| versión para imprimir - envía este articulo por e-mail |
Los manuales nos siguen contando la historia al revés
Por Fuente: Area Educativa -
Friday, Jul. 23, 2010 at 5:51 PM
El año del Bicentenario propicia un espacio de reflexión respecto a cómo se comprende a los pueblos originarios en la enseñanza de la historia argentina. Representantes de estas comunidades plantean que aún hoy permanece una pedagogía Sarmientina que educa sobre una ficción incompleta y errónea del país.
El año del Bicentenario, con sus festejos, intentó demostrar que mucho de lo que se nos había enseñado en las escuelas acerca de los pueblos originarios, está tergiversado y todavía se omiten otros tantos aspectos de nuestro derrotero histórico. Para Anomar Iris Santana, de la comunidad Charrúa, se está haciendo un trabajo “gota a gota para que la reivindicación de estos pueblos llegue a las escuelas, a través de sus docentes”. Y el enfoque está fuertemente direccionado a los maestros y profesores, para que sean ellos, de forma independiente, quienes empiecen a enseñar la otra historia.
En este contexto, Iris Santana plantea que “se sigue enseñando una historia que no reconoce a los pueblos originarios; una educación que fue instaurada por Sarmiento en Facundo”. El libro que se sigue estudiando en las escuelas, recuerda la integrante de ésta comunidad, decía sobre los pueblos originarios: “No escatimemos la sangre de estos salvajes para imponer la cultura europea”. Con esto, los cambios no sólo deben apuntar a una revisión de aquello que se enseña, sino que deben incorporar una concepción totalmente distinta de la historia, que no produzca distinciones dadas por conceptos como “civilización y barbarie” o el de “europeo y aborigen”, y tan mencionados en aquel famoso libro del padre de la escuela argentina. A su vez, la charrúa asevera que “el cambio depende mucho de la apertura de los profesores y maestros, porque desde arriba, desde el Ministerio de Educación, no hay demasiado material que aborde la historia de los pueblos originarios”.
Los lineamientos curriculares son claros y específicos en cuanto a la enseñanza de la historia, a través de su asignatura pertinente o de otras. Así, el docente vacila entre aquello que aparece planificado y su criterio personal respecto a lo que sus alumnos deben saber de la historia argentina. Y a esto se refiere Iris Santana cuando alude a la reivindicación histórica indispensable en las escuelas: “Los manuales de Historia nos siguen contando la historia al revés. Nos enseñan que en 1853 el territorio estaba totalmente vacío, que había yuyos, cuando acá estaban los pueblos originarios. Las campañas de Roca y Rosas son en pos del exterminio de ellos. Se sigue enseñando a Roca, también a Rosas como próceres de la Nación”.
Cuando se revisa este punto en cuestión, queda al descubierto otro gran hueco que existe en el sistema educativo argentino. Se trata del amplio defasaje entre los diferentes niveles educativos, que operan de forma autónoma sin articular sus formas y contenidos, para, finalmente, erigir un hilo pedagógico común. Por ende, en la escuela primaria se enseña una historia, en media otra similar, y luego “los adolescentes empiezan a aprender por sus propios medios cuando llegan a las universidades y se dan cuenta que la historia es muy distinta a la que les habían enseñado”, señala Iris Santana.
La evidente indiferencia hacia los procesos históricos que tuvieron lugar en el sur de nuestro continente queda desnuda en la celebración de fechas como el 12 de Octubre, día en el que la escuela y sus actores representan el comienzo de un tiempo civilizatorio en estas tierras. En cambio, para quienes se empeñan en enseñar la verdadera historia, deben enfrentarse a esas estructuras históricamente construidas, y aún hoy celebradas. En este punto, la charrúa comenta que “los docentes tienen que usar un material didáctico que no tienen” y sugiere como actividad interesante para los educadores, “que conversen con sus alumnos y les hagan averiguar su procedencia, quiénes son sus ancestros, y entonces ahí se comenzará a descubrir nuestra verdadera historia”.
2010-07-19
www.areaeducativa.com.ar/sitio/ampliacion.php?id=1021