Julio López
está desaparecido
hace 6402 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Se comprobó el armado de causa
Por Candela ((i)) - Tuesday, Dec. 18, 2012 at 10:11 PM
cmilaplata@gmail.com

Seguriad y Derechos Humanos

Se comrpobó el armado de causa

El juicio al militante social Facundo Goñi concluyó con su absolución y el pedido de investigación de los policías implicados. A mediados de junio Pol, como lo llaman sus compañeros, fue detenido y  acusado de “tenencia ilegal de arma de fuego y resistencia a la autoridad”.  Finalmente la fiscalía desistió de la acusación ante la falta de pruebas y solicitó que se investigara al personal policial de la Comisaría 1° de La Plata .

 

Goñi había decidió no aceptar un juicio abreviado que implicaba declararse culpable para así recibir una pena menor de seis meses. En cambio, enfrentó un proceso más largo arriesgándose a ser culpado de un delito que no había cometido y pudiendo quedar en prisión por cinco años. La razón que motivó a Goñi tiene que ver con sentar un precedente en la lucha contra la impunidad policial, en este caso el armado de causas. Hacía meses que la Comisaría 1° de La Plata lo amenazaba con que lo iban a “meter preso con papeles”, pero aunque lo intentaron, no pudieron concluir la operación.

Facundo Goñi es parte de un proyecto de  extensión de la Facultad de Derecho de la UNLP, motivo por el cual obtuvo inmediatamente el apoyo de dicha institución. A su vez, ante la importancia de lo sucedido el defensor general, Omar Ozafrain, tomó el caso. Apoyado también por diversas organizaciones sociales, se inició el juicio el martes 11 de diciembre.


Desarrollo del juicio

El juicio se abrió con las declaraciones de allegados, policías y peritos. Los primeros fueron los integrantes del proyecto de extensión de la Facultad de Derecho y Ciencias Jurídicas en el que participa Goñi. Ellos aseguraron haber presenciado situaciones en donde Goñi era víctima del hostigamiento de la policía. También rechazaron el hecho de que pudiera tener un arma ya que minutos antes de que fuera detenido, lo habían abrazado todos juntos, de manera que aseguraron que si hubiera tenido algo en los bolsillos lo hubieran sentido.

Luego declaró el imputado, quien dio su versión de lo ocurrido esa noche. Alrededor de las 22 hs, Goñi se encontraba en la plaza con un grupo de chicos, quienes al ver que la policía se acercaba se fueron. Goñi se acercó a los oficiales preguntándoles qué pasaba y a cambio recibió un golpe de puño. Fue esposado y encapuchado con su campera, “no escuché que llamaran a ningún testigo” relata. Una vez en la comisaria le sacan sus pertenencias y le piden que se saque el cordón de la campera, pero él decidió dejarla con sus pertenencias porque pensó que saldría al día siguiente. En la dependencia policial se negó a firmar el acta por el cual se le imputaba el delito de resistencia a la autoridad.  Al otro día en la fiscalía se enteró que también estaba imputado de tenencia ilegal de arma de fuego.

Prontuario de persecución policial

Facundo trabaja de limpiavidrios desde su adolescencia. Hace varios años se involucró en organizaciones de trabajo comunitario y actualmente participa de los Proyectos de Extensión Universitaria dependientes de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, subsidiados por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Este proyecto está destinado a niños, niñas y adolescentes en situación de calle para crear redes de contención y protección.

Según el informe anual 2011  de la Comisión Provincial por la Memoria, Goñi fue detenido 25 veces en el 2010. Aquel año comenzaron las amenazas de la Comisaría 1° sobre que le armarían una causa. Con altos y bajos  las hostigaciones sobre Goñi se mantuvieron durante dos años  y medio. Finalmente la Comisaría 1° se decidió a concretar sus amenazas en julios del 2012, con la detención que acabó en este juicio.

Al finalizar el relato contó que ya conocía al jefe de calle que lo detuvo esa noche ya que había sido agredido por él en otras cinco oportunidades. Según Goñi, la Comisaría 1ra tiene orden de sacar a quienes trabajan de limpiavidrios en Plaza Moreno debido a que “queda feo que lo hagan frente a la municipalidad”. Es por eso que ante la negativa de Pol de mudarse del lugar, el jefe de calle le había dicho que lo meterían “preso con papeles”. En este sentido cuenta que  el día anterior a su detención definitiva, hubo otro intento de detenerlo pero que fue evitado al llegar Marcela López, directora de acción social directa de la Municipalidad de La Plata y encargada del hogar donde residía Facundo.

Al día siguiente declaró Arias, el testigo del procedimiento de la detención de Facundo. El joven estudiante de derecho relató que venía distraído caminando por calle 6 sobre plaza San Martín, que no notó la secuencia de la detención hasta se acercó a la camioneta de la policía. Allí un oficial le dijo que debía salir de testigo de un procedimiento.

En un principio aseguró haber visto que sacaban un arma del bolsillo, ero al pedirle mayor precisión sostuvo que no podía confirmar que la hubieran sacado de su bolsillo. En la interrogación sobre el momento en que aparecía el arma en escena, Arias cometió dos veces un acto fallido diciendo que “no vi cuando le metieron el arma en el bolsillo”. También aseguró que el detenido estaba encapuchado por lo que de ninguna manera podría reconocer a Goñi como la persona que requisaron aquella noche.

“Traeme el arma que tengo un testigo”

Luego de Goñi declararon los tres policías que realizaron la detención; Lascano, Flores y Ponce. En su declaración hubo una serie de contradicciones. Mientras que el jefe de calle, Gastón Lascano afirmó no haber agredido a Goñi, el sargento Flores aseguró haberlo visto ensangrentado.  Además el defensor general preguntó sobre los motivos de la detención. Los tres plantearon que se trató de una denuncia por robo en el 911, sin embargo no pudieron explicar qué les hizo pensar que Facundo podría estar implicado, dejando entrever la arbitrariedad de la detención. En este sentido, el defensor sugirió al jefe de calle Lascano que “que repase el Código Procesal Penal para no infringir la ley”.

El segundo hecho significativo en el interrogatorio de los policías fue que se comprobó que el arma cabía en la palma de la mano, de manera que pudiera introducirse en el bolsillo sin ser percibido por el testigo presente en el procedimiento. Ozafrain pidió a Lascano que se colocará el arma en la palma de la mano, al hacerlo, el oficial la tapó por completo. Además, Flores aseguró posteriormente que “es chiquita, entra en la palma de una mano”.  Flores tuvo un traspié y dijo que una vez Goñi esposado, el superior Lascano le pidió “traeme un arma que tengo un testigo” , en lugar de “trae un testigo que hay un arma”.


“Desisto de la acusación”

De esta forma la fiscal dio inicio a la última audiencia. Graciela Riveros aseguró que al evaluar las pruebas objetivas del proceso entendía que “los funcionarios policiales actuaron con exceso de sus facultades al no encontrarse en una situación de flagrancia y tampoco entiendo que han justificado debidamente el estado de sospechas hacía Goñi. Procedieron igualmente a la requisa de un individuo sin orden judicial”.

La fiscal rechazó las acusaciones y también solicitó que se revisara lo declarado por el imputado. A raíz de ello se abrirá una investigación por “apremios ilegales” contra los oficiales que llevaron a cabo la detención. En este sentido, Ozafrain aseguró que “esta decisión  convierte esta causa en una causa paradigmática sobre cómo los procedimientos policiales conducen a la incriminación de inocentes”.

El mismo día que absolvieron a Facundo se cumplían 132 años de la policía bonaerense y el gobernador Scioli festejaba porque había sido aprobada la reforma al Código Penal Procesal. Esta reforma consta en negar las excarcelaciones a quienes hayan impedido el accionar policial con un arma de fuego. La justificación del gobernador tiene que ver con que así se podrá manejar la circulación ilegal de armas y controlar los crímenes más violentos.

El caso de Goñi es uno entre tantos y lo que él está denunciando es lo habitual del armado de causas. Entre esta modalidad de impunidad policial, el plantado de armas o la resistencia a la autoridad son las más usuales. En este sentido, organizaciones que trabajan en cárceles o con la justicia expresaron su rechazo: “en contradicción con lo que se sostiene públicamente, esta ley profundizará la lógica de trabajo policial, que redunda en detenciones ilegítimas, plantado de prueba y, en los casos más extremos, ejecuciones.”

Prontuario de persecución policial

Facundo trabaja de limpiavidrios desde su adolescencia. Hace varios años se involucró en organizaciones de trabajo comunitario y actualmente participa de los Proyectos de Extensión Universitaria dependientes de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, subsidiados por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Este proyecto está destinado a niños, niñas y adolescentes en situación de calle para crear redes de contención y protección.
Según el informe anual 2011  de la Comisión Provincial por la Memoria, Goñi fue detenido 25 veces en el 2010. Aquel año comenzaron las amenazas de la Comisaría 1° sobre que le armarían una causa. Con altos y bajos  las hostigaciones sobre Goñi se mantuvieron durante dos años  y medio. Finalmente la Comisaría 1° se decidió a concretar sus amenazas en julios del 2012, con la detención que acabó en este juicio.

agrega un comentario