Julio López
está desaparecido
hace 6401 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

CIRCULAR DE OPINIÓN
Por Organización Libertaria Cimarrón - Friday, Nov. 11, 2005 at 12:24 PM
olc.uruguay@gmail.com

La presencia de un criminal no pasó desapercibida, el pasado viernes 4 de noviembre miles de militantes, luchadores sociales de todo el continente se manifestaron en repudio de la llegada de Bush a América Latina, de la Cumbre de las Américas y del avance del ALCA en nuestro territorio. En ese marco, Uruguay no estuvo ajeno, tres movilizaciones dieron cuenta de que desde el movimiento popular no se le otorgará ningún aval a la estrategia del imperialismo.

Diversas son las muestras de lo que se intentaba políticamente sintetizar en la cumbre de las Américas, la posesión y dominio de los bancos de biodiversidad y de recursos naturales, la presencia militar de estados unidos en zonas geopolíticamente estratégicas de nuestro continente, y la necesaria profundización de los marcos políticos que garanticen una subordinación a la reorientación de la ofensiva norteamericana.
La implantación del ALCA, sigue siendo para EEUU uno de los principales ejes estratégicos desde donde pensar la intervención en nuestro continente, el imperialismo necesita del ALCA para perpetuar su hegemonía mundial. En los últimos años, diversos obstáculos han imposibilitado desarrollar la estrategia de “Fast Track” que preveía inaugurar el ALCA en el 2005, pero esto ha significado una readecuación metodológica y redefiniciones en los tiempos.
En alguno de los tantos pronunciamientos durante la realización de la cumbre de las Américas, desde el gobierno norteamericano se encargaron de sintetizar de forma clara los objetivos que venían a buscar, no importa que un gobierno se defina de izquierda, lo importante es que se oriente en favor de lograr acuerdos, y aunque en líneas generales existieron varios pronunciamientos políticos cuestionadores del área de libre comercio, el avance en la consecución de acuerdos bilaterales demostró que por la vía de los hechos se profundizaba la injerencia. Tratados de libre comercio con los países andinos, de intercambio energético con México, comerciales con la comunidad de países centroamericanos, y nuestro país no podía quedar ausente, de espaldas al pueblo se firmó el tratado de protección de inversiones..., de las norteamericanas, obvio. Pero la rúbrica la puso solo el gobierno, el pueblo uruguayo dejó claro que su firma no quedó estampada.

Criminalizar la protesta, una cuestión de sedición...

Siempre existe alguna posibilidad, siempre hay algún resorte jurídico que desde el poder se haga saltar para castigar de forma ejemplarizante, para amedrentar, y de esa forma garantizar la dominación, pero lo único que condiciona la aplicación o no y la forma que esta adquiere, es la correlación de fuerzas en que se desarrolle la lucha de clases. Son lecturas de “posibilidad”, en las cuales la represión física como jurídica debe contemplar determinado margen de legitimación a nivel social, fortalecer a nivel de la subjetividad la dialéctica “lucha-delito”.
En el 2002 afrontamos intentos de procesamientos a compañeros, allanamientos a radios comunitarias, etc., El domingo 6 de noviembre de 2005 se inauguraba escenario sumamente regresivo para el movimiento popular, luego de varios años, volvemos a transitar un tiempo con presos políticos...

En el marco de decenas de movilizaciones a nivel continental que se desarrollaron el 4 de noviembre en rechazo a la cumbre de las Américas, una brutal represión policial se abatió sobre una de las movilizaciones realizadas ese día, la policía reprimió con el salvajismo que promueve la impunidad. La violencia de los aparatos represivos del Estado se hizo sentir sobre los manifestantes, dejando como saldo a 15 compañeros detenidos.
Un operativo policial realmente aberrante, con la utilización de armas de fuego, golpes a compañeros, infiltración de la movilización, cobertura a provocadores, etc.
El saldo final es la condena jurídica a cuatro compañeros por el delito de sedición y el intento de condenarlos socialmente desde los medios masivos de comunicación.
Sin tener pruebas que los vinculen a los hechos de violencia ocurridos ese día en la ciudad vieja, los condenan por pensar de una determinada manera, por ser anticapitalistas y antiimperialistas, por querer transformar un sistema social injusto. La sedición, tal cual se tipifica en el procesamiento, es un ?delito? que se configura NO por el hacer sino por el pensar.

Ignacio Corrales, Claudio Piñeiro, Fiorella Josendez y Lilián Bogado son militantes sociales que, desde sus barrios, desde sus sindicatos, desde sus centros de estudiantes luchan día a día por cambiar un sistema que oprime y condena al hambre y a la miseria a nuestro pueblo. Ignacio Corrales es militante estudiantil. Claudio Piñeiro es militante del Centro de estudiantes del IPA y del sindicato del taxi. Fiorella Josendez es militante del Centro Social El Galpón de Corrales. Lilián Bogado es militante de AFCASMU. Todos ellos son trabajadores, estudiantes, son luchadores sociales, y a partir de ahora presos políticos.

La tipificación de sedición, deja bien claro la caracterización política que se quiere imponer, esto es que se esta condenando a nuestros compañeros por luchar, y sabemos que esto implica una descarada criminalización de la protesta, lo que significa un antecedente sumamente nefasto para el movimiento popular todo. Luchar para transformar un orden social injusto no es un delito, y nuestros compañeros no son criminales, NO. Son militantes sociales, que pelean por un mundo más justo. Ignacio, Claudio, Fiorella y Lilián sufren hoy la penuria de estar privados de su libertad por defender sus ideas, por luchar por un cambio social. Ellos son presos políticos, víctimas de un juez reaccionario y fascista, que está convencido de que nuestros compañeros deben estar presos por sediciosos, pero que no cree que los militares y civiles, responsables del asesinato de la nuera de Juan Gelman deban pagar por sus crímenes. Tampoco cree que los responsables del asesinato de Helena Quinteros deban estar presos. El juez Lechini es culpable, culpable de defender la impunidad, culpable de proteger a los torturadores y asesinos de la dictadura.

Siniestra articulación: un procesamiento irregular -en el que el juez pide un delito mayor al que pide la fiscal-, y una violenta represión policial, ambos elementos indisociables para analizar las consecuencias.
Las responsabilidades se generan por las acciones, pero también por las omisiones, y en esta vez hay de las dos. A quién puede asombrarle el accionar de la represión cuando este ministerio del interior a garantizado espacios de poder dentro de las fuerzas policiales a criminales responsables de la represión del Filtro: Miguel Rolán y Raúl Guarino. Rolán ge ascendido a Segundo del Regimiento de la Guardia Republicana, y está a cargo de la guardia de coraceros y granaderos de Montevideo; Guarino fue ascendido a director de seguridad de Montevideo, y está a cargo de todas las comisarías del país.
Es impensable que responsables de continuos delitos contra el pueblo continúen en sus cargos, mantenerlos significa legitimar la represión desatada y remarcar una actitud represiva hacia la movilización popular.

Para muestra, no solo les bastó un botón, y el procesamiento de los cuatro compañeros puede ser un punto de partida para avanzar sustancialmente en la criminalización de la lucha y en la legitimación de prácticas represivas.
La prueba está en que las persecuciones y amenazas de judicialización se siguen presentando, se procesa a los compañeros y se persigue judicialmente a quienes los defienden, tal cual queda demostrado con la citación a una compañera de la Plenaria Memoria y Justicia.
Pero no solamente queda a nivel jurídico, diversos han sido los hostigamientos sufridos en los últimos días sobre todo en actividades de propaganda...

Hoy más que nunca, hay que construir una alternativa como pueblo

Es fundamental manifestarse contra la brutalidad de un imperio que día a día mata a miles de hombres y mujeres en todo el mundo, en un supuesta guerra antiterrorista cuyo único objetivo es el de apropiarse de los recursos naturales, a costa del hambre de los pueblos. Hay que repudiar al genocida de Bush.
Defendemos el derecho a manifestarse, a no conformarse, a rebelarse. Pero no creemos en prácticas autocomplacientes como el camino adecuado para luchar por subvertir el orden de dominación vigente. No creemos que ese sea el camino para construir el mundo que soñamos. Nuestra propuesta es la de trabajar para la construcción de poder popular. Desde los barrios, desde los centros de estudiantes, desde las organizaciones de derechos humanos, trabajar para desarrollar las organizaciones del pueblo, para fortalecerlas impulsando la participación, la democracia directa, la solidaridad. Combatir este sistema social injusto y, en el mismo proceso, construir el germen de la sociedad nueva.
Nuestro camino es el de luchar con los de abajo, para que el horizonte revolucionario sea mañana una alternativa para los oprimidos. Estamos convencidos de que la tarea que nos imponen estos tiempos es la de trabajar para organizar lo desorganizado y reunir lo disperso, para fortalecer las expresiones organizativas de nuestro pueblo. Resistir la embestida del oficialismo que busca contener e institucionalizar al movimiento popular, y luchar día a día para profundizar su independencia política.
La construcción de la perspectiva se encuentra hoy con la fundamental tarea de organizarse y luchar hasta lograr la liberación de los compañeros presos, porque son presos políticos, pero por sobre todas las cosas porque son nuestros compañeros; y en esta tarea no hay lugar para chiflar y mirar el techo, porque un precedente habilita a que mas temprano que tarde aparezcan nuevos sediciosos.

Por la libertad de Ignacio, Claudio, Fiorella, y Lilián
Por la libertad de Gabriel Roser y todos los presos políticos de Argentina

Porque creemos en las propias fuerzas con las que cuenta este pueblo para
construir nuestra propia perspectiva

Por la libertad y el socialismo
Organizarse para luchar

agrega un comentario