Julio López
está desaparecido
hace 6429 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

LOS CAGADORES
Por Romulo Santos - Sunday, Oct. 23, 2005 at 11:27 PM

Como de aprovechan de los bolivianos los avivados dirigentes

LEAN ESTA DENUNCIA Y QUIEN LO HACE

Reducciòn a servidumbre en talleres de costura bolivianos : informe de la asamblea "Parque Avellaneda"
Fuente: http://www.labandaderolando.com
Fecha: 13 10 2005

En los barrios del sudoeste de la Capital (desde Flores a Liniers) existe una gran cantidad de talleres clandestinos donde los dueños se llevan fortunas mientras cientos de trabajadores son salvajemente explotados como si fueran esclavos y no se les reconoce ningún derecho laboral.

Por:Por:asambleaparqueavellaneda@hotmail.com
Y no nos referimos aquí a los pequeños talleres familiares que cuentan con una o dos máquinas y apenas obtienen ingresos de subsistencia, sino a talleres medianos y grandes con diez empleados como mínimo y maquinaria de última generación que producen diariamente volúmenes considerables de prendas para fabricantes. En la zona relevada que abarca Eva Perón, San Pedrito, Directorio y Lacarra hay aproximadamente 40 talleres clandestinos, a un promedio de uno o dos por manzana y la mayoría trabaja para fabricantes coreanos, argentinos, bolivianos o judíos instalados en comercios sobre la calle Avellaneda. Una simple recorrida por la zona comercial de esa avenida nos permitirá encontrar carteles que dicen «Se necesita tallerista», eufemismo para establecer el contacto con el fabricante. Por supuesto, fabricantes también pagan su sistema de peaje a la comisaría respectiva.

En este tipo de talleres los dueños no pagan aguinaldo, jubilación, obra social, escolaridad, vacaciones, ni indemnizaciones y obligan a sus obreros a trabajar con prácticas esclavistas similares a la de los inicios del capitalismo.

La mayoría de los empleados de estos talleres no tienen documentos argentinos y fueron traídos desde países limítrofes (mayoritariamente de Bolivia) con falsas promesas de trabajo estable y salarios en dólares. Muchos suponen que harán mucho dinero en una breve temporada de estadía y por eso no se preocupan por la documentación. Mediante avisos radiales y en diarios de Bolivia se enteran de las «ofertas laborales» en la Argentina. Quienes los contratan allí les pagan el pasaje , que luego le cobran aquí descontándolo de su trabajo. Se los suele traer en grupos de 6 o 7, preferentemente solos. Quien va a buscarlos es el propio dueño del taller en la Argentina o algún familiar directo vinculado a él.

La realidad cuando llegan acá es muy diferente de la que les contaron allá: deben trabajar en jornadas que van desde las 6 u 8 de la mañana hasta las 24 o 01 de la madrugada con cuatro pequeños intervalos para desayunar, almorzar, merendar y cenar. Cobran un porcentaje de las ventas (30 a 40 %) lo que les da un promedio salarial de $400. Menos de la mitad del salario de convenio (fijado en aproximadamente $ 1000) por jornadas laborales que duplican la normal. Duermen en los propios talleres en pequeñas piezas hechas con tabiques o camas marineras. Solamente salen los domingos en la franja horaria de 10 a 19 hs aproximadamente. Algunos participan de campeonatos de fútbol, por ejemplo, muy numerosos en el Polideportivo de Pque Avellaneda, que suelen ser organizados por los propios dueños que también estimulan el consumo de alcohol durante lo que resta de la única jornada de «descanso», cuestión de que no se les ocurra a los empleados por un minuto pensar en el infierno en que están metidos. En muchos casos los llevan en traffic o autos al Parque y luego los pasan a buscar a determinado horario para que regresen al taller. La comida de los talleres es muy precaria: algunas verduras y mucho arroz, fideos, pan, te y matecocido. Se les suele descontar de su magro salario en algunos casos también el uso de las piezas a $ 100 o $ 200.

Cuando hay quejas de los empleados, se los suele amenazar con la policia. Se les dice que no tienen ningún derecho en la Argentina, que nadie hará nada por ellos y que si molestan el propio dueño llamará a la policia. Agentes de policía pasan mensualmente por estos talleres a cobrar «peaje» que oscila según diversos testimonios en cuotas de $ 500 a $ 1000 pesos. También suele haber porcentajes o cuotas aparte para miembros del sindicato de obreros del vestido, aunque esto suele ser más esporádicamente. La mayoría de las coimas se las lleva la comisaría. Es frecuente también que cuando llegan inspectores, la mayoría de los empleados sea escondida y se aduzca que son familiares. Cabe señalar que la fachada externa de estos talleres es una casa común, aparentemente familiar.

Cada dos o tres años suelen mudarse, presumiblemente al término del contrato de alquiler. Existen inmobiliarias que saben perfectamente cuál es el destino de la locación y cobran una precio «diferencial» por el «riesgo». Las garantías son obviamente compradas y existen grupos de paisanos que las publicitan a menudo por los medios de la colectividad.

Cuando los empleados se hartan de la superexplotación y se vuelven «quejosos», algo que ocurre ciclicamente cada cuatro o seis meses, los patrones los echan a la calle sin dinero y sin documentos y van a Bolivia a buscar una nueva camada. Abusando de la absoluta precariedad de sus ex empleados, los patrones suelen quedarse con el dinero correspondiente al último período trabajado, una queja frecuente de quienes son expulsados de estos talleres.

La paga suele ser semanal, quincenal, mensual y hasta anual, si les pagan, porque se conocen muchos casos en que luego de haber sido superexplotados algunos meses, luego los echaron sin pagarles un centavo.

LOS GUSTAVOS TANTO VERA COMO MORON NO LEEN ESTA OTRA DENUNCIA Y CON LA MISMA GENTE



Acusaciones cruzadas en Parque Avellaneda

Un grupo de 30 mujeres, que se separó del comedor de La Alameda de Parque Avellaneda, organizó un festival. Investigamos los motivos de la discordia, las partes expusieron su posición.
Al primer festival organizado por las madres de la agrupación “Bolivia Argentina de Pie”, se acercaron el Grupo Siwara, Grupo Proyecto Illampu, Grupo Mallku Katari, Grupo Chasqui Wayra y Wayna Marka, representantes del Centro Cultural Teófilo López y el solista Alfredo Mamani.
El grupo que se separó del comedor “Asamblea 20 de Diciembre” denunció haber sido echado del comedor por Gustavo Vera. Ahondamos en el por qué de la ruptura.
Entrevistamos a Ivon Vega y a Juana Flores, dos de las integrantes del grupo que se apartó y también al representante de la Alameda.
Ivon Vega nos contaba que hace tres años, cuando vino de Bolivia con su hijo, llegó al comedor de Directorio y Lacarra y recibió “mucha ayuda a cambio de trabajar las 24hs., debía ayudar a cocinar y limpiar, que eso está bien. No me molesta. Lo que me molestó fue la presión, nos presionaban a estar ahí todo el día porque ese lugar donde funciona el comedor es un lugar ‘copado’ (queriendo decir: tomado), y si la policía no veía gente los iban a desalojar.”
- ¿Quién los presionaba?
-Gustavo Vera, él presionaba a la gente a estar todo el día ahí y a ir a las marchas que hacía. Nos prometieron incluirnos en un proyecto para pedir dinero al extranjero para comprar máquinas de coser, nos hicieron firmar unos papeles y nos sacaron fotos trabajando, mintiéndonos que el señor Pérez Esquivel, el que es Premio Nóbel de la Paz, garantizaba el proyecto para nosotros. El dinero llegó pero no para nosotros, sólo lo aprovecharon ellos.
Ivon nos dijo que Pérez Esquivel los había ayudado o mediado en algunas cosas, pero era mentira que él les garantizara recibir el dinero, el cual “aprovecharon Gustavo Vera y su gente”. “Simulando consensos fueron echando hasta 30 familias, decía que por votación decidieron que tal o cual persona no debía estar más y por miedo a que les saquen la comida los otros levantaban la mano”.
-¿Por qué los echaba, qué explicación les daba?
-Ninguna, pero no le gustó que le cuestionemos cosas. El que se quejaba sabía que lo iban a echar. Pero como nosotros ya entendíamos el manejo de las cosas, no le gustaba, no le gustaba que sepamos tanto y que sepamos que recibió el dinero del proyecto.
-¿En qué momento decidieron organizarse y quiénes?
-Hace un año más o menos es que nos estamos reuniendo y somos treinta familias ahora, algunas se fueron enterando y se fueron sumando. Las mujeres decidimos organizarnos porque algunas estamos solas y otras tienen a sus maridos desocupados y fue gracias al señor Omar Reta del FREVESO (Frente Solidario Vecinal), del centro de jubilados, quien nos brindó un espacio para reunirnos y hoy nos facilitó las mesas y las sillas.
Juana Flores en vísperas de dar a luz su quinto hijo, con un esposo asmático que trabaja en costura y por temporadas, nos contaba que Gustavo Vera “también la había echado del comedor, no les permitía el ingreso, así como a su compañera de ocho hijos. Hemos pasado casi toda la noche cocinando, pero va a ser para nosotros.” Entre risas aducía a su delicado estado, sus ojos que manifestaban el cansancio y el dolor físico, pero aún resplandecía una esperanza.
-¿Qué van a hacer con el dinero que recauden hoy Juana?
-Lo vamos a dividir entre todas las familias, porque hay gente que no tiene nada, a veces no tenemos trabajo y esto va a ser una ayuda. Yo le voy a poder comprar ropita a mi bebé, los pañales, será para mis hijos y los remedios de mi marido.
Hablamos con Gustavo Vera quien nos comentó que “él no echó a Ivón Vega Mendoza sino que ella y la señora Ovieda Pacasi se fueron solas, y tienen una denuncia penal por calumnias y falsificación de presupuesto de hoteles. Ambas tienen talleres clandestinos, y por la producción que sacan a diario tienen trabajando mucha gente”.
-¿Para qué falsificaban los presupuestos de hoteles?
-Para presentarlos ante Promoción Social y la gente consiga los subsidios de emergencia habitacional, que son de $300 y se renueva cada 3 meses, pero para hacer eso Ivon Vega le pedía entre $30 y $40 a la gente. Y ahora están con Omar Reta que les consigue planes sociales y bolsones porque se postulaba como Director de Parque Avellaneda, quien hace unos años quedó muy mal parado porque fue el promotor de sacar a la colectividad que se asentaba en el Parque. Está claro que hay intereses políticos de por medio, pero ¿por qué el afán de perjudicarlo a usted?
-Porque nosotros, como organización social y solidaria, queremos defender los derechos de la gente que está siendo explotada en los talleres clandestinos que tienen entre 30 y 40 personas trabajando y queremos erradicar el tráfico de bolivianos. Para eso estamos preparando un trabajo de mucha investigación para presentarlo ante la Defensoría del Pueblo, porque los explotadores son argentinos, coreanos y bolivianos. Lo sabemos por gente que llegan acá a pedir ayuda y nos cuenta. Y van a caer muchos en la volteada, hay muchos intereses de por medio, los talleristas son auspiciantes de programas de radio y ahora a Hugo Arnés no le conviene eso,
¿Por qué antes tenían al Comedor de la Asamblea 20 de Diciembre en alta estima y ahora nos quieren hundir?
Porque no le conviene perder los auspiciantes. Nosotros apuntamos a los grandes talleristas que se dedican a explotar no a los que trabajan como rama de taller familiar y conseguimos que en un taller tengan un delegado y cobren un sueldo digno con un jornal de ocho horas de trabajo, aguinaldo y vacaciones”.
-¿Es cierto que usted recibió un dinero de un proyecto destinado a comprar máquinas de coser?
-Nosotros recibimos el dinero, pero no era para comprarle maquinas de coser a la gente ni para dárselos a ellos, teníamos una maquinas de coser que nos donaron hace tiempo, y en el 2003 recibimos $5.000 de Francia por el señor León Herman de Desarrollo Social con lo cual hicimos arreglos en el techo, colocamos membrana y se compró parte de la maquinaria que hoy sirve para hacer impresiones. Acá trabajamos todos, todos lavamos, limpiamos y hacemos todo, nos rotamos el trabajo y no obligamos a nadie a hacer marchas ni piquetes porque no hacemos ninguna campaña política. Sí, una vez fuimos a apoyar para no permitir la entrada de Bush a la Argentina, pero fue el que quiso, no se obligó a nadie.
Amparo Bellot DIARIO RENACER

CAGADORES SE APROVECHAN

agrega un comentario