Julio López
está desaparecido
hace 6402 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Sobre el dominio de la publicidad en nuestras vidas
Por (reenvio) varios autores - Thursday, Nov. 10, 2011 at 6:05 AM

Selección de frases...

Sobre el dominio de ...
publicidad_sanfrienta.png, image/png, 521x625

“La dominación del 'comienzo' y de lo 'comercial' en el campo literario aumenta día a día, especialmente por medio de la concentración de la industria de publicidad que esta cada vez mas sujeta a las restricciones de la ganancia inmediata” PIERRE BORDIEU

“La publicidad manda consumir y la economía lo prohíbe. Las órdenes de consumo, obligatorias para todos pero imposibles para la mayoría, se traducen en invitaciones al delito. Las páginas policiales de los diarios enseñan más sobre contradicciones de nuestro tiempo que las páginas de información política y económica. Este mundo, que ofrece el banquete a todos y cierra la puerta en la narices de tantos es, al mismo tiempo, igualador y desigual: igualador en las ideas y en las costumbres que impone, y desigual en las oportunidades que brinda” EDUARDO GALEANO

"La publicidad se asegura tanto una idea original, nueva, que atraerá a los espectadores, como la neutralización del acto y del significado reales que están tras esa idea y que la justifican en su peligrosidad" JOSE MANUEL ROJO

“¿Quién es radicalmente libre de manera que su ser se realice plenamente? ¿Es la inteligencia un elemento enmascarador del ser humano? ¿Cómo podemos salirnos de la simulación que la publicidad nos enseña para sobrevivir en un mundo de apariencias? Años vengo estudiando el comportamiento humano. La sociedad moderna no es diferente increíblemente a la de la antigüedad. La pintura de rostros con que los primitivos se expresaban, hoy son las marcas y los lugares que visitamos y la gente con la que nos reunimos. En la sociedad burguesa hay que vivir de personalidades en competencia constante, estresante. Es el modo de progreso‚ que la misma sociedad conoce y acepta tácitamente. Nadie escapa al juego, los médicos, los abogados, los ingenieros, arquitectos, en fin, la totalidad de la gente se ve en la obligación de poner caras, máscaras, para obtener el sustento o alcanzar nuevas metas, dinero, fama, gloria, poder, etc. Hay un círculo de hierro silencioso, y quien osa romperlo es castigado de inmediato” MAURICIO OTERO

"Vivimos en un mundo gobernado por ficciones de toda índole: la producción en masa, la publicidad, la política conducida como una rama de la publicidad, la traducción instantánea de la ciencia y la tecnología en imaginería popular, la confusión y confrontación de identidades en el dominio de los bienes de consumo, la anulación anticipada, en la pantalla de TV, de toda reacción personal a alguna experiencia" JAMES GRAHAM BALLARD (1973)

“Así, la publicidad, ampliamente combatida todavía en el período anterior y acusada de alienación cultural, se encuentra de repente reconsiderada; se mira con curiosidad y se aprecia como diversión, hasta convertirse en el canon narrativo de lo postmoderno. Se puede decir que los publicitarios sustituyen a los filósofos como guías de la sociedad” LUIS ENRIQUE ALONSO (2005)

“La escuela es la agencia de publicidad que le hace creer a uno que necesita la sociedad tal como está” IVAN ILLICH (1971)

"Cada año, el presupuesto mundial global gastado en publicidad asciende a 500 mil millones de dólares. Un estudio de Naciones Unidas estima que sólo un 10% de esa cantidad sería necesaria para dividir por dos el hambre en el mundo" JAN COUNEN (2007)

“Estos mecanismos y automatismos, ya antiguos, han conocido nuevos perfeccionamientos, y la incorporación de nuevos engranajes ha permitido dar aún más amplitud a la máquina. Los consumidores, condicionados por la publicidad, responden a las solicitaciones del sistema de producción del mismo modo que los productores reaccionan ante las exigencias y las señales del mercado. Los ingenieros, al dar de sí todo lo que pueden, contribuyen –llegado el caso, contra su voluntad- al crecimiento ilimitado de las técnicas. Estas técnicas generan medios cada vez más novedosos y refinados para desposeer a los ciudadanos del dominio de sus propias vidas. Por otro lado, acrecientan las desigualdades entre el Norte y el Sur y alimentan la carrera de los medios de destrucción. Los propios responsables políticos funcionan como engranajes del mecanismo. Se convierten en ejecutantes de obligaciones que les superan. La mediatización de la política profesional acentúa el fenómeno de forma caricaturesca. (...) La política se transforma cada vez más en mercado (desarrollo del marketing político). Esto es algo relativamente nuevo y deriva del carácter ahora transnacional del funcionamiento de la máquina. La mundialización de la máquina y su mecanización total son fenómenos recientes y en vías de conclusión.” SERGE LATOUCHE (1998)

“Al hablar de las ofertas como ‘mandamientos de nuestro tiempo’, no hay que hacerse una idea demasiado exigua de su carácter de imperativos. Lo propiamente imperativo no se halla tan sólo en las frases declaradamente imperativas, en las estrepitosas órdenes de la publicidad –‘¡Compra tu ropa interior Mozart! ¡Cómprala ahora mismo! ¡Es un must!’-, a las que uno, en fin de cuentas, y con un poco de dominio de sí, puede todavía ofrecerles resistencia a pesar de todo, por más que lo traten ya anticipadamente de propietario; sino que lo imperativo está en la posesión de los productos mismos, cuyas órdenes, aunque silenciosas, efectivamente no admiten objeciones. Cada mercancía adquirida requiere, para seguir siendo utilizable o, por lo menos, para no quedar en seguida inservible (y también por razones de prestigio, esto es, para rodearse de objetos de su mismo rango), la compra de otras mercancías; cada mercancía tiene sed de otra o, mejor, de otras. Y cada una nos provoca también a nosotros la sed de otras: lo difícil no es comprar mercancías sino tenerlas; pues el propietario de la mercancía se ve obligado a hacer suya la sed que ésta padece (de jabón en copos o de gasolina), y por mucho que le cueste llenar las bocas acumuladoras de los objetos que se han convertido en su propiedad, no tiene más remedio que hacerse cargo de sus necesidades, y lo hace aún antes de saberlo.” GÜNTHER ANDERS (1956)

"Ningún grupo de sociólogos pueden aproximarse a los equipos de publicidad en la recolección y tratamiento de datos sociales explotables. Los equipos de anuncios tienen miles de millones para gastar anualmente en la investigación y las pruebas de reacciones, y sus productos son magníficas acumulaciones de material sobre la experiencia compartida y los sentimientos de toda la comunidad." MARSHAL MCLUHAN (1964)

"La publicidad nos hace desear coches y ropas, tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Somos los hijos malditos de la historia, desarraigados y sin objetivos. No hemos sufrido una gran guerra, ni una depresión. Nuestra guerra es la guerra espiritual, nuestra gran depresión es nuestra vida. Crecimos con la televisión que nos hizo creer que algún día seriamos millonarios, dioses del cine o estrellas del rock, pero no lo seremos y poco a poco lo entendemos, lo que hace que estemos muy cabreados." CHUCK PALAHNIUK (1996)

“La existencia del crédito masivo como estructura de facilitación, implica como contrapartida el desarrollo de estructuras de clasificación y control de los clientes, las cuales constituyen instituciones de vigilancia. Para que los mecanismos de facilitación puedan operar, el consumidor debe estar dispuesto a aceptar la publicidad de sus actos privados. Debe aceptar que exista una rigurosa constancia de sus deudas y de su comportamiento crediticio, debe tolerar que los datos sobre sus ingresos sean manejados por sistemas de vigilancia. Para que la facilitación funciones, todos los clientes están forzados, sin tener siquiera que ser consultados, a aceptar la publicidad y la circulación de sus informes. Estas empresas de vigilancia crediticia constituyen enormes bases de datos sobre el comportamiento del ciudadano-cliente. Nada se les escapa, cada una de las informaciones relevantes están en sus pantallas, listas para absolver o condenar al demandante. Todas las responsabilidades no cumplidas aparecen allí, acusadoras. La vigilancia es la condición de facilidad. Ella existe para hacer efímero el gozo, para que pronto se transforme en responsabilidad frente a la deuda contraída.” TOMAS MOULIAN (1998)

agrega un comentario