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Se levantó el acampe en Dana Spicer
Por reenvío agencia walsh -
Wednesday, Jan. 23, 2008 at 6:32 PM
Los trabajadores de la autopartista multinacional Dana Spicer que se encontraban acampando en el portón de ingreso a la planta de Grand Bourg, decidieron levantar la medida.
Buenos Aires, 22 de enero de 2008 (especial el roble.) El viernes se produjo una audiencia de negociación en el Minsiterio de Trabajo y, tan negociado como siempre, se produjo un capítulo más del pacto social entre gremio-patronal-gobierno. El sindicato de mecánicos y afines del transporte automotor (SMATA), donde se encuentran nucleados todos los obreros de Dana Spicer firmó el acta que avala la "reestructuración productiva", argumento técnico esgrimido por la empresa para provocar el despido de más de 50 empleados a principios de enero. El "acuerdo" resolvió la reinstalación de 18 despedidos . El resto...
En la madrugada de ayer lunes, se realizó una asamblea donde se resolvió junto a los compañeros que se reincorporaban levantar el acampe. Pero la nota sobresaliente fue el despliegue policial encomendado por Dana Spicer. Fuentes de este periódico indicaron que como mínimo 100 efectivos de azul se encontraban rodeando la planta. A ellos deben sumarse medidas represivas como la presencia policial también en baños y la incomunicación entre sí a la que los compañeros se encuentran sometidos.
Esta militarización es obra de la empresa, pero no deja de estar avalada en un todo por un gremio que ve en la organización y el activismo de los compañeros al enemigo mismo. De la misma manera, hace la vista gorda a una cuestión central de toda esta movida: el incremento de la productividad a menor costo de mano de obra, el incentivo a la precarización laboral y el desmedro de la salud de la clase obrera. En estos momentos, donde había cinco operarios hay tres.
El grueso de los trabajadores que por ahora mantienen alejada la autopartista y el SMATA, es el mismo que durante los últimos cinco años recuperó conquistas históricas para los trabajadores de planta permanente, presentó batalla por los trecerizados, se solidarizó con otras luchas clasistas y realizó un minucioso informe técnico, traducido en denuncia, acerca de las pésimas condiciones de salubridad con las que opera la fábrica: sustancias cancerígenas son utilizadas en el proceso de fundición y los mismos desechos cancerígenos rellenan el asfalto en las obras públicas que realizan los municipios aledaños a Dana Spicer.
El lunes 14 de enero, cerca de la medianoche, una patota de aproximadamente 60 bestias -algunos con la camiseta de Chacarita- golpearon a los trabajadores despedidos y en huelga. Los nuevos "batatas" llegaron con armas blancas, y saquearon el acampe atacando a los obreros con cuchillos y navajas. Además robaron pertenencias, rompieron coches estacionados, quemaron otros y se despidieron con tiros al aire. Como consecuencia del feroz ataque, el compañero Manuel Mora debió ser internado en el Polo Sanitario de la zona de manera urgente y otros heridos leves permanecieron en el lugar.
Esta práctica de amedrentamiento de la lucha obrera es típica de la organización patronal y la burocracia. Si bien nadie afirma que hayan sido personeros del genocida Gordo Rodríguez de la seccional San Martín, descreer de ello es caer en la ingenuidad.
AGENCIA DE COMUNICACION RODOLFO WALSH