Julio López
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Toma de la Escuela Normal Mariano Acosta
Por ruche - Tuesday, Jun. 28, 2005 at 9:39 PM

El colegio ha sido tomado por los estudiantes, con apoyo de la Asamblea de Padres. Los reclamos tienen que ver con el tema edilicio.



Nuevamente los estudiantes secundarios de la Escuela Normal Nº2 "Mariano Acosta" han decidido tomar pacíficamente el establecimiento, considerando que no se ha dado respuesta por parte del gobierno porteño a los reclamos que llevan varios años y que habían llevado a los estudiantes a tomar la misma medida hace poco más de un mes, aquella vez en el marco de una jornada en la que confluían muchos colegios de la capital.

A diferencia de otras escuelas, en el Mariano Acosta hace un año empezó un ambicioso plan de reforma edilicia, financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo. Como el gobierno falló con los plazos, las clases tienen lugar en medio de una obra, donde reina el polvillo y el ruido. Frecuentemente se corta la energía electrica sin previo aviso, y actualmente las autoridades han decidido cerrar las válvulas de gas natural porque se detectaron diversas pérdidas en los caños.


Se suma la exigencia de 47 nuevas becas más la normalización de las ya otorgadas.


Los reclamos edilicios venían desde el 2002, cuando algunos padres comenzaron a organizarse en asamblea, y de la mano del estudiantado dieron varias medidas de lucha, entre las que estuvo la toma del colegio. Hoy esta alianza está fortalecida, al punto que la exigencia concreta de esta toma es que se cumpla con un plan de obras que confeccionó una comisión de la asamblea de padres, de cara a evitar los problemas que acarrea la convivencia entre la obra y las clases. La medida de protesta fue acordada curso por curso. Se permite el normal funcionamiento de la escuela primaria que funciona en el mismo edificio.

La secretaria de educación de la ciudad, Roxana Perazza, señaló en declaraciones radiales que "hay muchos problemas con la obra", pero aseguró que "no hay condiciones objetivas para que los chicos tomen una medida extrema". Asimismo, el gobierno dispuso ayer la aparición en escena de un "administrador de obra" que deberá "mediar entre la comunidad educativa y la empresa que tiene a cargo el proyecto, para solucionar sobre la marcha de la obra todos los percances". Las primeras conversaciones con este funcionario ya generó disgusto en padres y estudiantes. "No tiene ningúna facultad ejecutiva, es un títere que pusieron para dar la cara, hartos de nuestros planteos", señaló una estudiante.

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