La estrategia del tero en los K, una amenaza a la soberanía popular
Por Caramba López - Friday, Feb. 24, 2012 at 3:39 PM
carambaez@yahoo.com.ar

Ante la avanzada represiva en el marco de la Ley Antiterrorista, intelectuales K y la Agrupación Evita - brazo político de Cristina- salen a convocar una discusión “sin dogmatismos” para ver qué minería queremos. El artículo analiza esta estrategia distraccionista y desmovilizadora señalando algunas de sus posibles y peligrosas consecuencias para las clases populares y trabajadoras y para nuestra soberanía territorial.

Bajo el título Discusión sí, represión no, “ el Ejecutivo Nacional del Movimiento Evita apoya el llamado de la Presidenta y convoca a dar un debate serio y sin posturas dogmáticas sobre la minería; a la vez que condena la represión de la protesta social en cualquier punto del país”.

Asimismo, la Evita, convoca, dice, “a dar un debate serio, sin posturas dogmáticas y llamando a la reflexión sin que implique confrontación”, algo así como hablar sin decodificar, es decir, neutralizar el pensamiento “nacional y popular”. O tal vez, discutir políticamente sin confrontar sea ‘negociar’ – dinámica política que la Presidente enseña a sus jóvenes huestes repartiéndolas en puestos. O tal vez, quieran arrinconar la ‘discusión’ a la cuestión técnica. Llevársela a técnicos que van a 6-7-8 y a TN, que saben de minería, a peritos como el obrero trucho que parloteó con la Presidente junto Abal Medina y al Vice, entre risas de la picaresca haciendo, de esto, un chiste, cuando el tema es trágico. Llevar la discusión al terreno técnico, es la más vulgar e histórica de las estrategias liberales.
El pueblo y las asambleas populares harto sabemos de esto: aparece un economista con esa jeringoza hipnótica que nos dice que estamos equivocados en nuestras percepciones de lo que sufrimos. Debemos creerle a esa perita y académica jeringoza de la que nada entendemos, y resignarnos a la ignorancia. Aparece un Moreno en el INDEC que nos dice que la inflación es un dígito, y debemos tirar por la borda nuestra ‘percepción’ cuando vamos al supermercado. Tenemos 39º de fiebre y aparece el termómetro oficial que nos dice que no, que tenemos 36º y medio, y otro termómetro de una Cámara oficialista que nos dice lo mismo; y otro, de una Asociación oficialista, que nos dice lo mismo. Y otro, chequeado por 6-7-8, que nos dice que no, que nos muestra el complot de otra fábrica de termómetros llamada Clarín; fábrica ésta que por oposición hace una flotante alianza mediática para también negar nuestra fiebre hasta que la lucha popular llega hasta el cuello- y ahí, Clarín, la banaliza con sus mesas de discusión democrática, en las cuales su último block es cerrado con la palabra de los técnicos representantes de las patronales. Otro modo de negar los 39º de fiebre que acusamos. Al cabo, las luchas populares tenemos un ataque de conversión histérica –según sus termómetros- cuyo síntoma es la mentira, el simulacro, el griterío mentiroso. Se busca de que, al cabo, dicha estrategia del termómetro -trucho- altere no sólo nuestra percepción, sino su fatal consecuencia: la pérdida de confianza en nuestro propio juicio de la realidad. Y ésta es la estrategia que, sin más, utiliza todo manipulador y golpeador con su víctima: alteración de la percepción, no confianza en su propio juicio, pérdida de autoestima, dependencia con el victimario y negación para creer en los termómetros reales, obediencia ciega, necesidad de ser ‘dicho’ por el golpeador, de existir por y para éste. El sacrificio invisible de la víctima que queda paralizada. Inmovilizada. Cuerpo sitiado. Las víctimas de tales estrategias, terminan en una suerte de Gaza cotidiana. Pero hay una diferencia: la mass-media argentina no lo sabe como lo sabe cada uno de los palestinos de Gaza. Sólo lo sienten, sin poder decodificarlo porque llega un momento en que no pueden siquiera pensarlo, pues el manipulador más refinado, siempre estará abierto a la discusión porque siempre es él quien la agencia. Tiene con qué.
Pero el problema para ellos es que las asambleas ambientalistas, de vecinos, los delegados de base, los que están en la lucha sin claudicación, ¡tienen el juicio muy claro!

Volviendo a la Evita, quieren lanzar 'ellos' la agencia de discusión –en un tiro elevado para la mass-media hipnotizada por la jeringoza – haciendo como que no se enteraron de que -ya no la discusión discursiva- sino el tener que poner el cuerpo para que no pasen los camiones e impedir que traigan la muerte es lo que necesariamente está haciendo la pueblada en provincias mineras sin paralizarse ante el aparato represivo, luego de mucha discusión, luego de que las asambleas convocaran, solicitaran, pidieran un debate serio para discutir las consecuencias de la minería a cielo abierto, luego de que los niños nazcan ya con cáncer, luego de que quedaran las tierras, el agua y el aire mismo contaminados, luego de que muchas leyes constitucionales en algunas provincias prohibieran la minería a cielo abierto, como es el caso de Córdoba que aprobó la Ley 9526 que prohíbe en todo el territorio de la provincia la explotación minera a cielo abierto; y no es menor informar –reiterar- que dicha ley sale de las entrañas mismas de la discusión de las asambleas de vecinos autoconvocados. Es más, la cordobesa Ley 9526 –aprobada en el 2008- es elaborada por una vecina autoconvocada, Marina Meijide, ley que ahora la Cámara de Minería en Córdoba, organismos mineros y el gobierno cordobés quieren derogar. Es decir, una ley discutida desde las bases populares y luego sancionada constitucionalmente, salida desde el pueblo mismo, de la Asamblea de Ongamira, Capilla del Monte y demás asambleas del NOA, ¿ahora el pueblo debe escuchar la convocatoria de la Evita para discutir sin implicancias confrontativas el derogar leyes constitucionales y populares que discutieron sin dogmatismos –pero sí con fundamentos, sin ismos- un proyecto minero que no afecte a la tierra, al agua, a las personas, a los niños? Aclaremos que no sólo Córdoba tiene una ley contra la minería a cielo abierto, también Mendoza, Tucumán, Tierra del Fuego, Río Negro, la Ley 03981- derogada a fines del 2011 por el Frente para la Victoria. Chubut, las 05001/05552/2006. La Pampa, boletín oficial No 2753. Y La Rioja, cuya Ley No 8137 le fue arrebata al pueblo y derogada bajo acuerdos espurios en agosto del 2008.
¿Discutir con los que falsifican los termómetros y golpean nuestro juicio? ¿Discutir los termómetros truchados? Una vez más, tratan de ganar tiempo como han hecho con la ley de glaciales que aún espera reglamentación y medición de peritaje y, mientras tanto, avanza la Barrick Gold destrozándolos. Claramente esta convocatoria a discutir se llama desmovilización con cantos democráticos de sirena, con títulos tan seductores como Discusión sí, represión no.

¿Por qué no salieron a exigir a la presidenta la derogación de la Ley antiterrorista? ¿O significaba esto tener que confrontar con la presidenta? Ah, cierto, había que negociar con una aparecida GAFI, organismo del cual nadie sabe nada, no hubo la más mínima discusión ‘popular y nacional’ que saliera a decirnos de qué se trataba. La anKipopular Ley Antiterrorista salió entre gallos y medianoche, en diciembre del 2011, sin ser, antes, anunciada por la propaganda electoral del enigmático Modelo. Supongamos que fue un apriete del GAFI. Démosle crédito a la realidad del apriete, al ‘hubo que negociar’. Pero, ¿qué es el GAFI? Es un sistema de Gestión de Activos Financieros Internacional...para el Ecuador y América Latina. Es un sistema multiusuario, multiambiental y multimoneda. ¿Qué gestionan? En pocas palabras, los riesgos. Distintos riesgos: de moneda, de usuarios, de ambiente. En pocas palabras, que el riesgo sea transferido a otros. ¿A quiénes? Al país que lo implemente (y éste –cuyo Estado extranjerizado- lo transfiere –con represión legalizada, si es necesario- a las clases populares y a los trabajadores). Después, vendrán los peritos con su jeringoza a hipnotizarnos con los detalles que se nos escapan. Aunque en este caso, ni siquiera nos informaron sobre la sintonía gruesa. Sólo una nominación extraña: el GAFI, ¡abracadabra!
La Ley antiterrorista supuestamente ‘impuesta’ por el GAFI a una presidenta, a la misma que sale a poner en vereda a Obama, que en Europa ofrece la receta de cómo salvar al capitalismo ‘no salvaje’ – ¿alguien alguna vez vio que una mujer esté ‘poco’ o ‘mucho’ embarazada? Exacto: eso se llama falacia. Idem con el capitalismo, esté gestando a su bestia donde, cómo y cuándo sea.
Pero tanto los intelectuales K, como los evita, hacen ‘gestos’ contra la represión. Gestos. Aunque los militantes de la evita saben muy bien que las palabras sensibles en las reuniones con amigos 'de ruta' no bastan para detener tal demonización de las luchas populares con dicha Ley en la mano. Y saben que es necesaria la maldita ley antiterrorismo para detener la discusión. O sea, ellos convocan que discutamos con la Ley Antiterrorista en la mano que es como decir con el chumbo puesto sobre nuestras cabezas. Adorable invitación la que nos hacen.

En su comunicado, el Ejecutivo de la Evita, dice: “las respuestas a la demanda popular, la incorporación del conflicto en políticas que sostengan los intereses de los más desprotegidos es una política de Estado desde el 2007 con la conducción de Néstor Kirchner. Jamás la represión o la criminalización de la protesta fue aceptada en ese marco” (bastardillas nuestras). Por eso, necesitaban otro marco: la Ley antiterrorista, el marco justo, el anillo al dedo para reprimir y criminalizar la protesta por lo que sabían iba necesariamente a ocurrir: el levantamiento de los pueblos a lo largo y a lo ancho del país, la defensa de la vida, de la tierra, del aire, del agua. En fin, éstos son los riesgos que señala el GAFI. Y, en este caso, los riesgos van por cuenta de los gobiernos que se aseguran con una Ley Antiterrorista. Es tan elemental que da avergüenza ajena hasta decirlo.

No les ha alcanzado –por lo visto- salir a distraer con un tema tan sensible como el de Malvinas, sobre cual –en el mismo documento donde promueven discutir sin represión, dicen: “Denunciamos a ONGs ambientalistas internacionales con estrecha dependencia -fundamentalmente económica- de los centros de poder del Imperio, que toman como bandera la cuestión minera en circunstancias en que el gobierno inglés militariza nuestras Islas Malvinas para garantizar la extracción petrolera que tendrá su impacto ambiental con características de gravedad como el exterminio de la fauna marítima o la extracción indiscriminada de las especies (pesca)”. Dicen, pero callan que la empresa Osisko es parte de las empresas petroleras que están invirtiendo en Malvinas.

Como se sabe, contra Osisko, Barrinck Gold y otras, está el pueblo peleando con su cuerpo golpeado por la represión provincial K, como es el caso de Famatina, en La Rioja, en donde la empresa contra la que lucha el pueblo riojano es, justamente, la Osisko (y recordamos que el gobierno provincial K, derogó en el 2008 la Ley constitucional que prohibía la minería a cielo abierto). O sea que la Evita –dogmáticamente alineados con el Ejecutivo Presidencial- está luchando en favor de Osisko, la misma empresa contra la que supuestamente lucharían en contra en Malvinas. Osisko es sólo una de las empresas del holding minero que opera en todo el país, en nuestros lagos, cerros y cordillera, y en Malvinas con el negocio petrolero bajo licenciatura inglesa. ¿De qué soberanía está hablando señeramente nuestra presidenta, “la mamá de los pobres”?, según la caracterizara Emilio Pérsico de la Evita.
O como es el caso de Catamarca, en donde el Director de la minera La Alumbrera es Ángel “Bombón” Mercado, ex-.marido de Alicia Kirchner, a su vez, tío político de Lucía Corpacci –la actual gobernadora de Catamarca, quien está casada con un sobrino del ex- marido de Alicia Kirchner, la Ministra de Acción Social- y, asimismo, el Director de La Alumbrera es también familiar del juez Ricardo Moreno que tiene la causa de La Alumbrera –su mujer es Nélida Mercado, sobrina de Ángel. ¿Tan cercanos a la familia presidencial, los evita desconocen el parentesco, la promiscuidad político empresarial del mismo? ¿Deberemos discutir con quienes son sordos, ciegos y mudos y funcionan como ‘iluminados’ de la lucha popular y nacional ante la extranjerización del Estado promovida en tamaña promiscuidad? Antaño el progreso y la extranjerización, señaló la conquista del desierto, matando al indio, a nuestros pueblos originarios que aún resisten al capital extranjero agarrado de la mano de agentes políticos, sindicales y empresariales nacionales que aceitan el aparato represivo de la última dictadura militar, indemne, con sólo algunas cúpulas en la cárcel ; ahora, la minerización a cielo abierto señala la conquista de los glaciales, de las provincias mineras y aparece la mentada ‘imposición’ del GAFI. Y la Evita habla de dogmas. Distrae con ‘nacionalismos’. Los medios –tanto de la Opo, como oficialistas, informan que hay gente luchando en Famatina, en Belén, en Andalgalá y que muchos no son ‘lugareños’. No se permite la entrada a periodistas, a los ‘hippies’ y a cuanto activista ambientalista o político, que se informa no serían lugareños, pero sí se permite amparar a punta de represión a las empresas mineras: ¡toda una declaración de principios! Y la Evita lo alimenta, en su estratégica esquizofrenia política. Escuchémosla: “Ya se ha visto cómo la conciencia ambiental del norte y su mejora en la calidad de vida es funcionalmente defendida por estas organizaciones (se refiere a las ambientalistas) que batallan con el opuesto en otro lugar del planeta. Callan, otorgan, promueven operaciones de inteligencia fijando prioridades, cuando una Nación debate su soberanía, que también implica soberanía ambiental”, (con ‘soberanía’ se refiere a Malvinas).

Dentro de la crisis capitalista mundial –en donde el capital vuelve sobre sus pasos la necesidad de confiscar recursos primarios (alimentos, energía, agua, y oro que sostenga el globo financiero), la confrontación en las cúpulas políticas, es decir, de las distintas facciones capitalistas inheridas en la realpolitik, se ha hecho evidente, incluso, cotejando la votación del Senado y Diputados de la Ley Antiterrorista. Allí, el Frente para la Victoria fue a cuerpo pleno en su voto afirmativo. No así los funcionarios de la UCR, otros de fuerzas provinciales que representan al campo –entre ellas el progresista ARI, y los PRO- Macri, que votaron en contra de dicha Ley. Las política extractiva y agroexportadora viene mostrando sus contradicciones y enfrentamientos: dicha Ley es una carta de stop también a las amenazas de los Buzzi, Biolcati y demás representantes ‘del campo’ en sus ‘luchas’ intercapitalistas por más regalías, por las ‘perdidas’ de la sequía, y en sus cortes de rutas. Macri, le dice a la UCR: hoy voto negativamente la ley por vos, mañana vos por mí, total no pierdo nada: la ley va a salir de todos modos.

Los K –y gran parte de la Opo que calla, otorga, y ambiguamente se engancha en el discurso ‘técnico’ de las mineras, y que, aún votando algunos en contra de dicha ley-, están dando, en última instancia, las condiciones para una revuelta civil y, a su vez, para un enfrentamiento civil –los obreros mineros truchos que cortan las rutas, la opinión de los mass-media que no quieren oír que el modelo muestra sus dientes, y los otros mass media, encerrados en la burbuja de su escepticismo explícito; las policías de las empresas, gendarmería, los parapoliciales, la policía provincial para azuzar el enfrentamiento con los luchadores populares- con el objetivo de que –producido el ‘caos’ – corra la máxima represión y cunda el terror para las luchas sindicales y de vecinos autoconvocados que defienden los recursos naturales y la vida misma.
El llamado de la Evita a discutir es una suerte de 'aviso' bajo el tinte democrático. ¿O qué es sino la ley antiterrorista, la represión y el Proyecto X -que sale de las entrañas mismas del gobierno nacional- para que gendarmería realice espionaje a delegados gremiales, a organizaciones políticas y sociales, a estudiantes, a Madres Línea Fundadora? Es, ni más ni menos, que el instrumento 'democrático', el 'aviso' de discusión, de que mejor 'no' confrontemos, y es, a su vez, distraccionista –para la mass-media- y amenaza encubierta –para los luchadores populares- escrita con la tinta transnacional del más rancio y decadente linaje liberal –vigente- concentrado en una maldita palabreja: sustentabilidad. Palabreja que utilizan los intelectuales K, con Ricardo Forster a la cabeza; palabreja que nace de las entrañas de la ONU que discutió qué nombre ponerle a la expoliación de los pueblos sumergidos, palabreja mentada por Henry Kissinger en la década del ’70 cuando ya lanza el proyecto –entre otros- de “canje de deuda externa por territorios” en países del llamado Tercer Mundo, cuyas clases populares son confiscadas por los intereses de la deuda externa y por las políticas liberales de permanentes ajustes. En consonancia con esto, ‘sustentabilidad’, palabreja que acompaña a los fondos buitres, al fideicomiso mundial que financia la ‘sustentabilidad’ de las áreas protegidas –acorralando –sobre todo- a los pueblos originarios- en nuestras tierras latinoamericanas y llevándose supermillonarias ganancias y dejando destrucción del medio ambiente, enfermedades, opresión y muerte.
En África, especialmente, esta palabreja ha llevado consigo a fatales enfrentamientos entre los mismos pueblos despojados que luego reciben santa caridad a través de algo de esos fondos fiduciarios con el sólo objeto de que queden cuerpos humanos para seguir explotándolos, como mano de obra baratísima para los grandes emprendimientos extractivos de recursos naturales.

Una nota al pie de página: el megaproyecto hidroeléctrico El Portón, de Endesa en Chile, cuyo objeto es represar, en la Patagonia, la cuenca del Río Puelo compartida entre Argentina y Chile, podría acarrear movimientos sísmicos inducidos de hasta 8º en Argentina, según denuncian los vecinos que luchan contra este proyecto. (Y además, acotemos, si fuera necesario, podría poner en vilo nuestra paz con Chile, a pesar de los acuerdos bilaterales entre ambos países para compartir recursos naturales).
Para tener una idea de la promiscuidad transnacional, recordemos que hace pocos días una fuerte represión sitió al pueblo de Berazategui que está en contra de la estación eléctrica Rigolleau por las fatales consecuencias a la salud. Gendarmería e infantería que salió a reprimir brutalmente a los vecinos –los cuales quedaron efectivamente sitiados- por una lucha que ya lleva 8 años contra Endesa (Edesur), empresa a cargo de la estación eléctrica; estación que –sospechamos- alcanzará para alimentar en Quilmes (localidad fronteriza a Berazategui), a La Nueva Cuenca, el megaproyecto proyecto inmobiliario de Techint –en contubernio con Macri, y los intendentes de Avellaneda, Quilmes y Berazategui. Megaproyecto por el cual están desmontando la ribera quilmeña, y contra el cual luchan los vecinos por los desastres ecológicos que lleva consigo semejante daño al ecosistema.
Sumarse al carro distraccionista de la Evita, de Carta Abierta, de la Presidenta y su cohorte opositora que apoya la distracción Malvinas, puede llevarnos a paisajes aún insospechados, arrojados a la ‘santa solidaridad’ del GAFI como sistema de control de capitales transnacionales para la reconstrucción de los desastres medioambientales (además del mundial salvataje a la crisis del capitalismo) Y más deuda. Y retornar a Henry Kissinger, canje de tierras por deuda. Hay discusiones que conducen al eterno retorno.

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