Gacetilla-Papelón de la Franja Morada y de las autoridades de la Facultad de Derecho
Por reenvio - Monday, May. 02, 2011 at 8:21 AM

Casos Soria y Piombo Papelón de la Franja Morada y de las autoridades de la Facultad de Derecho

Ayer, tras la asamblea estudiantil realizada en la Facultad de Derecho de la UNLP, los estudiantes decidieron llevar al Consejo Directivo de la institución tres planteos sobre los dos docentes cuestionados –Pedro Luis Soria y Horacio Piombo– para que fueran tratados sobre tablas. La agrupación estudiantil Franja Morada –que conduce el centro de estudiantes y pertenece a la UCR– realizó un terrible papelón al desconocer el mandato de la asamblea estudiantil y votar en contra de las presentaciones. No menos bochornosa fue la actitud del resto de los consejeros directivos –docentes y graduados- que no solo votaron en contra de las presentaciones si no que se negaron lisa y llanamente a debatir o emitir opinión sobre un docente que fue Juez durante la dictadura y otro que falló a favor de un violador de menores con argumentos sumamente machistas. Y para completar el panorama: la decisión de tabicar la discusión fue avalada por el decano de la Facultad Hernán Gómez que hasta amenazó con sanciones a los estudiantes.

El consejero por la minoría estudiantil perteneciente al Movimiento Independiente Universitario (MIU), llevó ayer al Consejo Directivo de la facultad el mandato de la asamblea estudiantil que se había realizado previamente. En síntesis, los estudiantes plantearon tres cuestiones:
1. Que el Consejo Directivo diera su apoyo al expediente presentado el día anterior por el MIU, en el que se pide la realización de un Juicio académico a Pedro Luís Soria, profesor de Derecho Procesal Penal que a pesar de haber sido designado juez durante la última dictadura cívico militar y estar involucrado en violaciones a los derechos humanos en el marco del terrorismo de Estado, continúa dando clases violando de esta forma el Estatuto de la UNLP.
2. Que el Decano y los Consejeros Directivos tomen las medidas correspondientes para que el profesor Horacio Piombo no siga dando clases en la facultad. Cabe aclarar que se trata del docente titular de Derecho Internacional Público y Privado de esta Unidad Académica, que además es Juez del Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Bs. As, y hace pocas semanas dictó un fallo a través del cual redujo la pena a la mitad a un violador de 2 menores de edad, utilizando argumentos discriminatorios desde una perspectiva sexista y de clase, sentando un gravísimo antecedente para miles de mujeres.
3. Que el Consejo Directivo apoye el proyecto de declaración de repudio a los argumentos del fallo dictado por Horacio Piombo.

Los primeros dos planteos fueron votados sólo por el consejero estudiantil por la minoría, que llevó el mandato de los estudiantes. El tercer punto fue paradójicamente votado dos veces: en la primera votación el vicedecano Vicente Atela junto a algunos docentes levantaron sus manos para que el proyecto sea tratado. Pero de inmediato otros docentes, incluyendo al Decano Hernán Gómez, hicieron volver atrás la votación fundamentando sencillamente que estaban distraídos. Lo curioso es que luego, la segunda vez que se vota, los profesores que habían levantado la mano para tratar el proyecto, adoptan la postura contraria y sin fundamentar su repentino cambio de posición evitan que se trate el proyecto de repudio sobre tablas.
El enojo de los estudiantes que habían ido a presenciar la sesión era evidente, agravado porque el Decano Gómez se había comprometido previamente ante los alumnos a permitir por lo menos el debate sobre el fallo de Horacio Piombo, cosa que negó sistemáticamente, faltando al único compromiso previo que había antes de la reunión. Además, ninguno de los docentes y graduados fue capaz de emitir opinión al respecto, en lo que quedó como una clara postura corporativa ya que con el silencio terminan apañando a dos docentes duramente cuestionados por los estudiantes que no quieren permitir que este tipo de personas los formen como abogados.
Y por si esto fuera poco, el intento de silenciar las críticas a estos dos profesores llegó al punto en que Gómez amenazó a los estudiantes con sanciones cuando éstos pedían que los consejeros emitieran por lo menos una opinión sobre el tema, tratándose de casos de extrema gravedad y que en definitiva terminan manchando a la institución. La frase “recuerden que ustedes todavía son estudiantes de la facultad”, fue la sugerente forma en que el decano intentó acallar las voces estudiantiles.
Quienes quedaron otra vez de la vereda de las autoridades fueron los representantes estudiantiles de la Franja Morada que hicieron oídos sordos ante las resoluciones de la asamblea estudiantil, a la que no asistieron repitiendo la postura que tienen desde hace años con respecto a este tipo de espacios, desconociendo la letra del propio estatuto del Centro de Estudiantes según el cual deberían no solo participar si no convocar regularmente y reconocer lo que allí se decide.
Lo más grave es que la postura corporativa que tomaron las autoridades y la Franja Morada permite que una persona involucrada en violaciones a los derechos humanos en el marco del terrorismo de Estado y otra que con argumentos discriminatorios y sexistas reduce la pena a un violador de menores, sigan al frente de sus cursadas en una institución pública de la jerarquía de la Universidad Nacional de la Plata. Mientras estos personajes sigan donde están, el silencio de los consejeros y el decano, se transforma en lisa y llana complicidad.

Contacto:
Damián Brumer - Consejero Directivo estudiantil
Celular: 15-498-1157

MIU
Movimiento Independiente Universitario

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