Julio López
está desaparecido
hace 6428 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

La Nueva Constitución Política de Kollasuyu, Bolivia
Por ASUNCIÓN ONTIVEROS YUQUILA - Wednesday, Mar. 25, 2009 at 12:05 AM
rumihuma@yahoo.com.ar Av. Remedios de Escalada 425; Barrio 25 de Mayo; (4612) PALPALÁ; JUJUY; ARGENTINA

KOLLASUYU: EL 25 DE ENERO DE 2009, EL PUEBLO DE BOLIVIA APROBÓ LA NUEVA CONSTITUCIÓN POLÍTICA. UN HECHO REVOLUCIONARIO DESDE EL PUNTO DESDE LA PERSPECTIVA DE LOS PUEBLOS I NDIOS U ORIGINARIOS DE TODO EL CONTINENTE DE LAS AMÉRICAS.

ESTADO Y POLÍTICAS PÚBLICAS

POLÍTICA PÚBLICA RELEVANTE
LA NUEVA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO DE BOLIVIA
PROCESO POLÍTICO QUE DESEMBOCÓ
EN SU APROBACIÓN Y PROMULGACIÓN

Hace más de un milenio, mucho antes de la [invasión] conquista europea, una civilización perdida floreció en un área que conocemos ahora como Bolivia.

Los arqueólogos están descubriendo que Bolivia tenía una sociedad muy sofisticada y compleja, o, para usar sus palabras, “uno de los medios ambientales artificiales más grandes, extraños y ecológicamente más ricos del planeta… sus poblaciones y ciudades eran grandes y formales” y eso creó un panorama que era “una de las obras de arte más grandes de la humanidad”.

Ahora Bolivia, junto con buena parte de la región, desde Venezuela hasta Argentina, ha resurgido. La conquista y su eco de dominio imperial en Estados Unidos están cediendo el paso a la independencia y a la interdependencia que marcan una nueva dinámica en las relaciones entre el norte y el sur. Y todo esto tiene como telón de fondo la crisis económica en Estados Unidos y en el mundo.

Noam Chomsky: 14/03/09, “La Jornada”
México, D. F.

INTRODUCCIÓN:

En junio de 2004, me encontraba de visita en la ciudad de La Paz. Luego de haber observado durante un par de horas el desfile de la “Fiesta del Gran Poder”, me acerqué a la plaza Murillo que está ubicada al frente del Palacio Quemado: Allí grabado en una mole de piedra se expone la declaración histórica de la Junta Tuitiva, del 16 de junio de 1809, que describe la realidad de las relaciones coloniales entre criollos (hijos de españoles en la colonia) y los españoles chapetones (nacidos en la metrópoli).

« Compatriotas : Hasta aquí hemos tolerado una especie de destierro en el seno de nuestra patria : hemos visto con indiferencia por más de tres siglos sometida nuestra primitiva libertad al despotismo y tiranía de un usurpador injusto que degradándonos de la especie humana nos ha mirado como a esclavos : hemos guardado un silencio bastante parecido a la estupidez que se nos atribuye el inculto español, sufriendo con tranquilidad que el mérito de los americanos haya sido siempre un presagio cierto de humillación y ruina. Ya es tiempo, pues, de sacudir yugo tan funesto a nuestra felicidad como favorable al orgullo nacional español. Ya es tiempo de organizar un sistema nuevo de gobierno fundado en los intereses de nuestra patria altamente deprimida por la bastarda política de Madrid. Ya es tiempo en fin de levantar el estandarte de la libertad en estas desgraciadas colonias adquiridas sin el menor título y conservadas con la mayor injusticia y tiranía. Valerosos habitantes de La Paz y de todo el imperio del Perú, revelad vuestros proyectos para la ejecución, aprovechaos de las circunstancias en que estamos, no miren con desdén la felicidad de nuestro suelo, no perdaís jamás de vista la unión que deber reinar en todos, para ser en adelante tan felices como desgraciados hasta el presente » .

El 10 de junio de 2004, escribía los siguientes párrafos que describía desde mis perspectivas y lentes de kolla jujeño, lo que percibía y apreciaba de las relaciones asimétricas y coloniales entre los pueblos indios y el Estado Boliviano:

Los pueblos indios no fueron consultados ni formaron parte de la reflexión y acción política independentista de principios del siglo XIX, fueron simplemente soldados y guerreros para pelear en el campo de batalla, dirigidos por generales o mariscales descendientes de españoles o bien por españoles que renunciaban a la metrópoli. Otros, eran obligados a luchar a favor de las tropas colonialistas. Habían transcurrido solamente 18 años de la insurgencia libertaria de Tupaj Amaru y de Tupaj Karari. La represión genocida, el racismo y el etnocidio español habían dejado secuelas profundas en las estructuras de los pueblos indios. Los cuerpos de los indios rebeldes y libertarios fueron descuartizados, trozados, expuestos en plazas, quemados y sus cenizas esparcidas. Sus familias fueron aniquiladas, sus viviendas destruidas y rociadas con polvo de sal los escombros.

Transcurrieron 195 años de aquel 1809. En 2004, la situación de los pueblos indios en la República de Bolivia no ha variado. Actualmente constituyen la base de la injusta pirámide cultural, social, económica y política. Los indios, sean aymaras, kishwas o guaraníes están en todas partes de la vida cultural, social y económica del país. Llenan las iglesias católicas, los templos « evangélicos », son mayoría en las fiestas populares, son arte y parte de la diversidad cultural con trayectoria milenaria.

Son los que llenan las cárceles degradantes de la condición humana, los que integran las tropas básicas de las fuerzas armadas, los que extraen los minerales de los socavones, los que son expoliados en los cañaverales, los que conforman los mercados « informales » y formales, los que movilizan la economía desde y hacia los cuatro puntos cardinales de la ciudad de La Paz, los que participan en las elecciones generales para elegir gobernantes, los que heredan los símbolos y valores prehispánicos, los que atraen a los turistas del mundo internacional. Pero, ellos no son los que deciden por el presente y futuro del país y del Estado.

El 6 de agosto de 1825, en términos jurídicos, sociales, culturales, económicos y políticos no significa emancipación para los pueblos indios. Al contrario se institucionalizaron los vicios feudales que el poder económico, clerical y militar « independentista » heredaba de la colonia española. A nivel mundial en esos años, en los países centrales, llámese España, Francia o Inglaterra, los poderes absolutistas, déspotas y colonialistas habían restaurado el status quo y el liderazgo que poseían antes de la Revolución Francesa. Los revolucionarios independentistas de las nuevas repúblicas, en las Américas estaban siendo asesinados, desterrados o marginados. España intentaba recuperar sus ex - colonias con nuevas invasiones. En ese contexto, los nuevos amos de la naciente República de Bolivia, económicamente optaron por continuar gozando de los privilegios y riquezas que otorgaba el modelo de expoliación a los pueblos indios y sus territorios (Yulquila, 2004: 2).

Álvaro García Linera, matemático y sociólogo autodidacta, actual vicepresidente de Bolivia, en 2005 ponía en acento en que todo Estado tiene que poseer la capacidad de sintetizar a la sociedad, de resumir el conjunto de valores y prácticas organizativas que poseen las colectividades de un país. García Linera prosigue:

Cuando esto no sucede, el Estado se presenta como “parte”, como segmento no como “resumen” y entonces el Estado vivirá el asecho de la sociedad y el lenguaje gubernamental se agazapará en el castigo en el castigo, la disuasión y la amenaza de una parte de la sociedad contra otra. Cuando estos componentes se convierten en la norma general de la vida política, estamos ante una crisis de Estado, que es lo precisamente caracteriza la situación política boliviana (2005:1).

García Linera, sostenía que la crisis del Estado boliviano presentaba una doble dimensión. Una crisis estructural de “larga duración”, que tiene que ver con un deterioro radical y un severo cuestionamiento de las certidumbres societales, institucionales y cognitivas que atravesaban persistentemente los distintos ordenamientos estatales de la vida republicana, llamada por García Linera como las estructuras de la invariancia estatal. La otra crisis de “corta duración”, lo relacionaba con el modelo “neoliberal” a que fue configurado el Estado, la que llamo estructuras estatales temporales (2005: 1).

Álvaro García cuestionaba el predominio arbitrario del orden Estatal monocultural, en el contexto de la sociedad mayoritariamente multicultural y multinacional. Denunciaba, que en 178 años de vida republicana, instituciones tales como, los derechos culturales, el idioma de reconocimiento público y ascenso social, los valores socialmente prestigiosos y la narrativa de la historia oficial estaban monopolizadas por una sola matriz cultural: criolla y mestiza castellano – hablante (minoritaria), en tanto que las otras matrices originarias, igualmente minoritarias por separado pero mayoritarias si se suman (62 % de la población), no eran reconocidas como culturas legítimas, como vehículo de ascenso social y de ejercicio de derechos ciudadanos.

Una buena parte de la población, según García Linera, tiene un régimen de autoridad socio – política local o regional no estatal, representado por sindicatos, ayllus, federaciones y gremios. Tales representaciones están adscritas al sistema de cultura política no liberal y unas formas de tomar de decisiones no individuadas. Por ello, asevera García Linera, que independientemente de lo que sucedía en el Congreso Nacional o lo partidos políticos, se movilizaba, presionaba al gobierno y lo obligaba al cambio de políticas públicas extraparlamentarias.

Ese régimen de autoridad existió y aún persiste en Bolivia desde antes de la invasión española. Para García Linera, se mantendrá mientras los sistemas tradicionales de organizar la economía y la sociedad, que es el soporte técnico de este tipo de comunitarismo político, se mantengan y regulen la reproducción material de los pueblos originarios o mayoría de los bolivianos (2005: 1 y 2).

García Linera se preguntaba ¿cómo enmendar esta esquizofrenia política de un Estado que establece un tipo de ciudadanía asentada en uno esquemas simbólicos monolingües y monoculturales para una sociedad multicultural? ¿Cómo superar la esquizofrenia institucional de un Estado que se asume como moderno, liberal, en una sociedad cuyo secular régimen normativos políticos es sindical, asambleístico y comunal (2005: 2).

Sin duda, la estructura institucional y emisión cultural era obsoleto en Bolivia, en términos de fuerzas sociales reales, con apetencia política: mundo indio u originario, o mundo plebeyo organizado en sindicatos, juntas vecinales, ayllus y gremios. García Linera sostenía que, en fondo la apetencia política de los excluidos era una querella democrática que buscaba incorporarse en la comunidad de las decisiones políticas.

García Linera sostenía además, que la amplitud de las demandas de las fuerzas sociales y de los excluidos era de tal naturaleza que su recepción no pasaba por meras reformas estatales, sino en por un remodelamiento estructural del orden político institucional, para que se vuelva a definir la manera en que todas las fuerzas sociales estaban dispuestas a convivir juntas.

Para lograr el remodelamiento estructural, los movimientos sociales emergentes de abril 2000, habían propuesto la Asamblea Constituyente. En palabras de García Linera: “Ha sido en este sentido, la propuesta más atinada y lúcida del mundo indígena – popular, para resolver mediante el ejercicio supremo de la soberanía democrática de la sociedad, la constitución de poderes, esto es la crisis estatal en sus dos dimensiones” (2005: 2).

PROCESO HACIA LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE

El presente análisis del proceso de la construcción de la política pública relevante en la República de Bolivia, denominada por el movimiento indio de la región como el Kollasuyu, y que concluyera con la aprobación y promulgación respectiva de la nueva Constitución Política del Estado boliviano, está adscrita a la corriente del enfoque sociocéntrico. Este enfoque centra su atención en las acciones y el papel de las fuerzas sociales en el inicio y acompañamiento de la autoría de las políticas públicas (Bertranou, 2005: 5).

Considerando que hasta el arribo de Evo Morales Aima a la presidencia de la República, el Estado era un botín para la minoría “blancoide” o “q`ara” como lo describiera la investigadora aymara Marina Ari (2004: 13 – 16), en este caso dentro del enfoque sociocéntrico se manifiesta las escuela instrumental: desde la fundación del Estado boliviano (1825) y hasta el referéndum para aprobar la nueva Constitución Política, el Estado boliviano era “el comité de negocios de la burguesía”, en un contexto de relaciones coloniales. El Estado, estructuralmente, había sido constituido para legitimar el monopolio de la minoría (q’ara), racista y excluyente de las mayorías nacionales (pueblos indios).

Considerando la corriente pluralista, se podría sostener, que el Estado era una arena para los grupos de la minoría q’ara. Ellos dirimían sus conflictos mediante golpes de Estado, o bien, o bien a través de negociados en el Congreso Nacional. Se presentaron una diversidad de negociados. Por ejemplo: el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) con la Alianza Democrática Nacionalista (ADN), que le permitió gobernar a Jaime Paz Zamora (1988 – 1993). Paz Zamora hizo alianza con el autor intelectual de las torturas de las que víctima cuando Hugo Bánzer Suárez era presidente de facto.

“El comité de negocios de la burguesía” de la Bolivia imaginaria (minoría q’ara), en 1993, en el Congreso, acordó que Gonzalo Sánchez Losada y Víctor Hugo Cárdenas (aymara), seleccionado por un grupo de antropólogos y sociólogos (método focal), arriban al poder aliado con la Alianza Democrática Nacionalista. El indio “intelectual” Víctor Hugo Cárdenas era vástago del poder eclesiástico católico. Ya en ese contexto, la sociedad de la Bolivia profunda, en el sentido que le da Bonfil Batalla (2008), exigía que un indio gobernara el Kollasuyu Bolivia.

A partir de agosto de 1997, las relaciones coloniales asimétricas y racistas se profundiza con el arribo a la presidencia del filonazi Hugo Bánzer Suárez, con el apoyo del Movimiento del MIR y de la Fuerza Republicana Nacionalista (FRN). El Estado había sido reducido a su mínima expresión como poder político. Solamente prevalecía como rector del orden legal represivo y como marco constitucional, para beneficio exclusivo de la Bolivia imaginaria (Bonfil Batalla, 2008). Las principales políticas públicas de Bánzer eran “pan, trabajo y techo” y, por supuesto, “combatir el cultivo de la hoja de coca” por presiones de Washington.

En el contexto de 1997, arriba al Congreso Nacional como diputado Evo Morales Aima. Fue el que más votación obtuvo en las elecciones de 1997. El colectivo político que apoyo a Evo se llamaba “Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos” (IPSP). Ante la negativa de la Corte Nacional Electoral para reconocer al IPSP, la postulación se realizó a través del Movimiento al Socialismo (MAS). Evo Morales se había instalado en el Congreso, reconocido como diputado, sindicalista cocalero y presidente del Comité de Coordinación de las Seis Federaciones del Trópico Cochabambino (Contreras, 2005: 10 – 13).

En el verano de 2002, enero, los diputados del MIR, ADN, UCS, NFR y del MNR, en una sesión destinada a satisfacer a la geopolítica de Washington, aprueban la expulsión de Evo Morales, del Congreso Nacional. Esta acción marca el inicio de un proceso político irreversible. El apartheid boliviano comenzaba a desmoronarse (Sondag, 1987).

¿Era autónomo el Estado boliviano al expulsar del Congreso Nacional al diputado Evo Morales Aima? En el marco del sistema de Naciones Unidas, Bolivia, a través de la minoría q’ara no era autónoma; dependía y defendía intereses de Washington. A nivel interno, el Estado había sido reducido a su mínima expresión de gerente administrativo de las transnacionales. No tenía legitimidad para intervenir reprimiendo al pueblo de la Bolivia profunda. Los llamados “colectivos de funcionarios” por la politóloga Theda Skocpol, sólo percibían y apreciaban los intereses de la minoría excluyente. Sin duda, el Estado gerenciado por la Alianza Democrática Nacionalista era predatorio en extremo: se alimentaba de la mayoría (pueblos indios), a través de la expoliación de la riqueza de Bolivia (Evans, 1996: 4 – 8).

En agosto 2002, Gonzalo Sánchez Losada arriba por segunda vez a la presidencia de Bolivia, acompañado como vicepresidente por el periodista Carlos Diego Mesa Gisbert. Evo Morales Aima salió segundo por una pequeña diferencia do votos. Por vez primera en los 177 años de existencia del Estado boliviano (1825 - 2002), estaban representadas la Bolivia imaginaria (q’ara) y la Bolivia profunda (pueblos indios u originarios). Evo Morales Aima (MAS) y Felipe Quispe del Movimiento Indio Pachakuti (MIP) eran los principales referentes.

En febrero 2003, Sánchez Losada, mediante decreto, aplica una presión tributaria a la masa laboral, con los propósitos de satisfacer las demandas de los operadores del “mercado libre”. La población reacciona contra el decreto. El ejército se enfrenta con la policía. El “gringo” Gonzalo deroga el decreto. Posteriormente, en octubre 2003, con el argumento que no había dinero en caja, el gobierno se propone vender gas a Chile. El pueblo se rebela. Luego ordena al ejército a masacrar a los aymaras. El pueblo indio se levanta contra el sistema y Gonzalo Sánchez Losada abandona el gobierno y a Bolivia, gritando: ¡¡¡Cómo es posible que estos ignorantes ganen!!! (Yulquila, 2005: 9).

Gonzalo Sánchez refugiado en Estado Unidos, el vicepresidente Carlos Diego Mesa Gisbert juramenta como presidente. Asume el compromiso de recuperar los hidrocarburos para Bolivia y convocar una Asamblea Constituyente, para redactar un nuevo contrato social. En julio 2004, se consulta a la ciudadanía mediante referéndum: la recuperación o no de los hidrocarburos. Ganó el sí por la recuperación que significaba la nacionalización.

Carlos Mesa argumentaba que la nacionalización de los hidrocarburos “aislará” a Bolivia de las “naciones civilizadas” y de las “inversiones”. El 6 de junio 2005, renuncia a la presidencia luego de gritar: ¡¡indios de mierda!!! El 9 de junio, siendo a las 23:50 asume como presidente provisional el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Eduardo Rodríguez Veltze.

Rodríguez Veltze, luego de juramentar al estilo cristiano del siglo XIX, se limitó a expresar que cumplirá con los objetivos de su corto mandato: 1) Convocar elecciones generales para elegir presidente, senadores, diputados y prefectos; 2) convocar elecciones para la conformación de la Asamblea Constituyente (Yulquila, 2005: 5 y 6).

LA NUEVA CONSTITUCIÓN POLÍTICA

El 9 de junio 2005, medio día en París, en la Radio Internacional de Francia, el analista político Eduardo Gamarra, de la Universidad Internacional de la Florida (privada – USA), opina que habría cuatro posibilidades de gobierno en Bolivia: 1) Revolución; 2) gobierno populista; 3) mano dura; 4) golpe militar. En Madrid, capital del ex – imperio genocida de los siglos XVI al XVIII, un grupo de analistas, en un canal de TV, describían dos mundos sobre Bolivia: la mayoría reconoce que más del 75 % de la población lleva siglos de injusticia y que es víctima de una discriminación lacerante. Un panelista conjetura que los españoles “no debemos endiosar a líderes como Evo Morales porque podemos estar apoyando a un potencial racista y futuro genocida” (Yulquila, 2005: 3).

Desde Londres, capital de los piratas de los siglos XVI al XVIII que robaban a los ladrones españoles, el escritor Mario Vargas Llosa, nacido en el Perú, criado en Bolivia y “nacionalizado” español, opinaba que la crisis de Bolivia tiene “paralizada” a la sociedad internacional y acusa al presidente de Venezuela de “si no financiar, sí haber defendido o promovido al movimiento de Evo Morales. [Hugo] Chávez es un figura perniciosa de América Latina que va contra la democracia”. ¿Qué significará democracia para el escritor Mario Vargas Llosa? ¿Excluir racial y económicamente al 75 por ciento de la población de Bolivia? (Yulquila, 2005: 4).

El 4 de diciembre 2005, el Movimiento al Socialismo (MAS) – Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos, gana las elecciones para la presidencia de la República. Evo Morales Aima el elegido superando en 54 por ciento de la votación. La participación de los votantes superó al 84, 35 por ciento de los 2.670. 971 ciudadanos registrador para sufragar. Fue una participación histórica del pueblo y además, Evo Morales fue arriba en forma directa al Palacio Quemado, sin necesidad de negociaciones en la “arena” del poder legislativo.

El MAS había propuesto al electorado abordar un serie de diez problemas cruciales, que definían la enorme brecha entre lo que las minorías nacionales indias viven la vida cotidiana y lo que desearían y merecían vivir. Es decir, la brecha que existe entre la agenda sistémica y la agenda de los gobiernos que administraron el Estado boliviano (Sáenz, 1997: 7 – 9).

Entre los diez temas principales de la agenda de gobierno de Evo Morales destacaban: la nacionalización de los hidrocarburos, la Asamblea Constituyente, la autonomía de los pueblos, la derogatoria de la libre contratación, la austeridad estatal, la lucha contra la corrupción, el juicio de responsabilidades contra los malos gobernantes, la defensa de la tierra y del territorio, la industrialización de la hoja de coca (Contreras, 2005: 15 y 16).

“La defensa de la cultura, de nuestro valores, de nuestro idioma, de nuestra tierra y territorio, de nuestros recursos territoriales, de nuestro recursos naturales y de nuestras raíces, es fundamental porque ahora ha llegado la hora de las transformaciones profundas, de refundar el país en alianza con todos los sectores” (Morales Aima, 2005).

Los problemas de la agenda de gobierno de Evo Morales Aima eran más que relevantes, eran cruciales y lacerantes; reconocidos no solamente en el interior de la población boliviana sino también a nivel internacional. Por ejemplo, el 18 de enero 2004, el entonces ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina, Rafael Bielsa, describía sobre la situación política y social de Bolivia:

“Hay ópticas diferentes. Yo no lo puedo decir a EE.UU. lo que tiene que hacer ni se lo puedo decir ni mi pidió que se los diga. En un país que tiene el 82 por ciento de población entre indios quechuas y aimaras, cuando en Jujuy el 50 por ciento de los habitantes son bolivianos, hay que comprender al indigenismo. Es una asignatura compleja, seria. Nuestra posición es que lo hay que hacer es sumergirse en el problema del indigenismo, comprenderlo y mantenerlo dentro del sistema. A mi no me interesa en qué lugar del sistema democrático se ubique Morales en el arco democrático y eso implica un trabajo. [... ] Yo no se qué es lo que va hacer EE.UU. en el caso de que haya elecciones y Evo Morales sea presidente de Bolivia; lo que yo quisiera es que a Bolivia dentro del sistema democrático le vaya bien y no le pase lo que le pasó con el Potosí, lo que le pasó con el estaño. Quiero que esa nación sea más próspera, que el gas sobre el cual nadan sea aprovechado en beneficio de los bolivianos” (citado por Yulquila, 2004: 1).

El 22 de enero 2006, Evo Morales asume la presidencia de la República. El 6 de marzo 2006 promulga la Ley de Convocatoria a la Asamblea Constituyente; asociada a dicha ley se presenta la cuestión de las “autonomías departamentales” que tenían como bandera política los prefectos de los departamentos de Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando. Por ello, conexa a la convocatoria a la Asamblea Constituyente se estableció la “convocatoria a referéndum nacional vinculante a la Asamblea Constituyente para las Autonomías Departamentales”. La pregunta para el referéndum del 2 de julio 2006 fue:

Art.4. Ley 3365: ¿Está usted de acuerdo en el marco de la unidad nacional, en dar a la Asamblea Constituyente el mandato vinculante, para establecer un régimen de autonomía departamental, aplicable inmediatamente después de la promulgación de la nueva Constitución Política del Estado en los departamentos donde este Referéndum tenga mayoría, de manera que sus autoridades sean elegidas directamente por los ciudadanos y reciban del Estado Nacional competencias ejecutivas, atribuciones normativas administrativas y los recursos económico-financieros que les asigne la nueva Constitución Política del Estado y las leyes?

¿Quiénes podían participar en las elecciones para constituyentes? Los tradicionales partidos políticos, las agrupaciones ciudadanas y los pueblos indios u originarios. Esta convocatoria complicó la participación de candidatos autónomos de múltiples movimientos sociales, dado que debieron cabildear acuerdos con los partidos políticos. El 2 de julio 2006 se eligieron 255 diputados constituyentes, divididos en 210 diputados uninominales y 45 diputados plurinominales. Con este sistema, la mayoría de los diputados debían responder de manera directa a sus electores de las circunscripciones electorales respectivas. Sin embargo, se redujo el espacio para al participación de los movimientos sociales. El Movimiento al Socialismo (MAS) obtuvo el 50.7 de los votos. El MAS se alzó con la mayoría absoluta de escaños.

El 6 de agosto 2006, Evo Morales Aima inauguró en la ciudad de Sucre la Asamblea Constituyente, con plenos poderes para redactar una nueva Constitución Política. La Asamblea acordó un plazo de entre seis meses hasta un año para redactar la nueva Constitución, para luego ser sometida a un referéndum popular.

La agenda social de los movimientos sociales que no lograron estar representados en la Asamblea, tenía como temas de tratamiento en la Asamblea Constituyente los siguientes puntos: 1) estructura de la propiedad de la tierra; 2) las formas de propiedad de los bienes de la República y la consagración legal de los derechos colectivos; 3) la estructura política conveniente para Bolivia. Estos temas, si bien en principio fueron tratados periféricamente, por los acontecimientos sucedidos en los meses subsiguientes, fueron abordados con interés por los diputados constituyentes.

El 18 de noviembre 2006, el Tribunal Constitucional rechazó la demanda de nulidad respecto del procedimiento de Reformas de la Constitución. Tal iniciativa fue presentada por los tradicionales partidos políticos Poder Democrático y Social (Podemos) y el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR). La Asamblea se declaró “originaria” y “plenipotenciaria”; también, declaró que las decisiones se adoptarán por mayoría de votos; en cambio el texto final, por la votación de los dos tercios de los 255 diputados constituyentes.

El 23 de diciembre 2006, la Asamblea entro en receso. No hubo acuerdo sobre la modalidad para aprobar la nueva Constitución Política. El 10 de enero 2007, el MAS aceptó que la nueva Constitución fuera aprobada por dos tercios de la Asamblea. El 2 de febrero 2007, propuso realizar un solo referéndum para aprobar la nueva Constitución. Ante la crisis política, el 16 de marzo 2007 anuncia que convocaría a elecciones generales una vez finalizado la redacción de la nueva Constitución.

El 2 de agosto 2007, el Congreso Nacional modifica la Ley de convocatoria a la Asamblea Constituyente, prorrogándola hasta el 14 de diciembre 2007. El 6 de agosto, la Asamblea cumple un año de vigencia y no se había aprobado ni una línea del texto respectivo. El 23 de agosto 2007 se suspendió la Asamblea y la oposición convocó paros y protestas radicales. El 26 de octubre, el vicepresidente Álvaro García Linera convocó a las autoridades del Departamento de Chuquisaca a salvar la Asamblea. El principal punto de conflicto era la demanda de Sucre del traslado de los poderes Ejecutivo y Legislativo desde La Paz hacia Sucre.

El 29 de octubre 2007, los dirigentes de Sucre ratificaron que solamente permitirán que la Asamblea reanudara sus sesiones si se reponía el tema de la capitalidad en su agenda. En un contexto de disturbios, la Asamblea se instala en un recinto militar de la ciudad de Sucre. Concurren 145 diputados constituyentes del oficialismo y otros aliados, de los 255 totales. Se vota sin oposición el proyecto de la nueva Constitución.

Posteriormente, el 9 de diciembre 2007, en la ciudad de Oruro, los constituyentes del partido gobernante (MAS) y los aliados aprueban 411 artículos de la nueva Constitución Política. El 14 de diciembre, la Asamblea hizo entrega de la nueva Constitución al vicepresidente Álvaro García Linera. El 15 de diciembre 2007, el texto es recibido oficialmente por el presidente Evo Morales Aima, en un contexto de acto cívico masivo.

El 28 de febrero 2008, mediante presión del campesinado que cercó el Congreso Nacional, se aprueban las convocatorias de dos referendos, una para aprobar la nueva Constitución y otra, para desautorizar las consultas autonómicas convocadas por cuatro departamentos: Sucre, Tarija, Beni y Pando.

El 7 de marzo 2007, la Corte Electoral suspende los referendos constitucionales y rechaza la consulta autonómica de Santa Cruz. El 4 de mayo, en Santa Cruz se celebra un referéndum, para ratificar o rechazar el estatuto de la autonomía. Se aprueba en estatuto de Santa Cruz.

El 8 de mayo 2008, el Senado del Congreso aprueba una Ley de convocatoria de un referéndum, para ratificar o revocar los mandatos de presidente, vicepresidente y de los nueve gobernadores del país. El 12 de mayo, Evo Morales acepta el juego del Senado y decide convocar a referendo revocatorio su mandato, el del vicepresidente Álvaro García Linera y de los nueve gobernadores o prefectos. Queda fijando el referendo para el 10 de agosto 2008. Se celebra la consulta y Evo Morales obtiene el respaldo del 67.4 por ciento. Quedan ratificados los prefecto de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija. Fueron revocados los prefectos de La Paz y de Cochabamba.

El 28 de agosto 2008, Evo Morales convoca por decreto supremo un referendo para el 7 de diciembre 2008, para aprobar la nueva Constitución y para dirimir la extensión de los latifundios. El 1 de septiembre, la Corte Electoral suspende la convocatoria. El 5 de octubre, el presidente Evo Morales y los prefectos autonomistas concluyen un proceso de diálogo, bajo la observación de organismos internacionales.

El 21 de octubre 2008, Evo Morales, tras alcanza un acuerdo con la oposición (Podemos, MNR, UN), promulgo la Ley para convocar un referendo sobre la nueva Constitución, para el 25 de enero de 2009. Entre los acuerdo con la oposición al gobierno del MAS, el presidente Evo Morales Aima, solamente podría postular una primera reelección una vez que entrara en vigor la nueva Constitución Política; es decir para el periodo 2009 – 2014. Fueron observadores representantes de la Unión Europea, de la OEA y de las Naciones Unidas.

A MODO DE CONCLUSIÓN

El referéndum se llevó a cabo en dos ámbitos. 1) Se consultó a la ciudadanía sobre el Artículo 398 del proyecto de Constitución Política que no alcanzó la aprobación de los dos tercios de los miembros (255) de la Asamblea. El Artículo quedó aprobado con el referéndum con la siguiente redacción:

“Se prohíbe el latifundio y la doble titulación por ser contrarios al interés colectivo y al desarrollo del país. Se entiende por latifundio la tenencia improductiva de la tierra; la tierra que no cumpla la función económica social; la explotación de la tierra que aplica un sistema de servidumbre, semiesclavitud o esclavitud en la relación laboral o la propiedad que sobrepasa la superficie máxima zonificada establecida en la Ley. La superficie en ningún caso podrá exceder las diez mil hectáreas.”

La otra pregunta establece que “[…] La superficie en ningún caso podrá exceder de cinco mil hectáreas”. La segunda parte de la consulta se refería a la nueva Constitución Política del Estado. La pregunta era la siguiente:
“¿Usted esta de acuerdo con refrendar el texto del proyecto de Constitución Política del Estado presentado por la Asamblea Constituyente, y ajustado por la Comisión Especial de Concertación del H. Congreso Nacional, que incluye los consensos logrados en el diálogo entre el Gobierno Nacional por los Prefectos y Representantes Municipales sobre autonomías, incorporando el resultado de la consulta sobre el Artículo 398 a ser resuelto en este mismo referéndum, y que la misma sea promulgada y puesta en vigencia como nueva Ley Fundamental del Estado Boliviano?

Votaron por el SÍ 2.053.695 votos, representando el porcentaje de 61.67 %. Votaron por el NO 1.276.308 votos, representando el porcentaje de 38.33 %. Los datos representan el resultado del 98.83 por ciento del sufragio emitido el 25 de enero de 2009. Según las conclusiones del Parlamento Latinoamericano, el marco jurídico fue adecuado para dar legalidad y transparencia al referéndum nacional constituyente de la República de Bolivia. El padrón electoral utilizado fue considerado confiable por todos los actores políticos. Además concluyen describiendo que la jornada del referéndum se realizó con una amplia participación ciudadana y sin incidentes que obstruyeran el sufragio libre (2009: 22 – 47).

De acuerdo a lo expuesto, desde la página 1 a la 14, el principal problema de la República de Bolivia y que había que abordarlo mediante una refundación del Estado, era: la segregación racial, política, cultural, social y económica, institucionalizadas; que tenían como objeto a los pueblos indios u originarios. El problema estaba perfectamente identificado y definido. Estaba en permanente evolución, pero, las formas de percibirlo, apreciarlo y atenderlo eran coloniales. Se puede afirmar que las lentes para percibir el problema indio eran europeas de la segunda mitad del siglo XIX.

Bolivia, país de 8.624.268 habitantes según el Censo de 2001, con la nueva Constitución Política contabiliza una docena de constituciones. La anterior Constitución que estuvo vigente hasta el 25 de enero reciente, en su Artículo 1) expresaba: “Bolivia libre, independiente, soberana, multiétnica y pluricultural […]”. En su Artículo 3) establecía: “El Estado reconoce y sostiene la religión católica, apostólica y romana. Garantiza el ejercicio público de todo otro culto. Las relaciones con la iglesia católica se regirán mediante concordatos y acuerdos entre el Estado Boliviano y la Santa Sede” (2003). Ambos artículos son antagónicos.

En la nueva Constitución, el Artículo 1) expresa: “Bolivia se constituye en un Estado Social de Derecho Plurinacional Comunitario, libre, independiente, soberano, democrático, intercultural, descentralizado con autonomías. Bolivia se funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico, cultural, lingüístico, dentro del proceso integrador del país” (2009).

El Artículo 4) establece: “El Estado respeta y garantiza la libertad de religión y de creencias espirituales, de acuerdo con sus cosmovisiones. El Estado es independiente de la religión”. El Artículo 6) sostiene: “I. Sucre es la capital de Bolivia. II. Los símbolos del Estado son la bandera tricolor rojo, amarillo y verde; el himno boliviano: el escudo de armas; la wiphala; la escarapela: la flor de la kantuta y la flor del patujú” (2009).

En el proceso de la construcción de la política pública que culminó con la aprobación de la nueva Constitución Política, se presentaron sesgos negativos y positivos, como en todo espacio social y cultural competitivo (Pierre Bourdieu). Los primeros fueron los prefectos y oligarcas terratenientes de los departamentos de Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando; los medios de comunicación ligados a Madrid y Washington; y la CNN de Estados Unidos. Entre los sesgos positivos estuvieron las convicciones y el profesionalismo político del presidente Evo Morales y del vicepresidente Álvaro García Linera, la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), las intenciones de modificar la injusta realidad social de los representantes y miembros de los pueblos indios u originarios, como también del colectivo político MAS.

¿Qué modelo se utilizó en la elaboración de la política pública analizada? Estuvieron presentes, desde que se conoció la fórmula Evo Morales Aima – Álvaro García Linera, el modelo de la racionalidad limitada y la incremental (Tamayo Saez, 1997: 9 – 13). Ambas personalidades buscaron y encontraron políticas satisfactorias para las mayorías, teniendo en cuenta siempre qué es lo que se hizo antes. Además, siempre, el gobierno de Evo Morales estuvo y está presente en la interacción política, entre los individuos y grupos sociales. Siempre enfrentaron personalmente las crisis, que se suscitaron durante el proceso de la construcción del contenido de la nueva Constitución Política. El MAS, como partido buscó y lo sigue haciendo, como expresara Evo Morales en 2005:

“La política es la ciencia para servir al pueblo y nosotros vivimos para la política y no vivimos de la política. Ha llegado la hora del cambio, de la esperanza, de un futuro mejor para nuestro hijos y para nuestro nietos” (Citado por Contreras, 2005: 16).

BIBLIOGRAFÍA

BAÑON, Rafael y CARRILLO, Ernesto (1997). La nueva administración pública. Alianza Universidad. Madrid. Capítulo II: El Análisis de las Políticas Públicas: Manuel Tamayo Saez.
BERTRANOU, Julián (2009). Curso de Estado y Políticas Públicas. Universidad Nacional de Quilmes. Maestría en Ciencias Sociales y Humanidades. Clases 1 – 12. Bernal, Buenos Aires.
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO (2003). Edición popular. La Paz, Bolivia.
CONTRERAS BASPNEIRO, Alex (2005). Biografía de Evo Morales Aima. Una historia de dignidad. U. P. S. Editorial S. R. L. La Paz, Bolivia.
CHOMSKY, Noam (2009). El desafío de América Latina. “La Jornada”, Sección Mundo, Pagina 22. Ano 25, Nº 8827, 14 de marzo 2009. México, D. F.
EL MILITANTE (2006). Evo Morales gana por mayoría las elecciones bolivianas. http://www.elmilitante.org. Consulta: 20/03/2009.
EVANS, Peter (1996). El Estado como problema y como solución. Revista de Ciencias Sociales. Desarrollo Económico. Buenos Aires, Vol. 35, Nº 140, enero – marzo 1996.
GARCIA LINERA, Álvaro (2005). Asamblea Constituyente y movimientos sociales. http://www.edu.ec/padh/revista10/actualidad/alvaro%garcia.htm. Consulta 10/01/2005.
GUTIÉRREZ AGUILAR, Raquel y MOKRANI CHÁVEZ, Dunia (2006) Asamblea Constituyente en Bolivia: ¿reformar o refundar el Estado?
http://www.ircamericas.prg/esp/3338. Consulta 13/03/09.
LA NUEVA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO BOLIVIANO (2009).http://armc580mail.yahoo.com/me/shwMessage. Consulta 01/01/2009.
MISIN DE OBSERVACIÓN ELECTORAL DEL PARLAMENTO LATINOAMERICANO (2009). República de Bolivia. Referéndum Nacional Constituyente 2009. http://www.senado.gob.mx/agsp/gaceta/60/8/2009. Consulta 13/02/09.
SONDAG, Yvon (1987) Historia para acabar con un pueblo. Editorial “Pueblo Indio”. Consejo Indio de Sud América, CISA: Lima, Perú.
YULQUILA, Asunción O. (2004). KOLLASUYU: Los pueblos indios y el Estado de Bolivia. http://argentina.indymedia.org/mail.php?id=201877. Consulta 15/03/09.
YULQUILA, Asunción O. (2205). Carta enviada al Canciller Bielsa por sus declaraciones respecto de los pueblos indios.
http://www.mapuche.info/indgen/indymedia040211.html.
YULQUILA, Asunción O. (2205). Kollasuyu: Bolivia2005, emancipación aymara kishwa guraní. http://argentina.indymedia.org/news/2005/06/301147.php.

agrega un comentario