Julio López
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Amaneceres (Wall Street hoy)
Por reenvío red eco alternativo - Wednesday, Oct. 05, 2011 at 7:18 PM

Con un primer encuentro en Wall Street entre estudiantes y trabajadores, de pronto se asoma algo que podría convertirse en un nuevo movimiento social en Estados Unidos. Hace un par de días, la sección de Nueva York del sindicato de trabajadores de transporte público TWU fue el primer gremio en expresar formalmente su solidaridad con los jóvenes que conforman la mayoría del plantón de Ocupa Wall Street, y poco a poco se fueron sumando otros. Y en lo que puede cambiar todo, el sindicato industrial más grande del país –el siderúrgico USW– se convirtió en el primer gremio nacional en expresar su apoyo. De repente se escuchaba en el plantón el coro de estudiantes y trabajadores unidos.

(David Brooks – La Jornada/Cubadebate/TeleSur) EEUU - Esa alianza, históricamente, hace temblar al poder en cualquier país: en El Cairo la unión de sindicatos y jóvenes fue fundamental; aquí fue lo que convirtió a Seattle y sus ecos en otros países en una amenaza al orden mundial. En Seattle, en 1999, en un mitin del sindicato siderúrgico durante las protestas contra la cumbre de la Organización Mundial de Comercio, los trabajadores se dieron cuenta de que aparecieron cientos de jóvenes a su lado. Un líder sindical, el actual presidente del USW Leo Gerard, estaba al micrófono y de pronto interrumpió la lectura de su discurso y dijo: hermanos y hermanas, por favor volteen a su lado y abracen a los jóvenes, a nuestros nuevos hermanos, el futuro de todos nosotros.
La pasada semana empezó a ocurrir algo parecido, pero al revés: ahora los sindicalistas llegaron a la concentración de los jóvenes a ofrecer su abrazo de solidaridad. Apenas son palabras, ya que sólo han llegado pequeños contingentes de sindicalistas al plantón y sus marchas, pero es un aviso de algo que no se ha visto desde Seattle. Está muy lejos de ser una primavera árabe en EEUU, pero representa el potencial de llegar a ser el primer movimiento de rebelión contra un sistema político y económico que ya no responde a las grandes mayorías.
El terreno no puede ser más fértil. Las encuestas más recientes demuestran algunos de los niveles más altos de desconfianza y repudio contra la cúpula política y económica del país, por todas partes se repite que esta es la peor crisis desde la gran depresión pero que los costos de esta recesión se trasladan a los trabajadores y los pobres mientras los ricos gozan cada vez más de una concentración de riqueza no vista desde 1928.
Poco a poco se asoma la posibilidad de que la acción en Wall Street, iniciada por una agrupación de individuos, sin vínculos con organizaciones y con poca experiencia en lo que podría llamarse un movimiento, podría detonar el estallido que tanto esperan sectores progresistas, y tanto temen las autoridades, que sí estudian lo que ocurre en Madrid, Chile, Grecia y Londres, y que recuerdan –más que muchos de los manifestantes– a Seattle.
Algunos creen que éste es el momento. El ex periodista del New York Times y ahora comentarista progresista Chris Hedges recién instó a todos a sumarse a las protestas de Ocupa Wall Street. Ya no quedan pretextos. O te sumas a la revuelta que está ocurriendo en Wall Street y los distritos financieros de otras ciudades a lo largo del país, o te quedas del lado equivocado de la historia. O bien obstruyes, en la única manera que nos queda, la desobediencia civil, el saqueo de la clase criminal en Wall Street, que ha acelerado la destrucción del ecosistema que sostiene a la especie humana, o te conviertes en los que pasivamente permiten todo esto. O pruebas, sientes y hueles la intoxicación de la libertad y revuelta, o te hundes en el miasma de la desolación y apatía. O eres un rebelde, o eres un esclavo.
Para el reconocido filósofo político Cornel West, profesor de la Universidad de Princeton, lo de Ocupa Wall Street podría ser el inicio de un otoño estadounidense respondiendo a la primavera árabe. En entrevista con Amy Goodman, de Democracy Now, realizada en el plantón, West dijo: “estamos hablando de un despertar democrático; estamos hablando de elevar la conciencia política para que se vierta por todas partes del país, para que la gente empiece a ver lo que sucede a través de un lente diferente… Porque estamos hablando al fin de lo que Martin Luther King llamaría una revolución; un traslado del poder de los oligarcas a la gente de todos los días, de todos los colores, y eso es un proceso de paso a paso. Es un proceso democrático, es un proceso no violento, pero es una revolución, porque estos oligarcas han estado transfiriendo riqueza de la gente pobre y trabajadora a un ritmo muy intenso en los últimos 30 años, con impunidad, y aun así sonríen en nuestra cara y nos dicen que (la crisis) es nuestra culpa. Eso es mentira, y este bello grupo es un testimonio de que es mentira…. Digo, es sublime ver todos los diferentes colores, los diferentes géneros, todas las diferentes orientaciones sexuales y diferentes culturas, todos juntos aquí en la Plaza Libertad”.
Marines se suman a Indignados en Nueva York
Un grupo de Marines estadounidenses irá a Wall Street. Pero no para hacer frente a los manifestantes del movimiento Occupy Wall Street, sino para protegerles. Así lo han anunciado a través de Facebook una quincena de Marines veteranos que acudirán uniformados al distrito financiero de Nueva York.
“Los Marines vamos a Wall Street… (a PROTEGER a los manifestantes)”, anunció este sábado Ward Reilly, líder de esta iniciativa, a través de su cuenta. “Voy a ir esta noche con mi traje azul. Por el momento, otros 15 de mis colegas Marines también irán allí, también uniformados”, agregaba.
“Quiero enviar el siguiente mensaje a Wall Steet y al Congreso: Yo no luché por Wall Street, luché por América. Ahora es el turno del Congreso”, asegura Reilly.
“Mi verdadera esperanza es que los veteranos podamos ser la primera línea de defensa entre la policía y los manifestantes. Si quieren acceder a los manifestantes para golpearles tendrán que pasar primero a través del puto Cuerpo de Marines. Veamos si un policía es capaz de pegar a un grupo de veteranos de guerra condecorados”, añade Reilly.

Preparan marcha para este miércoles
“Ocupa Wall Street” prepara una gran protesta para la tarde de este miércoles, a la que también se sumarán “los sindicatos de trabajadores”, informó este martes la corresponsal de teleSUR en Washington, Aurora Samperio.
Se tiene previsto que la marcha parta desde “Wall Street hacia la municipalidad de la ciudad de Nueva York”.
Del mismo modo, se evalúa realizar la movilización “de manera conjunta con otros estados, por ejemplo, los Ángeles (California, suroeste), Chicago (Illinois, oeste) y Boston (Massachusetts oeste)” con la finalidad de “realizar la manifestación de forma simultánea”, indicó.
La actividad de este miércoles se realizará después de que este lunes miles de personas se unieran en varias ciudades del país y protagonizaran la marcha de “zombies” (muertos vivientes).
Disfrazados de “zombies”, con sangre en sus vestimentas y con billetes en la boca, los manifestantes dieron n mensaje a los especuladores cerca del Wall Street.
"Necesitamos representación del mismo gobierno al que nosotros llevamos al poder. Queremos que nuestro poder sea de nuevo nuestro y no parte de un interés corporativo", indicó Matty Slick-Hex, un pinchadiscos de 23 años disfrazado de "zombie corporativo".
Para el próximo 15 de octubre, todos los indignados están llamados a movilizarse, en el marco del "Global revolution day" (Día de la Revolución mundial), el objetivo es que las personas tomen los espacios públicos en todas las ciudades para protestar por la vulneración de sus derechos, por el estado de la política y por la concentración de las riquezas.

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Los indignados copan EE.UU.
Por de páginak12 - Wednesday, Oct. 05, 2011 at 7:21 PM

LA OLA SE EXTIENDE DE WALL STREET A LAS PRINCIPALES CIUDADES


Los activistas comenzaron a armar carpas en las principales ciudades y ya planean marchas en bancos, oficinas corporativas y comisarías a lo largo y ancho de Estados Unidos. Dicen que la economía sólo beneficia a la elite adinerada.





Por Stephen Foley *

Desde Nueva York

Lo que originalmente comenzó como una tibia promesa de “A ocupar Wall Street”, y una sentada en una plaza del distrito financiero de Manhattan ya se esparció en un movimiento de protesta de alcance nacional. Organizadas a través de redes sociales como Twitter, y vigorizadas por el arresto de 700 manifestantes en Nueva York el sábado, los activistas comenzaron a armar carpas en las principales ciudades y ya planean marchas en bancos, oficinas corporativas y comisarías a lo largo y ancho de Estados Unidos.

El rango de las protestas de los activistas es tan amplio como la protesta en sí. La ausencia de demandas específicas ha suscitado burlas en algunos sectores, pero el movimiento se cohesiona alrededor de la idea de que las políticas y la economía del país sólo benefician a la elite adinerada. Mientras que “A ocupar Wall Street” fue seguida de “A ocupar Filadelfia”, “A ocupar Chicago”, y más de una docena de ciudades, el mantra unificador de las protestas fue uno. “Somos más del 99 por ciento de norteamericanos comunes fuera de las ganancias económicas de la era de pre-recesión, golpeados por el downturn e ignorados día a día en asuntos políticos que van desde educación hasta medio ambiente y guerra.”

La estudiante de doctorado en Harvard, Marisa Engerstrom, formó parte de una marcha en la Casa de Gobierno de Boston junto a otras cien personas en donde se pidió el fin del corporativismo en el gobierno. “Nuestro hermoso sistema norteamericano de control y contrapoderes fue destruido por la influencia de bancos y finanzas que hicieron imposible que la gente alce su voz”, dijo la doctoranda. Más de 1000 personas acampan ahora en grandes ciudades y prometen quedarse todo el invierno.

En el Zuccotti Park de Nueva York, a metros de la célebre estatua del toro que simboliza a Wall Street, la protesta ya lleva 19 días. Con donaciones de plata y pizza de los peatones que pasan por al lado, los indignados elaboraron un sistema de reglas para esa comunidad.

La música suena en el campamento durante el día, y tienen su propio periódico, llamado The occupied Wall Street Journal. Ocasionalmente, alguna que otra celebridad se da una vuelta por el lugar y dice presente. Los manifestantes se valen de sus cámaras y laptops para difundir los detalles de las protestas por Internet. Las críticas contra el alcalde de la Gran Manzana, Michael Bloomberg, arreciaron luego de haber deslizado que no permitiría que los indignados acampen en la plaza Liberty. “Fue un imbécil por criticarnos diciendo que nuestro objetivo era ir por millonarios como él”, dijo Joan Pleune, una jubilada de 72 años que respalda la movilización callejera.

Durante las dos primeras semanas, el liderazgo difuso de A ocupar Wall Street se quejó por la poca cobertura de los medios, aunque los editores dicen que le dieron un tratamiento acorde al tamaño de la protesta. Sin embargo, ahora los ánimos comenzaron a subir por lo que parece un verdadero desarrollo del movimiento. Cuando los manifestantes llenaron el Puente de Brooklyn de Nueva York el sábado, gracias a los 700 arrestos las protestas repercutieron a nivel nacional.

En Seattle, había 30 carpas y 125 personas en la madrugada de ayer. El alcalde les dijo que no podían quedarse otra noche más. “Nos quería sacar, pero no nos movemos. Lo invitamos a que venga a la asamblea general de hoy, y esperamos hacerlo entender”, decía el comunicado de “A ocupar Seattle”. En Nueva Orleáns, los activistas planean marchar a la Reserva Federal. Se montó un campamento en Los Angeles por primera vez desde el sábado y desde allí comenzó a crecer. En San Francisco, 200 indignados rodearon el edificio del Bank of America en el distrito financiero de la ciudad, y el candidato a intendente John Avalos le habló a la multitud. “Este edificio es un símbolo de la increíble avaricia y riqueza que se acumuló en cada vez menos manos.”

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

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