Julio López
está desaparecido
hace 6401 días
versión para imprimir - envía este articulo por e-mail

Fábrica textil esclavista en Villa Celina. A 200 años de la Asamblea del año XIII
Por reenvío agencia walsh - Thursday, Jan. 03, 2013 at 7:27 AM

(AW) Este año se conmemora el bicentenario de la Asamblea del año XIII que un 31 de enero resolvía poner fin a la inquisición, las torturas y el tráfico de esclavos y declaraba la libertad de vientres de los hijos de esclavos que nacieran en suelo argentino. Era el principio del fin de la esclavitud. Sin embargo, a 200 años de aquella asamblea, en el 2013 aún hay medio millón de esclavos en la Argentina, encerrados en talleres clandestinos y campos de agricultura que requieren mano de obra intensiva. El 78 % de la ropa que se confecciona en la Argentina se realiza en talleres clandestinos donde más de 200.000 costureros están encerrados, trabajando por arriba de las 12 horas, sin ningún derecho laboral o gremial y con un salario inferior al mínimo.Solamente en el conurbano bonaerense hay màs de 30 mil talleres clandestinos entre los que producen para las marcas y para la feria la Salada o para ambos a la vez.


Y más allá de los esporádicos allanamientos que cada tanto engordan las estadísticas, el gobierno no penaliza ni a las marcas, ni a los capos de la Salada que abiertamente se jactan de confeccionar sus prendas en talleres ilegales con costureros superexplotados. Por el contrario, se premia a quienes se debería penalizar. Los líderes de la Salada viajaron el año pasado con la primer delegación oficial a Angola junto al Secretario de Comercio, Guillermo Moreno y hace pocas semanas la Chancillería llevó a Benito Fernández a una exposición a Paris, pese a que todo el país vio en el 2010 la cámara oculta de la Alameda donde se probaba que ese diseñador basaba su producción desde hace muchos años en un taller clandestino de Avellaneda.



LA DENUNCIA

En octubre de 2012 en un programa de la radio Constelación que dirige Alfredo Ayala se pedían costureros para un taller en Villa Celina y se indicaba un celular. Costureros de nuestra organización se pusieron en contacto con el dueño del taller, quien los reclutó en su camioneta en Mariano Acosta y Directorio en Parque Avellaneda y los llevó hasta su fábrica clandestina en el barrio Nueva Celina en la Calle 9 s/n entre la calle 6 y una cortada. En la cámara oculta que hicieron nuestros costureros se puede apreciar la inmensa fábrica clandestina de cinco pisos que regentea un hombre que se hace llamar Willy y que se jacta de pisar fuerte en el barrio y tener todo arreglado con la policía de la jurisdicción. El barrio está minado de talleres clandestinos como el que regentea Willy.

http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=ZITYLEXOsxc#! Video 30.000 TALLERES CLANDESTINOS ASÍ, EN LA PROV. DE BUENOS AIRES.

Willy reconoce trabajar para el Mercado Central donde dice tener puesto, al igual que en Flores y para clientes del sudoeste de la Capital y del interior confeccionando ropa para niños y para perros. A su vez, también reconoce que cuando rebalsa de pedidos, terceriza con otros talleres clandestinos. En su fábrica trabajan una decena de costureros un mínimo de 13 horas (a veces más), por dos mil pesos, la mitad del sueldo de convenio por ocho horas. Los costureros duermen en el taller como se aprecia en el videoinforme y salen de la fábrica solo cuando Willy lo resuelve. De hecho, en la conversación admite que «hace rato que no les doy una libertad» a los costureros y que si es por él trabajarían «las 24 horas». Cuando uno de nuestros costureros le plantea que no tiene documento en regla, Willy le responde categóricamente que «Estas conmigo, estás con Willy, no conoces quien soy yo, yo acá piso fuerte, tengo que arreglar con la cana, todo», con lo cual reconoce explotar trabajadores en situación migratoria irregular y totalmente fuera de la ley.

Por las inmensas dimensiones de la fábrica, cualquiera puede apreciar que Willy no es un tallerista pobre de recursos que está en la clandestinidad por razones presupuestarias. Nada de eso. La razón por la cual paga la mitad del sueldo de convenio haciendo trabajar casi el doble de jornada a los costureros es posible por la enorme corrupción de la policía local y los cuerpos inspectivos del Estado que miran para otro lado. Mientras Willy se lleva la plata con pala y una pequeña parte la distribuye en materia de coimas, los costureros viven encerrados en esa fábrica clandestina con extensas jornadas, cobrando un miserable sueldo y tomando aire de vez en cuando en la terraza.

La Alameda que ya ha denunciado a 106 marcas de ropa ante la justicia federal por basar su producción en talleres clandestinos; que ha denunciado que los responsables de la Salada también se enriquecen en base al trabajo esclavo que no respeta leyes, derechos, ni convenios, va a redoblar sus denuncias judiciales y públicas en el presente año en que se conmemoran 200 años de aquella Asamblea del año XIII que comenzó a tomar medidas contra la esclavitud y va a seguir reclamando que como en Italia y Brasil o como ya hiciera el Juez Federal Sergio Torres en el 2007 se allanen los talleres esclavos, se rescaten a los costureros y se incauten inmediatamente las propiedades y maquinarias para que sean reutilizadas social y dignamente por las victimas en forma cooperativa y bajo la supervisión del INTI u otro organismo del Estado competente. Para terminar con el trabajo esclavo, no alcanza con un feriado el 31 de enero. Hacen falta políticas públicas decididas para que en la Argentina del 2013 no tengamos más esclavos, ni excluidos.

Informes

15 6158 4835 (Gustavo Vera)

4115-5071 (La Alameda)

agrega un comentario