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No te calles, no cierres los ojos, el silencio mata
Por Zula ((i)) Buenos Aires -
Wednesday, Feb. 01, 2006 at 8:34 PM
zula(arroba)riseup.net
Una de cada cuatro mujeres será violada, golpeada, obligada a tener relaciones sexuales u otro tipo de abuso a lo largo de su vida. Cada 18 segundos una mujer es víctima de violencia en el mundo. (Sociedad sin Violencia
La violencia contra la mujer incluye la violencia física, sexual y psicológica:
América Latina y el Caribe registran los índices más altos de violencia hacia las mujeres. El homicidio representa la quinta causa de muerte, el 70 por ciento de las mujeres padece violencia domestica y el 30 por ciento reportó que su primera relación sexual fue forzada. Según el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM) una de cada tres mujeres en todo el mundo fue victima de violencia.
Según estudios realizados en la provincia de Buenos Aires sobre muertes de mujeres ocurridos entre 1997 y 2003, alrededor del el 70 por ciento son asesinatos producidos a manos de un conocido. En su mayoría estos hechos cuentan con denuncias previas que no fueron escuchadas. En el foro de Mujeres de 2004, la directora del UNIFEM en América Latina, Mirijke Velzeboer, alerto que en Argentina, Bolivia y Guatemala se incrementaron los asesinatos de mujeres por razones asociadas al género.
En el Centro de la Mujer de Vicente López el promedio de casos anules de violencia domestica, atendidos es de 3.500. Alrededor de 5.000 mujeres son atendidas en el Centro de Atención a la Victima en la provincia de Córdoba en su mayoría victimas de abusos sexual y/o violencia conyugal. Se estima que se producen entre 5.000 y 7.000 violaciones que son denunciadas por año, pero la condena por este tipo de delitos sexuales oscila entre los 500 y 700 anuales (fuente: Informe Nacional de Argentina sobre Violencia de Género. Silvia Chejter, 1998)
Para Julio Fernández, juez de la Pampa, tener hematomas en el cuerpo-luego de realizar una denuncia por un delito sexual- no es prueba suficiente abuso. En diciembre de 2002, en intendente Alvear, un hombre de 31 años ingreso al lugar de trabajo de su victima, la apoyo violentamente y la toco en sus partes intimas. Según las pericias medicas “se detectaron lesiones en las piernas de la ofendida, producto del accionar del acusado. Asimismo, se observaron, en el ámbito de los hechos, manchas seminales en el piso”. Para los jueces Tomás Mustapich y Alfredo Alonso, de la Cámara de General Pico fue suficiente la detallada y convincente declaración de la mujer y la certificación de las lesiones, pero para el juez Fernández quien voto en disidencia las lesiones constatadas “no aportan nada ya que pueden ser consecuencias de la fogosidad pasional” y se inclino por la absolución del acusado.
El juez Fernández no es el único machista que pulula el sistema judicial Argentino. Recordemos el tristestemente conocido juez Argentino Juárez quien instruyo la causa de Romina Tejerina, en Jujuy y se tomo más de un año para dictarle el procesamiento. El vergonzante trabajo de la fiscal del juicio de esta joven, quien se preocupo en indagar más sobre su vida social que a indagar la denuncia de violación.
En abril de 2005 el gobierno porteño y la Procuración General de la Nación firmaron un convenio para crear una fiscalía dedicada exclusivamente a los ilícitos tipificados por el Código Penal como delitos contra la integridad sexual, la trata de personas y la prostitución infantil, pero a la fecha esta fiscalía no cuenta con espacio físico ni con personal. En la provincia de Buenos Aires más precisamente en la ciudad de Mar del Plata funcionaba una unidad especial a cargo de la fiscal María de los Angeles Lorenzo e investigó exclusivamente delitos contra la integridad sexual. En un lapso muy corto, las denuncias pasaron de ocho a cuarenta mensuales. A pesar de los buenos resultados, la Procuración de la provincia decidió cerrarla. ¿?
Mientras las justicia Argentina se nutre de personajes de visiones retrogradas y machistas, las mujeres continúa siendo sumidas en una red que las victimiza y humilla hasta el hartazgo.
La prostitución es una actividad comercial bien conocida por la policía. No importa si es la bonaerense, la federal o alguna policía provincial, siempre es esta fuerza quien se beneficia de la comercialización del cuerpo de la mujer, en forma consentida o forzada. Es muy común se que cuelen en los medios masivos de información noticias de mujeres o menores obligadas a prostituirse en cabaret que son regenteados por policías o cuentan con la protección de esta. El “Sabor bar Show” de José C. Paz no fue la excepción para tres jóvenes mujeres de entre 20 y 23 años quienes eran obligadas a prestar favores sexuales. A estas jovenes se les retiraron sus documentos y pasaportes y las metieron una habitación. Cuando consiguieron escapar no realizaron la denuncia en la comisaría 2° porque los policías eran clientes del lugar.
Y en este comercio aberrante donde miles de mujeres y niñas son obligadas a prostituirse, no sólo es necesaria una fuerza policial corrupta como la policial, sino un sin número de actores que conformen esta cadena de complicidades y un Estado que mira para otro lado. Y al parecer este flagelo que golpea fuertemente a las mujeres no es tomado con la seriedad que merece y convierte a la Argentina en un país de destino de la trata de personas con fuertes redes delictivas altamente organizadas. Redes que operan a su antojo bajo el amparo de un Estado ausente.
¿Quiénes son los clientes? “Jueces, políticos, policías, en los pueblos del interior hay muchos gerentes de empresas, de petroleras, por ejemplo. Es el segmento ABC1. Después, en los pueblos chicos, donde funcionan estas redes que yo llamo familiares, quizás el habitué es un pueblerino. Pero esto tiene que ver también con los circuitos que recorren las mujeres en este negocio. Hay un circuito ABC1, que son las más jovencitas, las que recién empiezan, las que están en mejores condiciones físicas. Cuando se van poniendo viejas, se enferman, o molestan, las pasan a un segundo grupo que son estos prostíbulos más de pueblo. Y de ahí lo que les queda es terminar en algún pueblo perdido. Pero también están las que son asesinadas antes, o porque molestan demasiado, o porque están demasiado enfermas, o porque ya no saben qué hacer con ellas. El promedio de vida de estas mujeres es de 35 años. Y no sólo porque las matan sino porque las que logran salir tienen tantas enfermedades juntas –VIH, gonorrea, sífilis– que no viven mucho tiempo. (Mercedes Assorati- El Mapa de la trata en la Argentina)
Pero la impunidad que gozan los agentes policiales parece traspasar todo limite imaginado. En Rosario una chica de 16 años esperaba noticias de un amigo que estaba detenido en una seccional. Alrededor de la cinco de la mañana un policía se le acerco y la obligo a acompañarlo hasta una habitación donde fue violada durante una hora por este y dos compañeros más. Esto sucedió en julio de 2002 en la comisaría 1ª de Rosario. Ahora un juez condenó con penas de entre 12 y 14 años de prisión a los tres policías.
El juez condeno a 12 y 14 años de prisión a los tres policías a quienes además les imputa el delito de privación ilegal de la libertad y amenazas. Los condenados, junto al Estado provincial, deberán hacerse cargo de una indemnización de 200 mil pesos más los intereses. La sentencia, sin embargo, fue apelada y no está firme. El fallo también castiga con dos años y tres meses de prisión condicional a una agente, por incumplimiento de deberes de funcionaria pública y por ser partícipe necesaria de la privación de la libertad de la adolescente.
Cualquier tipo de violencia hacia la mujer es consecuencia de la utilización del cuerpo de esta de manera degradante, de una sociedad capitalista y patriarcal que naturaliza el mal trato y lo justifica. Mientras como sociedad continuemos silenciando el pedido desesperado de millones de mujeres, estamos siendo cómplices de su sufrimiento. Sufrimiento que terminan pagando con sus cuerpos. La vida de las mujeres no son sólo estadísticas, son rostros, son historias truncas silenciadas en la oscuridad de la violencia. No te calles. No cierres los ojos. El silencio mata.
Articulos relacionados: El mapa de la trata en la Argentina + Casi 9.000 denuncia de mujeres golpeadas en Córdoba + ¿Crímenes pasionales o crímenes contra las mujeres? + Educación sexual: Informar para la libertad + Derecho a decidir sobre el propio cuerpo: Ligadura de trompas
Fuentes:
La violencia tiene rostro patriarcal, Andrea D’atri
ISIS Internacional
Sociedad sin Violencia
UNIFEM
El hip-hop de la Mujeres en lucha
Por Zula ((i)) Buenos Aires -
Thursday, Feb. 02, 2006 at 11:52 AM
zula(arroba)riseup.net
http://argentina.indymedia.org/news/2005/01/260608.php
Nuestras Hijas de Regreso a Casa
Por robles -
Thursday, Feb. 02, 2006 at 3:20 PM
Uno de los casos emblemáticos de la misoginia y la barbarie son los crímenes contra mujeres en Ciudad Juárez Chihuahua (México), Nuestras Hijas de Regreso a Casa, organización de madres, amigos y familiares de las víctimas, se dedica a difundir inforación al respecto y lucha contra la impunidad
Nuestras Hijas de Regreso a Casa
Por robles -
Thursday, Feb. 02, 2006 at 3:20 PM
Uno de los casos emblemáticos de la misoginia y la barbarie son los crímenes contra mujeres en Ciudad Juárez Chihuahua (México), Nuestras Hijas de Regreso a Casa, organización de madres, amigos y familiares de las víctimas, se dedica a difundir inforación al respecto y lucha contra la impunidad