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24 de marzo de 2011 El Kirchnerismo refuerza el aparato represivo y procesa al activismo
Por Juventud del PRS -
Tuesday, Mar. 22, 2011 at 11:33 AM
prs-juventud@live.com.ar
24 de Marzo un día de Lucha....
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Las FF AA (fuerzas armadas) y las FF SS (fuerzas de seguridad) –policía, prefectura y gendarmería- son pilares esenciales del estado capitalista. Este monopolio de las armas es el que le permite a la burguesía reprimir cuando ya no sirve el engaño y los trabajadores y al pueblo pobre se rebelan contra el hambre y la opresión. Pero hasta para lanzar la más feroz represión por parte de las FFAA, los dirigentes políticos del estado burgués tratan de conseguir alguna base de apoyo de masas, como hizo por ejemplo, la dictadura militar en 1976, cuando ganó el apoyo de las clases medias para “aniquilar la subversión” y terminar con “el caos” que provocaban las huelgas obreras.
Néstor Kirchner ganó las elecciones en el 2003 bajo la influencia de los levantamientos populares de fines del 2001. El objetivo de la burguesía al promover a este candidato muy poco conocido del peronismo era canalizar la movilización de las masas -que había volteado a De La Rúa- nuevamente hacia los “canales normales de la política”, que se volviera a creer en la política, y recomponer las instituciones burguesas que habían quedado en crisis, totalmente desprestigiadas ante el pueblo.
La huída de De La Rúa tras tratar de imponer el estado de sitio con el asesinato de una treintena de compañeros y posteriormente la feroz represión en la estación Avellaneda con el asesinato de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki que -tras la multitudinaria respuesta de la movilización popular- le costó a Duhalde el llamado anticipado a las elecciones, revelaron que no había ninguna base social que avalara la represión y que no podían contar para implementarla con unas FFAA que no habían podido superar el odio popular.
Los operativos de “reconciliación” intentados por Alfonsín con el juicio a la cúpula militar, la obediencia debida y el punto final, o después con Menem a través del indulto, no habían logrado su objetivo. Había que seguir utilizando el mecanismo del engaño, lo cual necesariamente implicaba hacer más concesiones a los reclamos de justicia que todavía se expresaban masivamente cada 24 de marzo.
El kirchnerismo fue el encargado de implementar la política de llevar a juicio a una cantidad de represores de la dictadura, de tal manera que se pudiera cerrar ese “capítulo de la historia” y restablecer el “honor” de las FFAA, es decir, recuperar una cierta base social de confianza hacia las FFAA y de represión. Parcialmente este objetivo fue alcanzado, ya que con el argumento de combatir la delincuencia, Cristina K creó el ministerio de seguridad y su nueva ministra estrella Nilda Garré ya consiguió poner en la calle a la Gendarmería, una de cuyas primeras acciones fue apoyar a la policía en el desalojo de las vías cortadas por los vendedores ambulantes ferroviarios. ¡Basta de protestar cortando las vías y las calles! Había reclamado Cristina K en varias oportunidades, argumentando que perjudican a los propios trabajadores y automovilistas, tratando de ganar base social para su política de reprimir las protestas, para imponer el “orden” que le reclama la burguesía.
La política de “derechos humanos” le permitió al gobierno Kirchnerista ganar una importante base social, y cooptar a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Para ello tuvieron que reabrir las causas pero hasta Octubre de 2010 y según datos de la “Unidad Fiscal de Coordinación y Seguimiento de la Procuración de la Nación sobre Personas Condenadas, Procesadas y Detenidas”, tan solo 41 condenas están firmes, luego de juzgar a 145 represores; y de los 464 represores detenidos, un 37.5% están en sus domicilios dada “su edad y dolencias”. Es decir hasta ahora condenaron sólo a un puñado de los más destacados represores de la dictadura. Esa gente ya le había prestado sus servicios al régimen burgués y ahora -después de más de 30 años y sin mando de tropas- la forma en que le son útiles a la burguesía es yendo presos.
En el discurso de Cristina K del 1 de marzo, al inaugurar las sesiones del Parlamento, dijo: "los militares presos no son números que nos alegran, no debieron haber existido, pero tenemos necesidad de terminar con un proceso histórico y hacerlo con la ley en la mano sin rencores y clausurar esa etapa histórica".
Ya en el discurso del año pasado, para esa misma fecha, le había pedido “a la justicia que finalmente termine juzgando a los responsables y culpables para que con verdad y con justicia podamos dar vuelta definitivamente la página tal vez más dolorosa de este siglo XX que nos tocó pasar a los argentinos”.
Cuando el gobierno habla de dar vuelta la página de la historia, quiere meter en la conciencia popular que hoy las FFAA están limpias de represores y listas para defender “La Nación”, y que los desaparecidos fueron obra de algunos militares trasnochados. Por eso Cristina K dijo en aquel discurso del año pasado “Han humillado mucho más a las Fuerzas Armadas los que la redujeron a ser simples encapuchados en lugar de defensores de la soberanía nacional… como San Martín y Belgrano”
Estos discursos no hacen más que confirmar que el Kirchnerismo quiere terminar de “lavarle la cara” a las fuerzas armadas y represivas, las que ahora expurgadas de represores estarían de nuevo al servicio de “la patria”. Pero Cristina K no se queda de brazos cruzados esperando, no. Ya hace unos años que envió a las fuerzas armadas de “la patria” a una “misión humanitaria” en Haití, en donde junto a las tropas del imperialismo yanqui y francés se dedican a reprimir al pueblo haitiano cada vez que protesta contra la inmensa pobreza a la que están sometidos por la explotación capitalista e imperialista, agudizada hasta extremos increíbles por el terremoto y el cólera.
“Bueno -nos podrá decir algún compañero- pero se logró el objetivo de que una cantidad de represores fueran presos”. Es verdad, es el resultado de tantas movilizaciones enormes reclamando juicio y castigo para todos los milicos del proceso. Ningún compañero y menos los que sobrevivimos a la dictadura, puede dejar de sentir una gran satisfacción al ver a esa lacra fascista en la cárcel.
Pero hay una cuestión muy importante que tenemos que aclarar. El golpe militar de 1976 fue obra de la gran burguesía argentina y el imperialismo yanky dominante en la región, y contó con el aval del radicalismo, el grueso del peronismo –incluida la burocracia sindical-, el Partido Comunista y el Partido Socialista, entre otros. El principal objetivo del golpe fue quebrar el espinazo de la clase obrera que venía luchando contra la política antiobrera de Isabel Perón y que por medio de la huelga general había obligado a renunciar a López Rega. La organización de importantes sectores de la vanguardia obrera a partir de las coordinadoras zonales de fábricas cuestionaba el control de la burocracia sindical y puso en crisis el plan económico del ministro Rodrigo que pretendía aumentar la explotación de la clase obrera en beneficio de la patronal y el imperialismo. El instrumento del golpe fueron las FFAA, el brazo ejecutor de un “genocidio” sí, pero dirigido fundamentalmente contra la clase obrera y la juventud que abrazaba ideas revolucionarias y antiimperialistas. Fue la política contrarrevolucionaria de una clase –la burguesa- centralmente contra la clase obrera.
Ahora el gobierno de Cristina K cree que ya ha recogido los frutos de su política de derechos humanos e insiste en que ya es hora de dar vuelta la página. ¿Cuáles son las razones de esta insistencia?
Tanto la burguesía como el gobierno saben que cada día que pasa se achican los márgenes para la demagogia y para las concesiones, aún para esas escasas y miserables concesiones materiales con las el kirchnerismo ha recuperado apoyo popular, como la asignación por hijo, que se estrecha frente a la inflación como tela barata. Cristina, manoteando la plata de los jubilados, trata de estirar hasta las próximas elecciones la política de ganar apoyo a través de estos magros “beneficios” para los pobres, y de sostener con subsidios a algunas patronales poco productivas, las que gracias a esos “aportes” se han vuelto “incondicionales” del gobierno. Sin embargo, por más que nos prometan que La Argentina está “condenada por Dios” al crecimiento, la realidad es que por la crisis del capitalismo internacional y por las propias contradicciones de un “modelo económico” dependiente de la soja y las exportaciones de autos, se acerca la hora en que cualquier gobierno burgués –incluyendo al de Cristina si resulta reelecta- tendrá que apretarle bastante más el cinturón a la clase trabajadora, para que la patronal siga ganando mucha plata como lo hace ahora y lo hizo todos estos años gracias al gobierno “progresista” de los Kirchner.
La política de sacar la Gendarmería a la calle, y los discursos contra las protestas que afectan los servicios públicos y el tránsito, son los preparativos para la situación que indefectiblemente se aproxima. Para acompañar las palabras con hechos, el Gobierno K dio luz verde al procesamiento de miles de luchadores obreros y populares, como Javier Hermosilla de la Comisión Interna de Kraft-Terrabusi, Gustavo Lerer y otros compañeros de la Junta Interna del Hospital Garrahan, y mantiene preso a Roberto Martino. A la vez, por política del gobierno, la justicia hace lugar al pedido de desafuero –paso previo al despido- de decenas de delegados que se enfrentan a las patronales.
Pero, como lo han demostrado los acontecimientos del Egipto , Túnez, Libia y otros países de la región del Magreb, puede llegar el momento en que a la burguesía y su gobierno no le alcance con la policía y demás fuerzas de seguridad. Necesitan a las FFAA, el último y determinante sostén del régimen burgués.
Ya los hechos del Parque Indoamericano hicieron sonar la alarma de la burguesía. Es que de repente la pobreza y sus “necesidades básicas insatisfechas”, esa misma pobreza que el Indec se esfuerza por negar, hizo su aparición en la realidad, y con los muertos a causa de la represión de la Policía Federal de Cristina, de la Metropolitana de Macri, y de las bandas de barrasbravas contratadas para la ocasión, conmovieron la situación política. Los campesinos tobas asesinados por Gildo Insfrán –gobernador kirchnerista de Formosa- para robarles las tierras en aras de la extensión de la soja, revela que la pobreza, las injusticias y la represión están en todas partes.
El asesinato de Mariano Ferreyra, a manos de las bandas armadas de la burocracia sindical, aliada fundamental del gobierno K, en el marco de la represión a los tercerizados que “obstaculizaban un servicio público” para reclamar su pase a la planta ferroviaria permanente, es el reflejo del 40% o más de la clase trabajadora que sobrevive con salarios miserables, con laburos en negro o precarios contratos que los despojan de los derechos más elementales.
Y todos los días la policía de Cristina, Scioli, o las policías bravas del interior como la de Mendoza o Rio Negro, asesinan a jóvenes de los barrios pobres con el “gatillo fácil” y la tortura.
La burguesía y el gobierno de Cristina K, piensan y temen que más presión en esta olla social inevitablemente provocará luchas obreras y populares como respuesta.
Y entonces vuelven a añorar los años en los que el Estado tenía siempre a disposición a sus “patrióticas” FFAA listas para enfrentar a esa “guerrilla fabril”, como llamó Balbín -el caudillo radical de los ’70- a los obreros que hacían huelgas.
A recuperar esas FFAA estuvo y está dirigida toda la política de los Kirchner. Lo demás es todo cuento para engañar “progresistas”.
Para hacer realidad la reivindicación de “nunca más”, que expresa la aspiración de que no se vuelvan a repetir los golpes de estado o más en general de terminar con la represión contra el pueblo, y para conquistar la vigencia de los derechos democráticos y sociales para los trabajadores y el pueblo pobre, no basta con encarcelar a algunos represores de la dictadura, hay que luchar por la destrucción de las FF.AA y el aparato represivo del régimen burgués, lo cual sólo se puede realizar en el curso de la lucha revolucionaria por instaurar un gobierno de los trabajadores apoyado en el pueblo pobre.
En este 24 de marzo, en el que el gobierno de Cristina espera capitalizar políticamente la lucha popular por “el juicio y castigo”, porque faltan pocos meses para las elecciones, debemos trazar una clara línea de clase.
El PRS participará en las movilizaciones del 24 de marzo en unidad de acción con eje en los siguientes puntos democráticos:
*Por el desprocesamiento de los luchadores obreros y populares, cierre de las causas y anulación de las condenas a los trabajadores de Kraft, subterráneos, Zanón, ferroviaros, FATE, Hospital Garrahan, Hospital Francés; movimientos de desocupados y territoriales; ambientalistas; estudiantes; campesinos; originarios; militantes políticos y a todos los procesados por luchar.
*Libertad a Roberto Martino y demás presos políticos.
*Cárcel a Pedrazza y a todos los burócratas y responsables políticos de la muerte de Mariano Ferreyra.
*Esclarecimiento de la desaparición de Julio López y la muerte de Silvia Suppo, Luciano Arruga y todos los jóvenes víctimas de la represión policial
Unidad en la movilización sí, pero los trabajadores no debemos poner expectativas en ninguna variante de los partidos patronales, ni en el gobierno de los K, ni en la oposición patronal de derecha o de centroizquierda, ni hacerle el juego a los discursos demagógicos. Por eso llamamos a los trabajadores y a la juventud a no participar ni a realizar ningún acto conjunto, ni firmar documentos comunes con los representantes políticos de la burguesía.
Que te pasa PRS, estas nervioso...
Por Juventud K. -
Wednesday, Mar. 23, 2011 at 10:26 AM
Si se lleva a juicio a los milicos, resulta que son pocos. Si se respetan los ddhh, es por conveniencia política. Si tenemos un gobierno popular, resulta que no te gusta ese tipo de populismo. Si nuestra presidenta quiere pacificar el país de intolerantes como vos, esta mal. Si esta mujer combate a los capitales especulativos y poderosos que permanentemente le juegan en contra para sacarla del poder, sea como sea, vos la cuestionas. Y podría mencionar más, mucho más...
Por lo que veo, no hay pija que te venga bien y eso tiene una simple explicación. Te quedaste en el pasado y cuando alguien añora el pasado, nunca regresa al presente y menos al futuro. Este país necesita personas que piensen a futuro para levantar la nación de todos los desastres que otros hicieron.
Criticar es muy fácil. Lo difícil es construir. Es una lástima que no puedas participar, estas demasiado enfermo de soberbia política e ideológica, donde solo vale lo que vos pensás… y con pensadores como vos, nunca se va a levanta un país.
Tal ves eso sea lo que quieras.
Por suerte son una insignificante minoría…
preparate amiguito
Por Setentista -
Wednesday, Mar. 23, 2011 at 1:20 PM
preparate que maniana cobran, vos y toda la gilada K
q buena forma de recordar el 24, no?
Por K -
Wednesday, Mar. 23, 2011 at 2:42 PM
Sería inteligentísimo recordar el 24 de marzo cagándose a palos no setentista?
Llegan a intentar hacer algo y van a quedar en la mayor bancarrota política de la historia.
LA ESTUPIDEZ DE LOS ZURDOS
Por Sergio -
Monday, Mar. 28, 2011 at 9:18 AM
enriqueoctavo_69@hotmail.com
SE VE QUE NO TIENEN NADA QUE HACER MIS QUERIDOS ZURDOS DESCEREBRADOS. LO UNICO QUE SABEN HACER ES DECIR ESTUPIDECES POR EL RESENTIMIENTO QUE TIENEN. TIRAN PALABRAS POR TIRARLAS BUSCANDO GENERAR ALGO Y NUNCA GENERARON NADA !! SI EL CHE VIVIERA LOS ESCUPIRIA EN LA CARA !!!