Causa Díaz Bessone: Resumen audiencia 5/10
Por Daniel Aristizabal - Wednesday, Oct. 05, 2011 at 11:48 PM

JUICIO A LOS REPRESORES DE LA ULTIMA DICTADURA MILITAR

CAUSA DIAZ BESSONE

La Audiencia

En el día de hoy - Miercols 5- continuaron las audiencias en la Causa Díaz Bessone. Retomó su alegato el fiscal Gonzalo Stara continuando con el desarrollo de los casos.
Los casos analizados fueron los de Azucena Solana quien era militante de la UES y tenía 15 años al momento de su secuestro, Gustavo Piccolo quien acreditó además cómo fueron los últimos momentos vividos en el SI por Daniel Gorosito antes de ser obligado a firmar su libertad fraguada para luego ser desaparecido y también fue testigo presencial de los últimos momentos de los compañeros víctimas de la masacre de Los Surgentes, Ana María Ferrari militante de base peronista que fue secuestrada desde su domicilio por Guzmán Alfaro en persona.
También el fiscal se refirió al caso de la Dra. Olga Cabrera Hansen quien era abogada y tuvo el valor de denunciar las condiciones de cautiverio ante la visita de la Cruz Roja a pesar de las amenazas recibidas. Por ese motivo sufrió dos años más de prisión.
De los testimonios que analizó el fiscal, nuevamente surgió la participación del ex Capellán de la Policía Eugenio Zitelli dentro del grupo de represores. Así, mencionó Stara que la abogada declaró que las compañeras detenidas regresaron espantadas de su entrevista con el cura en la Alcaidía que justificaba los tormentos.
Al exponer el caso de Tomasa Verdún de Ortiz Stara mencionó que la misma pudo constatar la presencia del religioso no sólo en la Alcaidía sino en el propio Servicio de Informaciones. “Zitelli como parte del grupo tenía una función específica, hemos podido registrar que ingresaba al SI y, más concretamente a la sala de torturas”, dijo Stara en su alegato.
También se refirió el fiscal a los casos de Elida Deheza y Stella Maris Hernández. Ambas denunciaron en audiencia no sólo las torturas a las que fueron sometidas sino también que fueron víctimas de violaciones durante su cautiverio en el SI. Hernández específicamente señaló al Cura Marcote, imputado en la causa, como el violador serial del SI quien cumplía ese rol dentro de las funciones represivas. Cabe destacar que ante un pedido de este fiscal, el Tribunal ya ordenó previamente que se remitan al Juzgado de Instrucción los testimonios de las víctimas que denunciaron este tipo de delitos para su investigación y juzgamiento.
Otros casos desarrollados por Stara pusieron de manifiesto las terribles condiciones de cautiverio y las torturas a las que eran sometidas las mujeres embarazadas.
Expuso en este sentido los padecimientos sufridos por María Inés Luchetti de Bettanín quien era militante de Montoneros, fue secuestrada junto con su suegra Elba Juana Ferraro de Bettanin y sus tres hijas. Estaba embarazada de 9 meses en aquel momento, fue torturada y llevada a la Maternidad Martin donde da a luz maniatada y no se le proveen elementos para vestir a su hija ni se le aplica vacuna alguna.
Asimismo se refirió el fiscal a Teresita Marciani, quien fue secuestrada junto a su familia. Ella y sus dos hermanas eran obreras del SWIFT y estaban embarazadas. Todas fueron sometidas a tormentos, inclusive una de ellas, Tita, falleció en el parto junto con su bebé por falta de atención médica. “Volvemos a insistir en el rol irreemplazable de los médicos en este plan de exterminio”, manifestó el fiscal.
Otros casos tratados por la fiscalía fueron los de Marcos Alcides Olivera quien señaló que Lofiego era el “experto en picanas” y que fue interrogado y torturado por un juez militar quien no sólo lo picaneó sino que le “pintó las uñas” lo cual consistía en clavarle agujas debajo de las mismas para que sangraran; Máximo Antonio Mur y Osvaldo Daniel Bas y Mansilla. Este último fue escondido en un camión junto a Adrián Sánchez, Daniel Farías, Analía Minetti, ante la llegada de la Cruz Roja Internacional, atento a las terribles condiciones en que se encontraban a raíz de los tormentos sufridos.
En todos los casos el fiscal recalcó que el Tribunal no sólo debe ponderar las torturas infligidas sistemáticamente mediante la utilización de picana eléctrica, submarino, golpes simultáneos en los oídos y demás métodos aplicados en las denominadas “sesiones” de tortura específicas, sino que además deben considerarse como tormentos las propias condiciones de detención en que se encontraban las víctimas, no sólo durante su estadía en el Centro Clandestino de Detención que operaba en el ex Servicio de Informaciones sino también en la Alcaidía y en las cárceles llamadas “legales” como Coronda y Devoto.
La audiencia continúa el martes a las 9:30 hs donde continuará el alegato del fiscal Gonzalo Stara.

Prensa
Daniel Aristizabal
0341-153200008

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