Apuntes y reflexiones sobre la campaña oficial contra el Partido Obrero
Por Red Eco Alternativo - Saturday, Jan. 01, 2011 at 8:53 PM

30 de Diciembre de 2010 - La campaña del gobierno nacional contra el Partido Obrero, la conspiración duhaldista-trotskista y la negación de la justeza de los reclamos. El rol de la Unión Ferroviaria. La criminalización de la protesta. Novedades en la causa por el asesinato de Ferreyra.

(Jorge Pessoa-Red Eco) Buenos Aires - Desde que se produjo el corte de vías del Ferrocarril Roca en Avellaneda, y los posteriores desmanes en la estación Constitución, el Gobierno nacional, a través de sus voceros oficiales y mediáticos, se ha montado en una campaña descalificatoria y persecutoria hacia el Partido Obrero - y por elevación, contra organizaciones y partidos de izquierda críticos de su gestión- que mirada de cerca, no resiste el menor análisis y desnuda su carácter irrisorio, de manifiesta operación política.
Desde el principio, los voceros oficiales vincularon, sin dar pruebas, al corte de vías con los destrozos en Constitución. Acusaron al Partido Obrero de haber levantado las negociaciones en el Ministerio de Trabajo, y luego fogonearon el caos. El dedo acusatorio oficial señaló la dirección a la justicia; dos dirigentes ferroviarios que protagonizaron el corte de vías, Jorge Hospital y Omar Merino, fueron detenidos el domingo 26 e incomunicados, acusados de “interrupción del servicio de trenes” y “extorsión”. Las detenciones fueron efectuadas por la división Roca de la Federal, la misma que liberó la zona de Barracas el día del asesinato de Mariano Ferreyra.

La campaña “oficial”
El domingo, el escriba oficial Horacio Verbitsky publicó una nota en Página 12 plagada de falsedades y elucubraciones, más allá de las notorias descalificaciones hacia el PO (ver http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-159354-2010-12-26.html ). La primera línea del artículo señalaba que los tercerizados del Roca no participaron en el corte, llevado a cabo por dirigentes del PO y tercerizados de otras líneas. Sin embargo, Hospital y Merino son dirigentes ferroviarios empleados por UGOFE, quienes venían denunciando que el acuerdo alcanzado en noviembre para el pase a planta y la reincorporación de despedidos no se estaba concretando, al haber 60 trabajadores tercerizados que no serían reincorporados –hecho que Verbistsky justifica argumentando que “la limpieza de los baños que realizan es retribuida por las propinas de los usuarios”- y denunciando 50 nuevos despidos de tercerizados. Líneas más adelante, Verbitsky desliza la vinculación entre el corte y los destrozos, señalando que “no queda claro si los primeros atacantes pertenecían al mismo grupo que los responsables del corte, porque actuaron sin ninguna identificación ostensible y porque en general el partido “Obrero” reivindica sus acciones”.
Las acusaciones a Duhalde, cuya participación en un hecho de este calibre no debería llamar la atención, no van más allá de la mención de su nombre y de algún puntero mafioso, de esos que tanto abundan. Ni una palabra sobre el posible rol en los desmanes de la Unión Ferroviaria, que ha dado sobradas muestras de su actitud violenta y patotera. Si fueron capaces de asesinar a un militante para defender sus negocios, ¿por qué no lo serían de provocar este caos para deslegitimar la lucha de los tercerizados y provocar el repudio y la descalificación del reclamo de los ferroviarios? De hecho, cuando fue asesinado Ferreyra, los voceros oficialistas dedicaron largas horas de micrófono y aire a vincular a Pedraza con Duhalde, y a tratar de desvincular a la cúpula de la UF de Cristina (Fernández) y (Hugo) Moyano. ¿Cómo se explica entonces que de un plumazo se pretenda ligar a un sector de la izquierda con lo peor de la derecha, justamente cuando sus intereses son diametralmente opuestos? Si Pedraza es Duhalde, como tanto insistieron desde el gobierno y sus voceros mediáticos, ¿cómo se explicaría la connivencia Altamira-Duhalde, cuando la lucha de los tercerizados del Roca, apoyada y sostenida por el PO, lo que hace peligrar son los fabulosos negociados del “duhaldista” Pedraza? Valga recordar también que el día del crimen de Ferreyra, Pedraza participó junto con el secretario de transporte, Juan Pablo Schiavi, de la conferencia de prensa que abrió el 5° Congreso y exposición ferroviaria Latinrieles. Schavi fue uno de los primeros en atacar y criticar duramente al PO el día de los incidentes en Constitución.
Durante el lunes y martes, el jefe de gabinete Aníbal Fernández y el canciller Héctor Timerman continuaron con la campaña descalificatoria, hablando de una conspiración trosko-duhaldista, calificando al PO de ser una élite radicalizada de estudiantes de clase media, un Partido “sin obreros”. Más allá de la coincidencia o disidencia con las caracterizaciones políticas y métodos del PO, llama la atención este señalamiento, cuando hace dos meses, un joven militante del PO fue asesinado por defender los derechos de los obreros explotados del ferrocarril, cuya precarización es llevada a cabo a partir de la connivencia entre la gerenciadora UGOFE (armada en 2007 por el propio gobierno nacional) y la Unión Ferroviaria, ante la mirada ausente (o cómplice) del Ministerio de Trabajo.
Continuando con su campaña descalificatoria, Verbitsky sostiene que “el empleado de la Legislatura porteña Néstor Pitrola, que dirige esa agrupación de la clase media radicalizada, participó de los encuentros de urgencia realizados en el Ministerio de Trabajo mientras la temperatura subía hasta los 35° C”. Esto fue desmentido por el PO, que señaló que Pitrola dejó la Legislatura junto con Altamira en 2003 y que además no participó de las negociaciones en la cartera laboral (ver El Partido Obrero le responde a Horacio Verbitsky http://www.redeco.com.ar/nv/index.php?option=com_content&task=view&id=4721&Itemid=42). Estas acusaciones fueron repetidas incansablemente por Fernández y Timerman, quien calificó a Pitrola de “ñoqui” en una entrevista realizada por Victor Hugo Morales en Radio Continental.

El “descargo”
Luego de la detención de los dos dirigentes ferroviarios opositores a la conducción de Pedraza, el PO salió a cuestionar la campaña oficial y la criminalización de la lucha de los tercerizados. Marcelo Ramal señaló en la conferencia de Prensa realizada el martes 28/12 que “Está muy clara la intención deslizada por voceros del gobierno y por funcionarios del propio gobierno, de querer involucrar al Partido obrero en los hechos de Constitución, cuando con toda claridad, en los desmanes del jueves pasado está la mano de la patota sindical, de los barrabravas a sueldo del Estado”.
A continuación, Pitrola mostró una foto de una persona que habría protagonizado los destrozos en Constitución, señalando que sería el “Mono Gómez”, delegado de la empresa UrbanoExpress, de convenio camionero. En contraste con la detención de los ferroviarios que cortaron las vías, Pitrola señaló que “hasta el momento no aparece una investigación de quien fue responsable de haber saqueado comercios, destruido ambulancias, algo que supera en mucho a la normal bronca popular por un problema de trenes”.
Pitrola también sostuvo que “hubo tres paros ferroviarios, que en realidad fueron lock-outs, que fueron por la libertad de estos asesinos, dos en el Roca y uno en el San Martín. El gobierno no ha levantado la voz . Y ahora resulta que el Partido Obrero es responsable de interrupción, de extorsión, etc, frente a una medida de lucha obligada, que han tomado obreros acorralados que llegaron a fin de año sin su trabajo, sin cobro y sin nada. Además, esto fue en el marco de nuevos despidos, porque hubo 50 despidos más”.
Según sostiene el PO, en las últimas semanas hubo 15 despidos en la empresa Herzo, 20 en Mazza Tec Tres; 5 socorristas (personal de enfermería) y 5 de la empresa MAPRA. El PO señala además que el acta firmada con el Ministerio de Trabajo no se cumplió porque la misma estipulaba que el 20 de diciembre estarían todos en planta permanente, y que mientras tanto, a partir del 1 de diciembre, todos los trabajadores debían cobrar la categoría más baja del convenio ferroviario.
Estas denuncias, no refutadas por el Ministerio de Trabajo ni el Gobierno, indicarían la justeza de los motivos del corte de vías enmarcado en la lucha de los tercerizados, más allá de lo oportuno o inoportuno que pudiera haber sido el mismo, y del perjuicio generado a miles de trabajadores que viajan en el Roca. El ataque al PO parecería esconder la negación de la legitimidad de los reclamos y la lucha de los tercerizados.
Pero además de ello, lo que llama la atención es esta furibunda embestida contra una organización de izquierda que forma parte de la gran mayoría de las luchas obreras y populares. El peligro que entraña el naturalizar o justificar estas operaciones implica dar vía libre a la persecución y criminalización de los que luchan y reclaman. No es el primero ni el último caso. Allí está Roberto Martino confinado en el penal de Márcos Paz, acusado injustamente por un delito que además es excarcelable. El caso de la represión a los Qom de Formosa también es paradigmático. No hubo un solo paso hacia la investigación de los asesinatos por parte de la policía provincial. Félix Díaz, dirigente de la comunidad se encuentra realizando una huelga de hambre y el ministro del interior Randazzo se ha negado en reiteradas oportunidades a recibirlo. Ni una palabra han dicho los voceros oficiales de la responsabilidad del gobernador Gildo Insfrán, kirchnerista de la primera hora. Mientras tanto, la diputada formoseña María Graciela De la Rosa, integrante del bloque kirchnerista, sostuvo hoy en el programa radial de Víctor Hugo Morales que la figura de Félix Díaz no es representativa de la comunidad La Primavera; “en Formosa no hubo, no hay, ni habrá ningún desalojo de pueblos aborígenes. Formosa está orgullosa de tener un 10 por ciento de población aborigen. El problema que tiene el grupo de Félix Díaz, que no sé si es un cacique o un dirigente político, La Primavera es una colonia muy grande que vive al margen de este conflicto. No hubo ningún desalojo de tierras aborígenes”, señaló la legisladora nacional.

Afuera y adentro
El martes 28, el juez Luis Armella resolvió la excarcelación de Merino y Hospital y dio lugar a los pedidos de eximición de prisión de Eduardo Belliboni y Miguel Morales, también militantes del PO y acusados por el corte de vías en Avellaneda. A pesar de la excarcelación, fuentes judiciales señalaron que todos continuarán procesados
En la misma jornada se confirmó la prisión preventiva a los 7 acusados por el crimen de Ferreyra, entre ellos Cristian Favale y Gabriel “Payaso” Sanchez, sindicados como autores materiales. Además, permanecerán detenidos Juan Carlos Pérez, Guillermo Uño, Salvador Pipito y Jorge González. Pablo Díaz, dirigente de la UF fue señalado como “instigador” y como la persona a quien reportaba la patota. Esta confirmación “abriría” el camino a la indagatoria a Pedraza y el “Gallego” Fernández, máximos jerarcas de la Unión Ferroviaria.

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