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Unión Europea indiferente ante disturbios exige cambios en Hungría
Por Reenvío Prensa Latina - Wednesday, Sep. 20, 2006 at 3:02 AM

Budapest, 19 sep (PL) La Unión Europea (UE) se mostró hoy cercana a la indiferencia ante los disturbios ocurridos en Hungría, al considerar necesarios, aunque dolorosos, los cambios para reducir el abultado déficit fiscal magyar.

Tras reportarse casi 200 heridos en los desórdenes de la víspera cerca del Parlamento y la televisión nacional en esta capital, la dirección comunitaria consideró que Budapest debe adoptar medidas para poner a tono al país con los acuerdos económicos de Mastricht.


El primer ministro socialista húngaro, Ferenc Gyurcsany, admitió la veracidad del contenido de grabaciones publicadas por la prensa de una reunión a puertas cerradas de mayo pasado de su gabinete donde afirmó que mintió al pueblo durante la campaña electoral.


Gyurcsany ocultó las fuertes medidas de austeridad, como la subida de impuestos y la reducción de subvenciones, que pondría en práctica para poder salir airoso en los comicios de abril último.


La UE exige que Hungría aplique regulaciones para cumplir con su compromiso de llevar el déficit planificado en este año de 10,1 por ciento del Producto Interno Bruto a 3,2 en 2009.


En opinión de Amelia Torres, portavoz del comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, el recorte del déficit fiscal será, dijo, por el bien de la población, aunque doloroso.


Torres, citada por la prensa capitalina, recordó que la Comisión Europea, órgano ejecutivo de la UE, analizará antes de finalizar este mes el programa revisado de convergencia, presentado por las autoridades de este país el pasado día primero.


Ello prepararía condiciones en esta nación de Europa del este, que ingresó a la UE el 1 de mayo de 2004, para unirse a la zona del euro en 2013.


Asimismo, la inusitada reacción ante las revelaciones de la prensa parece estar más allá de un movimiento popular espontáneo, cuando se conoce la participación mayoritaria en ello de elementos de extrema derecha, incluidos los llamados cabeza rapada.


Al respecto, el jefe de Gabinete consideró que las manifestaciones callejeras de ayer en esta capital, donde decenas de autos fueron incendiados y parte del edificio de la televisión tomado y saqueado, constituyeron un ataque a la República.


Tras una reunión de emergencia del ejecutivo, Gyurcsany estimó que se trató de la noche más larga y oscura de la historia reciente de este país.


Mientras el gabinete realizaba su encuentro extraordinario, entre 200 y 300 miembros del ultraconservador Partido Jobbik (Movimiento por una Hungría Mejor) se congregaron frente al edificio del Parlamento.


Los manifestantes portaban un féretro que simbolizaba el entierro del gabinete de Gyurcsany, quien este martes rechazó la posibilidad de su renuncia.


El jefe de Gobierno se negó a aceptar la dimisión presentada por su ministro de Justicia, Joszef Petretei, a cargo de la policía, la cual arremetió anoche contra quienes asaltaron la sede de la televisión, en medio de una demostración de unas 10 mil personas.



pgh/to

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