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El 24 de Marzo los Pueblos Indigenas Marchamos por nuestros derechos
Por Equipo de Comunicadores ENOTPO - Wednesday, Mar. 23, 2011 at 1:22 PM

Juntos por la Memoria, la Identidad y el Territorio de los Pueblos Originarios

En los últimos años los pueblos originarios hemos sufrido asesinatos y muertes evitables como ha sucedido en Salta, en la que el desmonte y la usurpación territorial nos deja sin nuestras fuentes de vida, y son los niños los primeros damnificados.

21-03-2011

Hoy más que nunca es necesario respaldar la política de derechos humanos llevada adelante por el gobierno nacional, pero también profundizar las políticas de protección de los derechos humanos de los pueblos originarios ante los continuos atropellos y desalojos violentos en nuestros territorios. En los últimos años los pueblos originarios hemos sufrido asesinatos y muertes evitables como ha sucedido en Salta, en la que el desmonte y la usurpación territorial nos deja sin nuestras fuentes de vida, y son los niños los primeros damnificados.

El Encuentro Nacional de Organizaciones Territoriales de Pueblos Originarios se movilizará el próximo 24 de marzo junto a organismos de derechos humanos, sindicatos, organizaciones sociales y populares para reclamar el respeto y el cumplimiento de los derechos de los pueblos indigenas consagrados en la constitución nacional y tratados internacionales.

Como se viene realizando cada “Día de la memoria”, autoridades y referentes de los 30 pueblos originarios y 36 organizaciones del ENOTPO se harán presentes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para acompañar y reclamar por los derechos humanos, la memoria, la verdad, la justicia y el territorio. Desde su conformación como espacio político de las organizaciones territoriales, “el encuentro se moviliza cada 24 de marzo para mantener la memoria viva de los pueblos”, manifestaron delegados de los pueblos Ocloya y Diaguita que están trabajando en la organización previa.

Los Derechos Humanos en Argentina se han puesto de manifiesto a través de la acción de la justicia que impulsaron lo dos últimos gobiernos en Argentina, los juicios y condenas a los asesinos de la última dictadura militar, la restitución de la identidad a hijos y nietos de desaparecidos, el fortalecimiento de los organismos de Derechos Humanos, por mencionar sólo algunas. Sin embargo en lo que hace a políticas específicas hacia los Pueblos Originarios, preexistentes a la conformación del estado nacional, sólo se han propiciados algunos hechos significativos pero no suficientes, para revertir la exclusión, desigualdad y la violencia que ejercen los poderosos y los que defienden sus intereses.

En los últimos dos años han sido numerosos los asesinatos de hermanos originarios por violencia policial, o grupos civiles afines al poder. La muerte de Javier Chocobar en Tucumán y Roberto López en Formosa son dos de los hechos más violentos contra los indígenas con un punto en común: sus muertes se producen cuando se realizaban acciones de resguardo territorial ante la inminente usurpación por parte de particulares o terratenientes.

Dejar solo la discusión de los derechos humanos en los terribles actos de los militares en la década del setenta es no reconocer la historia y negar una discusión como sociedad que se debe dar sobre nuestra identidad como pueblos diversos y unidos por una misma identidad cultural en el continente. Creemos que debemos debatir la conformación del estado-nación, su dialéctica fundacional “civilización y barbarie” que alimentó este proceso de subalternización y despojo territorial de nuestros Pueblos.

Con la denominada conquista del “desierto” y del Gran Chaco se puso en marcha un proceso de “invisibilización” de los pueblos indígenas en el imaginario nacional. De esta manera, durante mucho tiempo, los textos escolares subrayaron la homogeneidad del pueblo argentino, europeo y blanco, ocultando a los pueblos indígenas en un capítulo sobre estas “tribus” que habitaban el país. Sin embargo, a partir de los años 1990, los movimientos indígenas comenzaron a constituirse como actores políticos y adquirir no sólo cierta “visibilidad”, sino también el reconocimiento del Estado. Este proceso desembocó en la reforma constitucional del año 1994 que definió a la Argentina como una nación multiétnica y garantizó a los pueblos indígenas ciertos derechos especiales. En efecto, el Artículo 75, inciso 17, señala: “Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos. Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural; reconocer la personería jurídica de sus comunidades, y la posesión y propiedad comunitarias de las tierras que tradicionalmente ocupan; y regular la entrega de otras aptas y suficientes para el desarrollo humano; ninguna de ellas será enajenable, transmisible ni susceptible de gravámenes o embargos. Asegurar su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afecten”.

Pese a que para algunos somos todos iguales, si vemos las condiciones de vida de la población indígena que se encuentra con necesidades básicas insatisfechas, vemos que no es así. Esta proporción es muy alta en comparación con los hogares no indígenas y el total nacional. Se lograron hechos significativos y se están impulsando otros en materia de derechos constitucionales como se viene haciendo, pero esta acción del movimiento indígena no es suficiente si no esta acompañada por la voluntad política de hacer realidad el efectivo respeto de los derechos, voluntad política que Cristina Fernández ha expresado en numerosas ocasiones, no estamos acá para dividirnos, estamos acá para construir una mejor sociedad entre todos, los indígenas, los trabajadores, las amas de casa, los estudiantes, todos, somos parte de la solucion no del problema.

Exigimos que se escuchen nuestras demandas y propuestas como organizaciones que estamos en los territorios y día a día vemos como se desploman los derechos que tantos años hemos luchado para que se reconozcan. Los Pueblos Originarios junto al pueblo argentino queremos construir la sociedad indoamericana que algunas veces soñaron los libertarios del continente.

Por todo ello marchamos con las consignas de:

NI UN PASO ATRÁS TERRITORIO INDÍGENA YA!

LEY DE PROPIEDAD COMUNITARIA INDÍGENA YA!

“LOS PUEBLOS ORIGINARIOS NO SOMOS El PROBLEMA, SOMOS PARTE DE LA SOLUCIÓN”

JUSTICIA POR JAVIER CHOCOBAR

JUSTICIA POR ROBERTO LÓPEZ

JUNTOS POR LA MEMORIA, LA IDENTIDAD Y EL TERRITORIO DE LOS PUEBLOS

Fuente: Equipo de Comunicadores ENOTPO

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