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MEJICO: LA 2° SELECCION NACIONAL ARGENTINA en el Mundial
Por Brutus -
Monday, Jun. 12, 2006 at 1:59 AM
La seleccion nacional Mejicana, dirijida por el técnico Argentino Ricardo La Volpe vencio al combinado Irani por 3 a 1, desplejando un juego espectacular y un esquema de circulacion tipicamente Argentino que recuerdan el sistema tactico puesto en marcha por Bilardo durante el Mundial de 1986.
Superando criticas injustificadas, La Volpe impuso esta sorprendente seleccion conservando el grupo de base que llego a semi-finales en la ultima edicion de la ultima copa de confederaciones. En una sabia combinacion de juventud y experiencia, agrego nuevos jugadores, entre ellos al también Argentino Guillermo Franco.
Como buen Argento, Ricardito La Volpe suele tener grandes arrebatos de optimismo. Hace unos pocos dias afirmo tonicamente que Méjico se llevara este año el maximo titulo mundial.
¿Porqué no?. Aunque para eso tendra tal vez que verselas primero con nosotros, jeje. Y ahi no sé, con todo respeto, quien la talla mas alto.
Igual. Vamos Vamos Querido Méjico También.
Aguante América
La Volpe, Maestro. Pensamiento Brutus de Norte a Sur.
El milagro Correntino en Mexico
Por el mariachi zapatista -
Monday, Jun. 12, 2006 at 3:23 AM
mariachinga@hotmail.com
Su aparición como internacional, una mudanza a Europa y una trayectoria en la Liga de Campeones de la UEFA: lo que fue un año extraordinario para Guillermo Franco.
El delantero nacido en Corrientes, Argentina (hoy punta de lanza del ataque de México) no es un jugador común.
En una entrevista la estrella del Villarreal cuenta cómo su vida, que estuvo a punto de no comenzar, está llegando a las puertas del cielo futbolístico.
La lucha por la vida
Su esforzada actitud actitud ayudo a Franco a dominar el aspecto mental del fútbol, algo que otros jugadores han sido incapaces de hacer. Destacado por su juego aéreo y por su capacidad como corredor, la principal virtud de Guillermo Franco es su tenacidad, una cualidad que ha mostrado desde que nació.
El propio jugador nos cuenta cómo dos semanas antes de lo previsto para darle a luz, su madre, Ada Virginia, tuvo la repentina sensación de que algo no iba bien y corrió a ver a un doctor.
“No tenía síntomas de enfermedad”, cuenta Franco. “Mi madre dijo que había tenido una premonición: estaba convencida de que me estaba muriendo, y convenció al doctor para que la llevara al hospital. Allí descubrieron que tenía el cordón umbilical enrollado en el cuello y me estaba estrangulando”.
Después de una cesárea de urgencia y de sobrevivir por poco en una incubadora durante dos semanas, el bebé, bautizado Guillermo, finalmente salió adelante. Ada, sin embargo, no estaba destinada a criar al niño que salvó: los padres de Franco se divorciaron cuando él tenía cuatro años, y su abuela Eva se encargó de criarlo.
"Fue una época muy dura”, admite. “No teníamos mucho dinero y yo echaba la culpa a Dios por no poder tener una vida normal con mi madre y mi padre”.
Un día, cuando tenía nueve años, Guillermo salió de la ducha y, empapado, fue a buscar algo de beber al viejo refrigerador de su abuela. Al ir a abrirlo recibió una descarga eléctrica de 120 vatios. Aunque lo tiró al suelo, el chaval consiguió pedir ayuda. Eva lo oyó gritar, corrió hacia la cocina e intentó apartar a su nieto del refrigerador con una mano mientras agarraba una silla de madera con la otra. Ambos se electrocutaron durante varios minutos, pero milagrosamente sobrevivieron.
"Teníamos que haber muerto”, dice Guille. “Unos expertos nos lo dijeron. Nos explicaron que mi cuerpo tenía que haber estallado porque la tensión es el doble cuando dos cuerpos se tocan. El poco de madera que mi abuela agarró no podía haber repelido la descarga”.
De Corrientes a Buenos Aires
Guille, que se pasaba el día en la calle jugando al fútbol, logró destacar como futbolista. Tanto fue así que el club San Lorenzo lo fichó para sus categorías juveniles. De este modo, después de volver a vivir con su padre a los 14 años, abandonó de nuevo el hogar.
Lejos de su familia, la gran ciudad le planteó otro reto emocional. llevandolo a vivió en un barco anclado al lado de lo que hoy es el exclusivo barrio de Puerto Madero. Tenía poco dinero y sufría horribles pesadillas.
El 12 de mayo de 1996 debutó en el San Lorenzo y, en seis años, logró ganar dos títulos con este club relativamente humilde. Cuando la crisis económica golpeó Argentina, Guille, con 26 años, casado y con una hija, fichó para el Monterrey de México.
Valiente, veloz y dedicado Franco se convirtió rápidamente en un favorito de los aficionados, marcó 57 goles en cuatro temporadas y contribuyó a que su club ganara el título en 2003. En su cuarta temporada en México, el seleccionador Ricardo La Volpe le preguntó si estaría preparado para defender los colores de la selección mexicana.
"México me ha dado todo lo que tengo”, explica. "Me dio dos hijas, estabilidad económica y la oportunidad de mejorar como persona. Pensé que se me ofrecía una excelente oportunidad para expresar mi gratitud".
Después de un comienzo estelar en el fútbol europeo en la primera división española, Franco espera coronar un año sensacional en la Copa Mundial de la FIFA.
México nunca ha superado los cuartos de final en un Mundial. “No sé por qué”, cavila Franco. “Hay suficientes buenos jugadores y no creo que tengamos que cambiar nuestro estilo de juego para tener éxito”.
“La prensa ha criticado a Ricardo La Volpe y a veces tiene problemas para comunicarse con los jugadores, pero hay un buen ambiente en el equipo, estamos todos unidos. Creo que superaremos la fase de grupos y que podríamos llegar a las semifinales e incluso a la final”.
Si los goles de Franco llevan su país de adopción a lo más alto, veremos con frecuencia su saludo con el brazo al cielo. “Mi vida ha sido un milagro”, declara. “Si es mi hora y la de México, Dios lo decidirá”.
fuente: mariachi world cup de la chingadera