Julio López
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El ALCA, los funerales y los partos
Por reenvío lavaca.org - Friday, Nov. 11, 2005 at 9:18 AM

Finalizó la Cumbre de las Américas, con un patético desencuentro entre presidentes americanos. Finalizó también la Cumbre de los Pueblos con un documento, con el acto del renacido sector transversal del oficialismo (con el agregado de Diego Maradona, y el presidente venezolano Hugo Chávez como orador principal) y, por otro lado, grupos programados para ir al choque con todos los chichés mediáticos del caso, que provocaron una remanida e indiscriminada represión policial. La encarnizada batalla entre las consignas y la realidad.




La jornada que culminó con la minuciosa realización del programa anunciado a lavaca por un muchacho disfrazado de piquetero (“ya coordinamos con las organizaciones para que se vayan, y a los 20 minutos pudrimos todo. Si no pasamos las vallas vamos a romper vidrieras”, dijo con la certeza de quien tiene todo bajo control) había empezado bastante antes.
Fue también la jornada en la que el presidente venezolano Hugo Chávez anunció con entusiasmo el entierro del ALCA, propuso el próximo entierro del capitalismo y el parto del que llamó “socialismo del siglo XXI” a condición del logro de la unidad en la lucha (mientras varios de los kirchneristas presentes, debe decirse, ignoraban tal programa de acción).

La ciudad de Mar del Plata se convirtió durante varias semanas en un lugar partido al medio, con pasaportes internos para los vecinos, miles de policías en alerta, servicios de inteligencia, integrantes de la CIA, submarinos surcando las costas, escudos antiaéreos, paranoias frondosas, millones de dólares despilfarrados y expectativas estériles alrededor de la Cumbre de las Américas, encuentro o desencuentro de un conjunto de presidentes americanos cuya utilidad es un enigma del cual tal vez alguien, alguna vez, logre desentrañar.
(Ninguna de estas prevenciones impidió que a agentes de la CIA les robaran el auto que apareció desarmado con la característica eficiencia de los cacos criollos, ni que ochenta policías amanecieran intoxicados no por acción de terroristas bacteriológicos, sino por lasañas en mal estado).
Una respuesta a la reunión fue la Cumbre de los Pueblos, que tuvo como principal promotor al Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, y a diversas organizaciones sociales de todo el continente. Allí se concretaron talleres, diálogos y denuncias con relación al cúmulo de crímenes e injusticias que sufre la región, y se elaboró un documento que refleja la posición de quienes fueron a trabajar.
A esas actividades se sumó una más inesperada. Algunos dirigentes del kirchnerismo “transversal” (esto es: dirigentes que apoyan al gobierno por fuera del aparato partidario justicialista, intentando reemplazarlo) convocaron a lo que llamaron “El tren del Alba”. El Alba (Alternativa Bolivariana para América Latina) es el programa de acción del venezolano Hugo Chávez.
Pero la idea del tren contó además con el apoyo entusiasta de Fidel Castro. Castro, entrevistado por el renacido Diego Maradona en su programa de televisión, logró que el ex futbolista saliera de Cuba anunciando su participación en el tren y en el acto marplatense. El efecto mediático fue instantáneo, y la cuestión del ALCA pasó a formar parte de la agenda de programas y medios hipnotizados por la presencia de Maradona en el tren.
Los organizadores del viaje vieron llover sobre sus cabezas los pedidos de ser incluidos. Los grandes medios, que no hubieran viajado con Bonasso ni cobrando, se peleban ahora por estar en el lugar del hecho. Maradona tiene entre sus defectos el de no ser divisible, por lo cual hubo una cantidad de enojos de las personalidades viajeras (actrices, actores, músicos, dirigentes, funcionarios estatales) que no pudieron permanecer con él tanto como lo esperaban.
El tren partió a medianoche desde Buenos Aires, y tal vez lo más conmovedor fue ver cómo en las estaciones había cientos de personas que soportaron la madrugada para saludarlo. El tren llegó al alba, poco después de las 6.30 de la mañana. El descontrol que había impedido en Buenos Aires oficiar una conferencia de prensa, se reprodujo en Mar del Plata. Los custodios contratados para la ocasión por el PRD (Partido para la Revolución Democrática, que lidera el ex periodista Miguel Bonasso) hicieron gala de una prepotencia levemente absurda. Maradona prefirió abandonar el proyecto de marchar por la ciudad con semejante compañía, y se esfumó de la zona.
Por la Ruta 2 también buscaban Mar del Plata cientos y cientos de colectivos y combis, cargados de militantes de sindicatos y movimientos sociales, organizaciones no gubernamentales e incluso funcionarios públicos (los viernes, se sabe, las actividades de la administración pública se hacen un tanto fantasmales, por lo cual no hay que temer que el faltazo haya provocado una hecatombe en el Estado nacional).

En Mar del Plata había un clima hostil: frío oceánico. Los que bajaban de los trenes y las combis comenzaron a reunirse en Luro e Independencia con una doble vibración: la expectativa por la marcha, y la provocada por los dos grados de sensación térmica y el viento marino.
La Federación Tierra y Vivienda fue la primera en desplegar una bandera asombrosa en la que se ven los rostros de Fidel Castro, Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Lula, y Tabaré Vázquez.
El propio Luis D’Elía hizo su reaparición poselectoral ante los micrófonos: “Acá estamos para rechazar a Bush, su política, la guerra, la invasión y rechazamos al ALCA que no es un proyecto de integración de los pueblos sino de adhesión colonialista. Ellos nos tiran con el miedo, pero acá estamos nosotros con alegría, esperanza, convicción, y con el Diego”. D’Elía recordó al escritor Osvaldo Soriano: “El gordo diría: che, ¿no estaremos apoliyando? Porque todo esto parece un sueño, que tanta fuerza y diversidad se junten contra la muerte”.

Bonasso se puso al frente de su columna, junto a otros viajeros del tren del Alba como el padre Luis Farinello, la señora María Lubertino (uno de los records de candidatos menos votados en las últimas elecciones), Vilma Ripoll, el metalúrgico y legislador Francisco “Barba” Gutiérrez. Se sumó Hebe de Bonafini junto a varias de las madres. Los custodios empezaron a patear tobillos y empujar a la gente y a los periodistas (si ocurrió con estos manifestantes, es fácil imaginar qué hubiera sido de la escena con Diego Maradona).
Unas cuadras más adelante, por Independencia, se armó una discusión un tanto densa entre representantes de la cabeza de la columna y personas que salieron a cruzarlos. Se trataba de quienes recriminaban a todo este grupo ferroviario el querer copar un protagonismo que no se ganaron trabajando en la Cumbre de los Pueblos. En ese momento, unos 20 metros adelante se instalaron justamente los referentes de la Cumbre, y así la marcha quedó encabezada, en primera línea, por Adolfo Pérez Esquivel y Nora Cortiñas (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora). Estaban también dirigentes como Patricio Echegaray (Partido Comunista), el economista Claudio Lozano y el presidente del Banco Credicoop, Carlos Heller. El grupo de madres con Hebe de Bonafini a la cabeza, se retiró, aunque reaparecería luego en el estadio mundialista.
Consigna de la nueva primera línea de la marcha: “La cumbre es de los pueblos, y no de los gobiernos”, cosa que en el de atrás no se cantaba.

Sobre el debate por quién encabezaba la marcha el economista Claudio Lozano dijo a lavaca:
-Es un disparate, un desatino, que supone no privilegiar el objetivo principal que es decirle no a Bush. Y plantear que se puede construir otra cosa.
-¿Cómo hacer para construir, y que estos encuentros no sean un formulismo, una expresión de deseos?
-Esto se nutre de movimientos sociales que estuvieron en la base de la reacción popular contra el neoliberalismo, que generó incluso los cambios a nivel de gobierno en muchos países de la región. Estados Unidos planteaba que en el 2005 tenía que estar acordado el ALCA para funcionar desde 2006. Que esto no ocurra es un reflejo objetivo de un nivel de crecimiento y de toma de conciencia. No quiere decir que haya que dormirse en los laureles. Estados Unidos revisó su estrategia, y ahora trata de penetrar con acuerdos bilaterales. Es una versión del ALCA, pero uno por uno. Creo que a los países con mayor capacidad para discutir, por sus recursos y estructura, como es la Argentina, les corresponde lograr que la región se pare en otro lugar para discutir su inserción en el mundo.
-¿Le parece que el ALBA, la propuesta de Chávez, es una alternativa?
-Es un camino de construcción inspirado en las ventajas de cada país, una complementariedad. Venezuela provee petróleo, Cuba paga con educadores y médicos que mejoran sustantivamente la situación del pueblo venezolano. No hay dinero, hay intercambio de potencialidad.
-Aquí se canta que la cumbre es de los pueblos, no de los gobiernos. ¿Qué opina del gobierno argentino?
-Para mí expresa toda la potencialidad y toda la limitación de la experiencia política argentina. Es resultado de las movilizaciones del 2001 y 2002 que cuestionaron la salida neoliberal, pero al mismo tiempo tiene el límite de que no se ha construido una fuerza política con capacidad de transformar. Mucho de lo que hoy aparece como estructura de soporte del presidente Kirchner tiene que ver con los mismos intereses económicos y políticos que construyeron la decadencia de país. Ese es objetivamente el límite. Por eso este gobierno tiene profundas contradicciones. Ahora: la discusión no es solamente qué hace el gobierno, sino qué capacidad tenemos nosotros de construir esa fuerza política.
-¿Estos foros sirven?
-Creo que sí, pero no alcanza ya a esta altura con el intercambio de debates y consignas, hay que discutir las estrategias de poder concretas que tienen nuestras organizaciones, y saltar del intercambio a la accón común. Pero es muy difícil construir acciones comunes.
-Lo veíamos con lo de la marcha. Pero ¿es posible una unidad, a partir de la diversidad?
-La diversidad para mí es una condición de la unidad. Pero sin unidad nadie se va a sentir fuerte como para encarar transformaciones reales.
En estos encuentros se ve que hay muchos trabajando en la misma dirección y esto tiene un impacto porque desmiente el escenario construido por los medios de comunicación, en el que supuestamente estamos todos solos y fragmentados. La unidad es lo que construye la potencia para la intervención popular en la política.

En una esquina un grupo de actores callejeros vestidos de negro, con fusiles de cartón de cuyos cañones surgía un letero que decía ¡pum! se definían como “jóvenes erroristas” y una ong repartía preservativos proporcionados por el Ministerio de Salud.
Carlos Heller conversó con lavaca
-¿Cómo hacer para que las consignas terminen siendo transformaciones concretas?
-Se puede, pero se requiere mucha masa crítica.
-¿En lo numérico?
-Sí, lógico. En el Foro de Porto Alegre decíamos que otro mundo es posible, si la gente quisiera. Entonces hay que generar voluntad masiva para la alternativa y el cambio. Estas movilizaciones tienen el valor de llamar la atención sobre la venida de Bush, la discusión del ALCA.
-Bush tiene una virtud unificadora. En contra.
-Se lo merece ¿no?
-¿Pero no es una debilidad? No sé si muchos de los que están aquí podrían reunirse, salvo por estar contra Bush.
-No es una cuestión de personas. Si no fuera Bush sería otro en su lugar. Esto tiene que ver con las políticas dominantes que el imperio y los países centrales imponen a los periféricos. Por supuesto que Bush le da una impronta particular, con su veta belicista.

La marcha por Independencia ocupó unas 15 cuadras y se vio castigada por la lluvia, como para bajar un poco más la sensación térmica. Los mejor pertrechados parecían los 300 cubanos que llegaron a Mar del Plata una semana atrás, con unas camperas Adidas blancas y rojas que los protegían y los uniformaban como delegación. Jorge Pérez, promotor cultural, iba incubando un incipiente resfrío. Con lavaca, charlando bajo la lluvia:
-Estamos en un momento muy peligroso, de instalación del fascismo en los Estados Unidos. América Latina tiene que integrarse bajo un proyecto diferente que no sea el del ALCA o el del neoliberalimso, que en definitiva ha fallado en todo el continente dejando muchísima desigualdad social.
-¿Creen que el ALBA que propone Chávez es una alternativa?
-Lo vemos como la alternativa pensada por nuestros próceres como Martí, Bolívar y el propio San Martín. Ellos tuvieron la visión hace dos siglos sobre lo que se venía como peligro. Hoy es mucho más visible. Y tenemos la oportunidad de una alternativa que no existía hace una década, cuando el neoliberalismo estaba en pleno poder.
-¿Cómo está la situción en Cuba?
-Bien, resistimos.
-¿La vida cotidiana, la falta de recursos?
-Mira, lo vamos superando, y siempre nuestro pueblo es muy enérgico y está acostumbrado a vivir bajo el bloqueo de más de 40 años. Es un pueblo de mucha resistencia.
-Un tema eterno: la edad de Fidel. ¿Cómo lo ven?
-Lo vemos como alguien que debería estar toda la vida. Y alguien que ha dedicado mucho esfuerzo a preparar su relevo, y a que su obra continúe.
-O sea que no hay una incertidumbre con respecto al momento en que ya no esté.
-No. Sería negar todo lo que hemos hecho en todos estos años.

Siguió la marcha. Un fotógrafo hacía el siguiente análisis de situación: “Esta es la marcha que quería el gobierno, concentrando la atención y el descontento en el estadio, lejos de la cumbre. Ni policía pusieron, de tranquilos que están”.
La llegada al estadio mundialista provocó algunos dilemas sobre qué lugar debía ocupar cada una de las aproximadamente 30.000 personas que estaban allí, entre tribunas y campo. En la entrada para periodistas había varias personas que no tenían acreditación, pese a que visiblemente eran funcionarios, dirigentes, etc. Haciendo gala del título de luchador que más de uno se confiere a sí mismo, enfrentaron a los encargados de seguridad mostrándoles toda clase de credenciales y mencionando influencias, hasta que las puertas se abrieron para todos.
Las tribunas comenzaron a poblarse, y también las plateas. Una popular fue ocupada principalmente por Barrios de Pie. Curiosidad: allí, y no en el palco, estaba su máximo dirigente y funcionario oficial, Jorge Ceballos. En el palco, en cambio, se enseñoreaba Luis D’Elía, un adversario eterno de Ceballos. Las banderas de la FTV de D’Elía se instalaron en la tribuna contraria, junto a las de Partido para la Revolución Democrática de Miguel Bonasso.
El grupo que venía a la cabeza de la marcha, excepción hecha de Pérez Esquivel, se instaló en la platea opuesta al palco, donde quedaron acompañando a D’Elía, Bonasso, Hebe de Bonafini y, un rato más tarde, los ovacionados Diego Maradona y Hugo Chávez. Bajo el escenario se repetía la iconografía que mencionó el cubano Pérez: Bolívar, San Martín y José Martí. Por encima, una gran bandera con el rostro de Ernesto Che Guevara.
Lectura de las infinitas banderas: Uom Quilmes, PDR Quilmes, Montoneros, Movimiento Popular Auténtico, Barrios de pie, Gracias Presidente, Astrillero Río Santiago, Fuera Bush de la Argentina-Polo Social, Bush – Genocida – Hitler, Movimiento Territorial de Liberación, MST, Partido Comunista, CTA, MTD Evita, Frente Transversal Nacional y Popular, Corriente Progresista de la Juventud Radical, Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, Juventud Socialista, Frente Popular Darío Santillán, entre muchos otros.
En el sector de prensa se comentaba sobre “la otra” marcha, la programada para más tarde. Un acreditado dijo: “Tengo entendido que ya arreglaron con los organizadores de este acto, para no superponerse”. Un corresponsal llegado desde Mendoza explicaba su asombro: “Los fotógrafos tienen máscaras, porque ya les avisaron que va a haber gases”.
Sobrevolaban el lugar algunos globos y también los preservativos que se habían repartido, convenientemente inflados. Un grupo cantó “Hasta siempre comandante”, bella balada dedicada al Che Guevara, y se lanzaron panfletos del Frente para la Victoria. Llevaban la firma de Barba Gutiérrez. Algunos conceptos que tal vez expresen el pensamiento de muchos de los que estaban en el acto
- “El Frente para la Victoria liderado por el Presidente Kirchner tiene el mandato pleno de la sociedad y somos la generación sobreviviente (se refiere a la generación de los setenta) la que tiene la segunda oportunidad que le fuera negada por la Dictadura militar”.
-“Para dar vuelta la taba y reconstruir el Rol del Estado es que convocamos a la Organización de una sola estructura d todas las militancias nacionales, populares y revolucionarias para que el Frente para la Victoria profundice la esperanza del pueblo. Una sola Organización que con liderazgo colectivo sea la cadena de transmisión entre el pueblo y el jefe Político de la Nación, Cro.Kirchner. Como dijo el Che no saber construir la unidad será “pecado de lesa dirigencia”. Como dijo Perón: sólo la organización vence al tiempo”.

El lenguaje puede retrotraer al pasado, como la iconografía. También ocurrió con la música. El principal intérprete invitado fue el cubano Silvio Rodríguez, muy aplaudido. Cantó un par de temas un tanto melancólicos, que tuvieron un efecto aletargante sobre la multitud. Chávez ya estaba derrochando gestos en el escenario, y escuchó una canción con la mejilla apoyada en la de su hija. Maradona miraba serio. Sin contar a la hija adolescente de Chávez, Maradona era –lejos- el más joven en esa zona del estadio (45 años) aventajando al propio presidente venezolano (51). Para otro tema musical fue invitado especialmente el cantautor uruguayo Daniel Viglietti, totalmente vestido de negro, quien entonó “A desalambrar”, compuesta en 1967. Los más viejos escuchaban con nostalgia. Los jóvenes, con curiosidad. Luego Rodríguez llamó a Víctor Heredia. La canción del cubano era un poco intrincada, llovía, y el público empezó a impacientarse: “Chávez, Chavez”, gritaron en la platea, con lo cual los trovadores optaron por irse con la música a otra parte, sabia decisión sumamente aplaudida por la concurrencia.
Hebe de Bonafini realizó una fugaz intervención de agradecimiento, postulando que el ALCA ya fue derrotado y agradeciendo en nombre de los 30.000 desaparecidos.
Luego Chávez levantó al público con su intervención que inició enviando “un abrazo bolivariano, un abrazo sanmartiniano, un abrazo guevarista, un abrazo peronista, un abrazo evista: que viva Eva Perón”.
Por momentos el suyo fue un discurso y por momentos, una especie de charla entre amigos, en la que se incluso se atrevió a saltar (“el que no salta es un inglés” y “el que no salta, no existe más”, dedicada al ALCA) planteando que su dificultad es que está un poco gordo. “Voy a proponer estos saltos en Venezuela. Son buenos para el físico, y para la moral”. También saludó a Pérez Esquivel cantando un tango célebre con letra cambiada: “Hola muchachos, compañeros de mi vida”. Contó que Fidel Castro lo había llamado cuando entraba al estadio y se despidió diciéndole: “Viva el Che, carajo”.
Llamó a Maradona al micrófono. Diego le dijo a las tribunas: “Los quiero mucho, gracias por estar. Echemos a Bush”. Chávez elogió a Maradona: “Tremenda entrevista le hiciste a Fidel Castro”. Como llovía, Chávez contó que la ecuatoriana Blanca Chancoso, una de las referentes de la Cumbre de los Pueblos, le había dicho que para alejar la lluvia, hay que soplar tres veces para arriba. Chávez lo hizo. Blanca lo aplaudió. Debe decirse que a los pocos minutos paró de llover, y el discurso terminó a pleno sol. La gente de la FTV de todos modos ya se había ido por la lluvia, como dando por cumplida la tarea encomendada y dejando raleada la tribuna. Los de Barrios de Pie en cambio volvieron. Cuando entre los agradecimientos Chávez nombró a D’Elía, la silbatina en el estadio fue estruendosa pero el venezolano, con reflejos, nombró enseguida a Hebe de Bonafini y pidió un aplauso para todas las Madres de Plaza de Mayo. En otro momento anunció que va a jugar un partido de fútbol contra el equipo de Fidel: “pero tú juegas para mí”, le dijo a Maradona.
Definiciones del discurso:
-“Cada uno trajo aquí una pala. Una pala de enterrador porque aquí, en Mar del Plata, está la tumba del ALCA. Los pueblos de América enterramos al ALCA”.
-“Pero además, tenemos que ser los enterradores, no sólo del ALCA, sino enterradores y en mucha mayor dimensión, complejidad y profundidad del modelo capitalista neoliberal que desde Washington arremete contra nuestros pueblos”.
-“Vamos a enterrar el ALCA y el modelo económico imperialista y capitalista, por una parte. Pero por otra, nos toca ser parteros de la nueva historia, la nueva integración y el ALBA, la Alternativa Bolivariana, una nueva integración liberadora para la libertad, la igualdad, la justicia y la paz. Solo unidos podremos hacerlo”.
-“Tenemos un doble proyecto histórico. Además de enterrar al capitalismo, vamos a parir el socialismo del siglo XXI. Un nuevo proyecto histórico socialista que una a los pueblos de Latinoamérica”.
-Citó a Rosa Luxemburgo por la frase “socialismo o barbarie”, y relacionó la idea con la que plantea el norteamericano Noam Chomsky (recomendó fervientemente leerlo) en su libro “Hegemonía o superviviencia”. Dijo Chávez: “Chomsky me llamó la atención porque habla de dos superpotencias. Una amenaza destruir al mundo, Estados Unidos. La otra que está naciendo, no es la Unión Soviética, ni ningún territorio o grupo de países. No, la que puede salvar al mundo, dice, es la opinión pública, la opinión movilizada, consciente. Le toca a los pueblos, entonces salvar la vida del planeta, que está amenazada por el capitalismo”.
-Planteó que la construcción de lo que llama socialismo del siglo XXI “es impulso político, moral, ético ideológico, pero se trata de mucho más, se trata de salvar la vida de este planeta porque el modelo capitalista y consumista está acabando con el planeta Tierra y, que se sepa, no tenemos ningún planeta cercano al cual emigrar”. Aclaró que apenas hay vestigios de que existió vida en Marte. “Se ve que allí estuvieron el FMI, el Banco Mundial, el consenso de Washington y acabaron con la vida en ese planeta”.
-Se reivindicó como cristiano y creyente. “Judas Iscariote fue el primer capitalista de esta era, que vendió a Jesús por unas monedas. Y el primer gran socialista se llamó Jesús el redentor, el nazareno crucificado que vino a anunciar el reino de la igualdad, la justicia y la paz”dijo entre aplausos.
-Planteó que una clave del futuro es la cultura, recordando al cubano José Martí: “Ser cultos, para ser libres”. A la inversa citó a Bolívar, cuando planteó que un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción.
-Dijo que para la destrucción del imperialismo y el capitalismo también hay que contar con el pueblo norteamericano, con el espíritu de líderes como Martin Luther King y Malcolm X.
-Al hablar de los efectos de las privatizaciones en la Argentina, la gente comenzó a insultar a Carlos Menem y a su señora madre. Chávez replicó: “Él dijo que soy un demagogo que engañó al pueblo venezolano y no sé cuántas cosas más. No me gusta meterme con nadie, pero él se metió conmigo, y entonces desde Mar del Plata le digo: entreguista, cipayo y bastardo”.
-Recordó que tras el Consenso de Washington “las élites de estas repúblicas se arrodillaron frente al imperio”.
-Dijo que frente a las teorías del fin del socialismo y el fin de las ideologías, lo que habría que pensar es que “la ideología no estaba muerta, estaba de parranda. Y el socialismo no estaba muerto, estaba de parranda. Y aquí estamos los socialistas levantando nuevamente nuestras banderas”.
-“No se trata solo de decirle no al ALCA sino de construir una alternativa. Esa alternativa es el ALBA”.
-Explicó los acuerdos con Cuba, de intercambio petrolero por el de sistemas de salud y alfabetización (el plan “Yo sí puedo”) que permitió declarar a Venezuela libre de analfabetismo.
-Dijo que así como Kennedy (a quien reivindicó con prudencia) planteó la Alianza para el Progreso hace casi medio siglo, Venezuela va a proponer una alianza contra el hambre (la denominó ALCHA ahí mismo, sobre el escenario) para la cual su país puede aportar 10.000 millones de dólares en los próximos diez años.
-Reconoció que esta disponibilidad económica se debe al incremento de los precios del petróleo, y recordó que Venezuela tiene la 1º reserva petrolífera del mundo y la 8º de gas. “Venezuela tiene petróleo y gas para proporcionarle a los pueblos de América Latina y el Caribe por 200 años. Cuenten esos pueblos con el apoyo de Venezuela para el desarrollo social y tecnológico”.
-Recordó que al actual gobierno argentino, además de haberle enviado petróleo, le compró bonos por 1.000 millones de dólares para financiar sus planes de desarrollo. Hizo la mención como al pasar, en una intervención en la que jamás nombró a Néstor Kirchner.
-Comentó también que en Venezuela se realizó el Encuentro Latinoamericano de Empresas Recuperadas, y dijo que planea crear una red de dichas empresas denominada Empresur. Y también propone Petrosur, una red con petroleras como Petrobras, Ancap (de Uruguay) y Enarsa (la variante argentina creada por el actual gobierno).
-Dijo que los militares también deben participar en toda esta estrategia.
“Parte de la penetración imperialista fue formar dictadores y enseñar a torturar. La más de las veces los ejércitos fueron ejércitos de ocupación. Yo pertenezco a un ejército que retomó las banderas de Bolívar para buscar la liberación”.
-Llamó a conquistar la Segunda Independencia de América Latina y terminó su discurso con las siguientes palabras: “Viva el Che Guevara, carajo”.

Con el fin del acto empezaron los preparativos de la otra marcha, promovida por organizaciones de izquierda como la Corriente Clasista y Combativa, el Polo Obrero y también algunos de los que intervinieron en el acto del estadio mundialista. Entre los dirigentes se pudo ver a Mario Cafiero, Patricia Walsh, Adriana Calvo, Carlos “Perro” Santillán, entre otros. Ripoll comentó a lavaca su impresión: “Esto está demasiado organizado”. El “demasiado” debería ser reemplazado por “sospechosamente”. Apareció de pronto un grupo de jóvenes con la cara enfundada. Uno de ellos explicó prolijamente a lavaca: “Ya coordinamos con las organizaciones para que se vayan, y a los 20 minutos pudrimos todo. Si no pasamos las vallas vamos a romper vidrieras”.
En efecto, las columnas de la movilización se retiraron y el grupo, no más de 50 personas, comenzó a atacar a la policía que estaba detrás de las vallas. Los policías les respondieron con gases lacrimógenos, segúnlo previsto. (Como lo había comentado el perioidista mendocino, los fotógrafos y camarógrafos ya lucían máscaras antigas).
La burocracia del enfrentamiento fue así: piedras de un lado (aunque también había disparos producidos por las llamadas “tumberas”, armas caseras que lucieron algunos manifestantes) y gases del otro. Como la situación quedaba en un empate, el grupo comenzó a romper e incendiar locales bancarios y de marcas multinacionales. Allí la policía se lanzó a reprimir. Cayeron periodistas extranjeros, paseantes, gente que se llevaba cajas de alfajores pescadas en el río revuelto y jóvenes que ostensiblemente no tenían nada que ver con la batahola.
A la misma hora Kirchner hacía su intervención ante los demás presidentes americanos, y luego todos se tomaron juntos una foto. La historia definitiva de estos acontecimientos tal vez deba ser escrita en el futuro. Mientras tanto sólo es posible decir con certeza que la multitud de visitantes que sufrió Mar del Plata emigró de modo completo, cosa que acaso le devuelva al lugar la posibilidad de ser considerado “la ciudad feliz”.




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