toda consideración de clase en el análisis de las condiciones “ambientales”, que así resultan limitadamente consideradas sólo en el plano ideológico, cultural (eso del culturalismo que yo mencionaba).
Desde mi punto de vista, lo que en verdad determina la disolución de los ghettos o su permanencia es la doble cuestión de la ubicación social de los judíos (más o menos distribuidos en clases, según el país) y del desarrollo económico, político y social del “ambiente” en cuestión. En Polonia los judíos pertenecían al campesinado, como en gran medida ocurría en Rusia (dependiendo un poco de qué nacionalidad asociada al Imperio Ruso estemos considerando). En Alemania, en cambio, formaban parte de las clases medias urbanas y se asociaron a una ola asencionista. En esas concretas circunstancias, y más allá de la prédica de los propagandistas judíos, el capitalismo alemán hallaba más ventajas en asimilar a los judíos que en segragarlos.
Las alternativas, entonces, no fueron las que se habría dado un sujeto abstracto, el “pueblo judío” (o, lo que es lo mismo, las “personas de origen judío” consideradas al margen de toda determinación de clase), sino las que postulaban diversas tendencias políticas dentro de dicho pueblo, cada una sostenida en perspectivas de clase diferentes, más o menos concientemente expresadas. Siempre existieron la ortodoxia religiosa y la doctrina del retoro, siempre existieron las posturas nacional-culturales de tipo bundista, y existió también una fuerte corriente asimilacionista cuyo contenido fue igualmente variopinto, ya que procedida de posiciones de clases disímiles, pero en general se trataba de capas sociales urbanas (lo que inequívocamente se asocia a un determinado desarrollo de las fuerzas productivas).
Hubo, entonces, asimilacionismo burgués, asimilacionismo pequeño-burgués y asimilacionismo socialista. Este último, en las condiciones rusas por ejemplo, prosperó no menos que el bundismo Y, si digo esto último, es para poner en tela de juicio la afirmación de N.N. sobre la “hegemonía del bundismo”, cuyo vigor no era general sino que se circunscribía principalmente a Rusia donde, paradójicamente, la discriminación era intensa, lo que en los términos de N.N. debería haber constituído un ambiente más favorable al sionismo. Pero el hecho histórico, que se verifica en los congresos del Partido Obrero Socialista Democrático de Rusia (al que el Bund estaba federativamente ligado) es que había tantos judíos en el socialismo no bundista como en el bundismo y ello, entre otras razones, por las fuertes limitaciones políticas del bundismo. Contrariamente a lo que señaló N.N., la agudeza de la discriminación, como estímulo o condición “ambiental” no necesariamente tuvo que dar base a un nacionalismo judío cerrado como fue el sionismo, sino que dio base a una radicalización política, de índole laica o atea, entre los judíos. ¿Por qué? Porque las alternativas políticas juegan un rol activo, fundamental, en toda esta cuestión. En el fondo, el marco que postula N.N. propende al mecanicismo.

Es, por otra parte, falso, que el bundismo ruso haya sido cooptado por el bolchevismo, por el contrario: los bundistas confrontarion con el ala bolchevique y optaron por ligarse al menchevismo, básicamente por motivos de estrategia política (y no por mayor afinidad en lo relativo a temas específicamente nacionales judíos, sino csi al contrario, aunque sus líderes bundistas se valieron de acusaciones en ese sentido, que luego evidenciaron ser falsas). En todo caso, bundismo y bolchevismo existieron uno al lado del otro y la desaparición del primero nada tiene que ver con ninguna clase de cooptación sino, a lo sumo, con el natural pasaje de individuos, con el correr de los años y la experiencoia política, de una a otra fracción del movimiento socialista (algo que no le atañe exclusivamente al bundismo, sino que ocurrió con todas las facciones socialistas rusas).
Es igualmente falso que el sionismo haya sido la “última mutación”, ya que tuvo existencia, especialmente en ámbitos burgueses y hasta elitistas, casi desde fines del siglo XVIII (pero, indiscutiblemente, a lo largo de todo el siglo XIX). Más que la “última mutación”, el sionismo fue la alternativa política adoptada en último término por un número importante de judíos, a partir de condiciones que ya señalé y que pasan, precisamente, “desde abajo” por el descrédito en que había caído, hacia la tercera década del siglo, el socialismo como alternativa universalista y, “desde arriba” la manipulación de los odios nacionales y raciales por parte de fuerzas políticas que expresaban intereses imperialistas.

Un elemento que me interesa es la observación de N.N. de que los pogroms eran realizados por gentes humildes. Hay que decir que aquí N.N. se mantiene aún fuera de la delimitación de clase. Los porgroms tenían lugar en ámbitos campesinos y, en muchos casos, intervenía en ellos lo que hoy llamaríamos el “lumpen” o la “escoria social”, es decir: los elementos que la sociedad mantiene en sus márgenes, los elementos descompuestos. Pero con eso todavía no hemos dicho nada: los porgroms invariablemente eran instigados desde arriba, en gran medida para aflojar la tensión surgida de las agobiantes opresión e injusticia que el pueblo sufría bajo el régimen zarista. Los propagandistas antisemitas presentaban, entonces, a los judíos como blanco legítimo de la violencia privilegiados por ese régimen injusto (lo mismo que, a una mayor escala, haría Hitler décadas más tarde, y que le valió al nazismo ser bautizado como el “socialismo de los idiotas”). Claro está que, además, el saquéo a los judíos presentaba beneficios materiales para quienes lo cometían, en ese sentido, estamos en presencia del mismo tipo de manejos que se ejercitan con las barras bravas y las patotas lúmpenes por parte de las burocracias sindicales peronistas, los intendentes municipales, sus punteros y las unidades básicas del PJ. Está ampliamente documentada la protección que la policía otorgaba a quienes realizaban pogroms (entre otras cosas porque había judíos que optaban por defenderse por medio de las armas y que fueron recalando en el ala revolucionaria de la socialdemocracia rusa).

Muchos atribuyen el giro hacia el sionismo de los judíos en general (yo diría que sobre la base objetiva de su asimilación universal a las capas medias y medias-acomodadas) a la masacre nazi. Ciertamente, eso es parte de la verdad. Pero, para tener una verdadera explicaicón, habría que explicar a su vez la función del antisemitismo nazi, lo que no puede hacerse fuera del contexto de las confrontaciones ointerimperialistas y la agudización de la lucha de clases que caracteriza al período en que surge y se desarrollan el fascismo y el nazismo. En cuanto se procede a analizar las condiciones “ambientales” raparece la compensión del carácter político y no cultural de la preeminencia que adquiere el sionismo en función del usufructo proimperialista de los sentimientos originados en el llamado “Holocausto”. Del mismo modo podría explicarse, en términos generales, el giro del pueblo alemán hacia el agresivo nacionalismo hitlerista por la manipulación de los legítimos sentimientos originados en el Pacto de Versailles. Pero no son los sentimientos por sí mismos, sino la manipulación política de los mismos por parte de intereses sociales bien definidos lo que explica la función que terminarían cumpliendo. No habría que olvidar que durante cerca de dos décadas los sentimientos nacionalistas del pueblo alemán habían dejado de existir, como producto de una experiencia de diferente signo: la catástrofe resultante de la primera guerra mundial, que había sido acompañada por un eufórico sentimiento patriótico por parte del pueblo alemán (incluídos los judíos, suficientemente asimilados como para sentirse tanto o más alemanes que los alemanes mismos).
Como se vé, las condiciones “ambientales” como concepto no sólo no explican nada, sino que deben a su vez ser explicadas y, sobre todo, descompuestas en categorías de comprensión más específica y pertinente.

Bueno, creo que la crítica del “marco” propuesto por N.N. complementa enteramente lo que ya escribí más arriba.
Saludos.

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Xor...
Por NN - Saturday, Jan. 29, 2005 at 1:53 PM

Xor:

Agradezco todos los detalles que das ya que aprendo mucho con ellos. Por supuesto, y como vos mismo señalás, no son dibujitos animados, por lo cual lo importante sería no buscar un "marco" (uso las comillas como vos) capaz de explicar toooodo sino alguno que tenga mayor valor explicativo (algunos detalles que das los conocía y otros no, como mi interés era ubicarlos en un esquema los simplifiqué, algunos errores que señalás son en realidad producto de mi falta de claridad)

Lo de el carácter lumpen de quienes llevaban adelante los pogrom no es, desgraciadamente, del todo cierto. Un ejemplo: Según un periodista extranjero (citado por Figes en su reciente historia de la revolución rusa) en la toma del palacio de invierno una pintada rezaba: ¡abajo el judío Kerenski, viva Troski! El antisemitismo existía (o existe) en amplios sectores de la sociedad rusa y atraviesa divisiones de clase. En eso consiste la dificultad de subsumir todo a un análisis de clase.

Yo no tengo respuesta ante la pregunta ¿por qué el racismo? Creo que parte de la misma está sin duda en los intereses de clase, o en un sentido más general los intereses económicos de distintos grupos, aunque no creo que sea toda la respuesta.

***

En todo caso creo que tu postura (indudablemente coherente) presume poseer la clave de cuales son los verdaderos intereses en un momento histórico de determinados grupos. Solo teniendo esa certeza podríamos hacer un análisis del tipo que vos llamás político. Yo, por supuesto, no la tengo.

Agradezco tu interés en responderme
NN

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Xor...
Por NN - Saturday, Jan. 29, 2005 at 1:58 PM

Xor:

Agradezco todos los detalles que das ya que aprendo mucho con ellos. Por supuesto, y como vos mismo señalás, no son dibujitos animados, por lo cual lo importante sería no buscar un "marco" (uso las comillas como vos) capaz de explicar toooodo sino alguno que tenga mayor valor explicativo (algunos detalles que das los conocía y otros no, como mi interés era ubicarlos en un esquema los simplifiqué, algunos errores que señalás son en realidad producto de mi falta de claridad)

Lo de el carácter lumpen de quienes llevaban adelante los pogrom no es, desgraciadamente, del todo cierto. Un ejemplo: Según un periodista extranjero (citado por Figes en su reciente historia de la revolución rusa) en la toma del palacio de invierno una pintada rezaba: ¡abajo el judío Kerenski, viva Troski! El antisemitismo existía (o existe) en amplios sectores de la sociedad rusa y atraviesa divisiones de clase. En eso consiste la dificultad de subsumir todo a un análisis de clase.

Yo no tengo respuesta ante la pregunta ¿por qué el racismo? Creo que parte de la misma está sin duda en los intereses de clase, o en un sentido más general los intereses económicos de distintos grupos, aunque no creo que sea toda la respuesta.

***

En todo caso creo que tu postura (indudablemente coherente) presume poseer la clave de cuales son los verdaderos intereses en un momento histórico de determinados grupos. Solo teniendo esa certeza podríamos hacer un análisis del tipo que vos llamás político. Yo, por supuesto, no la tengo.

Agradezco tu interés en responderme
NN

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De nada
Por Xr - Saturday, Jan. 29, 2005 at 3:07 PM

Bueno, yo creo que no es una asunción metafísica estimar los intereses de una clase (o una fracción de una clase) en un momento histórico concreto, y aún más fácil es cuando estos intereses se expresan explícitamente (aunque no sea públicamente, como por ejemplo los intercambios de opiniones y documentos que condujeron a la Declaración de Balfour, etc.). Mi asunción no es de orden psicológico y creo que los intereses prácticos de las clases y sus fracciones se pueden mensurar, pero en última instancia lo que estoy diciendo es que resulta fructífero, desde un punto de vista científico, considerar hechos tales como las oleadas nacionalistas, etc., como expresiones de intereses de clase o del juego de esos intereses en un marco de tensiones sociales y políticas.

Es verdad lo que vos señalás, de que el antisemitismo no se limitaba a los lúmpenes, ni en Rusia ni en otras partes, pero: lo que yo dije es que el lumpen era un elemento que participaba activamente en los pogroms, no el único, aunque a mi criterio le daba la tónica. Pero es claro que existía el antisemitismo fuera de ese sector social: era popular de modo general entre los campesinos (lo cual no impidió a unos cuantos judíos, como el padre de Trotski, instalarse en el campo y prosperar, pero esa suerte dependía de la región), y las clases cultas -y más aún la burocracia funcionarial zarista- profesaban y cultivaban a menudo el antisemitismo (y claro está que no eran lúmpenes, sino que se situaban en el extremo opuesto del espectro social clasista).
Con todo, yo no me refería a quienes asumían ideas antisemitas en general, sino a quienes intervenían en los pogroms, que no es lo mismo. El antisemitismo estaba muy extendido en Rusia y, a decir verdad, continuó igualmente extendido durante y después de la revolución, fusionándose más o menos espontáneamente con otras ideas populares, como es el caso del ejemplo que vos señalaste (nada infrecuente, diría). El prejuicio estaba especialmente extendido entre los campesinos, que aplicaban el mote de "judío" a cualquiera que vieran como un enemigo en posición de poder o privilegio. Esta clase, atrasada y que no se caracterizaba por su lucideas ni intelectual ni política, se valía de las figuritas que tenía a mano secularmente.
Hay que tener en cuenta que el campesinado dio base amplia a la revolución rusa, pero no fue, por así decirlo, su locomotora y, de hecho, sus inmensas limitaciones la llevaron a jugar un rol de freno a la revolución (lo que no debe llevar a ninguna condena moral: se trataba de una clase laboriosa y explotada, que no era responsable de su atraso y que, en última instancia, necesariamente debía condicionar el avance del proceso revolucionario, lo que había sido previsto por los bolcheviques más allá de las dificultades que tuvieron luego para apechugar con ese hecho).
Más tarde, al compás del advenimiento del Termidor soviético, Stalin atizó (o alentó que se atizase) el antisemitismo, especialmente entre los campesinos, vistiendo de "judía" a la oposición de izquierda en general y a Trotsky en particular. A este proceso le cabe perfectamente la caracterización de "manipulación desde arriba" que yo había hecho.
Y, no casualmente, esta campaña que alentaba el antisemitismo fue acompañada por el énfasis en el nacionalismo gran-ruso y el culto a la personalidad del líder, contribuyendo a sostener en el terreno de la propaganda más ideologizada, la tesis del "socialismo en un sólo país". También este proceso tuvo una base social, que fue el otorgamiento al campesinado, por parte de la burocracia gobernate, de un mayor peso en la vida social, lo que fue justificado teóricamente por Bujarin, el "cerebro" del ala derecha del bolchevismo (que en el pasado había militado en su ala izquierda!), quien hablaba del "avance hacia el socialismo a paso de tortuga" (sic!).
Ello finalmente condujo, en 1928, al llamado "boicot cerealero" por parte de los campesinos, que fue "resuelto" por el dictador georgiano por medio de una masacre sistemática de millones de campesinos, masacre que dejó devastado por décadas el agro soviético. Así se pasó del cuento reaccionario del "avance hacia el socialismo a paso de tortuga" a la ficción sangrienta conocida como "colectivización acelerada".
Me fui un poco del tema, pero pensé que podía resultar interesante.
Saludos.

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Último por hoy
Por NN - Saturday, Jan. 29, 2005 at 3:54 PM

Xor:

Efectivamente es muy interesante (al menos para mi) aunque te hayas ido de tema.

Estoy de acuerdo con vos en que pensar en términos de clase no es (al menos necesariamente) metafísico. Quizás acuerdes conmigo en el carácter metafísico que adquirió en determinados momentos de la historia comunista en China y otros lugares del SE de Asia. De hecho creo que (el análisis clasista) es en efecto más que fructífero aunque también creo que a veces resulta limitado. Un ejemplo extremo que exije el uso de categorías mas complejas es el de la India donde las divisiones de clase se complejizan con las de casta, pudiendo darse el caso (leí hace mucho un libro al respecto, voy a ver si lo encuentro así te lo menciono si te interesa) de huelgas llevadas adelante por obreros de una casta superior contra una patronal de casta inferior donde la patronal podía eventualmente enviar a la policía a reprimir al tiempo que estaba obligada a bajar la vista ante sus obreros (es rarísimo ¿no?), obviamente esta situación solo ha sido posible en el marco de la desestructuración social producto de la expansión del capitalismo (uso la palabra "desestrucruración" a falta de otra mejor ya que connota una "integración" anterior al imperialismo obviamente inexistente, la historia siempre implicó conflictos e intereses contradictorios en todas partes y épocas).

Cuando mencionaste que mi perspectiva era culturalista lo identifiqué con el relativismo cultural, derivado en últma instancia de Herder y del romanticismo alemán y que últimamente (posmodernismo mediante) se lanzó a una recuperación de autores como Husserl, Heiddegger y por el estilo (hermenéutica y todo eso). Sin embargo vos mencionás a Thompson y a Hobsbawn (podríamos agregar a Gramsci) como culturalistas los cuales son radicalmente opuestos a los anteriores. En ese caso probablemente tengas razón. Mi perspectiva se mantiene más o menos en ese campo (por llamarlo de alguna manera). Como ves, no se trata de autores que desprecien una perspectiva de clase, aunque si de un intento de complejizarla mediante el análisis de elementos subvalorados en otras corrientes marxistas.

Hasta otro día
NN

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¿Que es conciencia de clase?
Por Whilhelm Reich - Saturday, Jan. 29, 2005 at 4:16 PM

Tambien podemos citar Psicologia de masas del fascismo Reich muestra como las distintas clases pueden operar en contra de sus verdaderos intereses por inconsciencia no solo los hombres se equivocan tambien las clases y las comunidades "EL PUEBLO" AUNQUE LOS POPULISTAS NUNCA LO ENTENDERAN SI SE EQUIVOCA
y como en el caso de muchas comunidades aborigenes sobre todo de centroamerica desaparece por completo en buena medida por no interpretar las verdaderas intenciones del imperio español y de la santa madre iglesia que se ocuoa de su aparato de propaganda
Disculpen el tono subido pero es que no puedo explicar como se arregla la estupidez de la gente,es mas ni siquiera puedo entenderlo del todo.lo que si percibo es que mientras nosotros pensamos sentados frente a la computadora, la TV come y duerme con la gente y solo por eso tiene un poder de penetracion infinitamente mayor.Los medios de comunicacion masivos me parecen mucho mas terribles,es mas complementarios de los medios de destruccion masiva pues los vuelven innecesarios

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"Hamas's victory proves Islam is the solution,"
Por dos estados para dos pueblos - Saturday, Jan. 29, 2005 at 4:50 PM


w w w . h a a r e t z . c o m 29/01/2005
Hamas wins overwhelming victory in Gaza vote
By Arnon Regular, Haaretz Correspondent, Haaretz Service and Agencies

The final election results showed Friday that Hamas won control of seven of the ten municipal councils that held elections, including the three largest ones

Hamas won 75 out of the 118 seats in the 10 local councils, while the ruling Fatah party won 39 seats.

"Hamas's victory proves Islam is the solution," blared loudspeakers as thousands of supporters celebrated in the streets beneath fluttering green Hamas flags.

/hasen/objects/pages/PrintArticleEn.jhtml?itemNo=533106

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no fue una masacre
Por responsable - Saturday, Feb. 05, 2005 at 5:50 PM

No hay un unico responsable de que el 80% del pueblo palestino abandonara su patria.
los ingleses que gobernaban en ese momento querian formar estados divididos y alentaban la llegada de nuevos inmigrantes que crearan conflictos con los viejos de forma que no hacia falta visa para viajar por otro lado los nuevos paises arabes necesitaban soldados para sus nuevos ejercitos cuando no simples colonos para ocupar territorios en disputa y tambien alentaron el translado de la poblacion palestina.
Al mismo tiempo para defender los estados nuevos era necesario tambien un fuerte nacionalismo en todas partes que incluyo actos terroristas en todo el medio oriente y que empujo a medio millon de arabes a huir de israel y a otra medio millon de judios de los paises arabes a emigrar hacia israel entre muchos otros pueblos que emigraron hacia los estados que estaba creando la salida de inglaterra y Francia.Los ingleses y los franceses pusieron los trenes a ellos les convenia tambien
que los nuevos estados sean lo mas divididos e inestables que se pudiera conseguir

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No podes
Por Shalom - Sunday, May. 01, 2005 at 1:16 AM

No digo que los que escribiste sea algo bueno, por eso te digo que te vallas a la puta madre que te remil pario traidora, Israel no necesita gente como vos y quiero aclararte que en personas no existe RAZA sino religion o origen. HABLAS IGUAL COMO LOS NAZIS!

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Unico post acá
Por Fabián - Sunday, May. 01, 2005 at 4:32 AM

Algunos me han llamado para que opine en este foro. Hace mucho. La verdad no lo había visto. De todas maneras esas personas lo que quieren ver es "sangre" y yo no participo simplemente para gusto del pueblo romano.

Por otro lado, (a pesar de la discusión entre Xor y NN), ya empezamos mal y ya lo dije. No pienso entrar en ninguna discusión sobre el supuesto carácter artificial de Israel. Todos los estados son artificiales, y estupideces como esas lo único que hacen es desviar la cuestión a un marco racista.

Xor por supuesto, como la tiene tan clara, es capaz de apoyar el racismo si a él le parece que es antiimperialista. No es el único marxista que ha dado esas vueltas carnero éticas justificando lo injustificable.

Chau.
Fabián

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