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El jefe de la represión en Las Heras es un"kirchnerista puro"
Por Mosquita Cojonera -
Saturday, Mar. 18, 2006 at 8:56 AM
fliegecojonera@hotmail.com
Mientras Kirchner cacarea sobre los "excesos", con cinismo y pasión, Roque, el monje negro de la represión en toda Santa Cruz, es un kirchnerista puesto por el Pingüino. Que Hebe de Bonafini investigue, no cuesta mucho...
RIO GALLEGOS (De un enviado especial).- La policía de la provincia de Santa Cruz, criticada por el presidente Néstor Kirchner por cometer "excesos" en las detenciones de Las Heras, está conducida por un oficial que, desde 1991, responde, sin fisuras, al jefe del Estado: se trata de Wilfredo Roque, que además estuvo a cargo y comandó los operativos desde la revuelta social de febrero último.
Si el Presidente está disconforme con la actuación policial, seguramente podrá corregirla rápidamente con el desplazamiento de Roque, que ayer asistió aquí a la asunción del nuevo gobernador kirchnerista Carlos Sancho. En verdad, Kirchner buscó responsabilizar, aunque sin nombrarlo, al ex gobernador Sergio Acevedo por sus supuestos desmanejos.
Fue así como criticó anteayer, en duros términos, las denunciadas violaciones de los derechos humanos y los excesos policiales en las detenciones de la localidad santacruceña de Las Heras. En rigor, esa estrategia de la Casa Rosada para explicar la partida de Acevedo antes de tiempo.
Pero la realidad es que Roque, un soldado de Kirchner, fue quien comandó los operativos de detenciones que ordenó la jueza de instrucción de Pico Truncado, Graciela Ruata de Leone, que investiga la muerte del policía Jorge Sayago en la crisis de Las Heras.
Wilfredo Roque fue designado jefe de la policía provincial en 1991, cuando Kirchner asumió la gobernación. La gestión del jefe policial duró hasta noviembre de 2003, cuando asumió Acevedo al frente de la gobernación.
Roque pasó entonces a comandar la delegación provincial de la Secretaría de Inteligencia (SIDE) por pedido de Kirchner. El nuevo gobernador designó como jefe policial a Hugo Llamazares, de su máxima confianza.
Pero en octubre último sobrevino una crisis en la policía santacruceña, con acuartelamientos por reclamos salariales y mejoras laborales. Previo a las elecciones del año último, Acevedo se vio obligado a designar a Roque nuevamente por presión de Kirchner para resolver la crisis.
Crisis sociales
En medio de ello, Acevedo padecía recurrentes crisis sociales, que según sus allegados eran fogoneadas por sectores de la Casa Rosada: le apuntaban a Julio De Vido y a Carlos Zannini. Los mismos funcionarios kirchneristas eran quienes desembarcaban luego en la provincia con las soluciones económicas.
Una de las crisis más graves fue la protesta del sindicato petrolero de Las Heras, que mantuvo un corte de ruta durante 18 días, y que desembocó en un ataque a la comisaría del lugar de sectores fuera del control político que provocaron la muerte del suboficial Sayago.
Luego, la investigación de Ruata de Leone derivó en 19 detenciones y en denuncias de violaciones a los derechos humanos, de golpes y torturas por parte de la policía provincial.
En un intento de criticar a Acevedo, Kirchner dijo anteayer: "Ante los lamentables hechos que sucedieron en mi provincia, por más culpables que sean (los detenidos) cuando los fueron a detener se excedieron y los golpearon. Yo no avalo jamás ese tipo de cosas".
Y agregó: "El gobierno tiene una política de derechos humanos amplia y global, pero intransigente con la violación de los derechos humanos. Ni el peor criminal merece la tortura sino que se le apliquen todas las leyes".
Incluso, la Iglesia denunció el "atropello" policial. Las comisiones de Pastoral Social de la regional Patagonia-Comahue expresó su preocupación por "los atropellos a los derechos humanos" durante los operativos de detenciones. Incluso, el párroco de Las Heras, Luis Bicegó, denunció "una caza como en la época militar", además de "golpes y torturas".
Kirchner se sumó a las críticas. Pero hasta ayer al menos no había renunciado Wilfredo Roque, jefe policial, que comandó los operativos cuestionados. Más aún, estaba en el acto de asunción del nuevo gobernador de Santa Cruz, Carlos Sancho. Estaba entre las primeras filas.