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Nueva denuncia por trabajo esclavo en cárceles de la ciudad
Por Joaquín ((i)) - Tuesday, Jul. 03, 2012 at 1:29 PM
cmilaplata@gmail.com

La Plata - 3 de julio de 2012.
La denuncia fue realizada por organismos de Derechos Humanos tras una inspección realizada en la Unidad Penal Nº29 de Melchor Romero. Allí funciona un lavadero industrial donde trabajan 28 personas privadas de la libertad con un salario de $2 por ocho horas de trabajo Manipulan por igual material de clínicas privadas, restoranes y hoteles. Los residuos de las clínicas tales como jeringas, gasas ensangrentadas y materia fecal son clasificados en la U10, lindante a la U29, por enfermos mentales.

En el 2008 un grupo de detenidos llamó desde la Unidad Penal Nº10 a La Cantora –organización de comunicación popular en cárceles -, denunciando la existencia de un lavadero industrial. En aquel entonces el Comité Contra la Tortura realizó una inspección donde certificó que “sábanas, fundas de cirugía se mezclan con diferentes residuos patógenos que pudimos observar: pedazos de gasa y algodón con sangre, toallas, rejillas y trapos de piso ensangrentados”. Quienes manipulaban estos materiales eran los mismos presos enfermos mentales, que lo hacían sin ningún tipo de protección.

El martes 19 de junio pasado una nueva inspección, esta vez en la U29, llevada a cabo por La Cantora junto al Secretario de Ejecución Penal de San Martín, Juan Manuel Casolati, reveló que el trabajo se sigue realizando en las mismas condiciones e incluso se ha expandido. Al material proveniente de por lo menos seis clínicas privadas de La Plata se le ha sumado sábanas de hoteles y manteles de restaurantes. Casolati afirmó que “fue mayor nuestra sorpresa cuando observamos que estas prendas venían con restos de materia fecal, orines y sangre, en bolsas negras, que a su vez tenían en su interior, gasas con sangre, agujas, barbijos manchados con líquidos y sangre, guantes sucios, envases de jeringas o otros materiales de entidad patogénicas”. Los materiales son lavados en su conjunto, sin distinguir entre los materiales clínicos y gastronómicos.

Durante la inspección, el magistrado pudo hablar con el encargado del lavadero, propiedad de la empresa “Asepsia”. Al preguntarle que se hacía con los residuos, el encargado le informó que eran llevados a la U10 para enfermos mentales, donde estos se encargan de separarlos. Al tomar cuenta de esto, La Cantora realizó un pedido al Ministerio de Salud acerca de los procedimientos respecto a los materiales patógenos. La cartera les brindó el Manual para el Manejo de Desechos en Establecimientos de Salud donde se indica que los mismos deben ser clasificados y separados inmediatamente después de su generación y en el mismo lugar. Además de esto agrega que “son responsables de la clasificación y separación, los médicos, enfermeras, odontólogos, tecnólogos, auxiliares de enfermería, de farmacia y de dietética”. También agrega que los desechos deben ser clasificados y colocados en recipientes específicos, con color y rotulación. Sin embargo, desde La Cantora afirmaron que nada de esto sucede, sino que se colocan todos en una misma bolsa negra. El trabajo en la U29 consta de tres turnos de 8 horas, y los empleados suelen trabajar dos turnos por día con un salario de $2 por jornada. La Cantora afirmó también, que en el caso de la U10 los salarios son aun más bajos.

La empresa Asepsia que mantiene el convenio con el Servicio Penitenciario Bonaerense, también posee un lavadero industrial en la U15 de Mar del Plata, donde se encontraron las mismas irregularidades que en La Plata. Además de las seis clínicas privadas de nuestra ciudad que dan trabajo a la empresa Asepsia, en los penales se recibe material de Burzaco, Adrogué y Monte Grande. Entre las platenses se encuentra el Instituto del Diagnóstico, Los Tilos y ECO-BER.

Además de Asepsia, otras empresas participan del negocio. La empresa Lamcef se encarga de retirar los residuos de la U10, mientras Rasla se ocupa de transportar las bolsas de ropa sucia de las clínicas, hoteles y restoranes la cárcel. En este sentido, Casolati afirmó que “no sólo se trata de que las empresas ingresan a la cárcel y llevan adelante una actividad productiva en condiciones ventajosas de competencia desleal; además usufructúan las instalaciones de la cárcel, la electricidad, el gas... Ventajas que tornan a esta actividad en un negocio absolutamente redondo”.

En entrevista con Rap Colectivo de Colectivos, Azucena Racosta, Coordinadora de la Cantora, afirmó que la denuncia ya fue presentada y se encuentran realizando un pedido de habeas corpus para los detenidos de la U29. En este sentido, agregó que la U29 es una unidad transitoria, donde los detenidos no pueden pasar más de tres días, pero donde funciona de todas maneras un pabellón que es el que brinda el personal para trabajar en el lavadero. De las 30 personas detenidas en el pabellón once, 28 se encargar del trabajo.

Por su parte, el Secretario de Ejecución Penal de San Martín, Casolati, deberá remitir las actuaciones realizadas a la ciudad de La Plata por cuestiones de jurisprudencia. /

Informe de la Asociación Civil La Cantora

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Entrevista a Azucena Racosta -Coordinadora de la Asociación Civil La Cantora-
Por [Reenvio] Rap Colectivo de Colectivos - Tuesday, Jul. 03, 2012 at 1:45 PM

audio: MP3 at 10.3 mebibytes

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La Cantora y el Secretario de Ejecución Penal de San Martín, Juan Manuel Casolati, presentaron una denuncia por la existencia de lavaderos industriales privados en las unidades 10 y 29 de Melchor Romero y en la unidad 15 de Batán. Allí, los internos lavan ropa de blanco proveniente de clínicas privadas, hoteles y restaurantes, aunque la normativa sanitaria prohíbe que se laven materiales de origen diverso en las mismas máquinas, en particular cuando implica la presencia de residuos patógenos. Estas tareas se llevan a cabo en condiciones laborales indignas, sin las medidas de seguridad necesarias para manipular estos desechos y con salarios que rondan los $12 diarios.
En diálogo con RAP, Azucena Racosta, se refirió a los perjuicios para la salud que ocasiona la presencia de residuos patógenos en las unidades y expresó que “la cárcel extermina de diversas maneras pero siempre ganando dinero con la persona privada de la libertad, no sólo se le roba el presupuesto -por lo cual tiene hambre, tiene frío y padece enfermedades- sino que además se las asesina de distintas maneras", en referencia a la contaminación de las ropas que llegan a los lavaderos.


http://www.fmfutura.com.ar/

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