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Amnistía Internacional exige frenar los desalojos de los aborígenes tucumanos
Por El Siglo - Monday, Jun. 06, 2011 at 11:10 AM

La organización emitió una Acción Urgente, solicitando a sus socios de todo el mundo que le escriban notas al gobernador José Alperovich y al ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak, para reclamarles que eviten los desalojos forzosos de miembros de la comunidad de Quilmes y de cualquier otro pueblo originario.

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El peligro de desalojo forzoso de las tierras que ocupan desde hace siglos las comunidades originarias de Tucumán despertó el alerta de Amnistía Internacional.
Haciéndose eco de la situación sufrida semanas atrás por la comunidad de los Quilmes, sumado a la alarmante vulneración a los derechos de la que son víctimas los pueblos aborígenes de nuestra provincia, la organización emitió ayer una Acción Urgente, instando a sus socios de todo el mundo a manifestarse ante las autoridades de Tucumán y de la Nación.
En su informe, Amnistía solicitó a sus miembros que escriban, en español, sendas notas dirigidas al gobernador de Tucumán José Alperovich y al ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Julio Alak, expresando su "preocupación por el peligro de que cuatro familias de la Comunidad India Quilmes de Colalao del Valle sean objeto de un nuevo desalojo forzoso".
Además, el organismo pidió exhortar a las autoridades "a no llevar a cabo este desalojo forzoso ni ningún otro contra comunidades indígenas de ninguna parte del país, conforme establecen las leyes nacionales 26.160 y 26.55" y a solicitarles que "garanticen que los funcionarios que ordenen y lleven a cabo desalojos forzosos contra comunidades indígenas rinden cuentas de sus actos".
Por otro lado, se planteó recordar a los funcionarios "que deben tomar todas las medidas posibles para respetar los derechos de las comunidades indígenas, conforme establecen la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, de 2007, y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, de 1989". Amnistía Internacional también hizo una mención especial al asesinato del miembro de la comunidad de Chuschagasta, Javier Chocobar y a las amenazas de la que actualmente son víctimas dirigentes comunitarios, como represalias por la defensa de sus territorios.
"Cuatro familias indígenas corren peligro inminente de ser desalojadas forzosamente de sus casas en la provincia de Tucumán, en el norte de Argentina. Podrían sufrir violencia a manos de la Policía, y la pérdida de sus hogares y de sus medios de vida", advirtió la organización.

Violencia contra los Quilmes

El 30 de mayo, un juez de la ciudad de San Miguel de Tucumán denegó la petición de la Comunidad India Quilmes de Colalao del Valle de que se detuviera la orden de desalojo contra las familias. Miembros de la comunidad fueron desalojados el 17 de septiembre de 2009 y el 5 de enero de 2010 de cuatro hectáreas de tierra cuya propiedad reclaman tanto la comunidad como una empresa. En ambas ocasiones reocuparon las tierras días después. Unos policías, acompañados de un juez local, trataron de desalojarlos por tercera vez el 29 de abril de 2011, pero la comunidad se resistió al desalojo. Varios miembros de la comunidad y varios agentes de policía resultaron heridos en el enfrentamiento. La decisión del 30 de mayo ha dado a las autoridades luz verde para intentar un nuevo desalojo. En la actualidad, unas 30 personas, entre ellas 10 menores, viven en la tierra en disputa.
El desalojo de comunidades indígenas está prohibido en la actualidad por la legislación argentina. Las leyes 26.160 y 26.554 han establecido una prohibición general de los desalojos de comunidades indígenas desde el 23 de noviembre de 2006 hasta el 23 de noviembre de 2013, mientras se lleva a cabo un estudio nacional ("relevamiento de tierras") para definir los territorios indígenas.
El pueblo indígena Quilmes se compone de unas 3.000 personas, la mayoría de las cuales, aproximadamente 1.000, viven en la zona de Colalao del Valle, en la provincia de Tucumán.

Otros desalojos

Desde la organización ANDHES (Abogadas y Abogados del NOA en Derechos Humanos y Estudios Sociales) advirtieron que las autoridades provinciales también han desalojado a otras comunidades indígenas cercanas, algunos de cuyos dirigentes han sido atacados por defender la tierra que reclaman como suya.
En tal sentido, recordaron que el dirigente indígena Javier Chocobar, de la comunidad de Chuschagasta, fue asesinado el 12 de octubre de 2009, en una aparente represalia por su trabajo para garantizar la seguridad de tenencia para su comunidad. Un terrateniente local y dos ex policías fueron acusados de su asesinato, en una causa que irá a juicio en 2012.
Por otro lado, señalaron que "unos policías trataron de desalojar por la fuerza a la comunidad indígena de El Nogalito el 22 y 25 de septiembre de 2009" y que "los dirigentes indígenas Manuel Joaquín Pérez y Margarita Mamaní han denunciado amenazas de muerte e intimidación en relación con su campaña para garantizar la seguridad de tenencia para El Nogalito".
Según ANDHES, la presión sobre las tierras ancestrales de las comunidades indígenas podría intensificarse en Argentina a medida que se acerca la fecha de reanudar los desalojos sin que el relevamiento de tierras indígenas progrese de forma sustancial. "Mientras tanto, los desalojos forzosos continúan, ya que algunas autoridades locales y provinciales no respetan las leyes nacionales 26.160 y 26.544. Las tierras indígenas son reclamadas en ocasiones por individuos particulares, empresas o entidades oficiales que buscan desarrollar en ellas proyectos para su propio beneficio", advirtieron los abogados, mediante un comunicado.
Por último, recordaron que la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, adoptada en 2007 y que Argentina ha respaldado abiertamente, establece que "[l]os pueblos indígenas no serán desplazados por la fuerza de sus tierras o territorios" y que "[l]os pueblos indígenas tienen derecho a mantener y fortalecer su propia relación espiritual con las tierras […] que tradicionalmente han poseído u ocupado y utilizado de otra forma".

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