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¿Hay “indignados” en Londres?
Por Fuente: rebelion - viento sur -
Tuesday, Aug. 30, 2011 at 10:30 PM
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Viento Sur / Mediapart
24/07/2011
Tras Islandia, Portugal, España y
Grecia, ¿está Gran Bretaña descubriendo, a su vez, las virtudes de la
“indignación”? ¿La manifestación monstruo del 30 de junio, contra la
política de austeridad del gobierno, confirmaría la emergencia de un
movimiento de contestación poderoso, a caballo de varios países
europeos, siguiendo la estela de la primavera árabe? Lejos de los
hábitos de la Unión Europea frente a la agonía griega, se estaría
despertando otra Europa…
A primera vista, la hipótesis,
ingenua, no se sostiene, cuando se la confronta con los desfiles
británicos. Las centenas de miles de participantes, entre ellos muchos
jóvenes enseñantes, se han desplazado en nombre de una reivindicación
muy precisa: han respondido al llamamiento de cuatro sindicatos del
servicio público, con la esperanza de forzar a la coalición del primer
ministro David Cameron a retirar su proyecto de reforma de las
jubilaciones.
En Londres, la marcha, bajo el sol,
fue tranquila y milimetrada, casi aburrida en el momento de pa sar por
Trafalgar Square, con una consigna sin vuelta: “fair pensions for all”
(pensiones justas para todos). Una movilización sectorial de gran
amplitud, difícil de comparar con el planteamiento espontáneo, festivo
y global de los “indignados” en Madrid, deseosos de reconstruir la
sociedad por entero. No se lee a Stéphane Hessel del otro lado del
canal de la Mancha.
A la llegada de la manifestación, a
dos pasos del Big Ben, Josephine Kisserling, estudiante en la
University College of London (UCL), matiza la constatación, con una
sonrisa en los labios: “No llegaría a decir que es una manifestación
combativa, pero digamos que es más bien viva. En tiempos normales, los
desfiles sindicales son mucho más aburridos… Tocan música de
entierro…”.
“Jo” estuvo en las primeras filas, el
invierno pasado, de las movilizaciones estudiantiles contra la subida
de los gastos de escolarización. Desde finales de noviembre a finales
de diciembre ha ocupado, con varios centenares de sus compañeros, una
sala de su prestigiosa facultad, noche y día, para expresar su ira.
Estas ocupaciones espontáneas, pruebas de una radicalización de la
joven generación en Gran Bretaña, se han extendido a una treintena de
campus, incluyendo Oxford y Cambridge. Hoy, la dinámica ha recaído, y
Josephine quiere ver en la manifestación del 30 de junio “una nueva
etapa” contra el gobierno Cameron: “Los estudiantes estaban a la
iniciativa en noviembre de 2010, ahora son los sindicatos del servicio
público… Al final, es el mismo combate”.
“UK Uncut”: desobedecer frente al
rigor
En el desfile del 30 de junio, muchos
eslóganes dan fe de un estado de espíritu común con el de los
“indignados” de Europa del Sur, sobre el tema de la impunidad de la
finanza: las poblaciones no tienen que pagar los platos rotos de una
crisis que no han provocado. En inglés, esto da: "bankers play, workers
pay! " (los banqueros juegan, los trabajadores pagan), o también,
"Don´t increase my contributions to fund their debt!" (no aumentad mi
cotización de jubilación para financiar su endeudamiento).
Durante el recorrido, un manifestante
ha enarbolado, con un cierto éxito, una bandera griega, en apoyo a los
manifestantes atenienses. Otro llevaba un cartel mostrando una cara de
oso, con un eslogan escrito en griego, que quería significar “cortad mi
garganta”. El marasmo griego, ¿futuro del Reino Unido? Para Alexander
Rose, 22 años, estudiante en artes y sindicado en UCU, preguntado
durante un piquete de huelga matinal, las situaciones de Grecia y
España deben “inspirar” a la juventud británica: “Libramos batallas
similares, en terrenos diferentes”.
En el seno del cortejo, colectivos
contra los recortes presupuestarios (los “cuts” ), como artsagainstcuts
(un colectivo de artistas y de enseñantes de artes plásticas, que
plantea el “artsssssstrike” , la huelga artística, frente al rigor), la
plataforma Coalition of Resistance Against Cuts , y sobre todo UK
Uncut, se han impuesto a la sombra de las grandes máquinas sindicales.
Prueba de que el injerto entre varias generaciones de activistas y de
militantes podría prender, en estos tiempos de rigor compartido.
Sin hacer nunca referencia a ello, UK
Uncut es sin duda el más fiel de todos al espíritu “indignado”. Por
primera vez desde su formación en octubre de 2010, este colectivo, que
se había hasta ahora ilustrado en acciones golpeando en solitario, ha
decidido acompañar el jueves a los “viejos” sindicatos en esta jornada
de huelga. “Montamos acciones de desobediencia civil, de un modo
creativo, para protestar contra los recortes presupuestarios. Pero son
precisas diferentes tácticas para luchar contra la austeridad. Solos,
no lo lograremos”, explica Dani Wright, de UK Uncut.
El jueves, los activistas han servido
primero el desayuno a los huelguistas, un “big society breakfast”
referencia al proyecto (confuso y abandonado) de David Cameron de
fundar una “gran sociedad” que habría permitido, al final, reducir el
papel del Estado. Sobre todo, al final de la jornada, han organizado
(es Inglaterra) un partido de fútbol, no lejos de Westminster,
oponiendo un equipo de verdaderos-falsos banqueros a un grupo de
militantes ant-iausteridad –que, como estaba previsto, han ganado, con
gran alegría del público.
¿Qué alternativa?
“Queremos desmontar el mito según el
cual 1) estamos todos en el mismo barco y 2) no hay otra alternativa
que el rigor. Nos parece decisivo romper esta retórica, para que la
gente comprenda que el gobierno le miente. Presentamos pues
alternativas sencillas. Por ejemplo llamando la atención sobre la
evasión fiscal: esto representa 25 millardos de libras por año a escala
de Gran Bretaña. Es chocante. Este dinero bastaría para reemplazar los
recortes presupuestarios del sector público. O también las ayudas a los
bancos: se les dan 100 millardos de libras por año, sin siquiera hablar
de los planes de ayuda en tiempos de crisis”, asegura Dani Wright.
Treinta años después de los años
Margaret Thatcher, apodada TINA (por There is no alternative –no hay
alternativa), el país se encuentra una vez más confrontado a la trampa
del pensamiento único. De ahí la apuesta de UK Uncut , consistente en
fisurar por todos los medios ese yugo. Nacido como reacción a un
discurso clave del ministro de Finanzas británico, en octubre de 2010,
alabando las bondades de la austeridad, el colectivo funciona de forma
descentralizada y sin verdadera jerarquía. Su nombre viene de un
hashtag, una palabra clave en Twitter, que les preexistía. No mantiene
ningún lazo con los partidos tradicionales ni con los sindicatos.
UK Uncut se ha dado a conocer, a
fines de 2010, por una serie de acciones efímeras y bien sentidas, ante
tiendas de marcas como Vodafone o Top Shop, cuyos propietarios son
sospechosos de evasión fiscal. Desde una agencia ocupada en Edimburgo,
denuncian los beneficios alucinantes anunciados por el banco Barclays,
poco después de haber sido ayudado por el estado. Hasta ahora, la gran
mayoría de la prensa británica (conservadora) continúa ignorando a UK
Uncut.
La próxima jornada de movilizaciones
en Gran Bretaña, el 5 de julio contra la reforma del sistema de salud,
debería aportar una nueva prueba de la circulación de experiencias
militantes, de una punta a otra de Europa. Esa tarde se proyectará,
como preestreno en un cine de Londres, Debtocracy , una película
militante, ya visible desde hace meses en Internet, que aboga por una
anulación parcial de la deuda griega. Costas Lapavitsas, profesor de
economía en la capital británica, de origen griego, y militante desde
hace mucho por la formación de una auditoría de la deuda en Atenas, es
quien sirve de punto de unión para las luchas de los dos países.
Traducción:
Faustino Eguberri para VIENTO SUR
Fuente traducción: http://www.vientosur.info/articulosweb/noticia/?x=4118#
Fuente original: http://www.mediapart.fr/journal/international/010711/y-t-il-des-indignes-londres