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Desplazamiento Forzado en Colombia
Por Leandro E. Arteta Coronell -
Wednesday, Jun. 29, 2005 at 12:24 AM
leandrozqui@hotmail.com (Casilla de correo válida) ..,. ....
Las constantes infracciones del cese de hostilidades por los grupos paramilitares y los medios violentos utilizados por todos los grupos armados ilegales han convertido a Colombia en uno de los Países con la más alta cifra de violaciones a los Derechos Humanos.
Desplazamiento Forzado
en Colombia: país con la principal Crisis Humanitaria en América. Las constantes infracciones del cese de
hostilidades por los grupos paramilitares y los medios violentos utilizados por
todos los grupos armados ilegales han convertido a Colombia en uno de los
Países con la más alta cifra de
violaciones de Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario. Más de
Mil Ochocientos homicidios en la impunidad, perpetrados por paramilitares y 509
personas secuestradas en su poder y más
4.000 hectáreas de tierra en posesión de este grupo, demuestran la connivencia
de algunos funcionarios del Estado Colombiano con la Autodefensas. [if !vml][endif] Según
el informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos
Humanos y en la Declaración del Presidente de la Comisión de Derechos Humanos
de la ONU: los desplazamientos forzosos, las constantes infracciones sobre el cese
de las hostilidades por los grupos Paramilitares y el hecho de que los Grupos
Armados ilegales sigan recurriendo a medios violentos y cometiendo graves
ataques contra la población Civil, agresiones indiscriminadas, homicidios
selectivos, masacres, desapariciones, toma de rehenes, reclutamiento a menores
y actos violentos contra mujeres sindicalistas; líderes, comunitarios,
Campesinos etc., han llevado a Colombia a una gran crisis humanitaria y por
ende al detrimento de una considerable parte de la ciudadanía. El
Desplazamiento forzado es uno de los principales problemas que enfrenta
Colombia y que la ubica en el Tercer País del Mundo con este fenómeno y aunque
el Gobierno Nacional manifiesta que el Desplazamiento de Personas ha
disminuido, la realidad es otra y en el 2005 las cifras han aumentado considerablemente;
entre otras razones, debido a la Política de Seguridad Democrática y a la
posesión que tienen los Grupos Paramilitares en gran parte de los Municipios y
algunas Gobernaciones del País; posesión que va más allá de las Operaciones
Militares y se adentra en el poder Público, la política, en el sector comercial
y la expropiación de tierras a campesinos y pequeños productores. La
odisea o la cruz que vive el desplazado
es un cuenta gotas, arrastrando los días, cargando el tiempo, que poco a poco
va consumiendo las esperanzas, los sueños, el libre desarrollo social y civil,
su expresión cultura; en fin el deterioro de la vida como tal; el estar
desplazado del entorno propio de convivencia significa deambular; ir de una
Institución Estatal a otra y de otra a la calle; a esa calle de cemento gris e
inclemente, donde los ciudadanos se cruzan con indiferencia y se miran con
miedos… a nadie le interesa lo de otra gente y sus angustias. Actualmente
la Ciudad de Bogotá es un epicentro donde llegan desplazados de todas partes del País a causa de la
violencia, producto del conflicto interno que no quiere reconocer el Estado
Colombiano; estos desplazados por lo general se ubican en los Barrios marginados de la Capital;
Barrios como: el Santa fé, Patio Bonito, el Socorro;
la Localidad de Ciudad Bolívar; entre otros, donde están los niveles más altos
de delincuencia y de violencia urbana; Zonas manejadas por milicias de las
Autodefensas y otros grupos armados ilegales; es decir que algunos de los
desplazados, después de salir de la Zona de riesgo, se enfrenta a otra
situación, tal vez peor, debido a lo desconocido y el misterio de las ciudades;
pero lo más alarmante es que el Estado Colombiano no cuenta con una real estructura social que brinde soluciones oportunas y efectivas; es más ni siquiera
existe una respuesta rápida en cuanto a la
atención en las Entidades Públicas, ni mucho menos cuenta con
funcionarios capacitados, tanto en las normatividades, en la toma de
decisiones, como en una conciencia absoluta, ética y en el desarrollo de una
sensibilidad social, ante la problemática de desplazamiento forzado; para
ejemplo un botón: “La
política de la Defensoría del Pueblo en Bogotá,
que para atender o escuchar a una persona desplazada debe ser con cita previa ; es decir el ciudadano debe llamar por teléfono o ir
personalmente y solicitar una cita; la cual si tiene suerte, por lo general se
la conceden en un plazo de 15 a 25 días
y cuando el desplazado acude a dicha cita, no encuentra ninguna solución” .
Y no solo es la política de esta Institución, sino prácticamente de todas las
Entidades Públicas. La pregunta es: ¿sáben
estos funcionarios como sale de la zona de riesgo, una persona
desplazada por la violencia, con su familia a cuesta?... la respuesta es
sencilla, a veces solo con un morral, con dos camisas, uno o dos interiores y
un jeean que alcanzó a tomar a tiempo; el pasaje o tiquetes por lo general es
regalado por el compadre o familiar más cercano que comparte la pena y cuando
no existe este compadre o familiar, sale pidiendo chance o aventones de
carretera en carretera, sin tiempo para pensar en por menores; con el temor de
ser alcanzado por sus perseguidores e invadido por lo general de sentimientos
de duelos y por la perdida de todas sus pertenencia y proyectos de vida: ¿tiéne a caso el desplazado dinero, tiempo, paciencia y
tranquilidad para realizar una llamada, que siempre la secretario u operadora
de turno coloca en llamada de espera?, ¿tiéne el
desplazado recursos económicos y 15 o 25 días de vida y para esperar dicha
cita?. Nada
ha cambiado, el actual Gobierno Colombiano es un Estado de Derecha “Extremista”
que margina cada día más la sociedad y que indudablemente es permisible ante
los grupos ilegales armados, hoy con más influencia paramilitar. Leandro E. Arteta Coronell
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