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"Yo creo que Miguel está contento"
Por Indymedia La Plata - Friday, Nov. 30, 2012 at 5:00 PM
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Especial 10 años de la Asociación Miguel Bru

"Yo creo que Miguel está contento"

 


La Asociación Miguel Bru nació en el 2002 por una idea de León Gieco. Aquellos familiares y amigos, encabezados por Rosa Schonfeld Bru, la llevan adelante día tras días en una ardua lucha contra la violencia institucional y por los Derechos Humanos. Indymedia La Plata entrevistó a Rosa, quién compartió recuerdos y reflexiones. “Creo que toda esta solidaridad que me brindaron en el reclamo de justicia por Miguel, de alguna manera la tengo que devolverafirmó la madre de Miguel.

"Creo que toda esta solidaridad que me brindaron en el reclamo de justicia por Miguel, de alguna manera la tengo que devolver"


Indymedia La Plata: ¿Cómo surge la idea de la asociación?

Rosa Bru :
La idea la tiro León Gieco en el 95’. Viene a tocar en el playón del Rectorado y él pide una casa para estar hasta que iba a actuar, y va a la casa de Jorge Jaunarena. Él quería saber qué hacíamos y en aquel entonces éramos la Comisión de Familiares, Amigos y Compañeros de Miguel Bru. Entonces le contamos todo lo que habíamos hecho, la experiencia que teníamos, y dijo “tenemos que hacer una fundación, y yo los voy a ayudar”. Esa fundación no pudo ser ya que era difícil contactarnos con León, entonces veíamos que el tiempo pasaba y decidimos que fuera una asociación. y justo ese año se da que León podía venir, así que fue de alguna manera el creador de este lugar.

((I)):¿Con qué objetivos nace y cómo fueron transformándose?

R.B:
El objetivo era la lucha contra la violencia institucional. Estuvimos patrocinando, acompañando, y alguna vez asesorando algún familiar. Asesorando de la mejor manera en que podíamos hacerlo.
El rol creo que siguen siendo los mismos por los cuales venimos caminando. Ya te digo, en La Plata seguir dentro de nuestras posibilidades, porque todo es muy difícil, seguir asesorando y ojalá que nunca, nunca más tengamos que patrocinar una causa, pero si algo sucediera ojala que pudieramos ayudar a otras familias.
Cuando nació la asociación, recibimos denuncias de todo tipo y color. La gente sabía que había un lugar, y creo que muchos se dieron cuenta, tanto de los que fueron como que llamaron, que era la Asociación Miguel Bru. Costó un año más o menos encaminar para el objetivo que había sido creada, que era la lucha contra la violencia institucional. Y después una vez que encaminamos fuimos despacio.

Uno muchas veces sobre la marcha piensa y parece que no hicimos nada, pero al hacer un balance pienso que se hicieron muchas cosas, tuvimos pequeños logros y grandes logros como la condena de Loretto, la condena del caso Christian Dominguez.

Antes de la Asociación, una Comisión nucleaba la lucha por Miguel

O como en el caso de Mauro Martínez,  que nos salió de forma negativa , pero donde le dimos batalla , donde luchamos convencidos de nuestros principios, que era demostrar que la policía sigue matando. Más allá de la condena, a Martínez lo mataron. Los jueces entendieron y la defensa entendieron que fue en defensa propia. Un fallo cuestionado, pero la peleamos hasta lo último y todo esto a mi me da, me llena el corazón de poder ayudar a otros, de tanto que nos ayudaron a nosotros.

 

((I)): También está el trabajo territorial de la asociación

R.B:En la Isla Maciel entramos con dos chiquitos que habían sido fusilados por la policía y resulta que entramos como organismo de Derechos Humanos.
Fueron primero las charlas, los chicos de la asociación pasaban películas, siempre películas con un contenido. Y un día las madres cuestionaron que no había nada para los adolescentes, fue así que se empezó a hacer trabajo territorial, se hicieron talleres de periodismo, Derechos Humanos, de género, de fotografía, de panadería. El que más funcionó fue el de fotografía por el hecho de que íbamos los sábados de diez de la mañana a las cuatro de la tarde y ellos nos entregaban el material, las fotos que habían sacado. de ese taller nació el libro los ojos de la isla que es el documento que nos queda de esa militancia en la isla. Más o menos en el 2008, 2009, nace la casa de Parque Patricios que es de cultura y oficios de la Asociación Miguel Bru, donde ahí se dan talleres para chicos en situación de calle y los pibes del barrio también. Hay talleres  de música, de computación, de cocina. Hace poco terminó el taller de electricidad.

La Asociación celebró su aniversario con León Gieco y Mundo Alas

((I)): ¿Qué te hace pensar todo el acompañamiento que han brindado a tantas familias?

R.B:
Creo que toda esta solidaridad que me brindaron en el reclamo de justicia por Miguel, de alguna manera la tengo que devolver, porque no tengo que esperar que a todos aquellos que nos acompañaron le pase algo para que estemos presentes. Para mi no es una obligación, pero sí siento que es lo que tenemos que hacer.Mi vida cambió, aparte, de lo que era antes de que pasara lo de Miguel a lo de ahora, cambió totalmente, cambió mi cabeza, cambió nuestra familia, todo. Para mi es algo como natural y en este pensar cuáles fueron los logros siento agradecimiento a los familiares que confiaron en ese espacio, en la asociación, agradecer a los abogados que trabajan con tanta conciencia y tanto empeño, para un lugar que ellos saben que es todo ad honorem. Entonces es muy valioso, muy grande


((I)): Hace diez años, en la presentación de la asociación dijiste que Miguel diría “que despelote armaste vieja”. ¿En qué cambiaría diez años después la reacción de Miguel?

R.B:Yo creo que MIguel está contento.  Si de algo me convencieron los amigos es de que él  haría lo mismo
, capaz no trabajando en la parte judicial, pero sí por los pibes, con los chicos; dado su temperamento, su solidaridad tan grande que tenía y que yo por ahí  le cuestionaba, Por ahí caía un pibe de la calle a dormir y yo le decía “Miguel, no podés traer a todos”. Eso no lo hacía de mala, sino que miraba mis niñas, yo tenía tres nenas y yo trabajaba y no me podía ir hasta que el chico no se retiraba. Capaz que era más bueno que nosotros, de la confianza, pero era un varón, y yo tenía tres nenas chiquitas y no me podía ir a trabajar hasta que el chiquito no se iba, y si el chiquito no se iba yo tampoco me podía ir porque tampoco me daba para decirle ‘bueno, yo me tengo que ir, te tenés que ir vos”. Así que hasta que él entendió que no lo hacía de bruja como me decía él. A mi eso  como que me duele, pero eran momentos donde uno no tenía, o por ahí no conocía todo esto que conocemos hoy.

La Asociación acompaña a otras familias vícitmas de la violencia policial

Yo siempre me acuerdo de una vuelta de unos amigos, que sus viejos estaban desaparecidos y yo lo miré y le dije "Miguel ya está",  que ya se sabía lo que había pasado. Me miró con una mirada que no se puede reproducir, hasta como con lástima, como que yo era muy ignorante. Todo esto a él lo conmovía mucho, lo movilizaba mucho esto de las desapariciones, de los viejos desaparecidos que tenían sus amigos. Participaba de las marchas, tenemos fotos de él movilizando.

Me acuerdo cuando me contaba que los papás de Maxi Albanese iban al juzgado, y él iba  a la escuela ahí de 8 y 58 y cuando salía él me contaba  de los viejos.  Yo seguía a la familia de Albanese por el diario. De esta gente me habían quedado  frases que Lalo, el papá, había dicho, y cuando nos conocimos con Lalo yo le decía “vos pensa que nunca se me dió pensar "yo también voy a ir"”; era como algo que era de otro, y eso me duele.

((I)): ¿Qué reflexión te traen estos diez años?

R.B:
Hoy hablábamos con Palo que me invitó a la Facultad de Quilmes, todo esto sin ellos, sin la ayuda de tantos jóvenes, de los estudiantes, de las autoridades de esa hermosa escuela y ahora facultad de periodismo, no lo habríamos podido hacer, nosotros no habríamos salido a hacerlo porque no teníamos experiencia. Nunca habíamos militado y desde la ignorancia de creer en un juez y en la policía, que había matado y desaparecido a Miguel y además encubrían.

Fueron muchas experiencias, mucho aprendizaje, aprender a moverse en espacios que jamás pensé que iba a ir, o estar, como hablar con abogados.
Ahora tenemos familias nuevas porque cada mamá que viene que le falta su hijo ya pasamos a ser parte de su familia.

 

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