la clase obrera en el centro de la escena
Por plifonia - Friday, May. 06, 2005 at 8:50 PM

La polItica del gobierno de Kirchner tiene su viga maestra en salarios y jubilaciones de pobreza para garantizar las ganancias de los monopolios y terratenientes y pagar la deuda externa. ¡Basta!

1. Un gran acto clasista y opositor
Cuando las columnas de las tres avenidas se juntaron sobre el filo de la Plaza de Mayo, para avanzar unidas, una marea humana de más de cien metros de ancho marchó ordenadamente, cubriendo todo a su paso hasta rebalsar el histórico lugar.
El frente lo ocupaban delegados, comisiones internas y trabajadores de las grandes luchas que vienen conmoviendo el país: subtes, telefónicos, Astillero Río Santiago, Terrabusi y Pepsico, docentes de Salta, los hospitales Garrahan, Ramos Mejía, Gutiérrez y otros del Gran Buenos Aires, Lafsa, Parmalat, empresas recuperadas como Renacer y Zanón, ferroviarios, frigoríficos. Todos ellos fueron presentados en el palco ante los aplausos de la multitud, así como los familiares de las víctimas de Cromañón y de los caídos en la lucha. Subieron los dirigentes de las corrientes y los partidos políticos que apoyaron la convocatoria. Las grandes columnas de los desocupados avanzaron con sus pecheras y carteles. La de la CCC y el PCR estaba encabezada por los cascos amarillos de los trabajadores de las cooperativas.
El documento leído, que se acordó entre 100 organizaciones, reclama un paro nacional activo. Se sumaron organizaciones de derechos humanos, estudiantiles, asambleas populares. Al cierre del acto vibró en la plaza el himno internacional de los trabajadores: La Internacional.
Mientras tanto, grandes actos unitarios clasistas también se realizaban en Rosario, Bahía Blanca, Mendoza, Tucumán, Rosario, Comodoro Rivadavia, Lanús y Mar del Plata.


La clase obrera ocupada está de pie
Los grandes actos del 1° de Mayo, unitarios, combativos y clasistas, opositores a la política hambreadora y entreguista del gobierno de Kirchner, mostraron que la clase obrera ocupada se ha puesto de pie, irrumpiendo con sus luchas en el centro de la escena política.
Es el inicio de una oleada que va por más. Porque son luchas que muestran la decisión del proletariado, de enfrentar la política de salarios de pobreza, trabajo en negro y superexplotación que es la viga maestra de la política del gobierno.
Un nuevo ejemplo de la firmeza de clase lo está dando la lucha de más de tres semanas de los obreros de la alimentación (fileteros y otros de las plantas de tierra), junto a los pescadores y otros gremios, bloqueando las terminales de los puertos en Madryn y otros lugares de la Patagonia.
También, la gran movilización de los trabajadores del Astillero Río Santiago, que empalmó con el paro y movilización de los trabajadores de la salud convocado por el ATE provincia de Buenos Aires.


Luchas duras, y triunfos
Ha comenzado la lucha de los docentes de Buenos Aires, con marchas a los consejos escolares por los edificios, zapatillas y becas. Está planteado un paro con asambleas en la provincia y un paro nacional. No será una lucha fácil, porque el centro de la política del gobierno en los estatales, es mantener básicos de indigencia, como exige el FMI. Torcerle el brazo a esa política hambreadora exigirá retomar las grandes tradiciones de lucha como la marcha de Tigre a La Plata y la Marcha Blanca.
Las patronales, el gobierno y los jerarcas sindicales actúan unidos. Lo mostró el espectáculo de asunción de la nueva conducción del PJ kirchnerista en la Capital Federal, donde Cristina Kirchner habló rodeada del ex menemista y ex cavallista Alberto Fernández, junto a otros ex menemistas de los servicios como Andrés Rodríguez (UPCN) y Santamarina (encargados de edificios), sindicalistas empresarios como Cavalieri, y el organizador de patotas rompehuelgas en los hospitales, Datarmine.
Cada lucha ha debido enfrentar la represión, las intrigas del gobierno y la prensa, las patotas de los jerarcas, y el aislamiento de las direcciones sindicales conciliadoras. Pero la firmeza de clase que va asomando les ha torcido el brazo, y una a una han ido triunfando.


Afluentes populares
Los avances del proletariado ocupado se dan cuando la represión y las intrigas del gobierno no han podido aplastar y sacar de la calle al movimiento piquetero. El plan de lucha unitario de los desocupados avanza hacia una nueva jornada combativa, empalmando con los combates de los obreros ocupados, la juventud y los jubilados.

Sigue avanzando el combate de la juventud, como se ha visto en la movilización hacia el Ministerio de Educación, protagonizada por la Juventud de la CCC, la CEPA, y otras organizaciones, con la adhesión de la FUA, FUBA, Conadu y Suteba.
Volvió a movilizarse la juventud y el pueblo por la masacre de Cromañón. Como dijo el padre de una de las víctimas: “Aunque la Justicia cómplice siga sin condenarlo, nosotros lo hemos condenado y vamos a hacer de la Capital una cárcel para Ibarra”. La gigantesca movilización de las poblaciones de Gualeguaychú y la uruguaya Fray Bentos, repudiando la instalación de dos plantas papeleras que contaminarán la región, mostró la voluntad de lucha que se extiende por todo el país.
El miércoles 4 se realiza una movilización a la Cancillería, del Foro Patriótico y Popular junto a diversas organizaciones y personalidades, en repudio a la decisión imperialista de la Unión Europea, de incorporar a su Constitución, como parte de “su territorio”, a las Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur y parte del territorio Antártico, convirtiendo al Atlántico Sur en un supuesto “lago europeo”. Hace un año que el gobierno argentino oculta este hecho grave.





2. Desgaste: luchas, energía y Venezuela

La lucha obrera y popular avanza. La política del gobierno y el bloque dominante de utilizar a los medios de comunicación para aislarlas e intrigar contra ellas se va desgastando. Algo de ese desgaste se sinceró cuando las “encuestas”, en las que Perón y Gardel fueron menos populares que Kirchner, cayeron el 11% en un mes.
Con los primeros fríos, comenzaron los cortes de gas a la industria, mostrando el fracaso de la política energética del gobierno. La amenaza de una nueva crisis ya ni se discute. Depende de cuánto llueva en la Patagonia y Brasil, y si el invierno es más o menos frío. El problema de la crisis energética está en la privatización de YPF y Gas del Estado, con lo que la renta fabulosa de la exportación de petróleo, en lugar de ir a obras públicas que aumenten el flujo del gas y abaraten la energía, va a parar a los bolsillos de un puñado de monopolios imperialistas.
Por otra parte, también, ayudan a clarificar el tablero político, los ataques de miembros de los gobiernos de Lula y Kirchner contra el proceso revolucionario venezolano que prepara y arma a su pueblo frente a la amenaza descarada del gobierno de Bush, que mandó a Condoleezza Rice a presionar contra Chávez a gobiernos de la región. Lula criticó públicamente a Chávez; y Kirchner avaló con su silencio las declaraciones de su ministro Pampuro que atacó como “armamentismo” el derecho del pueblo venezolano a su defensa en armas.
Los yanquis presionan “con todo” al gobierno argentino en relación a Venezuela (y también sobre Bolivia). Bush tiene poder de decisión para desbloquear el “megacanje”, y para trabar el acuerdo que Kirchner negocia con el FMI. La política de Kirchner de pagar la deuda externa ilícita y fraudulenta, ha colocado al gobierno en una encerrona: traicionar a Venezuela a cambio del apoyo yanqui para un acuerdo con el FMI y destrabar el megacanje; o mantener una posición digna (como la que Venezuela tuvo con nosotros en Malvinas) y “arriesgarse” a entrar en cesación de pagos con el Fondo y a que quede bloqueado el canje.




3. Tormentas en america latina

El acto de lanzamiento de la candidatura de Cristina Fernández, rodeada de la vieja lacra de “ex” menemistas, cavallistas, jerarcas sindicales y “buchones” de la SIDE, ha vuelvo a revelar la mentira del doble discurso oficial sobre “la nueva manera de hacer política”.
Por el contrario, como se dice en el documento que se leyó en Plaza de Mayo, sigue vigente el reclamo histórico del Argentinazo: “¡Que se vayan todos!”. En muchas plazas del país estaban cientos de nuevos dirigentes surgidos del combate popular.
Los pueblos de Santiago del Estero y de Catamarca volvieron a trazar el camino del voto bronca como la expresión, en las urnas, de la voluntad de sostener ese reclamo histórico que volvió a escucharse en Plaza de Mayo.
José Claudio Escribano, el “comisario político” de La Nación, escribió una nota sobre la reunión del Foro Iberoamericano, que tuvo como tema central las rebeliones populares en Ucrania, Líbano, Ecuador, la de Argentina del 2001, que tiñen el mundo y sobre todo a Latinoamérica, región en la que Venezuela “ha pasado a tener la categoría de cuestión continental”.
Las tormentas latinoamericanas y el faro ascendente venezolano causan pánico en las clases dominantes. No tiene futuro el doble discurso, se va calando, ni la política de retoques. Avanza la conciencia de la necesidad de un cambio de sistema. Las tormentas populares vienen por más.

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