Relataron cinco hechos de maltrato laboral de parte del juez Rozanski
Por UEJN Regional 5 La Plata - Sunday, Sep. 04, 2011 at 4:32 PM
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La secretaría de Prensa de la Regional 5 de la UEJN informa sobre las últimas declaraciones en el expediente 144/09 del Consejo de la Magistratura, que investiga el estado del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, en las que volvieron a relatarse situaciones de maltrato laboral y desidia en el manejo de los expedientes.

En la última audiencia, los testigos se refirieron a cinco hechos concretos: una reunión en la que el juez Carlos Rozanski maltrató a gritos a una secretaria; otra reunión en la que con una lista de empleados fue preguntando qué problema tenían con él; un tercer episodio en el que una secretaria embarazada tuvo que ser asistida por una ambulancia después de una violenta reunión con el juez; un cuarto en el que le impidió a una compañera participar de una asamblea presidida por Julio Piumato; y un quinto episodio en el que ingresó a una oficina para pedir a los gritos que se comenzara a trabajar en una tarea dispuesta por él.

Además, se destacaron las reiteradas reestructuraciones en las funciones de secretarios y empleados, dispuestas por el personal de confianza de Rozanski, con el consecuente cambio "abrupto y continuo" de tareas, o directamente la no asignación de tareas, todas situaciones configurativas del maltrato laboral.

PRIMER HECHO

En el primer hecho, los testigos destacaron que ocurrió un viernes de mayo de 2009, cuando Rozanski convocó a todo el personal a su despacho, les advirtió a los empleados que se avecinaban en el Tribunal tiempos "difíciles" y los intimó a tomar posición a favor de él o de los otros jueces, Dres. Isaurralde y Bertuzzi.

Los testigos explicaron que había allí un pizarrón en la que los otros dos jueces del tribunal eran el "juez deteriorado" y el "juez denunciado".

"Ustedes saben que son contratados, no apuesten con el diario del lunes", advirtió Rozanski, según los testimonios. También refirieron que el juez le gritó en términos muy duros a una secretaria, a 30 centímetros de su cara, a la que conminó a retirarse a su casa porque él había decidido suspenderla con una simple providencia (sin sumario previo). Cuando la secretaria se retiró, Rozanski se dirigió a los empleados: "¿Ven?, estas son las situaciones en las que pueden ser sometidos", señaló. Y miró a una de las empleadas: "Y vos, ¿tenés algo que decir? Porque estás angustiada desde que comenzó la reunión".
Respecto del mismo hecho, uno de los testigos expresó: "Fue una reunión muy subida de tono en la que (Rozanski) nos pide que no hablemos con los otros dos jueces". Otro testigo dijo: "Planteó que había que ver con quién se estaba. Fue en tono amenazante, sonó así". Y otro más, dijo: "El Dr. Rozanski se transfiguró, falto que le pegara a la secretaria". SEGUNDO HECHO
La segunda reunión referida por los testigos ocurrió poco antes del inicio del juicio de "unidad 9", en febrero o marzo de 2010. Curiosamente, también fue un viernes, el día elegido por Rozanski para poner en práctica lo que un testigo denominó "maldades que planea desde su sillón de cuero de 3 mil pesos".

En esa ocasión, Rozanski tenía una lista de todos los empleados, confeccionada a mano, en la que se indicaba cómo habían llegado al Tribunal. En la reunión, el magistrado hizo referencia a las asambleas de empleados, y se preguntó por qué continuaban realizándose. "Me dijo que había conseguido el contrato para mí y me preguntó si yo tenía algún problema con él", relató uno de los testigos.

TERCER, CUARTO y QUINTO HECHO

Después de estos episodios, mientras se vivía un clima de zozobra, los empleados comenzaron a organizarse en asambleas. "Las primeras asambleas fueron para pedir a los jueces que su pelea no interfiriera en nuestro trabajo", recordó uno de los testigos.

Así, finalmente los jueces Isaurralde y Bertuzzi se fueron del Tribunal y llegaron en su reemplazo los Dres. Falcone y Portela, subrogantes hasta el día de hoy. Mientras eso sucedía, se produjo el tercer hecho, cuando una secretaria embarazada tuvo que ser asistida por una ambulancia después de una violenta reunión con Rozanski, situación ya referida en otras declaraciones testimoniales.

Comenzó el juicio por los crímenes en la Unidad 9 pero los episodios de maltrato y gritos dentro del Tribunal comenzaron a reiterarse. El mismo día de inicio del juicio, 12 de abril de 2010, Julio Piumato concurrió al Tribunal para solidarizarse con los compañeros y presidir una asamblea. Y ocurrió el cuarto hecho: Rozanski mandó a un secretario a interferirla, reclamando a una empleada que saliera de la asamblea para entregarle una fotocopia al juez. La empleada se puso a llorar y Piumato pidió una reunión urgente.

Semanas después, uno de los que participó en esa asamblea, vivió el siguiente episodio, según su relato en la Comisión de Disciplina y Acusación: "El secretario me dijo que el Dr. Rozanski a mí y a otro compañero nos había hecho la cruz", reveló. Esto fue objeto de repregunta de parte del consejero Mario Cimadevilla, que quiso saber si ese anuncio había tenido repercusiones posteriores, a lo que contestó que sí.

El testigo ejemplificó con el quinto episodio, en el que el Dr. Rozanski se apersonó en su oficina y a los gritos exigió a los empleados que se pusieran a trabajar en una tarea que había ordenado media hora antes, cuando dependía de otras personas que ese trabajo se iniciara.

Agregó el testigo que meses después, en noviembre de 2010, Rozanski decidió quitarle el contrato, tanto a él como a otros 10 empleados, situación que no se pudo concretar porque los jueces Portela y Falcone respaldaron a los empleados. La amenaza de "la cruz" se había cumplido.

RETRASO DE EXPEDIENTES, PRESCRIPCIONES y LORENZETTI

En la última audiencia, Cimadevilla preguntó a cada uno de los testigos si existía "retraso" en los expedientes del Tribunal, y todos fueron contundentes en afirmar que sí, en coincidencia con lo ya declarado por otros.

Uno de ellos explicó que una forma de "bajar" la cantida de detenidos del Tribunal era excarcelarlos y que entonces ese expediente, al quedar sin detenidos, pasaba a no tener importancia, pese a que se investigaban allí "delitos graves", como secuestros extorsivos y grandes cargamentos de estupefacientes. "Siempre que se excarcelaba, las causas quedaban conminadas al sueño de los justos", dijo otro testigo.

Los testigos también relataron que Rozanski siempre citó palabras del presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, que señalaba que las causas más importantes eran las de lesa humanidad. "Decía que las otras causas no importaban, que eso era lo que decía Lorenzetti", señalaron.

Respecto del funcionamiento del Tribunal, los testigos dijeron que los días en que sólo está el juez Rozanski, muchas veces no se firman los expedientes. "Lunes y martes cuando están los Dres. Portela y Falcone, se firma todo. Los otros días, no", dijeron.

LA PERSONALIDAD DEL LOBO CON PIEL DE CORDERO

Los testigos también se refirieron a la personalidad del juez, que goza de reputación mediática por haber realizado juicios de alto impacto público, como a los genocidas Etchecolatz y Von Wernich, el secuestro de Diego Peralta o el asesinato de Santiaguito Miralles.

Denunciaron asimismo que Rozanski los filmó con su celular en el pasillo del Consejo de la Magistratura, en una de las jornadas de audiencias del expediente 144/09.

"No hay otra manera de llevarse bien con Rozanski que no sea siendo obsecuente y rindiéndole pleitesía", dijo uno de los testigos.

Agregaron que muchos de los empleados, al ingresar al Tribunal, sintieron que cumplían un sueño. "Con Rozanski uno pasa de la admiración, al desencanto y, por último, al miedo". Otro explicó que "el Dr. Rozanski planea sus maldades los viernes, desde su sillón de 3 mil pesos".

Además, recordaron que después del juicio a Von Wernich, reprendió al grupo de empleados que organizó el debate y lo ayudó en la redacción de la sentencia: "En lugar de felicitarnos, nos calificó de sectarios que pecábamos de soberbios intelectuales". También dijeron que en el Tribunal se vivió y se vive en un clima de "tensión permanente" y que "los gritos del Dr. Rozanski se han escuchado desde la calle, por abogados querellantes".

Recordaron su personalidad mediática, más proclive a recibir periodistas que a abogados defensores, y que ni siquiera realiza las visitas penitenciarias que hacen todos los jueces a los penales. "Recuerdo que estábamos corriendo muebles para el juicio de Unidad 9 y la preocupación del Dr. Rozanski era ver cómo lo enfocaba la cámara".

También señalaron que en una oportunidad Rozanski "planeó un veredicto para las 19 horas porque es el horario central de los noticieros".

"Pisotear los derechos humanos de los trabajadores es algo muy violento. Pero es mucho más violento salir a hacer creer que uno es un emblema de los Derechos Humanos", remató un testigo, en referencia al juez.

Y agregó que la personalidad del juez sólo se entiende como "perversa y paranoica" y que "su único objetivo es destruirnos".

EL PSICOLOGO EN EL TRIBUNAL Y EL PERMANENTE CLIMA DE TENSIÓN

Durante 2010, mientras el conflicto gremial se hacía más visible, Rozanski convocó a un psicólogo para que entrevistara al personal que trabaja en el edificio de calle 4, alquilado a $1,2 millón de pesos por el Consejo de la Magistratura, supuestamente para resolver los problemas que él entiende que hay "entre los empleados".

"Pero a nosotros se nos excluyó de la convocatoria. Ni siquiera hubo una instancia para que se nos convocara, y al resto del personal se le dijo que no queríamos participar de la entrevista con el psicólogo. Hasta ese punto se nos discriminaba", dijo un testigo, que participó de las asambleas del gremio.

Los testigos dijeron que muchos empleados no vivieron situaciones de violencia laboral directa contra ellos, sino una "violencia simbólica para con un grupo de empleados". Dijeron además que el constante cambio de oficinas y funciones, constituye un maltrato de por sí, así como la falta de directivas y el ninguneo.

Otro testigo dijo que aún hoy la distribución de tareas es "confusa" y que "el clima de trabajo es tenso en el Tribunal". Y reiteraron que un pequeño grupo de entre 4 y 5 empleados tiene a cargo unas "1200 causas", entre las que hay unos 30 detenidos.

NOTA: NO PONEMOS LOS NOMBRES DE LOS TESTIGOS PARA EVITAR LA PERSECUCION GREMIAL Y LABORAL DE LA QUE YA SON VICTIMAS

Secretaría De Prensa UEJN Regional 5 La Plata ¡A paso de Vencedores!

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