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Los comunistas y el campo
Por Jorge Kreynnes -
Sunday, Apr. 06, 2008 at 11:01 PM
El Partido Comunista, desde un inicio, alertó sobre el peligro de que las derechas surfeen la situación, apoyadas particularmente ahora en una base social propia: la de los sectores agroexportadores más concentrados y los nuevos pooles de siembra, especialmente de soja. Es ya imposible desconocer que hay en la Argentina una derecha en fase de constitución avanzada que se conforma como el peligro principal del actual cuadro político.
Tras su debacle del 2001 esa derecha logró en su momento con Blumberg instalar una falaz idea de la “inseguridad”, ganando un sector de las capas medias. Luego ha establecido con Macri su cabecera de playa en la Ciudad de Buenos Aires, agrediendo a los sectores más vulnerables como los cartoneros y los trabajadores contratados o los usuarios hospitalarios del Conurbano, y se propone ahora más cesantías del personal de la Ciudad. Es una derecha que aspira a contar con su propia Policía establecida bajo el paradigma de la represión. Y busca a toda costa alcanzar el gobierno nacional para que la Argentina se alinee nuevamente con los EE.UU., respalde los tratados de libre comercio, minimice el Mercosur y actúe contra Venezuela, contra Bolivia, contra Ecuador, y contra el intercambio humanitario y una paz consensuada políticamente en Colombia.
Para eso, entre otras cosas, deliberó en Rosario hace unos días un cónclave kukuxclanero con Aznar, Fox, Lacalle, Tuto Quiroga y una horrible sarta de neoliberales financiados por el Partido Liberal de Alemania y la Organización Democristiana de América, devenida en instrumento yanqui. No es casualidad que Macri homanajeara a algunos de ellos declarándolos “ciudadanos ilustres” de Buenos Aires.
Ahora es esa derecha la que programó y desarrolló mediante los pulpos de la comunicación los cacerolazos urbanos “espontáneos” de los últimos días en apoyo “al campo”, los cuales, al margen de quienes hayan concurrido con la mejor intención, resultan un nuevo modo de avanzar en su proyecto reaccionario y desestabilizador. Es interesante verificar el modo cómo los hechos fueron presentados en lo mediático: esta vez los protagonistas de los cortes de ruta no eran unos forajidos piqueteros, sino “gente del campo”. Los caceroleros del norte porteño eran “ciudadanos comunes” y quienes los confrontaron defendiendo al gobierno fueron tildados de “piqueteros violentos”
Todo ello, por supuesto, es parte de la política, es parte de la lucha de clases y hasta resulta lógico. Como dijimos más arriba, cada uno defiende sus intereses.
El oportunismo de izquierda
Lo que resulta verdaderamente sorprendente es que algunas fuerzas de izquierda, especialmente de raíz trotskysta, hayan concurrido a esos cacerolazos junto a los macristas, los de la Coalición Cívica y los adictos porteños de la Sociedad Rural. Algunos responderán: no tan sorprendente, ¡si ya habían marchado con Blumberg!
Llama especialmente la atención el oportunismo de ciertos adictos de palabra al gran revolucionario ruso muerto en México que postulara en su momento en Rusia la socialización forzosa de las tierras y la proletarización del campesinado, que ahora marchan a la vera de los estancieros más ricos en su error de poner por delante las diferencias con el actual gobierno sin medir cuáles son hoy los movimientos de la lucha de clases en la Argentina y en América Latina.
¿Qué tendrá que ver eso con la tan pregonada “independencia política de los trabajadores” que se vocifera a rabiar? Esa gente ha entregado la independencia de sus subdivididas fuerzas políticas a cambio de las monedas depreciadas que ofrece estar de cualquier modo en la calle haciendo alguna forma de proselitismo.
La responsabilidad de cada uno
Es verdad que el gobierno no ha definido una política agropecuaria de carácter progresista que asegure la carne, la leche, el pan, los vegetales y el vino a precio accesible para las mayorías sufridas de nuestro pueblo, con una justa retribución para quienes trabajan la tierra, que seguramente no son los Miguens y compañía. Y que se han tomado medidas inconsultas, improvisadas e indiscriminadas, desconociendo la diversidad y segmentación social del campo argentino.
También es verdad que eso justifica la demanda de los pequeños y medianos productores que están en las rutas, a los que apoyamos, aunque es evidente que pierden efectividad los discursos correctos que confrontan la concentración de la propiedad de la tierra y de la renta agropecuaria con una asociación con las entidades que a todas luces representan esas lacras de nuestra estructura económico-social.
Hemos definido que las retenciones son una adecuada reforma para recuperar ganancias exageradas de los sectores agroexportadores más concentrados, pero ellas deben ser discriminadas por sector, deben formar parte de un proyecto agrario de tinte popular y antilatifundista y su producido debe ser distribuido a favor de los sectores desposeídos del país.
Al respecto será necesario promover un gran debate nacional.
Los comunistas hemos adoptado una política que pone el acento en la lucha contra la derecha agazapada y amenazante, propusimos una diferenciación entre los pequeños y medianos productores y los grandes concentradores y un conjunto de propuestas (ver declaración del PC del 26 de marzo de 2008) que responden a las inmediatas necesidades del campesinado pobre y medio y que se concatenan con una estrategia de recreación de las juntas nacionales de Granos y de Carnes, la nacionalización del comercio exterior y una reforma agraria integral.
Incluimos en las proposiciones resolver ya las injustas situaciones laborales por que atraviesan los trabajadores rurales y peones de campo.
La escena política muestra además que entre los que se enfrentan al paro agrario hay una diversidad de sectores económicos y políticos entre los que hay severas contradicciones.
Son convocadas movilizaciones y ello es lo que corresponde, aunque hacen eje en una defensa acrítica del gobierno y se anuncia en ellas la participación de sectores de cuestionada autoridad política y ética.
El océano en que se navega es tormentoso. Las mareas y los vientos van en una y otra dirección afectando la visibilidad del conjunto de la situación. Ese clima será el contexto de las próximas luchas en las que sin dudas hay que actuar sin caer en el pecado de la neutralidad que sólo favorecerá los peores designios. Quienes busquen pureza ideológica o sufran de rigidez teórica se quedarán en su casa analizando sesudamente las imágenes que le ofrezcan los canales de TV.
Nosotros no pensamos así. Es hora de actuar.
Lo importante es sostener el timón con los cañones apuntados contra las oligarquías y las derechas, y en medio de una situación difícil de encontrar en los libros, donde hay confusión, muchos que confunden y otros que buscan confundir, quienes aspiramos a una política alternativa debemos apuntar a agruparnos con las fuerzas que comparten esa misma direccionalidad.
Y ese encuentro, en estos días, será en las calles.
SOS MUY ATREVIDA! COMUNISTAS ERAN LAS DE ANTES!
Por Fany -
Wednesday, Apr. 09, 2008 at 3:47 PM
Qué raro, el PC criticando a los troskos. Por qué no hablan de su ferviente apoyo al golpe de Videla? de los afiches de su frente "progre" con la carita del Che y del impresentable de Luis Juez? por qué no hablan de cuando se pasaron a la vereda de enfrente mientras la cana reprimía a lxs troskxs por el Cospelazo?
respuesta
Por espartaco -
Wednesday, Jul. 16, 2008 at 6:40 AM
obelixlibertarix@yahoo.com.ar
los comunistas siempre han traicionado a la izquierda por ser de origen burgues, por creer que los trabajadores no podemos organizarnos y por eso ellos, los iluminados, nos tienen que guiar x el camino a traves de sus vanguardias. que los trabajadores somos ignorantes es otro prejuicio burgues adoptado por la izquierda como otras tantas practicas...
el PCR y el PC son casi lo mismo, y los troscos tambien, todos burgueses. y no me extrañaria que algunos anarquistas tambien lo sean.
hay que volver a los clasicos, ¿acaso no leyeron el capiatal? la situacion no es tan confusa, los que perdemos siempre somos los mismos, los burgueses sean de izquierda o de derecha siempore nos han cagado, asi se pongan la remera del che comprada en la calle florida.
en lo unico que estoy de acuerdo es que hay que ser pragmatico y evitar que los niños mueran de hambre mientras otros se enrriquesen.
no hay que apoyar al gobierno, hay que oponerse a la oligarquia y a la burguesia que apoya y se erriquese con el campo.
acuerdo
Por militante -
Wednesday, Jul. 16, 2008 at 9:30 PM
ACUERDO CON LA POSICION DEL TIPO ESTE... POR SUERTE EL PC ESTA VES NO SE PUSO DELA VEREDA DE ENFRENTE CON LOS GORILAS....ALGO APRENDIERON.... BIEN AHI....
Y AHORAS Q SIGUE CUANDO ESTO TERMINE..... LA ALTERNATIVA POLITICA CUANDO LA CONSTRUIMOS....????
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Por . -
Thursday, Jul. 17, 2008 at 1:22 PM
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Todos los negros con las manos arriba.