Julio López
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IDEOLOGIAS MODERNAS
Por wilson efrain huarachi - Friday, May. 05, 2006 at 11:44 PM
elarcodefrain@hotmail.com

IDEOLOGIAS ELARCODEFRAIN

IDEOLOGIAS MODERNAS...
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EL NEOLIBERALISMO

Se llama neoliberalismo a ciertas propuestas de política económica de diversos economistas (o escuelas de economía), políticos o personajes de la cultura en general. Las dos ideas que principalmente se llaman así son:

En cuestión de política ecónomica internacional, el favorecimiento del libre comercio y la supresión de las fronteras del capital.
En cuestiones de política económica interna, el apoyo de la desregularización de los mercados (incluido el laboral) y de la mínima intervención del Estado en la economía (incluyendo la privatización de empresas públicas).
El neoliberalismo así definido está impulsado principalmente por la Organización Mundial del Comercio y el Fondo Monetario Internacional. Expone como economía-modelo (salvo en cuestiones de libre comercio) a la economía estadounidense y, en latinoamérica, suelen identificarse sus políticas con el nombre de Consenso de Washington, término acuñado en un paper de 1989 por el economista John Williamson para referirse precisamente al tipo de políticas fiscales y monetarios recomendadas por los organismos de Washington (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y el Tesoro entre otros) para los países en desarrollo.

¿Qué es el neoliberalismo?

El liberalismo es la ideología de la libertad. Para los liberales, la libertad es el valor supremo, entendiendo libertad como la ausencia de coerción. Si nadie me impide hacer algo, soy libre. La libertad, sin embargo, no es la ausencia de leyes, como piensan algunos. En efecto, si yo deseo algo que otros también quieren, ¿cómo impedir que nuestras libertades no entren en conflicto y conduzcan a la violencia? La respuesta está en el estado de derecho, en el imperio de la ley. La ley plantea las reglas del juego. Si todos estamos obligados a cumplirlas, somos libres (ver La Evolución del Estado de Derecho, Hayek). La ausencia de leyes sólo conduciría al imperio de la fuerza y viviríamos bajo la tiranía de los más fuertes.

En el terreno político, por consiguiente, el liberalismo está a favor del gobierno que más libertades le garantice a cada individuo, y que menos restricciones le imponga a sus actividades. Los liberales desconfían del gobierno y quieren restringir su poder sobre los ciudadanos. En definitiva, la historia de la humanidad ha sido la historia del poder aplastante del gobierno sobre el individuo, empezando con las monarquías asirias y los faraones egipcios hasta las monarquías absolutas que dominaron todo el mundo (con excepción de Inglaterra) hasta la Revolución Francesa. Las ideas esenciales del liberalismo fueron elaboradas por John Locke (1632-1704), Montesquieu (1689-1755), David Hume (1711-1776), Adam Smith (1723-1790) y John Stuart Mill (1806-1873), entre otros.

Debemos recordar que las monarquías absolutas y la existencia de una aristocracia hereditaria eran la norma en toda Europa (con excepción de Inglaterra) hasta el mismo siglo XIX. La única república que existía en el mundo occidental era Estados Unidos, heredero de las tradiciones británicas. América Latina, sin embargo, tenía una herencia muy distinta, la del absolutismo español con sus gobiernos despóticos y su corrupción institucionalizada (ver La tradición estatista de América Latina, Craig Roberts).

Lenta y trabajosamente, sin embargo, las ideas liberales se fueron imponiendo en todo el mundo occidental. La palabra "liberal" se utilizó por primera vez en España, a principios del siglo XIX, para denotar simpatía por una monarquía constitucional, con una constitución parecida a la inglesa. El poder del gobierno sobre los individuos es lo viejo. Lo radicalmente nuevo es el respeto a las libertades individuales (también llamados "derechos humanos"). Es por eso que el socialismo y el comunismo son profundamente reaccionarios y por lo que, desde hace 200 años, la lucha política fundamental se desarrolla entre los liberales y sus enemigos (ver Conflicto de Visiones, Sowell).

En el terreno económico, la libertad es la ausencia de coerción gubernamental para la producción, distribución y consumo de bienes y servicios más allá de lo indispensable para mantener la libertad misma. Durante toda la historia, el gobierno ha impuesto infinitas restricciones y regulaciones sobre la actividad económica de los individuos (ver La herencia del mercantilismo español, Rangel). Lo nuevo es la eliminación de esas restricciones. Pero eso es, justamente, lo que libera las energías creadoras de la gente. Los países más libres económicamente son los más ricos. Los más regulados, como Corea del Norte o Cuba están entre los más pobres (ver Indice de la libertad económica)

A fines del siglo XIX, las ideas del liberalismo dominban en todo el mundo occidental. El liberalismo, sin embargo, se vio prácticamente marginalizado durante la mayor parte del siglo XX. Eso se debió, en gran medida, a la desilusión con el capitalismo provocada por la I Guerra Mundial y luego por la Gran Depresión de los años 30 (ver Una historia económica del siglo XX, Wannisky). Todo el mundo creía que el capitalismo estaba en sus últimos estertores y que la economía planificada (a diferencia del libre juego del mercado) y la propiedad estatal (a diferencia de la propiedad privada) eran el camino a seguir (ver El Camino de la Servidumbre, Hayek ). La Unión Soviética representaba "el futuro luminoso de la humanidad." En Estados Unidos, Franklin Roosevelt, un socialdemócrata, se apoderó del nombre de "liberalismo" (Estados Unidos es el único país del mundo donde los socialistas se llaman "liberales.").

LA GLOBALIZACION

Globalización es un término moderno especialmente usado para describir los cambios en las sociedades y la economía mundial que resultan en un incremento sustancial del comercio internacional y el intercambio cultural. El término fue utilizado por primera vez en 1985, por Theodore Levitt en "The Globalization of Markets" para describir las transformaciones que venía sufriendo la economía internacional desde mediados de la década del 60. Toni Comín define este proceso como "un proceso fundamentalmente económico que consiste en la creciente integración de las distintas economías nacionales en un único mercado capitalista mundial".

La globalización es el proceso por el que la creciente comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo unifica mercados, sociedades y culturas, a través de una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que les dan un carácter global. Así, los modos de producción y de movimientos de capital se configuran a escala planetaria, mientras los gobiernos van perdiendo atribuciones ante lo que se ha denominado la "sociedad en red". En éste marco se registra un gran incremento del comercio internacional y las inversiones, debido a la caída de las barreras arancelarias y la interdependencia de las naciones.

la Globalización o el Nuevo Orden Mundial.

Para desmitificar la "globalización" se ha escrito que comenzó en 1519/22, cuando la expedición de Fernando Magallanes completó por primer vez la vuelta al mundo. No obstante, aun si admitimos que la "globalización" es un fenómeno nuevo, caracterizado por unas crecientes y muy intensas relaciones económica de todos los países, no existen, sobre el papel, razones para que este nuevo estado de cosas, cuyo impulso último viene dado por el desarrollo de las fuerzas productivas, afectara negativamente al objetivo de promover un mundo donde el conjunto de los habitantes del Planeta se beneficiara de las conquistas que el hombre ha logrado a lo largo de su historia.

Antes muy al contrario. El desarrollo de las comunicaciones y el transporte, la aparición de nuevos productos, la modernización de los procesos productivos, las técnicas de preservación de las mercancías, estos y otros avances, ciertamente maravillosos, podrían dar lugar a un intercambio creciente y a una dependencia cada vez mayor entre todos los países, que podrían resultar beneficiosos para el conjunto de todos ellos, permitiendo que las posibilidades que otorga la ciencia y la tecnología hicieran más fácil, plena y, si cabe la palabra, más feliz, la existencia de toda la humanidad.

El problema surge porque, para empezar, la "globalización" es una nueva fase del desarrollo del capitalismo, y hablando de un sistema que descansa en la división de clases y en la desigualdad no cabe pensar en la neutralidad del fenómeno. Y, para seguir, porque la globalización es en gran medida un producto del neoliberalismo, bajo cuya hegemonía está hoy concebido el orden económico mundial, el cual exacerba y amplifica los aspectos más aberrantes del sistema.

Secularización

Proceso histórico de gradual autonomía de la cultura respecto a la tutela religiosa o eclesiástica. La secularización ha jugado un rol muy importante, quizá fundamental, en las recientes reflexiones sobre la religión. Ello se debe a la amplitud y a la complejidad de los problemas que lleva consigo. "La secularización no puede interpretarse, manifiesta G. Palo, a la luz del pasado, volviendo a asumir las categorías del mismo; no puede inscribirse en un horizonte que confirma una concepción tradicional de la religión en virtud de la cual en la actualidad no puede constatarse, por la misma definición, sino decadencia religiosa". Parece que el término secularizare comienza a utilizarse por vez primera hacia el año 1648 en un ámbito político (la paz de Westfalia) para definir un tipo de acuerdo que se respeta de palabra, pero no de hecho, para admitir y negar al mismo tiempo la laicización de algunos territorios conquistados.

Para E. Troeltsch secularización significa "pérdida de cualidades específicamente religiosas" e "implica que el contenido comprendido en una forma religiosa se conserve y actúe incluso después de la pérdida de esa forma específica". Y D. Bonhoeffer empleó, más que el término, el significado mismo de secularización para indicar una nueva consideración positiva de un mundo hecho adulto y desvinculado de la dependencia religiosa; acercándose a F. Gogarten, quien concibió la secularización como fruto de la fe cristiana.

La Globalización

Llevamos de 1990 ocupándonos de la globalización y, sin embargo, todavía no nos hemos puesto de acuerdo sobre su significado.

Para algunos, en efecto, es un proceso económico-financiero, quizás el último estadio del capitalismo liberal. Otros, sin negar la progresiva inserción de las economías nacionales en un esquema de economía mundial, ven en ellos el preludio de una homogeneización cultural. Y hay quienes, más drásticos todavía, aseguran que se ha iniciado la etapa final de la utopía del estado mundial.

Todos, sin embargo, coinciden en que el proceso de globalización, aún considerado nada más en su significación económica, ha traído como consecuencia el debilitamiento del poder del Estado-nación, a punto tal que algunos han pronosticado su definitiva extinción en el próximo milenio.

Para Guéhenno, por ejemplo, “el año 1989 no clausura una época iniciada en 1945 o en 1917. Clausura lo que se institucionalizó gracias a 1789. Pone fin a la era de los Estados-naciones”. Y más adelante dirá: “El desaparecer de la nación lleva en sí la muerte de la política”.

El tema, pues, es lo suficientemente serio como para que, a poco que se piense un instante en él, surja una pregunta inquietante. En efecto, ¿es el proceso de globalización un fenómeno natural, en el sentido de involuntario, casi casual, como consecuencia lógica (y por ello irresistible) del estado de la economía y el progreso de las comunicaciones? ¿O, por el contrario, ha sido concebido, preparado y ahora conducido o dirigido por fuerzas poderosas? ¿Existe una planificación estratégica? Y si la respuesta fuese afirmativa, ¿quién la ha creado y quién o quiénes la ejecutan?

Lo que Adrián Sabulchi pone de manifiesto en su libro, es que esta prédica relativa a la creación de un poder mundial y la desaparición del Estado-nación, se encuentra enunciada desde hace más de 20 años, con timidez y disimulo primero, con bastante desparpajo en nuestros días.



El nuevo Dios: El dinero
El nuevo hombre: Una cápita
Objetivo: El Mundo

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WILSON HUARARACHI
Por wilson efrain huarachi - Friday, May. 05, 2006 at 11:44 PM
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WILSON HUARARACHI...
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ELARCO
Por wilson efrain huarachi - Friday, May. 05, 2006 at 11:44 PM
elarcodefrain@hotmail.com

ELARCO...
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ELARCODEFRAIN

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IDEOLOGIAS MODERNAS II
Por Miguel - Saturday, May. 06, 2006 at 8:54 PM
migueljordan@fibertel.com.ar

Lindo trabajo Wilson ¿Es una monografía?, y si lo es ¿dónde la presentaste? Te falto consignar la bibliografía. Saludos, Miguel.

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a que viene la fotito??
Por !!! - Sunday, May. 07, 2006 at 1:25 AM

Buscas fama Efrain?
ya te masajeaste el ego?

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Ideologías Modernas III
Por El otro semejante - Sunday, May. 07, 2006 at 1:29 PM

El trabajo de las Ideologías es interesante. Toca a todos, a los ateos, a los cristianos, a los musulmanes, a la izquierda, a los trabajadores, etc, etc ...más si queremos definir la globalización en función de la ideología las ideologías, ya que consignarla en plural o singular no es poco.

Hay muchos trabajos hasta acá, desde el celebre texto "Imperio" con el que se ha desatado una poderosa e interesante polémica no solamente en el campo popular sino en el campo ideológico.

La caracterización de cómo concebir la globalización es interesante, por eso le pido al compañero Wilson que exponga su trabajo en comparación a este célebre libro “Imperio”, como para comenzar la polémica. Abrazos.

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Una-Ideología ¿es discurso-uno?
Por El Im-parcial - Sunday, May. 07, 2006 at 2:00 PM

Una-Ideología ¿es discurso-uno?

Si, esta muy bueno el trabajo de Wilson aunque a veces impreciso. Wilson nos introduce a lo que significa para él el concepto de globalización, pero queda impregnado él mismo en conceptos muy fuertes como indeterminantes, como por ejemplo cuando cita la frase:

“El desaparecer de la nación lleva en sí la muerte de la política”

¿Cómo se entiende eso?, parecería muy articulada con aquella que decía otro “libre” pensador que decía “La muerte de la historia”.

Lo comento para que Wilson comente como articularía esa frase con el artículo que publica hoy el poeta Gelman donde informan que las víctimas iraquíes ascenderían a más de 200.000, a un promedio de 200 muertes por día y en su absoluta mayoría de esos asesinatos por las Tropas de la Coalición (EEUU, Gran Bretaña, España, Italia, etc), la mayoría de esas 200.000 asesinatos serían niños, mujeres y viejxs. Es decir esas más de 50.000 misiles supuestamente teledirigidos que destruyeron en sus primeras impactos destruyendo hospitales, escuelas, edificios encargados de distribuciones de agua, gas, electricidad, telefonía a la población,

Le pregunto a Wilson como articularía este verdadero genocidio en su interesante trabajo, es decir, como asociaría este “fin de la política” con estas más de 200.000 asesinatos. Quiero decir, cómo el compañero Wilson explicaría este supuesto “fin de la historia”.

Cómo explica Wilson “el fin de la política” con las políticas del presidente Bush.

Cómo explica el compañero Wilson “el fin de las ideologías” si hoy siguen provocando genocidios?

¿Dónde registramos esas muertes, esas torturas “actuales” de más de 34.000 torturados en las prisiones?

¿Dónde escribimos todo eso?

Lindo trabajo Wilson, pero hay que avanzarlo. Espero que con esto podamos ayudarte a complejizar este lindo trabajo que realizaste.

Chau a Todos. El Im-parcial

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estos zurdos siempre la pifian en lo mismo
Por Marlboro - Sunday, May. 07, 2006 at 4:26 PM

historia no es igual a política
política no es igual a historia.

...nunca lo van a poder entender

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MARLBORO II
Por El Im-parcial - Sunday, May. 07, 2006 at 5:10 PM

Seguro que los radicales como Marlboro, que se pone nombre de cigarrillos norteamericanos nada puede decir de la “ideología” del Gral. Roca matador de los trabajadores de la Patagonia articuladas. Como no pueden explicar la masacre del 19 y 20 de diciembre en pleno gobierno radical y como tampoco podrá hablar de la “ideología” de las “politicas” de Mr. Bush.

El aséptico y “objetivo” Mister Marlboro seguramente no quiere mezclar las muertes de la “historia” con la hermosa y linda “política” que él suele pregonar, la política del olvido de todas las matanzas para perpetuar el poderío económico de las multinacionales que representa el FMI.


Si, seguramente, este Mister-Radical, esterilizado de las políticas, “Señor Marlboro”, nada quiere saber con mezclar los 50.000 misiles que llovieron en el inocente pueblo iraquí y que solo sirve para enriquecer las grandes compañías de petróleo en los cuales sus mayores socios son la Familia Bush y sus amigos ¿Me pregunto por qué los mister-radicales colaboran con tanta mentira?

La Historia tiene su correlato en la política
La Política igualmente lo tiene en la historia.


No entender eso es proclive a escribir “lindas” y coquetas historietas, donde se excluyen las muertes, los fusilamientos, las desapariciones, el hambre de millones, la desocupación de la mitad de la población mundial …

No entenderlo así es escribir “lindas y fashion” cuentos donde no solamente están omitidas esas historias de muerte, sino todas las políticas… Por eso odias a los zurdos, y que la verdad son siempre los que están excluidos.

La ideología única que pretenden los Marlboro’s es aquella que solo cuentan con un-solo-discurso, el discurso del petróleo, el discurso de la muerte.

Esa ideología de los Marlboros son la misma planificación de la muerte de millones de inocentes escritas, ideadas en los escritorios de estos “libres” pensadores que proclaman el “fin de la historia” para solamente escribir una sola: la aséptica historieta de los amos.

Nota: Falta el comentario del compañero Wilson, así lo podemos entender mejor.

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Marlboro III
Por El Im-parcial - Sunday, May. 07, 2006 at 5:32 PM

¿Que curioso tu nombre Marlboro?, llevas el nombre de cigarrillos que causan la muerte ¿es notable como inoportuno con tanta campaña antitabaco no?, auque si soslayas, es decir, omitís tanta muerte en la historia, alguna asociación debe haber entre tu nick y el proceso de la muerte que impone la globalización del capital.

Ahora, lo más curioso es que decís que a los que llamas zurdos no lo van a entender nunca. Pero no decís qué cosa esos que cos llamas zurdos no van a entender nunca ¿no es que la política había finalizado?

Una cosa muy sencilla: No pienses que polemizo contigo Marlboro. Con los que polemizo es con los que sostienen tu idea que vos pregonas ¿se entiende?. Aunque me importa lo que decís. Y reitero, pediría nuevamente que hable el autor de la nota. Por favor Wilson aparece, así defendemos tu trabajo.

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Globalización y la lengua única
Por El Im-parcial - Wednesday, May. 10, 2006 at 9:36 AM

Me gustaría saber que relación hay entre el liberalismo y la globalización y también como se replicó en tan pocos años, teniendo en cuenta que la historia de la humanidad no comienza ni con la revolución francesa de 1789 y ni con la religión cristiana. La globalización se da con el desarrollo de capitalismo. Se replico en pocos años, ahora ¿Por qué y cómo se multiplico globalmente?

La introducción que nos hace Wilson es interesante. Me preguntaría que tendrá que ver el lenguaje por ejemplo, a propósito de una nota que apareció hoy informando sobre el tremendo susto de Bush y Cia sobre un “Himno nacional” cantado en castellano por parte y/o en momentos de que “centenares de miles de hombres y mujeres que reivindicaban una amnistía para los doce millones de trabajadores indocumentados”.

Es interesante el planteo: “El alma nacional de los Estados Unidos, manifestó Bush en una conferencia de prensa, está en peligro de perderse.” Y no se refería nada más que a eso: que había una traducción en castellano del himno y cantados por los millones de inmigrantes. Todo esto a cuento del trabajo de Wilson. Para seguir pensando la globalización, es decir, qué tienen que ver las guerras imperiales, la imposición del capital a través de los préstamos que generan deudas súper millonarias a los pueblos; tendrá en cuenta todo esto sumado a la cultura que se vehiculiza por la palabra, por el lenguaje en los medios de comunicación (revistas, diarios, y la poderosa internet), fundamentalmente por medio del monstruo de la TV que ingresa a todos los humildes hogares de cada rinconcito del planeta.. No hay nada más que lo que dice y aparece en las imágenes de la TV. No es poco.

La penetración cultural del capital, la globalización, ingresa por varios “métodos”. Si no es por los negocios monopólicos, ingresa por la fuerza de los misiles; pero siempre el lenguaje, el inglés esta en la base de la dominación.

Ese discurso único ni siquiera puede permitirse que su himno sea cantado en castellano ¿se entiende? Se entiende mucho más cuando lo pensamos observando las publicaciones de las revistas, los conjuntos musicales que cantan sus bellas, tiernas y hasta canciones de protesta en inglés, entre otras muchas cosas, pero la globalización comienza, se nutre, permanentemente por ahí.

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Ser un buen orador - II
Por El Im-parcial - Friday, May. 12, 2006 at 12:50 AM

Ví tu artículo Wilson que titulaste "SER UN BUEN ORADOR", aunque no lo leí entero –te prometo que lo leo si me contestas-, ya que en el primer párrafo hablas de "con-vencer" e “influir” y eso para mi es una no-dialéctica propia de amos que someten al otro a su discurso, eliminando la diferencia. Hay muchísimo para hablar aquí.

Estoy más del lado de la “discusión” o mejor de la “crítica” que lleve a contener las dos posiciones…

Y por otro lado no hablas de la revolución de 1917 que realmente le da valor a la de 1789 ¿se entiende? la revolución francesa que lleva al poder a la burguesía es resignificada por la revolución soviética que lleva a la nueva clase al poder, el proletariado. Esto más allá de las ideologías y de la política, total para vos están muertas. Pero vos Wilson, te lo digo sinceramente, estás maniatado por una sola lógica que no te hace ver más que un lado de la historia. Pensaba que publicabas para polemizar, pero el profesor Marlboro tampoco quiso polemizar, como se estila en estas páginas.

Saludos a los dos. Volveré sobre el tema, sino habrá sólo un discurso, y la consigna es “agregar tu comentario”, ese es el juego: hay que responder...

Y vuelvo a decirte que no es personal, detrás de tu trabajo “hay” una ideología que “responde” a una política.

Saludos para Todos. El Im-parcial.

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No te diste cuenta boludo?
Por ... - Friday, May. 12, 2006 at 1:01 AM

que Wilson es Marlboro

...si serás autista!

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No te diste cuenta boludo? II
Por El Im-parcial - Saturday, May. 13, 2006 at 1:59 AM

Me encanta tu diáfana perspicacia tan exquisitamente explicita.

Saludos a todos los otros, El Im-parcial

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Para leer
Por Un amigo de W. - Thursday, May. 25, 2006 at 11:08 AM

Del ajedrez energético
Por Juan Gelman

Zbigniew Brzezinski supo formularlo años ha: Asia central es clave para dominar el mundo por sus reservas de petróleo y gas natural. En su libro The Grand Chessboard-American Primacy and it’s Strategic Imperatives (Basic Books, Nueva York, 1997), quien fuera asesor de Carter, Reagan y Bush padre señala que en Eurasia (Rusia, Medio Oriente, India y China) se concentran “las tres cuartas partes de los recursos energéticos mundiales conocidos” y saca las conclusiones: para dominar al mundo entero, EE.UU. debe controlar esa extensa región. No otro sentido tienen la invasión de Irak y Afganistán, la proyectada de Irán y la promoción de “cambios democráticos” en Ucrania y otros ex miembros de la disuelta Unión Soviética que, casualmente, también poseen importantes reservas de oro negro. La realización del proyecto se está tornando difícil para la Casa Blanca y el vice Dick Cheney visitó Kazajstán a principios de mayo con el designio de imponerlo. El día anterior había criticado a Moscú “por su uso del petróleo y del gas natural como herramientas de intimidación y chantaje” (The New York Times, 6/5/06).
El presidente kazako, Nursultan Nazarbayev, gobierna su país con mano de hierro desde hace 12 años. En diciembre del 2005 ganó su tercer mandato sexenal con el 91 por ciento de los sufragios, una votación que recuerda las de la época soviética. Pero Kazajstán produce 1.200.000 barriles de crudo por día y se estima que llegará a 3 millones en el 2015, cuando la demanda mundial habrá crecido un 50 por ciento en comparación con 1993. De manera que Cheney, el gran impulsor de “la libertad” en todo el mundo, olvidó sus veleidades democráticas para expresar “admiración” por el dictador con la esperanza de que aceptara la construcción –por empresas yanquis, desde luego– de un oleoducto que atraviese Azeibarján y desemboque en Turquía evitando el paso por Rusia. Le fue mal: el ministro de Energía kazako no tardó en garantizar a Moscú el transporte de petróleo ruso a China por el ducto Atasu-Alashankou recientemente inaugurado.

En junio del 2001 nació la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) formada por Rusia, China y cuatro ex repúblicas soviéticas de Asia Central: Kazajstán, Tadjikistán, Uzbekistán y Kirguisistán. El mes que viene Irán, hasta ahora país observador, será invitado a ingresar a la OCS como miembro pleno, y Lio Tan, embajador de China en Teherán, anunció en abril pasado la pronta firma de un acuerdo de no pequeña dimensión: se estima que su valor será al menos de 100.000 millones de dólares. Incluye la explotación conjunta del rico yacimiento marino iraní de Yadavarán y la compra por China de 250 millones de toneladas de gas natural líquido en 25 años (http://www.globalre search.ca, 7/5/06). Por algo Pekín se opone a las sanciones contra Irán que EE.UU. quiere imponer al Consejo de Seguridad de la ONU.
En el encuentro de la OCS que tendrá lugar el 15 de junio próximo se analizará el diseño de una estrategia común de esos países asiáticos, que incluye proyectos conjuntos de trazados de oleoductos y de prospección de reservas petrolíferas, y se invitará a Mongolia, Pakistán y la India a participar en el organismo. La OCS podría convertirse en un obstáculo formidable para los sueños imperiales de los “halcones-gallina”. Por otra parte, los ministros de Energía de Irán, Pakistán y la India se volverán a reunir para examinar la propuesta de construir un gasoducto que una las tres naciones y suministre gas natural iraní a las dos últimas. La Casa Blanca, que siempre consideró a Nueva Delhi el contrapeso de Pekín en la región, presiona duro para impedirlo. El dolor de cabeza más grande para los diseñadores de la geopolítica energética norteamericana es, en efecto, China.

El 18 de abril, el presidente chino Hu Jintao inició una visita de cuatro días a EE.UU. y tuvo que padecer un par de insultos deliberados de la Casa Blanca. El más grave se produjo al encontrarse con Bush: resonó el himno chino, pero el de Taiwan, no el de la República Popular. Hu no se inmutó: terminada su estadía en Washington fue a Arabia Saudita –que la Casa Blanca considera una piedra fundamental de su política energética– donde firmó un acuerdo por valor de 5200 millones de dólares destinados a construir una refinería de petróleo y una petroquímica en el nordeste de China. Luego anduvo por Nigeria, Kenia y Marruecos, países que se ubican dentro de la esfera de influencia estadounidense. Hace un par de meses el jefe del Pentágono, Donald Rumsfeld, estuvo en Rabat para vender armamento. Hu ofreció financiar la prospección de las reservas marroquíes de petróleo y gas natural.

Brzezinski señala en su libro que uno de “los imperativos de una geoestrategia imperial” consiste en “impedir que los bárbaros se unan”. Parece que se están uniendo y tal vez se cumpla antes de lo previsto una profecía del que hoy es un neoconservador “realista”: “A largo plazo, las políticas globales serán cada vez más incompatibles con la concentración del poder hegemónico en un solo estado. EE.UU. no sólo es la primera y única superpotencia verdaderamente mundial que haya existido nunca, sino que probablemente también será la última”. Amén.

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LALI
Por LALI - Tuesday, Apr. 15, 2008 at 6:06 PM
ESMERALDA.123@HOTMAIL.COM 456798 ciudad invisible @hotmail.com

holaaaaaaaa a los años que veo tu foto! bueno que onito tu articulo.. t ebañas =D

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