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Por qué es posible una nueva Ley de jubilaciones
Por AMSAFE Rosario - Wednesday, Nov. 04, 2009 at 10:23 PM

¿Por qué es necesaria una ley jubilatoria que contenga nuestro reclamo de 25 años de aporte sin límite de edad?

Estadísticamente está comprobado que las licencias de larga duración y las tareas diferentes se producen especialmente en el sector de mayor antigüedad.
El director del nuevo sistema de salud laboral docente, desde una mirada científica y con muchos datos a su disposición, asegura que “bajar la edad jubilatoria es una política indispensable para proteger a aquellos que ya han sido dañados por el trabajo”. Dice además que “las probabilidades de retorno a tareas habituales de quienes ya han sufrido por años el desgaste laboral, trabajadores de edades mayores a los 50 años, son mínimas.”
Hoy ya nadie discute que esta posibilidad sería muy beneficiosa para la educación, porque los docentes que llegan agotados y/o enfermos al fin de su carrera merecen jubilarse, y porque este beneficio se extendería a los docentes jóvenes que podrían ingresar en esos lugares, y todo esto- dicho también por la misma Ministra Rasino- sería muy importante para el sistema educativo. Esto sin duda seria un beneficio para toda la comunidad educativa.
A fin de cuentas, lo único que estamos reclamando es que nos devuelvan la ley que tuvimos y que en los ‘90, con las famosas “Leyes de Emergencia”, nos robaron.

¿Por qué es posible esta Ley?
En el sector docente, producto de estas políticas, hay 4,5 activos/aportantes por cada sueldo de jubilado o pensionado docente de la Caja. Esto nos demuestra que son muchos los aportantes docentes en relación a los beneficiarios de nuestro sector, ya que la media general hoy de la caja es que hay 2, 56 activos/aportantes por cada beneficiario.
Esto que podría ser visto como una caja solidaria donde los docentes aportamos para que todos los estatales nos jubilemos, si ahondamos un poco, nos damos cuenta de que en realidad lo que nos hacen pagar a los docentes es lo que el Estado diseñó con sus políticas neoliberales. El caso más marcado es que producto de la privatización del banco de Santa Fe, los bancarios aportantes que quedan hoy son sólo 0,20 cada jubilado, o sea la relación es inversa: cada 5 jubilados bancarios hay un aportante. Claro está que de esto no somos responsables los trabajadores de ningún sector, y menos los bancarios que resistieron estas políticas, sino el Estado.
Aún jubilándose los 11.400 compañeros docentes que hoy tienen más de 25 años de antigüedad, la relación entre activos y beneficiarios superaría los 2,60 activos por cada beneficiario. Seguiríamos teniendo una relación mayor que la media de hoy y que muchos otros sectores de la caja: los judiciales tienen una relación de 1, 5; la policía 1,3, vialidad provincial, a la que la desmantelaron, es 0,61. Esta situación requiere incorporar otras fuentes de financiamiento no previsionales.
Todos los trabajadores tenemos derecho a tener una jubilación digna, pero es el Estado el que se tiene que hacer cargo de las deudas generadas por las políticas neoliberales de los ’90, y no podemos seguir siendo los docentes los que paguemos con nuestra salud.
Además, el cambio de condición de activo a jubilado de estos 11.400 compañeros, implicaría la disminución de las partidas de reemplazantes, porque como aseguramos mas arriba, el sector de más antigüedad docente es el que mas ausencias prolongadas genera y porque la jubilación de gran parte de los compañeros en tareas diferentes dejarían de significar un doble salario para educación. Esto es para el Estado un ahorro que podría ser utilizado para sostener la Caja.
Este gobierno nos dice que tenemos razón pero que no hay plata, Nosotros afirmamos que plata hay, lo que pasa es que esta mal distribuida.

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