Julio López
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ING. WHITE: LA POLUCIÓN Y OTROS RELATOS
Por Hernán Scandizzo ((i)) - Monday, Nov. 28, 2005 at 9:58 AM
herscan@yahoo.com.ar

El polo petroquímico de Ingeniero White es el tercero más importante de Argentina. Ubicado en Bahía Blanca, al sur de la provincia de Buenos Aires, fue pensado en la década del ’70 para crecer en los espacios que los elevadores de granos dejaron libre en ese nudo ferroportuario en el que hoy viven unas 12 mil personas. Las primeras plantas comenzaron a funcionar a inicios de los ’80 pero fue a fines de los ’90 y despuntando el milenio que adquirió la impronta actual: una ciudad portuaria con costas tomadas y una ría tóxica que expulsa a sus pescadores. Las corporaciones destacan que en los últimos años invirtieron en la zona US$ 2.000 millones y anuncian nuevas obras. Sin embargo la imponencia del polo y de los ceros y el marketing empresarial y público contrastan con las calles grises, los insalubres gases pestilentes y una alegría robada, difícil de recuperar... la que White perdió cuando trocaron su alma por chimeneas.

ING. WHITE: LA POLUC...
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Dow Chemical, Petrobras, Solvay Indupa, Profértil (Repsol YPF + Agrium Inc), Mega (Repsol YPF + Dow Chemical + Petrobras)... próximamente Rio Tinto y todas las que lleguen o el ‘progreso’ arrastre. Una planta de metanol, ¿por qué no?... mientras el cuerpo aguante... o los cuerpos aguanten... los miles del inmediato White profundo y la bahía blanca de humo. Todos arriba del bondi. “¡Pal’fondo que hay lugar!” Etano, propano, butano, polietileno de alta y baja densidad, soda cáustica perlada, urea granulada y amoníaco. “Para mí sin azúcar.”

El 20 de agosto de 2000 un escape de cloro en la planta Solvay Indupa alarmó a la ciudad, la nube tóxica fue filmada y la imagen no sólo recorrió Bahía Blanca, llegó a la CNN. Para las autoridades locales y los empresarios fue imposible negar lo sucedido, cómo sí ocurrió en otros eventos o ante manifestaciones de que algo no estaba bien en el agua, suelo y aire del lugar. Siete días después de aquel escape se produjo otro, durante la puesta en marcha de la planta de Profértil, no era cloro sino amoníaco. White era un hervidero de miedos, propuestas, protestas y ansiedades, la gente había tomado las calles y bloqueado el acceso al polo. Un mes de furia permanente. Pero con el paso del tiempo sobrevinieron la fragmentación y los canales institucionales se impusieron, también el marketing empresarial y los discursos descartables. Cinco años después el polo allí está, inmutable. Agosto caliente pasó y las nubes se perdieron en el mar, siguiendo una publicidad de Rex.

“Actualmente estamos desarrollando los siguientes programas - enumera el Anuario 2004 de actividades ambientales editado por la Secretaría de Gobierno e Infraestructura de Bahía Blanca -:
- Monitoreo de emisiones gaseosas perimetrales de cloruro de vinilo monómero, vientos abajo de las plantas del complejo Solvay Indupa S.A.I.C.
- Monitoreo de emisiones gaseosas perimetrales de Compuestos Orgánicos Volátiles, Benceno, Tolueno, Etilbenceno y Oxileno, vientos arriba y vientos abajo de la refinería EG-3 S.A. (Petrobras)
- Monitoreo de emisiones perimetrales de Material Particulado Sedimentable en las plantas del complejo Cargill S.A.C.I.
- Monitoreo continuo de emisiones gaseosas perimetrales de cloro, en las plantas del complejo Solvay Indupa S.A.I.C.
- Monitoreo de emisiones gaseosas de contaminantes básicos, en chimeneas de las plantas del área industrial de Ingeniero White.
- Sistema de alarma continuo para emergencias por fugas de amoníaco en 4 puntos de Ingeniero White.”

Viva tranquilo, duerma profundo. ¡Es una orden!

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LA SUTILEZA DE LA MORDAZA (I)
Por Hernán Scandizzo ((i)) - Monday, Nov. 28, 2005 at 10:00 AM
herscan@yahoo.com.ar

LA SUTILEZA DE LA MO...
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Entrevista a Alejandro Díaz (AD) de la Asociación Vecinos por la Vida de Ing. White.



AD: La comunidad se siente muy castigada con respecto al polo petroquímico, a lo que produce tener un polo petroquímico en el patio de la casa, sabemos que hay muchas enfermedades. Nosotros, desde nuestra asociación, venimos pidiendo un censo de salud hace 3 años ya, y ni los radicales cuando eran gobierno en la ciudad, ni ahora los justicialistas quieren hacer un censo de salud. No quieren saber nada con eso.


- ¿Por qué se niegan al censo de salud?

AD: Y... para la economía de la ciudad debe ser peligroso, suponemos.

Nosotros somos claros en algo: tener este monstruo acá y con lo que le genera económicamente a ellos, no los van a sacar nunca. Desde el escape de cloro venimos pidiendo que lo saquen de forma urgente, o que dentro de un tiempo prudencial lo erradiquen. Sabemos que no va a ocurrir nunca, por eso siempre pedimos lo máximo - que lo saquen - para conseguir que los controlen al menos. ¡Que los controlen!, al menos!

Es difícil, porque por más control que haya, siempre vivís a expensas de que haya un escape, de que vuele algo. O sea... vivir de esa manera no es agradable para nada. A eso vos le sumás que cada 10 chicos que nacen en la zona - no solamente en White sino en Villa Rosa, Loma Paraguaya, Villa Delfina, que son los lugares aledaños -, hay 7 con problemas respiratorios. Entonces acá hay algo que no camina... Problemas respiratorios, de piel, alergia en la vista... ¡muchas cosas! Hay algo que no camina. Se han conseguido cosas, tampoco seamos tan duros, pero es un 5% de lo que realmente se tiene que hacer.


- Se consiguieron controles en las plantas.

AD: Se armó un Comité Técnico (Ejecutivo) que es el que controla el polo petroquímico... pero acá tenés que sumar no solamente el polo petroquímico sino las terminales de cereal. Hay un estudio de salud que nos da la razón: la gente que más cercana está al cordón industrial – polo petroquímico y terminales cerealeras – está más afectada que los habitantes que viven más alejados de la zona. Acá nadie quiere se hacer cargo del tema, es así de sencillo y de lamentable.


- Sin embargo el subsecretario de Saneamiento Ambiental, Néstor Quiroga, dice que Bahía Blanca tiene el mejor sistema de monitoreo, prevención y saneamiento. Que a nivel nacional lo llaman para dar cursos, en todas partes quieren copiar el modelo que se aplica en Bahía Blanca.

AD: El modelo puede ser bueno, ahora ¿se controla? En los papeles es espectacular, ahora, ¿se controla acá? No. Eso es mentira. Acá se había conseguido que ante un evento, ante un escape, algún incidente o accidente, las empresas comuniquen en forma urgente al Comité Técnico. ¡En forma urgente! Esto estamos hablando de 3 años atrás, casi 4. Cuando ellos tienen algún problema tratan de solucionarlo. ¿Sabés cuándo avisan? Cuando hay algún empleado, alguna persona, que ve algo raro y llama al Comité Técnico: “Hay un problema en tal lado”. Si no las empresas siguen en la misma.


- ¿Ustedes participaban en el CCyM – Comité de Control y Monitoreo?

AD: Nosotros estamos, nos retiramos porque consideramos que el CCyM era – y lo seguimos considerando, aunque después nos volvimos a reincorporar - una charla de café. Vamos, nos sentamos, tomamos un café, criticamos, protestamos, pero no sale nada. No-se-decide-nada.


- ¿Para vos los vecinos no tienen participación en el control?

AD: ¡No! ¡No la tuvimos nunca!


- ¿Se vive con miedo en White o la gente no piensa en el polo?

AD: Creo que todas las personas que viven acá durante el día tienen un rato para pensar en el polo. Ningún habitante de acá pasa las 24 horas del día sin pensar en el polo, porque sí o sí de alguna manera mirás para allá y lo ves. O sea, no creo que ninguno se olvide de lo que tiene ahí. Y en una casa donde hay problemas de salud, esa gente no se puede olvidar del polo y piensan en el polo.

Nosotros sabemos que hay médicos que ante problemas de salud a la gente le han dicho que se vayan de acá, pero el médico no te lo firma. Hay una complicidad manifiesta entre el poder político, la salud, las instituciones whitenses. Porque si vos sos médico y me decís: “Mirá, los chicos tuyos tienen este problema de salud - o vos tenés este problema de salud. Yo te recomiendo que te vayas de esa zona”. ¡Fírmamelo! ¡Hacete cargo de lo que decís! No, no lo hacen. Y eso es lo que más te llama la atención... no te llama la atención, vos sabés cómo viene el tema.


- ¿Qué le cambió a los whitenses el escape del 20 de agosto 2000?

AD: Nos cambió todo, acá había muy pocas personas que veían venir esto. Antes del escape había dos mujeres que les decían ‘Las Locas de las Margaritas’, porque en ese momento el intendente Linares irónicamente les decía: “Protestan porque no les crecen las margaritas en el frente de la casa”. ¡Viven enfrente de Indupa! (productora de PVC y soda cáustica)

Lógico, después que todos vimos el escape de cloro, gracias a dios que se filmó, ahí nos dimos cuenta de la dimensión, de dónde estábamos parados. Porque por ahí eran todas cosas sueltas: “Y mirá, a aquel le pasó esto”, “A aquel otro le pasó lo otro”, “Vos sabés, las parras no me salen”. Y el golpe de alarma fue cuando vino Greenpeace, tomaron muestras y las mediciones eran terribles. Porque acá el tema es muy claro. Sí, empezaste a controlar... ¡pero estuviste 20 años haciendo un desastre, en el cual nadie controlaba nada! Vos pasabas por la ruta y (en el predio de Solvay Indupa) se veía la montaña, tenían los barros mercuriados amontonados. ¡Qué! ¿No contaminaron? Van, hacen muestras... no, no hay mercurio en las napas... ¡No me jodas! No jodamos. Por eso te digo, lo del control es para tomarnos el pelo.

A ver si nos entendemos, no es que ellos te van a abrir una chimenea durante el día, durante la noche te lo hacen, te largan toda la porquería habida y por haber. Vamos a ser claros, porque nosotros el dedo no nos chupamos. A la noche, cuando empiezan a largar, que te dicen: “es vapor”. ¡Ma qué vapor! ¡El vapor es cada vez más pesado! ¡Se queda dos horas ahí arriba! ¿Cómo es el tema?

A eso sumale el monstruo que tenés con las terminales cerealeras, que son otro de los grandes contaminantes en la zona. Hoy nadie les toca un pelo, con decirte que el Comité Técnico, la Municipalidad, no puede entrar a controlarlas.

Esto se parece cuando eras pibe, que leías la historia, ‘el progreso’. Cuando llevaron el progreso a la Patagonia... El progreso en todo el mundo costó miles de muertos, vamos a ser claros. El progreso siempre costó muertos, nada más que ahora no te vienen con una metralleta y te matan. Te hacen creer que el progreso... pero el progreso te va costando, de eso es que no nos damos cuenta. No nos damos cuenta porque acá hay una cosa que es muy sencilla: el polo petroquímico, hasta el 2000, no le daba nada a nadie. Era un círculo cerrado, para la comunidad no existían, o sea, no te daban bolilla. Directamente no te daban bolilla. Después del escape de Indupa, eran unos vecinos espectaculares: ponían plata en un club, ponían plata en la iglesia, ponían plata acá, ponían plata allá. Claro, agarraste un país – como este – económicamente destruido, culturalmente destruido... hicieron lo que quisieron.


- ¿La plata que pusieron en la comunidad quebró la movilización posterior a los escapes?

AD: Lamentablemente sí. Después de las grandes movilizaciones, de estos cortes, piquetes... ellos inteligentemente empezaron a notar cuál era el problema. Y el problema es, sí, la falta trabajo, en la comunidad de White no hay laburo. “Bueno, vamos a darle puestos de trabajo.” “¿Qué le falta a la iglesia? ¿El techo? Bueno, vamos a darle plata para el techo de la iglesia.” “A ver, allá ¿qué falta? Habría que pintarle las paredes. Vamos a pintarle...” Ese es el trabajito que hicieron.

Te puedo asegurar que White está hecho pedazos y que no sobra laburo, al contrario, hay un montón de gente sin laburo, hay muchísima gente sin laburo. Nosotros lo que no vamos a cambiar nunca es salud por trabajo, siempre vamos a estar hinchando, vamos a estar ahí, pero si al menos a White la hubiesen tenido bien, la gente con laburo, limpio, ordenado, pintado... ¡qué sé yo!... lo mirás desde otra óptica. ¡White está hecho pedazos!

Acá hay un rol que las instituciones no cumplieron nunca, la sociedad de fomento, que supuestamente es la que tiene que estar al pie del cañón en los problemas de la comunidad, nunca lo estuvo, ni lo está, ni van a estar mientras sigan con esa mentalidad. Con decirte que veníamos de un gravísimo problema con el polo industrial en el año 2000... con cortes, hubo problemas con la policía, ¡pesado el tema! Y ellos hicieron la fiesta del langostino y el camarón como si nada. La comunidad whitense no estaba para ninguna fiestita, y la hicieron igual. ¿Y sabés quién pagó la fiesta del camarón y el langostino? ¡El polo petroquímico!

Ponen plata en el Club de Leones. ¡Qué bárbaro, el Club de Leones! ¿Qué hacemos? ¡Criamos leones! Porque yo no escuché nunca decir: “¡Qué mal que estamos!”. Creo que el rol de las instituciones fue bastante pobre, por no decirte una porquería. Vamos a ser buenos, “bastante pobre”. Esas instituciones se llaman: la sociedad de fomento, clubes. Los clubes acá cumplen un rol muy importante también. A mí me llama mucho la atención, tenés un club como ser Comercial, que está a 6 cuadras de Indupa, a 5 cuadras de Profértil y nunca los escuché decir: “Pucha, vamos a organizarnos como club, a ver qué podemos hacer con respecto a esto”. No te olvides que tenés pibes jugando al fútbol, tenés pibes jugando al basket, se hacen partidos los domingos donde se junta un montón de gente. Si llega a pasar algo durante un partido, ¿qué hacemos? Acá se toma muy a la chacota.

Bahía tiene un equipo que está jugando en primera, Olimpo. La cancha de Olimpo, en línea recta, está a 25, 30 cuadras el polo petroquímico, no es más de eso. Entonces analizá esta situación: un escape como el que hubo, con un viento que vaya para aquel lado de allá... qué se yo, no le pongas mucho, 40 km/h, ¿Cuánto tarda en llegar a la cancha? En 5’... ¡menos! Nosotros eso se lo venimos planteando hace rato.

Dejá el escape, vamos a una explosión... No te olvides que (las plantas) las tenemos una al lado de la otra... No, nunca hicieron nada.... Hay cosas más graves todavía. Si vos caminás White te vas a dar cuenta enseguida. ¿Qué salida de escape tenés? Ninguna, ninguna. Salís por Dozzo o por el empedrado... ¡Nos matamos todos (embotellados) en Villa Rosa!


- ¿Tenés idea del volumen de plata que circula por las terminales y las petroquímicas?

AD: Y mucha, muchísima plata.


- Y no derrama.

AD: No... Para que te des una idea, la urea creo que vale de US$ 250 o 200 la tonelada. Te llenan un barco de 20 mil toneladas de urea en un día. Sacá la cuenta de la plata que se movió en ese movimiento chiquito. ¡Es infernal! Estamos hablando de Profértil (única productora de urea granulada en el país y lidera las ventas), después Indupa, PBB (Petroquímica Bahía Blanca – del Grupo Dow), las terminales cerealeras... La plata que se maneja acá es incalculable. Ahora, ¿cuánto queda acá? Y, muy poco. Vos por ahí escuchás ciertos sectores del periodismo de Bahía que muchas veces te revuelven el estómago: “Lo que produce para Bahía Blanca.” “Lo que le da a Bahía Blanca”. Y... no sé. ¡Nosotros no lo vemos! Honestamente, no lo vemos.


- ¿Alguna vez los apretaron? (Durante la entrevista nos acompaña Carlos Ríos, también de la Asociación Vecinos por la Vida, que interviene en contadas ocasiones.)

AD: No. En eso, la verdad, que te tengo que decir que no.

CR: Lo que hicieron, lo hicieron más sutil.

AD: Ah, sí, nos quedamos sin trabajo. Pero apretar, no, nunca.


- ¿Laburaban en el polo?

AD: No, somos recibidores de granos, somos trabajadores eventuales, trabajamos en casi todas las terminales de cereales. A raíz de todas estas denuncias que venimos haciendo nos dejaron sin trabajo.

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