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Ningun techo salarial: ¡5000 de básico para todos/as!
Por Prensa Convergencia Socialista -
Tuesday, Feb. 15, 2011 at 6:28 AM
¡Ningún techo salarial! Hay que luchar por $5000.- de básico para todos
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Mientras la inflación continúa reduciendo el poder adquisitivo del salario, las luchas obreras crecen y se extienden, aún durante las fiestas de fin de año y las vacaciones. Innumerables establecimientos y fábricas, incluso gremios enteros presionados por las bases, consiguieron adelantos y bonificaciones para diciembre y los primeros meses del 2011.
Las patronales y los dirigentes sindicales, acostumbrados a iniciar las discusiones paritarias en marzo, se vieron obligados a sentarse a negociar apurados por la ola de reclamos y medidas de fuerza impulsadas por la bronca frente al aumento de precios de la canasta familiar. De hecho cientos de miles de trabajadores impusieron la reapertura de las paritarias, obteniendo aumentos varios meses antes de la fecha pautada para el inicio de las negociaciones colectivas.
Diciembre y enero fueron meses calientes de conflictividad laboral. Los petroleros rompieron el techo salarial acordado entre el gobierno, los empresarios y los dirigentes sindicales a fin de año, los aceiteros impusieron mediante huelgas y piquetes un básico de $5000.- y los trabajadores de la fruta y empacadores de Río Negro lograron un 30 % de aumento, entre algunos ejemplos.
En pleno enero la CGT San Lorenzo, cuyo secretario general responde a Moyano y está enfrentado al dirigente de los aceiteros enrolado en la CGT Azul y Blanca de Barrionuevo, mantuvo una huelga general de 8 días con bloqueos en los puertos de Rosario, exigiendo $5000.- de básico para los trabajadores de todos los gremios. La presión de las bases y las peleas entre los desprestigiados burócratas, que empujan conflictos para disputarse afiliados, terminó con el principal aliado sindical del gobierno -Hugo Moyano- pateando el tablero del techo salarial.
Desde el gobierno echan leña al fuego
La reacción del gobierno para poner en caja a Moyano echó más leña al fuego. La presidenta, a diferencia de lo que ocurrió con otros bloqueos encabezado por el gremio de camioneros, después de exigir “responsabilidad” y que las protestas se hagan en las veredas para no interrumpir el trafico, ordenó la conciliación obligatoria para la CGT San Lorenzo. Pero a los pocos días desde los sectores de la justicia más ligados al kirchnerismo avanzaron con una jugada aún más dura.
El juez Oyarbide procesó y encarceló durante algunas horas al Momo Venegas, un pez gordo de las 62 Organizaciones Peronistas, ladero de Duhalde y uno de los involucrados en la “mafia de los medicamentos” (ver nota en página 4). Todo indica que esta movida no forma parte de un ataque al duhaldismo sino que significa un verdadero tiro por elevación al mismísimo Moyano, uno de los muchos burócratas que está siendo investigado por los negocios con los remedios truchos.
Sin embargo la detención de Venegas, una jugada dirigida a disciplinar a Moyano y a todos los sindicalistas peronistas, tuvo el efecto contrario, ya que toda la mafia sindical justicialista -kirchneristas y duhaldistas- cerró filas haciendo causa común con el Momo Venegas. ¡Ninguno de estos personajes tiene ideología más que la defensa irreductible de sus prebendas!
Como en el resto del mundo, la rebelión obrera y popular acecha detrás como un fantasma a los gobiernos cipayos similares al de de Cristina que descargan los ajustes sobre la clase obrera y el pueblo, para salvar los negocios de los imperialistas en medio de la crisis mundial.
La insurrección triunfante en Egipto y Túnez, los estallidos contra la carestía y los tarifazos en Bolivia y el Sur de Chile o las luchas que protagoniza la clase trabajadora europea, forman parte del mismo proceso que involucra a la clase obrera de nuestro país, que dio un salto de calidad en sus luchas luego de la explosión de los trabajadores tercerizados y la muerte de Mariano Ferreira.
Un año de elecciones, crisis y luchas
El año electoral, que se inicia con el marco de la revolución egipcia y la ruptura del techo salarial, acrecentará las disputas entre sectores patronales y burocráticos por el reparto del pedazo de una torta que cada vez se achica más debido a la rapiña imperialista y a la propia crisis internacional. Ejemplo de esto es la guerra por una parte de los ingresos de las exportaciones agropecuarias y la recaudación impositiva, que llevó a la división de los empresarios de la UIA en oficialistas y opositores y a la ruptura la Mesa de Enlace del campo.
Este contexto es cada vez más favorable para extender e intensificar la resistencia, organizando huelgas y conflictos para defender el poder adquisitivo, las conquistas laborales y los puestos de trabajo. Tenemos que aprovechar las actuales circunstancias para exigir e imponer asambleas para salir a la lucha y jugarnos a su unificación.
Hoy más que nunca existen condiciones excepcionales para impulsar asambleas, plenarios de delegados con mandato para exigir e imponer un plan de lucha por gremio y la huelga general por $ 5000 de básico y cláusula gatillo que actualice nuestro salario de acuerdo a la inflación real.
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