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Del ejèrcito israelì a la policìa metropolitana
Por reenvìo asamblea de viyurca - Monday, Feb. 15, 2010 at 8:01 AM

Eugenio Burzaco designó como vocero de la Metropolitana al ex portavoz del ejército israelí.



Por
Gustavo Veiga

La Policía Metropolitana que acaba de salir a la calle
tiene su pregonero. No es su hacedor, Mauricio Macri, ni tampoco su jefe,
Eugenio Burzaco. Se trata de un especialista, Alejandro Mellincovsky, ex jefe de
prensa del ejército israelí para los medios de habla hispana, un joven
licenciado en Comunicación e Historia que parece el hombre hecho a medida para
difundir desde su estreno el accionar de la nueva fuerza. Vivió, cursó estudios
universitarios y se graduó en Tel Aviv, donde refinó sus conocimientos en
seguridad, integró la juventud sionista –o Hanoar Hatzioni– y fundó un
periódico. También ha escrito varios artículos sobre la libertad de prensa y el
conflicto de Medio Oriente, con una visión crítica sobre gobiernos como los de
Venezuela y hasta Bolivia. Su último trabajo conocido lo desempeñó como
corresponsal del multimedio mexicano Televisa en la Argentina. Hoy, en cambio,
informa sobre el empleo de autos no identificables que comenzarán a patrullar
Buenos Aires con fines de Inteligencia. La principal herencia que dejó el
comisario Jorge "El Fino" Palacios.
Mellincovsky se radicó en Israel en 1999
después de pasar una infancia y adolescencia bien porteñas. Es hincha de Atlanta
y nostálgico de las calesitas (armó una página web con familiares sobre el
tema). Esta parte de su vida puede rastrearse en la entrevista que le realizó la
revista Piedra Libre en 2005, un medio de la comunidad latinoamericana en aquel
país, donde se incorporó al ejército.
"Para mí, seguir sintiéndome cercano a
Argentina es algo que atribuyo más que nada a las pequeñas cosas, a la vida de
todos los días, las costumbres, la comida", decía en aquella nota. En el mismo
reportaje, su autora, Jana Beris, informa: "Ahora sirve en Tzáhal, el ejército
israelí, como encargado de Análisis Estratégico de Comunicaciones, en contacto
con la prensa internacional en la unidad del Portavoz del Ejército (Dover
Tzáhal)..."
En ese rol, el flamante vocero de la Metropolitana fue el hombre
de consulta para los medios hispanoparlantes sobre todo lo que ocurriera en
Israel en materia de defensa. Hay artículos que lo citan, tanto en El País de
España como en La Nación. Una crónica del 18 de agosto de 2005, escrita por el
periodista Ferrán Sales en el primer diario, a propósito del desalojo de colonos
israelíes en la Franja de Gaza, señala: "La contundencia y la sorpresa con que
se está desarrollando la operación militar son las dos claves que permiten
explicar este éxito, según aseguraba ayer Alejandro Mellincovsky, director del
Departamento de Análisis y Estrategia del Ministerio de Defensa, quien en las
últimas horas había seguido la operación sobre el terreno en el asentamiento de
Neve Dekalim".
El colaborador que designó Burzaco para tratar de superar la
mala imagen con que se instaló la Policía porteña, no puede ser cuestionado por
carecer de pensamiento propio. En un artículo de su autoría que publicó la
agencia de noticias Impulso Baires, discurre sobre cómo los periodistas
cubrieron la información durante la Operación Plomo Fundido, la ofensiva israelí
sobre la Franja de Gaza que provocó, entre muertos y heridos, miles de víctimas
palestinas entre diciembre de 2008 y enero de 2009.
"No podemos remitirnos
exclusivamente a números o impresionarnos con las estadísticas. Los hechos
publicados son de notorio conocimiento, nosotros tenemos la obligación de ver,
no sólo de dónde salió la bala, también tenemos que preguntarnos por qué. Mueren
civiles. Es un hecho, no importa cuántos de cada lado, son muertos, seres
humanos. Mientras Hamas apunta sus cohetes y misiles deliberadamente a centros
urbanos para asesinar a la población civil, Israel intenta neutralizar la fuente
de los lanzamientos donde lamentablemente, a veces, se producen daños
colaterales. "
Más adelante, Mellincovsky profundiza su opinión con datos
que sólo puede conocer un especialista que se desempeñó en el Tzáhal: "Antes de
atacar, Israel le avisa a la población civil palestina, por panfletos y por vía
telefónica. Entonces, ¿por qué no se van? Hay dos posibilidades, o no salen de
la zona a ser atacada porque los terroristas de Hamas se escudan en ellos y los
tienen como rehenes, o deciden quedarse motu proprio para colaborar con el
Hamas; en ese caso, civil deja de ser sinónimo de inocente."
Por último,
sugiere: "Para esos periodistas, que su trabajo es también su vocación,
anhelamos que el tema no baje del orden del día sin que tengan la oportunidad de
ver y transmitir las distintas perspectivas de un caso, que por ser complejo, no
tiene por qué transformarse, ni en simple, ni en complicado".
Sus inquietudes
por la libertad de prensa se trasladan desde Irán a Venezuela y también
sobrevuelan Bolivia. En un extenso artículo de siete páginas que publicó El
Argentino.com, le atribuye al presidente Hugo Chávez sufrir una influencia
notable de su colega iraní Mahmud Ahmadinejad en la política interna de su país:
"... no sólo se le dio por influir en las naciones de la región, sino que además
se dio el lujo de importar una ideología, la del chiísmo iraní, que no se
conforma con un proyecto hegemónico en el Cercano Oriente...".
Mellincovsky
recorre la conflictiva relación del líder venezolano con los grandes medios y
hasta menciona un dato curioso sobre Bolivia, confirmado en agosto pasado: la
creación en ese país de un canal de televisión iraní. De ahí que establece en
tono paródico una comparación entre dos actitudes supuestamente contradictorias
que le atribuye a Evo Morales: "¿Qué tienen que ver los movimientos sociales
bolivianos con el chiísmo radical de un país en el que la libertad de prensa es
utópica? Aparentemente, nada. Sin embargo, luego de haberse independizado de la
colonización española, hay un medio Evo que afirma ser quien liberó al Estado
Plurinacional de Bolivia del yugo de los Estados Unidos, pero hay otro medio Evo
que no tiene inconvenientes en traicionar los principios de sus seguidores,
eliminando la identidad de los grupos originarios en pos de la propagación de la
versión chiíta del Islam, conduciendo a Bolivia al Medioevo, cuando religión y
Estado eran una entidad inseparable" .
La Policía Metropolitana ya tiene
quién le escriba y divulgue su razón de ser. Un civil que pasó por el ejército,
pero de otro país. No deja de ser un hecho infrecuente en un gobierno que sumó
un tropiezo tras otro desde que creó su propia fuerza. Esa que el vocero
Mellincovsky, como periodista de oficio, sabe que recibió más críticas que
elogios desde que se volcó al espionaje antes que a cumplir la función que le
asignaron por la Ley 2.894 de Seguridad Pública.

Fuente:
lafogata.org

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