Julio López
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PERU: 25 AÑOS DE GUERRA POPULAR. DEFENDER LA VIDA DEL PRESIDENTE GONZALO
Por Comite de Apoyo a la Revolucion Peruana. CARP - Thursday, Apr. 28, 2005 at 5:30 PM
carp_chile@hotmail.com

Defender la vida del Presidente Gonzalo con mas guerra popular que este año cumple 25 años de lucha armada indetenible en selvas, sierras, ciudades. El Presidente Gonzalo esta incomunicado totalmente desde hace 12 años. el gobiern o peruano a levantado montajes publicitarios con un impostor y un grupo de presos arrepentidos y soplones que se toman el nombre del Partido Comunista y dicen defender a Gonzalo, pero a continuación dicen acuerdo de paz, entregar armas, participar en elecciones, nueva constitucion, etc. Pueblo argentino, combativo sin tregua: lean bien, diferenciar, mueve tu cabeza y entendimiento. no dejes que te engañen

¡DEFENDER LA VIDA DEL PRESIDENTE GONZALO,
DIFUNDIR SU PENSAMIENTO Y
APOYAR LA GUERRA POPULAR QUE AVANZA EN EL PERU!

En el Perú, han transcurrido 24 años de Guerra Popular y 12 años de aislamiento absoluto del Presidente Gonzalo, jefatura de la revolución peruana, en el penal de la Base Naval del Callao. Aislamiento absoluto significa prohibición por parte del viejo Estado, de toda visita que no sea la de sus carceleros y torturadores. Este aislamiento es la mayor expresión de la negra política de mantener las cárceles, como ‘campos de concentración’ para el aislamiento y exterminio de miles de prisioneros políticos y de guerra. Pero además y esto es lo principal, la decisión de mantenerlo vivo y en aislamiento total, fue y es parte del plan norteamericano de utilizar el nombre y figura del presidente Gonzalo, para desprestigiarlo, contradiciendo su pensamiento y su papel de jefatura de la revolución, tan enraizado en el pueblo.
Montesinos (lugarteniente de Fujimori) ha confesado que en los años 90, montaron la ‘capitulación’ del Presidente Gonzalo, difundiendo escritos y videos prefabricados, en los que se le mostraba como un vencido que se rinde, que ordena desde la cárcel deponer las armas y negociar un acuerdo de paz. Para tener credibilidad, la inteligencia peruana formó un grupo negro de prisioneros traidores conocido como linea oportunista de derecha – LOD los que se declararon seguidores del ‘Gonzalo rendido’, cumpliendo así el papel de agentes del SIN (servicio de inteligencia nacional de Perú). El objeto del montaje era desmoralizar al pueblo, a los combatientes y comunistas, provocando en sus filas desconfianzas, deserciones y enfrentamientos y así acabar con la guerra popular. Pero ésta no se detuvo. Comunistas y combatientes continuaron los planes de la guerra, y enarbolaron un principio comunista elemental, que la revolución no se dirige desde la cárcel.
Los planes de Fujimori fracasaron y huyó al Japón. A fines del año 2000, la inteligencia peruana hizo difundir en la prensa y con el grupo negro de la LOD, la noticia (léase patraña) de que el Partido Comunista había dado por terminada la guerra popular y que había que buscar ‘solución política a los problemas derivados de la guerra’. Es así que el gobierno quiso darle al país la imagen de una revolución derrotada y que se inauguraba un periodo de reconstrucción nacional. Su objetivo era el mismo: confusión en el pueblo y que comunistas y combatientes reemplacen la rebelión por el sometimiento a las normas de la vieja sociedad. El grupo negro de la LOD dijo que tal sometimiento era necesario para utilizar la legalidad burguesa, acumular fuerzas y reiniciar la lucha en un futuro incierto. No hay país en América Latina, en que no se haya pronunciado, con hedor oportunista, esta vieja palabrería. Basta recordar Guatemala o El Salvador. Por otro lado, el imperialismo norteamericano dispuso legitimar (realzar) la tan desprestigiada democracia representativa con el gobierno de Toledo. Este nuevo títere levantó nuevos montajes, diciendo que el Presidente Gonzalo no estaba en aislamiento absoluto; que era visitado por otros prisioneros, por la cruz roja internacional y por un abogadillo llamado ‘fajardo’ fabricado por la inteligencia peruana; Mostraron mas videos, y anunciaron que el Presidente Gonzalo se había declarado en ‘huelga de hambre’. Pero el año 2001, un grupo de connotados abogados y médicos internacionales del “Comité Internacional de Emergencia” por la defensa de la vida del Presidente Gonzalo (CIE), llegaron a Lima y solicitaron por séptima vez entrevistarse con él. El gobierno y las fuerzas armadas, se desenmascararon al denegar la petición.
Ahora el proimperialista Toledo, está montando un ‘nuevo juicio’ al Presidente Gonzalo. Los genocidas se han unido (Alan García, Fujimori, Toledo y demás sanguinarios), con la pretensión de esconder sus grandes crímenes contra el pueblo peruano y condenar por genocidio al comunista mas respetado y querido por los más pobres y humildes. Respetado y querido, por entregar la vida, por su pensamiento, por su condición de Jefatura de la revolución peruana. ¿Cómo han preparado los genocidas este ‘nuevo juicio’? reacomodaron la legislación ‘antiterrorista’ con la apariencia de ser ‘respetuosa’ de la convención de Costa Rica y por otro lado montaron su Comisión de verdad y reconciliación. Esta comisión fue organizada y financiada por el gobierno y si revisamos la trayectoria de sus integrantes, nos debemos preguntar ¿cómo poder testimoniar la tortura, el asesinato, la desaparición, el exterminio de poblados, ante quienes fueron cómplices de tales actos? ¿Cómo pretender una reconciliación entre explotadores y explotados, entre genocidas y víctimas? Es la vieja historia de imponer su ‘verdad y justicia’ para obligarnos al ‘perdón y olvido’. Pero lo principal aquí es que con esa comisión intentaron achacarle (imputarle) al Partido Comunista los crímenes genocidas de las propias fuerzas armadas reaccionarias, del viejo Estado peruano. Pero como en los casos de montajes anteriores, la respuesta no podría ser otra que la continuación de la guerra popular y la denuncia internacional.
Hoy la prensa y el gobierno reaccionario peruano, se han referido a la presencia de ‘rebrotes de sendero’ y de ‘infiltración de sendero’ en las luchas populares en campo y ciudad. También han desarrollado campañas publicitarias destinadas a mostrar que el Partido Comunista del Perú, el Ejercito Popular de Liberación y las Bases de Apoyo existentes, no desenvuelven guerra popular unitaria, pues dicen que son ‘grupos aislados’. Dicen que estos ‘grupos aislados’ se disputan entre sí, pretendiendo así mostrar un Partido Comunista dividido. Difunden declaraciones de un tal ‘camarada artemio’ difundidas en Londres, el cual amenazó con iniciar acciones armadas en 60 días. Al difundir estas declaraciones, el gobierno peruano pretende desvirtuar el significado revolucionario de la lucha armada; haciéndola aparecer como un medio de presión que utilizan los caudillos, para hacer peticiones al viejo Estado, sin cuestionarlo. Recordemos como Alan García utilizó con el mismo objetivo al MRTA organización que se la pasó haciendo treguas hasta el final. Bociferan que toda protesta se debe a la infiltración de ‘sendero’, detienen a dirigentes populares acusándolos de ‘senderistas’, y en esto tienen abierto apoyo (incluida la delación) de grupos de la izquierda electorera como el denominado ‘patria roja’.
Estas campañas son prueba suficiente para afirmar que la guerra popular no ha sido aniquilada. Consideramos por el contrario que se aproxima la necesidad en los comunistas, combatientes y masas peruanas, de dar el gran salto de Salir del recodo en el camino, al que se ingresó con la detención del Presidente Gonzalo, perseverando en el plan de conquistar el poder en todo el país.
En tal situación, para revolucionarios y pueblos del mundo, la tarea de defender la vida y salud del Presidente Gonzalo es central. Teniendo en cuenta que “solo se puede defender la vida del Presidente Gonzalo, defendiendo su pensamiento, el Pensamiento Gonzalo; defendiendo su condición de Jefatura del Partido Comunista del Perú y de la revolución peruana y por lo tanto, bregando porque el Maoísmo sea mando y guía de la revolución mundial”. (Manifiesto CARP Chile del 2001)
Concluimos hoy en tres necesidades:
1. Defender la vida del Presidente Gonzalo, impulsando hoy, la campaña por romper el aislamiento absoluto al Presidente Gonzalo.
2. Apoyar la guerra popular de Perú que avanza bajo la jefatura del Presidente Gonzalo; y
3. Difundir el Pensamiento Gonzalo, que es la fusión de la verdad universal del marxismo leninismo maoísmo con la realidad peruana, como ejemplo vivo que sirva para la preparación y desarrollo de mas guerras populares.
Esta es la situación actual, a nuestro entender, de la guerra popular y del Presidente Gonzalo. Pero ¿qué importancia tiene la revolución peruana y el pensamiento Gonzalo, para los revolucionarios y pueblos de los demás países? Para comprender esto es necesario ubicar la guerra popular peruana, en el contexto histórico internacional, en particular latinoamericano.
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¿En que contexto histórico nos encontramos?
Han transcurrido casi cuatrocientos años (desde el siglo XVII), de codicia mercantil capitalista de los cuales los últimos 100 años (desde fines del siglo XIX) corresponden a su fase última, el imperialismo. Durante este último siglo un puñado de magnates a través de los estados imperialistas, se han repartido el mundo, organizaron múltiples guerras de agresión y dos guerras imperialistas, generaron graves crisis comerciales y ahora se preparan para una tercera guerra mundial. Durante ese mismo siglo, el 90% de la población mundial fue sobreexplotada y se rebeló; conquistó el poder en dos terceras partes de la tierra, siendo las expresiones más altas la revolución rusa y China. Durante 40 años en la URSS (1917-1957) y casi 30 años en China (1949 – 1976) el proletariado demostró la potencia y bienestar que solo el socialismo puede garantizarle al pueblo. Y mientras ahora, los imperialistas dicen que en el 2050 la desigualdad y la pobreza aún subsistirán aunque con gran tecnología; el Presidente Mao decía ya en los años 60 que se requerirán 50 a 100 años para sepultar al imperialismo. Estamos hoy casi en la mitad de este periodo.
Por su parte, el Presidente Gonzalo señaló que en los años 80 el imperialismo y la revolución mundial ingresaron a su tercera y última etapa; para el imperialismo es la etapa de crisis general y derrumbamiento final; y para la revolución mundial, es la etapa de la ofensiva estratégica hasta la instauración del socialismo en toda la tierra. Estrategia significa ver lo que predomina en la etapa en su conjunto, ver el color que predomina en el bosque y no en algunos arboles. En consecuencia, las condiciones de la situación internacional son difíciles no porque la revolución este de bajada o haya fracasado, sino porque el panorama general se ha elevado a una situación más compleja, en la que la revolución es la tendencia principal. Expresión de ésta tendencia es la Nueva Gran Ola de la Revolución Mundial. La tarea central es hacer que el maoísmo sea mando y guía de la revolución y generar partidos comunistas para la guerra popular en cada país. Hoy vivimos el desenvolvimiento inicial de ésta gran ola. Saquemos cuentas: guerra popular en Perú, Nepal y Turquía. Luchas armadas revolucionarias en India. Luchas de liberación nacional en medio oriente, Africa, Europa oriental. Luchas armadas en Asia, en Filipinas. Movimientos armados en Europa. Protesta proletaria y popular en Estados Unidos, Europa. Protesta popular y movimientos armados en América Latina.
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¿Cómo llega la revolución peruana a iniciar la guerra popular?
La revolución peruana a dejado al desnudo la realidad no solo del Perú, sino de toda América Latina. José Carlos Mariategui primero y el Presidente Gonzalo después, han señalado que en todo el continente latinoamericano, el capitalismo que tenemos, siempre se ha desarrollado enfermizo por estar sujeto al dominio imperialista y enredado con la semifeudalidad subsistente ‘modernizada’. Esta característica general se expresa en medio de las particularidades específicas de cada país. Es el Presidente Gonzalo quien plantea que este capitalismo y la revolución, desde comienzos del siglo XX, atraviesan un proceso dividido en tres momentos fundamentales.
Primer momento: Comienzos del siglo XX. Desarrollo de ese capitalismo denominado burocrático. Lo que generó sobreexplotación y el consecuente ascenso de luchas populares en el continente. Sobre ésta base se dieron las primeras expresiones del marxismo leninismo constituyéndose Partidos comunistas en diversos países. Precisamente, en los años 20, José Carlos Mariategui aplicando el marxismo leninismo, interpretó la realidad peruana para transformarla y constituyó el Partido Comunista del Perú. Estableció los objetivos y como hacer la revolución. Objetivos: conquistar el poder destruyendo el dominio imperialista, el gran capital y la gran propiedad terrateniente para continuar sin interrupción, con la revolución socialista. ¿Como cumplir estos objetivos? por medio de la lucha armada principalmente de obreros y campesinos, conquistando zonas rurales arrancadas de las manos del ‘gamonalismo’ (caciquismo), es decir del viejo Estado peruano. En esas zonas levantar lo que Mariategui llamó ‘soviets de obreros y campesinos’. Pero después Mariategui fue escondido, negado y revisado por electoreros y el Partido Comunista convertido en armatoste electoral.
Segundo Momento. Segunda mitad del siglo XX. Profundización del capitalismo burocrático en el continente con el plan imperialista de la Alianza para el Progreso. Esto generó sobre explotación y el consiguiente ascenso de luchas populares. La revolución cubana puso en el centro del debate la lucha armada. Hubo guerrillas urbanas y rurales en diversos países y los comunistas en el continente tuvieron que tomar posición entre la vía pacifica planteada por Jruschov y la vía armada con guerra popular defendida por el Presidente Mao. Así fueron los años 60, cuando el Presidente Gonzalo planteó que era necesario retomar el camino de Mariategui y reconstituir el Partido Comunista del Perú. Y solo pudo hacerse, cogiendo con firmeza el pensar, la ideología del proletariado internacional, es decir, el marxismo leninismo que se desarrollaba hacia su tercera etapa actual el maoísmo.
Tercer Momento. Crisis general del capitalismo burocrático, es el momento de su destrucción final. El Perú ingresa a este momento en los años 80. A el corresponde a su vez, el inicio de la guerra popular. Cabe preguntar ¿cómo se expresan los tres momentos en cada país latinoamericano?
La revolución peruana ha demostrado la validez universal del maoísmo cuya médula es el poder conquistado con guerra popular. De lo que se trata hoy es especificar las particularidades de su aplicación en cada país. En este sentido, el Presidente Gonzalo señaló que debido a la presencia de grandes ciudades en América Latina la guerra popular a diferencia de China, debe ser en campo y ciudad, en el campo es principal y en ciudad complementaria. La revolución peruana ha demostrado que en América Latina, el camino es cercar las ciudades desde el campo, haciendo guerra de guerrillas para destruir pedazo por pedazo el viejo Estado y la gran propiedad en cada zona rural conquistada, organizando en ella el nuevo poder, es decir las bases de apoyo, en las que la población se organiza para combatir y producir. Solo así el Partido Comunista del Perú, con el Pensamiento Gonzalo en una mano y el fusil en la otra, pudo conducir a las masas populares a través de 24 años de guerra popular hasta hoy.
Los primeros diez años fueron de defensiva (1980 – 1990), se comenzó como una fuerza débil, frágil, casi sin armas modernas, y por ello, con la necesidad de combatir a la defensiva. De pequeños objetivos a grandes objetivos. Así fue como se forjó y desarrolló el Ejercito Guerrillero Popular y se conquistaron posiciones geográficas organizando en ellas Bases de Apoyo. En los años 90 la guerra popular ingresó a lo que se denomina equilibrio estratégico, una etapa en que la reacción debe defender las posiciones que aun tiene y recuperar las perdidas para lo cual debe aniquilar la guerra popular, mientras que la revolución debe defender las posiciones conquistadas (Bases de Apoyo), ganar nuevas y disponerse a conquistar el poder en todo el país. En el año 92, es detenido el Presidente Gonzalo, ingresando así la revolución peruana a un periodo de ‘recodo en el camino’, el cual no significa que la revolución haya retrocedido al periodo anterior de defensiva de los años 80, sino que manteniéndose dentro del equilibrio alcanzado, la revolución repliega sus fuerzas para impulsar un avance mayor, y por ello el Partido Comunista del Perú tiene como centro ‘salir del recodo’ perseverando en el plan de conquistar el poder en todo el país.
Los comunistas y revolucionarios de América Latina tenemos la responsabilidad de comprender y transformar nuestra historia. Es revolucionario quien practica la revolución. La tarea central de toda revolución es la conquista del poder. Y la forma mas alta de hacerlo es por medio de la lucha armada. Solo así la obscuridad que predestina nuestras vidas, esa tiniebla del pantano imperialista, se hará girones. El fuego y el trueno de las masas en rebelión romperán la noche. Así ha sido, y así será. Somos la simiente de la nueva sociedad latinoamericana. Es el nuevo amanecer que ya ha comenzado.

¡Defender la salud y vida del Presidente Gonzalo apoyando la Guerra Popular de Perú. Romper el aislamiento al Presidente Gonzalo!
¡Enarbolar, defender y aplicar el Maoísmo, organizar Partido Comunista para la Guerra Popular en cada país!

Comité de Apoyo a la Revolución Peruana en Chile.
Santiago de Chile, noviembre del 2004.

CITA FINAL:
“La reacción apunta a destruir dirección, a destruir Partido para sofocar y aplastar la revolución, a más de separar al Partido de las masas. Aniquilar Partido es aplazar una revolución, no acabarla, pues mientras haya comunistas y masas nunca podrá ser acabada. Cualquiera de nosotros puede faltar pero el Partido seguirá y nuestras vidas inmoladas animarán a los que queden y el camino proseguirá hasta que el comunismo se imponga en la tierra. Esta es nuestra convicción”.
Presidente Gonzalo.


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