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INTENTO DE SOBORNO A UNA CONCEJAL (EX INTEGRANTE DE I.U.)
Por reenvío, Leonardo Mir -
Friday, Oct. 07, 2005 at 10:00 AM
"Carmen, te ofrezco resolver tu vida, la de tu hija y la de 20 generaciones de tu familia" El pasado 12 de septiembre, Carmen Lobo, ex edil de Izquierda Unida cuyo voto precisaba el equipo municipal de Camas (Sevilla, España) para desbloquear sus proyectos -fundamentalmente urbanísticos-, fue citada en un bar por el empresario Eusebio Gaviño. La concejal ocultó una grabadora que registró 64 minutos de un diálogo en el que Gaviño le lanzó una oferta que creía irrechazable: "Resolver tu vida, la de tu hija y de 20 generaciones tuyas". El intermediario le garantizó más de 1,2 millones de euros a fin de año, un piso en la playa y un "regalo" [12.000 euros] que esa misma noche interceptó la policía. En la cita, cuya grabación se incorporó al sumario, Gaviño pide a la edil que apoye al alcalde, Agustín Pavón (también ex de IU), para que cuajen los proyectos del grupo empresarial que representa.
Eusebio Gaviño. Me
gusta que hayas hablado tan directo. Puedes resolver tu vida, la
de tus hijos, y la de 20 generaciones tuyas. Si mañana nos vemos,
verás qué gente tengo yo detrás. C.L. ¿Qué gente hay detrás? E.G. Empresarios. Pero si no lo haces tú, la próxima la
hace otra persona. C.L. Si, ya lo sé... que todos tenemos un precio, ¿no? E. G. Ahora te voy a hablar más claro. El tren
pasa una vez por la vida. Una sola vez. Bormujos [Sevilla] está
entero corrompido. Yo te puedo enseñar en mi casa papeles
notariales. Tú no sabes lo que se llevó el tránsfuga. ¿Qué ganas
tú? Tu porvenir y el de tu hija. Yo trato de abrirte los ojos.
Esto es un filón. Esto es oro, oro y oro. C. L. La corrupción la he visto pasar siempre tan de
lejos. No creí que me iba a coger tan de cerca. E. G. A todos nos llega la hora. A ti te ha llegado
ahora. Yo voy a lo mío. No sé si vienes a sacarme información.
Pero yo quiero hacer. Yo tengo unos señores que tienen unos
intereses ahí. Te estoy hablando claro. Y tenemos la oportunidad
de resolver nuestra vida para 20 generaciones, la tuya y la mía. C. L. ¿De qué se trataría? E. G. Tenemos que sacar plenos puntuales. Y de 'esto'
nos vamos a llevar tanto, y de 'esto' tanto. C. L. Pero, "tanto", ¿cuánto es? E. G. Pues 200, 400 millones de pesetas, 500 millones de
pesetas... C. L. ¿Por cada pleno? E. G. Tenemos que sentarnos tranquilos y que me digas
que vamos para delante... C. L. Pero mañana es el primer pleno que convocan. E. G. Mañana, no. C. L. [Ríe] ¿Te han convocado a ti al pleno? E. G. No, pero yo lo tengo todo, los presupuestos.... C. L. Pues es información reservada... E. G. ¡Esta gente te va a montar un negocio y no vas a
tener que trabajar más!. Y si no lo haces tú, lo hará otro. Yo no
sé a qué vienes tú, yo vengo a montar el mejor centro deportivo de
Andalucía. C. L. Total, en resumidas cuentas, serían 200 millones
de pesetas por cada pleno. E. G. No, 200, no. Nosotros te daríamos cada uno 200
millones de pesetas de aquí a final de año. Esto son las
menudencias. Que luego viene el millón de metros. Y tengo otra
cosa yo para ofrecerte: un piso en la playa, no a nombre tuyo,
sino de otra persona. Pero ya. No tienes ni idea de lo que se está
cociendo ahí. Y controlado por nosotros. Tú salvas a tu pueblo, y
te lo vas a llevar. Si tú fallas, falla todo. Pero me has hecho
una pregunta que es muy buena: "¿Eusebio, yo qué me llevo?". C. L. Me cuesta asimilarlo, porque yo siempre me lo he
llevado por mi trabajo. ¿Cómo sería la operación? E. G. Vamos a ir punto, por punto. Operación por
operación. ¿Cuánto hay aquí? Esto va a ir al pleno y esto vale
tanto. Nosotros vamos a hacer un equipo, Paco Gordo [amigo de
Lobo] tú y yo. Si yo te fallo en un pleno, al otro tú me dices:
"Eusebio, se acabó". Lo tienes tan fácil que lo ves muy difícil.
Yo te diré: hay que votar esto, y cuánto nos llevamos de esto. C. L. Bueno, y en caso de votar a favor en el pleno de
mañana, ¿cómo haríamos hoy? E. G. Esta noche lo hablaríamos en casa. Yo voy a
confiar en ti. Yo te doy algo, pero en el pleno de dentro de 15
días, tú te tienes que mantener firme conmigo. C. L. Pero si no me mantengo... E. G. A mí me cortan el cuello... Porque es en el pleno
que cogemos la pela, pero en este se te va a dar. No vayas a decir
luego, me voy para atrás. Vamos a muerte porque vamos a salir
beneficiados los dos. La llave la tienes tú. Yo no voy a fallar,
ni mi gente, pero si me fallas, estoy muerto. Porque el alcalde no
manda nada, ¿eh? La que tienes la llave eres tú, la del Grupo
Mixto. C. L. Bueno, pues tú dirás... E. G. ¿Nos vemos hoy a las diez? ¿En tu casa o en mi
casa? C. L. En un bar, en un sitio neutro. ¿Sabes donde está
la taberna medieval, en la calle Torneo de Sevilla? E. G. A las 22.30.Yo te voy a dar un regalo hoy. Y
hacemos equipo. Y ya empezamos. Te llevo papeles y cosas. C. L. ¿Qué tipo de papeles? E. G. Papeles de lo que se va a sacar 'a subasta', de lo
que se va vender.... C. L. Estará todo amañado para que se lo lleve.... E. G. Pero vamos a ver, si no se hace eso se lo va a
llevar un 'cantamañanas'. Si la cantidad que va para el pueblo es
igual. Si se amaña esto, ¿a quién se le está engañando? C. L. [Ríe] A los otros constructores... E. G. ¿A quién estamos engañando? C. L. A mí misma, ¿te parece poco? E. G. ¿Por qué? Una cosa es que engañes al pueblo y otra
cosa lo que tú vas a hacer. Al pueblo lo vas a poner en órbita,
que está parado... Se están yendo todos los empresarios a otros
pueblos; por ejemplo, con mi negocio, voy a montar 32 puestos de
trabajo. Y como yo, hay un montón de gente que quiere invertir en
Camas. Y no se puede invertir. Y tú vas a hacer y... si de camino
viene lo que viene, Mari Carmen... C. L. Y tantos millones de pesetas, ¿de dónde salen? E. G. De los empresarios. Tienen miles y miles de
millones. Me está pasando contigo lo mismo que con mi amigo Pepe,
cuando le decía "tú en las próximas no vas a salir, y con tu
hipoteca, y con tu coche...". Y tú Mari Carmen: un piso en la
playa y 100 millones en el banco. Éste vive en Zahara de los
Atunes. Y dinero, como mínimo, 200 o 300 millones de pesetas al
finalizar el año. Y luego me dirás, "Eusebio, chapó". Esto es así.
Tan fácil. C. L. No tienen más huevos que confiar en mí... E. G. Y ahora me dirás el problema de colocar esto [el
dinero], pues te lo solucionamos. El padre de la criatura te lo
ingresa en la cuenta corriente... C. L. No, en la cuenta corriente, no. En metálico, que
yo lo cuente. E. G. No, a ver si me entiendes: En la cuenta corriente,
o debajo de una piedra. Vamos a hacer un calendario de lo que
vamos a sacar y de lo que no vamos a sacar. No hay otra. C. L. Bueno, nos vemos esta noche. Si me rajo, te aviso. E. G. Si te echas para atrás, lo que sí te pido es que
lo que hemos hablado... de ti para mí, porque llevas unas
informaciones... muy delicadas. Hombre, delicadas... ¡Yo me he
abierto a ti! C. L. ¿Y esta gente qué se llevan? Agustín [Pavón],
Enrique [Fraile, ex edil del PP]... E. G. Yo sé lo que se va a llevar el equipo y punto. Lo
que se lleven, que se lo llevarán, se lo están llevando... Pero
vamos a triunfar, cada uno en nuestra familia. ¿Que dices que no?,
bueno, te he conocido, te he hablado de verdad, de verdad... La posterior cita de Carmen Lobo con el empresario Eusebio
Gaviño fue controlada por dos policías, verificaron en un lavabo
el contenido del sobre entregado con 12.000 euros. Luego vendrían
las detenciones de los tres ediles de Camas adelantada por
Andalucía 24 horas.
http://www.elpais.es/articulo/elpporesp/20051003elpepinac_13/Tes
En todos lados se cuecen habas
Por Rim Odranoel -
Friday, Oct. 07, 2005 at 10:02 AM
Y yo que creía que la corrupción existía solamente en los países atrasados...
Un caso de higiene (por si a alguien le importa)
Por jesus clavijo urbano -
Sunday, Oct. 09, 2005 at 12:26 AM
En el municipio sevillano de Camas, como mucha gente sabe, ha sido denunciado un intento de soborno a una concejala del Ayuntamiento. Se trataba de que una edil votara a favor hasta en cinco plenos de sendas recalificaciones urbanísticas en las que estaban interesados algunos empresarios y promotores inmobiliarios.
No me voy a extender en el asunto, al menos desde una vertiente informativa. Considero que, quien más o quien menos, maneja algunos datos de dominio público sobre este turbio asunto.
Y que es revelador, precisamente, en la vertiente opuesta a la generalmente convencionalizada: porque la actitud de esta concejala camera, Carmen Lobo, que perteneció en su día a Izquierda Unida, marca un punto de inflexión, de higiene democrática y de responsabilidad social que contrarresta la interesada -y no menos cierta en muchos casos, por desgracia- asociación política / corrupción, con el subsiguiente y también impertinente, descrédito, por sistema, del ejercio de la política. Y aún más y por concatenación: de la mera militancia política, como bien ha comentado José Luis Prieto.
El caso de Carmen Lobo, tan real como la vida misma, tan normal su vida como la de cualquiera de nosotros, tan de la calle y del supermercado, tan del bar y del cine, tan de la plaza y del parque, tan de su pueblo o barrio como nuestros pueblos o barrios y ciudades, honra el ejercicio de la representación política, por encima de espúreos y no espúreos intereses personales, por encima de presiones de los poderosos, por encima, sí como lo van a leer, por encima de amenazas de muerte.
Carmen Lobo ha mostrado una integridad personal loable, genuina como pocas, ha sido y es fuerte, y tiene como única bandera la transparencia política, por el bien de la política, de la democracia, y de los vecinos y vecinas de Camas a los que representa en el Ayuntamiento desde su silla de concejal:
-A Carmen Lobo, un intermediario promotor, le ofreció 12.000 euros en un sobre como adelanto por su supuesta contribución al tejemaneje urbanístico planeado en la localidad por eterminadas empresas promotoras.
-Camen Lobo cogió el sobre y en el servicio de una taberna medieval que, por cierto, bien conozco, puesto que la frecuento con los míos, de Sevilla capital, en concreto en la zona de Nuevo Torneo, se lo entregó a una mujer policía que, de incógnito, había seguido, en una mesa aledaña, las conversaciones de Lobo con este intermediario promotor. Lógicamente, Lobo había avisado a la policía con anterioridad.
-A Carmen Lobo, en anteriores y en ese mismo encuentro en el mencionado bar, el intermediario urbanístico le adelantó que, por cada voto a favor en el pleno -y eran cinco sesiones las que se iban a celebrar en el Ayuntamiento de Camas-, esta concejala iba a recibir, ¡nada más y nada menos que 1,2 millones de euros!, es decir, unos 200 millones de pesetas, lo que sumarían 1.000 millones de las antiguas pesetas cuando todo el entramado urbanístico se consumara por la vía de la aprobación plenaria.
-Carmen Lobo ha renunciado a 6 millones de euros. Insisto: a 6 millones de euros por la defensa de su integridad dignidad y compromiso personal y político con su querido pueblo de Camas.
-Ahora, ella está recibiendo amenazas de muerte. Y no como consecuencia del inicio de la instrucción judicial, en la que, por cierto, aparecen imputados otros dos concejales de Camas y el mismo alcalde, además del intermediario constructor, sino desde el día en que Carmen Lobo y, pese a lo que esperaban los ahora ya imputados, dio su voto negativo a dos puntos de reordenación urbanística en litigio en un pleno de Camas de mediados de septiembre.
-Fueron precisamente estas amenazas las que han hecho que la policía haya colocado una custodia personal a la concejala Carmen Lobo, quien, desafortunadamente, no puede salir libremente, no puede pasear libremente por su pueblo, otros pueblos o la misma Sevilla capital, sabiendo eso sí y, si no se lo digo yo, que su ejercicio de libetad fue infinito, que ella no fue soldado de nadie, que no obedeció instrucciones políticas de nadie y que ha puesto al descubierto a quienes, con su ejercicio político y/o su actividad económica se dedican a atentar contra los intereses de la ciudadanía para lucrarse y enriquecerse.
Gracias a Carmen Lobo, el delito ha salido al descubierto. Y, como dice Isabel Coixet en un suplemento de este fin de semana:
Uno necesita sentir que las personas que han hecho daño, van a pagarlo.
Otra vez y cien, mil y cien mil veces más, muchas gracias, Carmen.