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2da jornada de declaraciones del juicio al ex-policia
Por Indymedia La Plata -
Friday, Feb. 18, 2011 at 2:05 AM
Mientras que la radio abierta sonaba de fondo, la segunda audiencia del juicio al ex policía, Enrique Loretto -acusado de "abuso de armas" y "apremios ilegales"- tomo lugar en Tribunales Orales del Fuero Penal de La Plata.
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En la audiencia de hoy, continuaron los testimonios de la causa por "abuso de armas". El testigo mas relevante fue Sayos María de las Mercedes, esposa de Gabriel García, quien presentó su opinión, acerca de los motivos que llevaron al ataque.
Según Sayos, cerca de su casa, le alquilaban una vivienda al policía Spindola, quién solo había pagado un mes de alquiler, a pesar de que repetidas veces García había hablado con el inquilino para que le pagase lo debido. Una tarde pasaron frente a la casa en auto y vieron que estaba siendo refaccionada. García se bajó a preguntar con autorización de quién lo estaban realizando, los trabajadores respondieron que "con autorización del dueño", quién después identificaron como Loretto. Sayos relata que horas más tarde, cuando volvía a su casa con su hijo encontró a su marido herido de bala en la pierna y a varios vecinos que habían salido al escuchar el disparo, para acompañarlo al hospital.
Causa por "apremios ilegales"
Los testimonios por la causa de "apremios ilegales" comenzaron esta mañana.
El primero en declarar fue el denunciante, Arévalo Carlos Daniel. La victima relató que a las 8.30 de la mañana del 6 de mayo del 2003, estaba yendo a trabajar en un remis junto con su compañero, Casco Adrián. A dos cuadras de su casa fueron interceptados por una camioneta azul. De la misma se bajaron tres hombres con armas largas, quienes nunca se identificaron como policías. Sin ser obligados y pensando que querían robarles, Arévalo y sus compañeros se bajaron del remis con las manos en alto. El testigo contó que en ese momento dijo "no soy un delincuente para tener las manos así", lo que ocasionó que uno de los civiles, lo golpeara con los puños desviándole el tabique nasal y le atara las manos con su cinturón. "Más lo miraba más me daba", dijo Arévalo.
"Uno gordo y pelado, otro más petizo con pelo paraditos, y otro grandote" fue la descripción que el testigo dio de los civiles. Explicó que los trasladaron en un patrullero a la Comisaría 4ta de Berisso donde los alojaron en la cocina donde se encontró con varios vecinos del barrio. Más tarde lo llevaron a un cuarto aparte para sacarle fotos. Luego lo llevaron al hospital Gutiérrez y más tarde a la fiscalía. Allí lo mantuvieron en una celda donde obligaron a desnudarse a él y al resto de los detenidos. De vuelta en la comisaría, lo imputaron por resistencia a la autoridad, una causa de la que nunca supo nada más.
Después se enteró de que Loretto era el jefe de calle que lo había golpeado y que la camioneta azul era de su propiedad. También reconoció a otro de los hombres que los había detenido como Sastre. Por último contó que a la noche, una vez en su casa vio pasar por la puerta de su casa la camioneta de Loretto dirigiéndose a la plaza del barrio. Sabiendo que allí se encontraba su hija con amigos, salió por temor a que algo ocurriese con el policía. Efectivamente, se encontró con los chicos agachados. Loretto los apuntaba mientras que les decía "soy el oficial Loretto hoy estoy medio loquito".
El siguiente testigo fue Casco Adrián, compañero de trabajo de Arévalo. A pesar de que iba en el remis con él, los sucesos que Casco relató no fueron los mismos que había declarado el primero.
Casco contó que se tomaron un remis desde la casa de Arévalo. En el trayecto al trabajo, los interceptó una camioneta policial, de la que se bajaron tres personas de civil con armas largas y dijeron ser policías. Recordó que detrás del remis se encontraba una camioneta azul de la que nadie se bajo. Luego de que Arévalo fuera golpeado los llevaron a la comisaría 4ta de Berisso, los alojaron en la cocina de la dependencia donde se encontraron con varios vecinos. Dice que en ningún momento él, Arévalo y el remisero, fueron separados. Luego de la comisaria, los trasladaron directamente a la fiscalía, donde no se acuerda que hayan sido obligados a desnudarse.
Casco también reconoció a Loretto y lo identificó como "él era el oficial Loretto, el que quería limpiar el barrio, él lo dijo".
Más tarde prestó declaración Monzón Marta, vecina de Arévalo.
La mañana del 6 de mayo su casa fue allanada durante las 5 y 8.30 de la mañana, luego fue trasladada junto con sus hijos a la Comisaría 4ta de Berisso y alojados junto con Arévalo, Casco y el remisero en la cocina de la dependencia. Explicó que a las 5 de la mañana irrumpieron en su casa un personal policial y dos hombres de civil, a quienes identifico como Loretto y Sastre. Monzón pidió una orden judicial que nunca fue mostrada, a cambió recibió agresiones físicas y verbales por parte de Loretto.
Una vez dentro del patrullero pudo ver que había otros móviles policiales y una camioneta azul que pertenecía al jefe de calle. También se encontraban detenidos su hijo, Sambrano Nicolás y un vecino al que también le habían allanado su casa, Sebastián Godoy.
La declaración de Monzón di paso a la de su hijo Sambrano Nicolás.
Contó que en el momento del allanamiento el se encontraba durmiendo. Fue detenido como su madre y trasladado a la cocina de la Comisaría 4ta de Berisso, junto con el resto de los vecinos. Allí se encontró con Arévalo, quien estaba muy golpeado. Además dijo haber sido detenido repetidas veces por "averiguación de antecedentes".
Luego entró a la sala Schonfeld Rosa, presidenta de la Asociación Miguel Bru. Ella contó que la Asociación había recibido la causa ayudando a Arévalo con la denuncia: "Arévalo se acerco para pedir ayuda por un problema que tuvo con un policía de Villa Arguello"
Loretto interroga y acusa a sus victimas
Se produjo una situación confusa cuando Loreto empezó a interrogar Arévalo. Tras una mirada atónita, los representantes del particular damnificado, objetaron tal acción por resultar intimidatoria, sin embargo el tribunal permitió que Loretto continuara con sus preguntas.
Cuando estaba interrogando a Sambrano, el Tribunal pidió que hiciera preguntas concretas. Cometiendo un desliz, Loretto explicó el motivo de sus preguntas: "quiero comprobar la falacia de que los testigos no se conocían entre si, sino que conformaban una banda".
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La tercera audiencia será mañana a las 9 a.m. En la misma asistirán los últimos testigos de la causa por "abuso de armas" y continuaran las declaraciones por la causa de "apremios ilegales"
Más información sobre la radio abierta
Más información sobra la primer Audiencia
Asociación Miguel Bru
Por Indymedia La Plata -
Friday, Feb. 18, 2011 at 2:05 AM
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