| versión para imprimir - envía este articulo por e-mail |
Todo el apoyo a los trabajadores y el pueblo de Francia
Por Prensa Convergencia de Izquierda -
Friday, Oct. 22, 2010 at 12:44 PM
Francia en llamas De arriba abajo, los estudiantes y trabajadores han paralizado Francia, en una rebelión generalizada contra el gobierno de Sarkozy y su intento de extender la edad de la jubilación a los 62 y 67 años, en medio de cada vez más llamados a una huelga general indefinida y a la salida del presidente.
Después de seis jornadas de huelga, se anuncian nuevos paros, y la situación es cada vez más parecida a mayo de 1968, pues se han juntado las luchas estudiantiles y de los trabajadores como nunca antes en las últimas décadas.
Después de una semana tumultuosa, los aeropuertos seguían parcialmente paralizados, los transportistas se unieron a un bloqueo de caminos y en especial al bloqueo de todas las refinerías, que llevan dos semanas paralizadas. De las 12500 estaciones de servicio, por lo menos un tercio ya no tienen combustible, según cifras oficiales.
En las ciudades, las cifras de las movilizaciones no bajan de un millón de personas, y lo más destacado es la participación de los estudiantes universitarios y principalmente secundarios, que se volcaron en masa a la protesta, realizando asambleas masivas y bloqueando las entradas a los colegios y universidades.
Según los organizadores, más de 1200 liceos se movilizaron y 850 fueron bloqueados. 12 de las 83 universidades votaron la huelga, según el sindicato estudiantil UNEF, diez universidades fueron bloqueadas totalmente y dos parcialmente, siendo cerradas.
El ingreso de la juventud aterra al gobierno. Hace pocos días Sarkozy dijo: "Debemos evitar a toda costa la movilización de la juventud. Para un gobierno, no hay nada peor que la unión entre los frentes sociales y de la educación. No hablo de los profesores que hacen huelga cuando vuelven de vacaciones, sino de los estudiantes. Deben ser vigilados de cerca, como la leche en el fuego”.
Es muy importante destacar la masiva participación de mujeres, que han sido las más afectadas por el proyecto de aumentar la edad de jubilación.
Las manifestaciones, que ya van por la sexta, marcan un ascenso de la radicalización, con enfrentamientos en las calles contra la policía, sobretodo de los estudiantes, encapuchados como en cualquier país latinoamericano, arrojando piedras, quemando autos, saqueando negocios, levantando los adoquines de las calles, en pleno centro de París y con los transportistas, bloqueando rutas, autopistas, puertos y refinerías con sus “operaciones escargot” (caracol), de endentecer el tráfico con sus vehículos.
Más importante aún es la amplitud de las movilizaciones no solo en París sino en las ciudades del interior, como Marsella, Toulouse y Bordeau, y en las ciudades más pequeñas. Según un investigador citado por Le Monde, “la persistencia de marchas importantes en las pequeñas ciudades muestran el anclaje en profundidad de la dinámica de la protesta”.
Francia al frente de la lucha contra los planes de ajuste europeos
Lo que está en juego no es solamente el proyecto de ley del gobierno. La mayoritaria simpatía popular que han despertado las movilizaciones (71%), es porque al defender la jubilación a los sesenta años, los “franceses quieren defender el conjunto de su modelo social”, como escribe Le Monde. Por eso, lo que hay no es una movilización parcial, sino el cuestionamiento al gobierno de Sarkozy en toda su extensión.
Lo que está en juego es el proyecto del gobierno, como parte del plan europeo de destruir las conquistas sociales y de imponer un fuerte plan de austeridad en todo el continente. Están en juego las grandes conquistas obtenidas desde 1936 en adelante.
Sarkozy ha perdido todas las batallas que ha dado, la más importante, la batalla ante la opinión pública. Este presidente aparece como el gobierno de los ricos, el de los escándalos políticos, como el escándalo Bettencourt (la heredera de L’oreal, para quien trabaja la esposa del ministro Eric Woerth, el encargado de la reforma)
Por eso, se juntan cada vez más todas las protestas de los últimos años, desde las de los jóvenes de los suburbios de París, los trabajadores contra el cierre de fábricas, los estudiantes secundarios y universitarios, con una destacadísima participación de las mujeres, que son las más afectadas por la reforma jubilatoria, y en general el conjunto de la población.
Las principales organizaciones estudiantiles han convocado una nueva marcha para el jueves, día en que debe votarse la propuesta en el Senado, ya que el gobierno quiere jugar con los diez días de vacaciones que se inician el viernes para desmovilizar. En varias provincias los sindicatos empiezan a discutir la huelga general indefinida, como en Alto Loria y en Ardennes, y algunos empiezan a levantar la consigna de Fuera Sarkozy.
¡Todo el apoyo a los trabajadores y los jóvenes franceses!
Convergencia de Izquierda manifiesta todo su apoyo a los jóvenes y trabajadores franceses en su lucha por impedir la reforma de las jubilaciones. Cuando en nuestro país el gobierno de Cristina Kirchner acaba de vetar la ley del 82% móvil mientras se roba la plata de nuestros jubilados, los trabajadores y estudiantes argentinos debemos seguir el ejemplo de los trabajadores y los jóvenes franceses.
Llamamos a todas las organizaciones de izquierda a realizar una marcha frente a la Embajada de Francia para la próxima semana, para coincidir con el día en que se discutirá la aprobación de la Ley.
www.convergenciadeizquierda.org