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Mujeres trabajadoras: Charlas con las cumpas de la Junin
Por Moni y Nati (((i Cba))) -
Sunday, May. 01, 2005 at 12:49 PM
Nati había arreglado por teléfono la cita, y el jueves salí del laburo con un montón de expectativas. Íbamos a charlar con algunas compañeras de la Clínica Junín, una empresa recuperada, un espacio de la resistencia... habíamos estado pensando en cómo plasmar el 1º de Mayo, pero de una manera un poquito diferente: desde la visión tantas veces invisibilizada de las mujeres trabajadoras… Nos juntamos en la puerta de la clínica, teníamos ganas de escucharlas y yo intuía que nos esperaban unos mates...
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Charla con las compañeras de la clínica junín
Nati había arreglado por teléfono la cita, y el jueves salí del laburo con un montón de expectativas. Íbamos a charlar con algunas compañeras de la Clínica Junín, una empresa recuperada, un espacio de la resistencia... habíamos estado pensando en cómo plasmar el 1º de Mayo, pero de una manera un poquito diferente: desde la visión tantas veces invisibilizada de las mujeres trabajadoras…
Nos juntamos en la puerta de la clínica, teníamos ganas de escucharlas y yo intuía que nos esperaban unos mates...
Nos encontramos con Silvia, Paulita, que después nos enteraríamos que es hija de Silvia, y con Edith en el comedor del edificio de calle Deán Funes... y esto es lo que nos contaron:
Silvia- Al principio el proceso fue bastante duro, el primer tiempo fue bastante duro porque pasamos muchas necesidades, muchas depresiones, muchas situaciones feas en cuanto a que todo el mundo hacía crisis porque estábamos metidos acá adentro y no sabíamos que nos iba a pasar, no sabíamos en que íbamos a terminar y no teníamos ni que comer...dormíamos acá, tomábamos mate todo el día, mañana, tarde y noche...
Edith- A mate, nada más, salíamos a pedir en las universidades, en la calle, fondo de huelga...Y después llegaba el fin de semana y era también poquísimo...o nada
Silvia-A veces nos llevábamos a la casa 5 pesos, 10 pesos... cuando nos llevábamos 10 pesos ya era...
Edith- Era muchísimo.... cada uno 10 pesos, no? O sea que había que andar para que nos lleváramos cada uno 10 pesos...y comíamos pan o algo de comida porque la gente que conocía el conflicto nos traía mercadería, arroz, fideos... y pan nos daban las panaderías, el pan que les quedaba nos traían y nos daban, así que la hemos pasado feo... sin gas, porque nos cortaron el gas, un invierno tremendo de frío tirados en el piso...
Nosotras- la decisión de ocupar y sostener la clínica a pesar de las dudas... ¿cómo se toma, hay un proceso de asamblea, les debían plata…?
Silvia - Lo que pasó fue que ya veníamos con asambleas nosotros...en los últimos días, antes de que pasara... antes de que nos enviaran los telegramas de despido...
Edith – Ellos nos debían un año de sueldos, prácticamente.
Silvia - Nos venían envolviendo con que cambiaban de firma, que sí, que no, que ya va a mejorar y así...nos daban capaz que dos cospeles el fin de semana al que tenía que venir y si no después nos decían “el que quiere venir que venga y el que no, que no venga”, pero lo mismo veníamos... yo me venía en bicicleta...bueno ahora también vengo en bicicleta (risas)...
Pero ahí empecé a venirme en bicicleta... yo vivo en Ampliación América... y bueno, no había plata para el colectivo, había que venirse como uno pudiera...
Edith - Y muchos venían caminando... meses y meses se han venido caminando...y si, se pasó mucha necesidad...
Silvia- Al comienzo no teníamos nada...
Edith-Al comenzar teníamos la directora médica, que es la doctora Torti... que es la secretaria (de la cooperativa) y una médica que venía a hacer guardias. De la planta de la clínica los médicos se fueron todos, quedamos enfermeras, administrativas, mucamas, personal de mantenimiento...
Nosotras -¿Y estas dos doctoras venían de antes trabajando con la clínica?
Silvia -Sí...
Nosotras – ¿Y cómo era la configuración del grupo que inicia la toma?
Edith- Y… éramos treinta mujeres...
Silvia- Siempre fuimos más mujeres...
Edith- En total éramos treinta y cuatro... cuatro o cinco varones...
Silvia - si, cinco hombres y las demás todas mujeres... y después se tomó la decisión de quedarnos acá. Cuando nos mandaron los telegramas de despido, vinimos todos acá, nos juntamos acá y vinieron distintas organizaciones sociales, los dueños se fueron, se fueron los otros empleados que no querían saber nada con la toma...Y recién cuando decidimos quedarnos, todos, toda la gente que estaba acá, que trabajaba acá se fue, ese día se fue... algunos se fueron por la puerta del costado para que no los vean que se iban y se fueron todos... médicos, mucamas, enfermeras, la gente que no quería...
Nosotras- ¿Había muchos empleados, antes?
Silvia- Sí, éramos casi cien los empleados... y bueno, nos quedamos nosotros. Habremos sido ponele cinco o seis más de los que somos ahora, pero durante ese proceso tan feo que tuvimos, se empezaron a ir un poquito más de gente y quedamos treinta y cuatro.
Nosotras- Ppero en general la mayoría de los que comenzaron, siguen…
Silvia- Sí, están... y bueno, después vinieron los abogados, empezamos a ver como podíamos conseguir una figura legal para seguir acá y la única salida que teníamos era constituirnos en cooperativa, que fue lo que hicimos... eso fue el 22 o 23 de mayo de 2002 y en junio, al mes siguiente, el 13 de junio se reabrió la clínica con los que estábamos y una médica... y la otra médica que venía a hacer guardia, que vivía acá cerca, nada más...
En el mes de octubre de ese mismo año ya nos dieron la matrícula y bueno... empezamos de a poquito. Se empezaron a incorporar médicos... siempre los médicos vienen y se los pone en aviso de cómo se trabaja acá, de cuanto se van a llevar, de que acá hay como si fuese un bono solidario, todavía, porque es un mínimo, porque acá, por ejemplo, del plan de salud para la cooperativa le que queda la cuota mensual, nada más, todo lo que es consulta, eso va para el médico, los tres pesos de la consulta se los lleva el médico. O sea que el sueldo nuestro depende de la cuota que paga el adherente al plan, nada más.
Nosotras- ¿Y los médicos pertenecen a la cooperativa, pasan a formar parte de la cooperativa?
Silvia- No. No son empleados, pero tampoco no están cooperativizados, todavía...
Edith - Eso se va a ver... la doctora Torti, sí. Todos los demás son enfermeras y administrativas y personal de mantenimiento y de limpieza.
Nosotras- Sobre el proceso de toma de decisiones, ¿acá como fue?
Silvia- Bueno, acá las decisiones se toman en asamblea y se toman entre todos...y gana la mayoría. Se vota, se dan dos o tres opciones o ideas que se largan y se vota... pero acá, te digo, somos siempre más mujeres que hombres así que ganamos por mayoría, así es, si o si (risas)... acá las mujeres que están son bastante bravas...
Nosotras- ¿Hoy cómo es la composición de la cooperativa?
Silvia- Y bueno, hay un consejo de administración que está formado por el presidente, la secretaria, la tesorera, un vocal...son cinco. El presidente es José López, es enfermero, la secretaria es la doctora Torti, la tesorera es Viviana Derticia y está Esteban que es vocal... y está María Ester que es síndica. Ese es el consejo de administración.
Edith- Y la cooperativa la conforman todo el resto...
Paula- Todos más el consejo...
Nosotras- ¿Se ha incorporado más gente a trabajar?
Paula- Sí, hasta el momento yo.
Silvia - Ella está trabajando acá porque tuvimos una compañera que tuvo un bebé y no pudo volver a trabajar todavía, bueno, ella como que está cubriendo ese cargo. Desde hace 9 meses... está en el plan de salud, en la mesa de entradas...
Edith - atendiendo el teléfono... ha estado por todas las áreas
Paula –solo me falta enfermería...(risas)
Silvia- Y bueno, ahora con esto de la municipalidad estamos un poco más tranquilos, en cuanto a que el edificio se declaró de utilidad pública y sujeto a expropiación (Ver NOTA en Indymedia CBA)...pero está latente todavía el juicio por desalojo, todavía eso lo tenemos ahí y está también lo de la custodia legal, que estamos esperando que salga, vamos a estar un poco más tranquilos si es que se nos da lo de la custodia legal del edificio.
Nosotras- Y la expropiación, ¿qué implica? ¿Que ustedes tienen que conseguir los recursos para adquirir el inmueble?
Silvia- Sí.
Nosotras - ¿Y a eso lo están pensado, lo están charlando o están esperando a ver como se resuelve?
Edith – No, nosotros lo que queremos es que nos autoricen a abrir el internado para de ahí poder generar más recursos para poder juntar la plata para pagar...
Nosotras-Y abrir el internado implicaría abrir un montón de puestos más de trabajo...
Silvia- Sí, sí, porque nosotros no vamos a poder solos
Nosotras- ¿Y esto depende de alguna habilitación?
Silvia- Sí, una habilitación que nos tiene que dar la provincia, en eso estamos ahora, tenemos que hacer unas reformas en el edificio, que, bueno, se están tratando de hacer.
Edith- Porque la habilitación nos la van a dar si tenemos en condiciones las cosas.
Silvia- Tenemos primero que hacer ese paso, para que vengan a hacer una inspección y nos dan la habilitación. A nosotros nos beneficiaría, un poco más. Económicamente nos ayudaría...
Nosotras- ¿Tienen mucha gente afiliada en este momento al plan de salud?
Paula – Y… hay cerca de mil afiliados hasta el momento, sí...
Edith- Mil planes que implican hasta el momento, de cada afiliado cuatro o cinco o seis o uno...
Silvia- Cada plan es un grupo familiar
Edith- Hay mil grupos familiares...
Paula- Hay gente que se afilia por cinco o seis, hay afiliaciones individuales...y está el tema de que por ahí se afilien y sigan pagando, pero por lo menos, ahora con el tema de la expropiación, es como que estamos un poquito mas seguros, como que ya viene más gente, que se interesa. En el momento en que salía todo eso en los noticieros, mucha gente dio de baja porque tenían miedo... no sabían si iban a seguir pagando algo que después no iban a poder utilizar, así que por miedo vienen y preguntan, “che qué va a pasar”, pero ahora por lo menos viene mucha gente, se asesora, nos dice que “no porque estuvimos viendo en la televisión, escuchamos, dijeron...”
Silvia- O sea, todavía seguimos resentidos en la parte económica, porque nosotros pagamos todo, como cooperativa pagamos todos los gastos acá...
Edith- Pagamos luz, pagamos impuestos, pagamos teléfono, todos los gastos corren por cuenta nuestra, obvio, que no tenemos otra ayuda para pagar eso...
Silvia- Y todo sale de lo mismo, también los sueldos, todavía no digamos que tenemos un sueldo ni siquiera relativamente bueno, estamos ahí, sobreviviendo.
Nosotras- ¿Y como se resuelve el tema de los sueldos?
Silvia- Acá todos cobramos igual, desde la persona que hace la limpieza hasta el presidente de la cooperativa cobran exactamente lo mismo,
Edith-todo se divide en partes iguales...exactamente en partes iguales, todo el mundo cobra lo mismo
Nosotras- ¿Y la carga horaria es también la misma para todos?
Silvia- Sí, sí.
Nosotras- ¿Ahora, que cantidad de médicos hay?
Silvia- Y… hay alrededor de 70, no?
Edith- Porque ya hay todas las especialidades médicas, y algunas áreas en las que hay tres o cuatro médicos.
Silvia- Por ahí se genera un poquito de problema en cuanto a consultorios, a veces está ocupado y viene el otro y tiene que esperar... es así porque hay muchos médicos.
Nosotras- Estuvimos viendo el folleto con el plan de salud, nos da la impresión de que tienen un criterio diferente, por ejemplo, del concepto de grupo familiar: si hay un grupo de estudiantes que viven juntas ustedes lo consideran grupo familiar... ¿hay un concepto de salud diferente respecto al que se maneja hoy en las clínicas privadas?
Silvia- Nosotros estamos convencidos de que se puede hacer una salud a bajo costo, obviamente, que nosotros la estamos haciendo, porque yo conozco, por ejemplo, gente que paga un plan de salud por grupo familiar 50 pesos en un barrio nada más que para consultorio externo 12 horas. O sea de 8 de la mañana a 8 de la noche y pará de contar...nada más. Y cada vez que una va tiene que pagar 5 pesos la consulta. Acá pagás 10 pesos por el grupo familiar y la consulta 3 pesos, es más, incluso ahí me enteré que no tienen todas las especialidades, o sea que... es sacrificado, porque nosotros tenemos que seguir esperando por tener un mejor ingreso, pero se puede hacer, se puede hacer. Nosotros estamos convencidos de que se puede hacer una salud a bajo costo y buena, no?, buena, porque hay buenos profesionales.
Nosotras- Les queríamos preguntar, a nivel personal, como mujeres, cada una de ustedes, cuando decidieron quedarse y en cierta forma dejar sus casas, ¿sintieron cambios en ustedes, respecto a las tareas por ahí más cotidianas?
Silvia- Y sí, sí porque te demanda...
Edith- En otro lado vos cumplis tus 8 horas de trabajo, salís y punto.
Silvia- Acá venimos a asambleas, a reuniones, vamos a las marchas, tenemos que ir a la legislatura, tenemos que ir a tribunales, hay que ir al ministerio, hay que ir a un lado, hay que ir al otro y nos dividimos, una vez va uno, otra vez va otro...
Edith- Y en la casa se modificó todo, es más nosotras, con el hecho de ser mujeres. Muchos en la familia no lo entienden, yo supongo que hasta Paulita, que ella ahora está participando con nosotros, recién está dándose cuenta de todo, por qué la madre no estuvo en la casa...
Silvia- Claro, porque ella es mi hija mayor y tengo otro de 12 años y otro de 6 años... y ella se tuvo que hacer cargo de los chicos cuando yo estuve acá metida tres días seguidos, que después me iba, y venía, y me quedaba dos días más, y volvía a mi casa a los dos o tres días.
Paula- Y es difícil, al principio no lo entendés, después si, después empezás a ver las cosas, el sacrificio y todo eso. La verdad que muchas veces se planteó el tema, por los malos momentos de no tener plata, de todo lo que te implican las necesidades y, por ejemplo, mi mamá decía por ahí, por una o por otra cosa “voy a dejar”, y cuando lo empecé a ver de otra manera yo le decía no, no dejés, seguí ahí, tenés que seguir poniendo, luchando... Ahora que yo estoy acá y me toca mucho más de cerca, lo entiendo. Y bueno, estoy re orgullosa de mi mamá, de ella y de todos.
Nosotras –¿Entonces a esto lo volverían a hacer?
Edith - Nosotros sí...
Silvia – Sí.
Edith - Siiii. (sonrisas)
Silvia - Yo sí, porque casualmente cuando yo volví a trabajar acá, yo había trabajado antes en esta clínica, después me fui a trabajar a otro lugar, estuve 7 años trabajando y me dejaron sin trabajo así, un 28 o 29 de abril, me dijeron “a partir del 1ro de Mayo ya no trabaja más acá”
Nosotras - ¿El 1ro de Mayo te quedaste sin laburo? que bajón!
Silvia - Sí (risas)... feliz día del trabajador dijimos todas... y vine acá y trabajé 11 meses sin que me pagaran un peso y después cuando sucedió esto, dije no, yo me prendo, yo me quedo porque no puede ser que me vuelvan a hacer lo mismo y que me vuelva a pasar lo mismo, ya basta y me quedé... y acá estoy.
Nosotras - Y esto de estar sin patrón, es otra cosa, no?
Silvia - Si, si, esto es otra cosa, es algo muy especial. Uno por ahí siente esos bajones, muchas ganas de decir, ¿hasta cuándo vamos a estar así?, ¿cuándo vamos a tener un respiro?, ¿cuándo vamos a decir tenemos un sueldo?, que lindo. Pero a la vez es algo que te sigue estimulando, porque ves que viene gente, ves que la gente te felicita, ves que la gente te va respondiendo.
Edith - Y se va dando cuenta que lo que vos estás brindando es algo útil para todo el mundo. Tenemos mucha gente alrededor que te está respondiendo...
Silvia - Y la gente te dice sigan adelante, sigan adelante, no se dejen, no les den con el gusto...
Edith -No abandonen, ellos mismos te van diciendo, no abandonen chicas...
Nosotras - ¿Y la gente de las organizaciones sociales?
Silvia - Sí ellos también, sí, sí...
Edith - Bueno, ellos siempre estuvieron aquí, apoyándonos.
Silvia - Es más, nosotros tenemos un plan de lucha, como lo llamamos, cuando estuvo el peligro del desalojo, teníamos un listado de gente y de organizaciones. Con un solo llamado telefónico tenemos 100 personas metidas acá adentro en 10 o 15 minutos. Y ya lo hicimos dos o tres veces. Ya nos pasó y nos respondieron como dijeron que lo iban a hacer. Una vez que me llamaron, vení que va a venir la policía, que nos quieren venir a sacar, yo hasta que llegué con mi bicicleta esto ya estaba lleno de gente...(risas)
Edith- Poco más y no te dejan entrar a vos...
Silvia- Porque o entraba yo o entraba la bicicleta.... sí, ¿ves? esas cosas también te dan ganas de seguir porque sabés que hay gente que te apoya.
Edith- No estamos solas...no estamos solas...
Nosotras- A nosotras nos interesaba saber cómo este hecho, esto de estar en otra situación, a partir del momento en que están en un ámbito en el que hay que tomar decisiones, enfrentarse a los dueños, al gobierno, a la policía... si eso de alguna manera las modificó a ustedes a la hora de encarar otros ámbitos.
Silvia- Es que estas cosas te hacen más fuerte, incluso nosotras hasta con el gremio hemos tenido que luchar, porque el gremio no nos apoyó nunca, el gremio que tenemos, o sea ATSA, vino cuando nosotros tomamos la clínica un día y que sí, que miren, que piensen... que vamos a ver... y bueno, con ellos lo único que logramos fue que retractaran lo de los despidos. O sea nosotros todavía seguimos siendo empleados de la clínica, no nos dimos por despedidos. eso fue lo que hicimos que consiguiera el sindicato en el Ministerio, que continúe el juicio laboral para poder cobrar todo lo que nos debían...y otra de las cosas que seguimos haciendo son los famosos aguantes, que les llamamos nosotros, que vienen compañeros a la noche y se quedan con nosotros para que no estemos solos. A veces somos dos enfermeras y un médico y vienen y se quedan para hacernos compañía y a la vez por si llega a pasar algo. Porque lo del desalojo siempre estuvo ahí latente, entonces siempre es lindo que seamos un poco más por cualquier cosa. A pesar de que a veces discutimos, y tenemos diferencias, como una familia, al momento de tomar decisiones o de que nos pase algo ahí estamos todos juntos. Y a mi todo esto me ha modificado, como que una se torna más fuerte, como que no pensaba yo que con la edad que tengo podía plantarme y tomar decisiones.
Edith- A mí sí me modificó, pienso que a todas nuestras compañeras, esto nos ha dado fuerza para salir adelante y darnos cuenta que no necesitamos de otra persona más para que nos ayude. A mí me tocó personalmente cosas muy fuertes ese año que decidimos tomar la clínica, yo tenía la partida de una hija que se iba a España y una separación, al final pude salir adelante en todo.
Luego de la charla nos sacamos unas fotos con las compañeras y disfrutamos de los últimos mates, nos abrazamos a ellas, a su lucha y quedamos en vernos pronto. Qué bueno.
Silvia...
Por Moni y Nati (((i Cba))) -
Sunday, May. 01, 2005 at 12:49 PM
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Edith...
Por Moni y Nati (((i Cba))) -
Sunday, May. 01, 2005 at 12:49 PM
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Paula...
Por Moni y Nati (((i Cba))) -
Sunday, May. 01, 2005 at 12:49 PM
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Las chicas de recepción...
Por Moni y Nati (((i Cba))) -
Sunday, May. 01, 2005 at 12:49 PM
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muy buen informe!!!!
Por soncho -
Sunday, May. 01, 2005 at 9:36 PM
felicitaciones, placer leer y ver estos relatos que no circulan y tanto hacen falta!.
comparto
Por muchomaiz -
Tuesday, May. 03, 2005 at 11:37 AM
La nota esta muy linda ,seguimos adelante en la construccion de nuevos mundos,saludos para todxs...
EL "BRUTUS" ESTE NO SOY YO
Por Brutus -
Tuesday, May. 03, 2005 at 3:22 PM
Aunque ell ultimo comentario no aparece en la pantalla, si mi Nick como ultima intervencion. Los mismos pelotudos de siempre se divierten clonando. No resulta muy dificil saber de donde viene.
¡Muerte a los clones!
ejemplo
Por el angel exterminador -
Wednesday, May. 04, 2005 at 8:28 AM
buenisima la nota y en estas compañeras se siembra la esperanza de un mundo mejor y socialista,no en los cuatro jetones rentados de los partidos de siempre y que no dirigen a nadie.
Fuerza compañeras, el futuro es de ustedes.
Una estamp((i))ta no se le rechaza a nadie
Por Detektor de estampitas -
Wednesday, May. 04, 2005 at 9:31 AM
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Seguramente si alguna de estas mujeres trabajadoras y luchadoras por la dignidad, opinaran en Indy, expresamente desde sus visiones Cristianas o Marianas, serían tildadas de ignorantes, chupacirios, fachas, y no sé cuantas pelotudeces más. La ignorancia no tiene ideología, (por supuesto, no lo digo por estas mujeres).