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Llamado de Blumberg a la seguridad, insegura
Por Adolfo Pérez Esquivel -
Thursday, Aug. 24, 2006 at 11:08 AM
Blumberg y sus aliados han convocado a una marcha por la seguridad, para el día 31 de agosto. Su reclamo consiste en pedir una policía unificada a nivel nacional y bajar la edad de imputabilidad de los menores. Dice que “la marcha será apolítica” y que “no pueden permitir que los menores sigan asesinando gente”.
Evidentemente busca soluciones por el camino de la fuerza y lograr que se sancione en el Congreso una ley para penalizar a los menores, porque –según el ingeniero– “hay que impedir que maten gente”. Podemos comprender y acompañar, ya que ha sufrido una dura experiencia personal dolorosa como es la pérdida de un hijo, pero hay que tener cuidado de no generalizar. Hay organizaciones de familiares víctimas de la violencia social como Avise, que reclaman Verdad y Justicia, juicio y castigo a los responsables, pero lo hacen dentro del marco de la ley y el derecho. Las leyes vigentes en el país son buenas, lo que falta es aplicarlas correctamente.
Otro de los problemas planteados por Blumberg es que, según su entender, los menores matan. Es correcta hasta cierto punto su afirmación, pero debe entenderse que la pobreza no es un delito, los chicos y chicas en situación de riesgo social no son delincuentes, son víctimas de una sociedad injusta y sufren la marginación y la represión. Es cierto que ha aumentado la inseguridad social, pero no se soluciona con medidas represivas, poniendo más policías. Ya han intentado bajar la edad de imputabilidad de los menores, pero quiero recordar que existen leyes y resoluciones internacionales, como la Convención de la Infancia de las Naciones Unidas, que los países miembros tienen la obligación de respetar y hacer respetar. Blumberg ha equivocado el camino. Y es peligroso pensar que aplicando la mano dura resolverá los problemas sociales. Son medidas que llevan al totalitarismo y al fascismo, generando y aumentando el miedo, el sometimiento y las violaciones de los derechos humanos. Estos planteos buscan aparentemente mayor seguridad pero generan mayor inseguridad.
La alternativa para superar la violencia y la inseguridad pasa por generar los espacios de acción social superadores de la pobreza, y proponer planes educativos y la participación de los jóvenes en la sociedad. Muchas de esas políticas están en marcha. El Ministerio de Educación lleva adelante planes de alfabetización a nivel nacional; el Ministerio de Desarrollo Social y el de Salud han implementado planes de asistencia y promoción humana, muchos municipios llevan adelante programas de asistencia a la minoridad, atendiendo la salud, educación y el derecho a una vida digna.
Organismos de derechos humanos y sociales comprometidos con el trabajo legal y social con menores en riesgo social vienen desarrollando planes, programas y proponiendo políticas, a nivel nacional y local. Hacer creer que la seguridad se logra con mayor represión y sanciones contra sectores de la población, contra los mal llamados chicos de la calle, como Blumberg lo ha señalado en su oportunidad, es no querer ver o no comprender la situación social. Sería bueno que toda esa energía puesta en buscar mecanismos de una seguridad cada vez más insegura que lleva a propuestas represivas y a la pérdida de los derechos, las use correctamente para impulsar políticas sociales en bien de todos. Y para ayudar a los más desprotegidos y no marginarlos, porque tienen los mismos derechos que todo ciudadano.
Y otra cosa que es necesario tener presente es la decisión política del gobierno nacional y de algunas provincias, no todas, de fortalecer las instituciones de las fuerzas de seguridad y el rol que éstas deben cumplir. Debemos recordar que en sus orígenes las fuerzas de seguridad fueron constituidas como fuerzas de prevención y seguridad social; lamentablemente, políticas como las que propone Blumberg hacen que continúen actuando como fuerzas de represión, lo que rechazamos rotundamente.Vemos que también en las fuerzas de seguridad comienza a comprenderse esta diferencia y esperamos que, como instituciones al servicio del pueblo, puedan cumplir sus obligaciones en defensa de la vida, la dignidad de la persona y el pueblo. Hay signos esperanzadores en esa dirección que hay que profundizar. La democracia y los derechos humanos son valores indivisibles y son espacios a construir ciudadanía con el esfuerzo de todos. Que la marcha del 31 sea “apolítica” no se lo cree ni el mismo Blumberg.
Venimos de experiencias muy duras para restablecer el estado de derecho en el país y el respeto a los derechos humanos. Hemos aprendido que nada es aséptico, la marcha plantea objetivos políticos para establecer espacios donde la seguridad que propone sea el autoritarismo y no el derecho; que la policía de “mano dura” reprima y que los jueces juzguen a los pobres como delincuentes. Ya conocemos esos mecanismos que buscaron imponer Patti, Bussi, Rico y los personeros de la dictadura militar. Eso no resuelve el grave problema que vive el país, heredado de gobiernos incapaces y del saqueo a que fue sometido.
Es necesario hacer memoria. No es porque sí no más que tenemos cerca de 10 millones de personas en situación de pobreza, que mueran niños de hambre y enfermedades evitables, que haya aumentado el analfabetismo. Esa es la inseguridad que hoy sufre el país. Es necesario construir los espacios que garanticen la seguridad social. Se necesita un debate nacional para analizar el camino a recorrer y aportar a la vida y seguridad de nuestro pueblo. Con la represión nada se construye. Cada uno debe decidir qué hacer. Y quienes participen de la marcha el día 31 deben tener claro los objetivos, analizar qué es lo mejor para el país para no ser sorprendidos en su buena fe.
Tener buena memoria
Por Buenamemoria -
Thursday, Aug. 24, 2006 at 2:24 PM
Propone Adolfo Pérez Esquivel que los argentinos tengamos memoria.
Y es correcto. Tengamos memoria.
Revisemos las votaciones nominales de los diputados nacionales que aprobaron la legislación Blumberg.
Recordemos que el mecanismo para aprobar parte de esa legislación fue la presión mediática, y la movilización al Congreso, con la participación dentro del propio recinto de la Cámara de Diputados del mismísimo Juan Carlos Blumberg, que hasta levantó la mano para hablar, y tuvieron que recordarle que no ocupaba una banca, y que por reglamento no podía hacer uso de la palabra durante el debate legislativo.
Recordemos que para aprobar parte de esas leyes se pidieron sesiones especiales.
Recordemos que para modificar el Código Penal se requería una mayoría especial, y que el bloque mayoritario de la Cámara no reunía ese número, a tal punto que una de las sesiones especiales fracasó por falta de quorum. Les faltaba un diputado.
Recordemos que al día siguiente, mes de abril del 2004, la sesión se volvió a convocar, para sorpresa de muchos, y esta vez tuvo el número suficiente para aprobar parte de esa legislación.
Recordemos quienes dieron el quorum y quienes levantaron la mano.
Miremos bien los nombres y apellidos de esas votaciones nominales.
¿Nos sorprenderá ver que 49 de los diputados nacionales que dieron ese quorum para la sesión especial de Blumberg forman parte del hoy llamado Bloque Frente para la Victoria-PJ?
De los 49 legisladores que le dieron quorum a Blumberg, para su mano dura legislativa, no todos votaron igual, ya que hubo varias votaciones, pero dieron el quorum que era sabido que significaba la aprobación de la legislación que hoy se repudia.
El bloque actual del Frente para la Victoria-PJ tiene 117 diputados nacionales. Cuarenta y nueve de ellos permitieron la aprobación de las leyes Blumberg, y hoy algunos se molestan porque Blumberg marcha a la Casa Rosada.
Por supuesto que Blumberg expresa a la derecha más recalcitrante.
¿Y a quien expresan los 49 diputados nacionales que le dieron aquel quórum?
A Kirchner.
Esos 49 diputados nacionales que aprobaron la legislación Blumberg hoy son diputados de Kirchner.
O sea, el chancho y el que les da de comer se quieren diferenciar.
Legisladores Blumberg
Por Aquí están estos son -
Friday, Aug. 25, 2006 at 2:17 AM
49 diputados nacionales, integrantes del actual Bloque Frente del Peronismo para la Victoria -PJ, que tiene hoy 117 integrantes, se sentaron en las bancas y votaron nominalmente de manera afirmativa para tratar, y luego aprobar, sin reabrir el debate, las leyes Blumberg.
Ellos son:
Agüero Elda Susana
Arguello Jorge Martín Arturo
Arnold Eduardo Ariel
Artola Isabel Amanda
Baladrón Manuel Justo
Bejarano Mario Fernando
Bertone Rosana Andrea
Bianchi Silvestre Marcela Alejandra
Canteros Gutierrez Alberto
Cantos José María
Córdoba Stella Maris
Daher Zulema Beatriz
Daud Jorge Carlos
Daza Héctor Rubén
De Bernardi Eduardo
De la Barrera Guillermo
De la Rosa María Graciela
Díaz Susana Eladia
Fadel Patricia Susana
Fernández Alfredo César
Figueroa José Oscar
Gallo Daniel Oscar
Garrido Arceo Jorge Antonio
Gioja Juan Carlos
Giorgetti Jorge Raúl
Godoy Ruperto Eduardo
González Jorge Pedro
Gutierrez Francisco Virgilio
Herrera Griselda Noemí
Ingram Roddy Ernesto
Irrazábal Juan Manuel
Lamberto Oscar Santiago
Lovaglio Saravia Antonio
Marconato Gustavo Angel
Mediza Heriberto Eloy
Mongeló José Ricardo
Nemirovsci Osvaldo Mario
Olmos Graciela Hortensia
Osorio Marta Lucía
Osuna Blanca Inés
Perié Hugo Rubén
Richter Ana Elisa Rita
Romero Rosario Margarita
Roquel Rodolfo
Salim Fernando Omar
Sartori Diego Horacio
Sluga Juan Carlos
Snopek Carlos Daniel
Urtubey Juan Manuel
Conviene recordar que el 28 de abril del 2004 se realizó el intento de aprobar el segundo Blumberazo.
Por sólo un voto, en una votación nominal, que requería los dos tercios, el Bloque del PJ perdió la votación. Díaz Bancalari y Graciela Camaño tuvieron un verdadero ataque de nervios en sus bancas. Y al día siguiente ordenaron la tropa de urgencia. Llamaron sorpresivamente a sesión especial, y esta vez sí, avanzaron duramente contra el viejo y garantista Código Penal, con leyes manodura que no sirven para nada, salvo para que los jueces las resuelvan inconstitucionales, cosa que sucedió innumerables veces tal como se anunciaba.
El 29/04/04, después de una tormentosa noche, los manoduristas consiguieron 152 votos afirmativos contra 70 negativos, y entonces, aprobado el blumberazo.
¿De qué se queja la Casa Rosada?
De que Blumberg no se contenta con el apoyo para su fundación, y a pesar de tanta franela, se va con Lavagna.
Eso es todo.
Y como todos los datos se pueden sacar de la página web de la Cámara de Diputados, quienes quieran marchar contra Blumberg, con el inefable Delía, pueden entonces exigir la renuncia a las bancas de cuarenta y nueve diputados nacionales, hoy kirchneristas, que son sus compañeros, y algunos de ellos incondicionales del señor presidente, así nos ahorramos toda esta sanata.
Los que no votaron leyes Blumberg, los que no les dieron quorum, los que denunciaron lo que estaba pasando... bueno, casi todos perdieron sus bancas.
Esa es otra memoria que conviene desarrollar.
¿Para qué podrían servir esas bancas si las ocuparan los que no compraron ni vendieron nada, y mucho menos el discurso de la mano dura?
Los que no mandaron tropas a Haití, los que denunciaron la deuda, los que explicaron mejor como se resolvería la seguridad, con empleo, educación, salud, inclusión social...
Tiene razón Perez Esquivel.
Se trata de tener buena memoria.
excelentes los dos primeros comentarios
Por blumberg=titere de kirchner -
Friday, Aug. 25, 2006 at 2:35 PM
gracias por publicar la lista de esos soretes!