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Comenzó la cruzada por el derecho al voto en el exterior
Por Periódico Renacer - Friday, Sep. 19, 2008 at 3:03 AM

Un puñado residentes bolivianos y argentinos llegaron a La Paz para exigir la aprobación de la ley que permitirá votar a tres millones de compatriotas que viven en el exterior. Una deuda pendiente del Estado.

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La Comisión que viajó a Bolivia se manifiesta con pancartas en la Plaza Murillo

Partieron en forma sorpresiva, lo decidieron después de una reunión realizada el penúltimo sábado en la Plaza Tupac Amaru.
Algunos dejaron sus trabajos, otros van sin mayores recursos y consultados por Renacer no saben donde van a parar los próximos días.
Se los ve decididos y no piensan volver si no consiguen respuestas a sus demandas.
Llegaron a Bolivia luego de un largo viaje desde Buenos Aires que les cobró factura en los casi 4 mil metros sobre el nivel del mar en la ciudad de El Alto, donde durmieron para recuperar fuerzas.
Al día siguiente (al cierre de esta edición) debían descender en una marcha pacífica hasta la plaza Murillo pero el cambio de clima afectó su salud y recién en horas de la tarde dieron a conocer su voz olvidada.
Se trata de 20 personas, residentes bolivianos en Buenos Aires, que llegaron a la sede de gobierno para exigir el trata-miento y la posterior aprobación del ahora olvidado anteproyecto de la ley del voto de bolivianos residentes en el exterior.

Un pedido legítimo

Uno de ellos es Juan Carlos Inocenti, que radica en ciudad autónoma de Buenos Aires, hace 20 años apuesta a una organización entre los compatriotas que decidieron dejar Bolivia para buscar mejor suerte. Para ello se han dividido en grupos de cuatro o cinco personas para reunirse con el canciller David Choque-huanca, con parlamentarios, principalmente con los senadores, pues en la Cámara Alta es donde se encuentra estacando el proceso de la revisión del mencionado anteproyecto. Recordemos que el mismo fue aprobado luego de varios años en la Cámara de Diputados –donde el oficialismo posee mayoría– pero no corrió la misma suerte en la Cámara de Senadores, donde prevalece la oposición.
Al cierre de esta edición, Inocenti y los demás compatriotas continuaban haciendo escuchar su voz y esperando una respuesta positiva a su pedido que se contempla en las leyes bolivianas pero que en la realidad nunca se cumplió. Y es precisamente, ahora, cuando Bolivia atraviesa por grandes cambios político sociales que es imprescindible que todos los bolivianos hagan escuchar su voz a través del voto.

Había una vez…

Todo comenzó antes de las elecciones de diciembre del 2005, en el que ganó Evo Morales, y cuando la justicia boliviana ordenó que los emigrantes bolivianos puedan ejercer el derecho a votar en elecciones. Por su parte, la Corte Nacional Electoral (CNE) arguyó que los bolivianos en el exterior no podían votar aún porque no existía una absoluta claridad sobre los procedimientos para la votación o un presupuesto acorde para llevar adelante el proceso. Según el Código Electoral (reformulado en 1991) y la Constitución Política del Estado, todos los ciudadanos bolivianos mayores de 18 años residentes en el extranjero tienen el derecho de votar en las elecciones generales del 2005 pero en ese entonces el vocal de la CNE, Salvador Romero, dijo que por razones logísticas y econó-micas los bolivianos en el extranjero no podían votar. Esto, legalmente, era contradictorio pues según las atribuciones establecidas en el artículo 29 del Código Elec-toral, la CNE puede decidir quién puede o no votar. Concretamente el artículo 8 señala que «no podrá ser restringido, obstaculizado ni coartado en su ejercicio por ninguna autoridad pública ni persona particular».

Desde La Paz, Richard Sánchez

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