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UPCN y ATE pedirán un aumento en sintonía con el "carrito del súper"
Por Fuente: La Capital - Tuesday, Jan. 08, 2013 at 9:24 PM

Martes, 08 de enero de 2013 | Economía | Los gremios estatales de la provincia plantearon su posición de cara a la negociación colectiva de febrero próximo. Galassi dijo que tirar cifras "al voleo" sería una irresponsabilidad. Las negociaciones involucran a más de 100.000 trabajadores.

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Los trabajadores del peaje en la autopista Rosario-Santa Fe mantienen las barreras levantadas de forma intermitente en reclamo de acuerdo salarial.

Las paritarias provinciales toman temperatura. Los gremios estatales UPCN y ATE de Santa Fe salieron a sentar su posición de cara a las próximas negociaciones colectivas y coincidieron que el porcentaje de incremento salarial debería ser la del "carrito del supermercado". Así se sumaron a los planteos lanzados la semana pasada por los docentes públicos agrupados en Amsafé Rosario y a responder a las señales emitidas por el Ejecutivo provincial en pos frenar las expectativas sindicales, que adelantaron que reclamarán un 30 por ciento.

El ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Rubén Galassi, confirmó ayer que las paritarias serán convocadas "en la primera semana de febrero" e insistió que plantear cifras "al voleo" sería una irresponsabilidad. En el Estado provincial algo más de 100 mil trabajadores están involucrados de forma directa por las paritarias, aunque bajo distintos convenios. En tanto, otros 18.500 empleados lo están de forma indirecta, ya que se trata de las fuerzas de seguridad.

El secretario general de UPCN, Alberto Maguid, consideró que antes de discutir las perspectivas inflacionarias de este año en las negociaciones se deberán tener en cuenta la evolución del salario y la remarcación de precios de 2012.

"Los trabajadores respetamos al Ipec", dijo Maguid, pero resaltó que pondrá en la mesa paritaria la fórmula del "carrito de supermercado", que será "sobre esta base sobre la que nos vamos a manejar".

El histórico dirigente de UPCN dijo que "cualquier cifra con la que empecemos a discutir no podrá ser menor a la inflación de 2012, más un anticipo de lo que se proyecta para 2013".

El titular de ATE Santa Fe, Jorge Hoffmann, coincidió en que irán a la mesa paritaria con "una cifra que supere a la inflación real de Argentina". Además, el dirigente señaló que tendrán en cuenta los niveles de recaudación de 2012 y las proyectadas por el Ministerio de Economía provincial para este año: "En torno al 25 por ciento", recordó.

Del resultado de las paritarias que alcancen UPCN y ATE Santa Fe dependen unos 35.000 trabajadores activos, que se desempeñan en la administración central, que representan alrededor del 28 por ciento de la masa de empleados estatales en la provincia.

El Estado santafesino, bajo distintos convenios cuenta con una plantilla de 123.532 trabajadores, de los cuales el 41 por ciento son docentes y alrededor de 16 por ciento trabajan en el área de seguridad.

Para Hoffmann las negociaciones paritarias deberían comenzar "más temprano que tarde, porque un acuerdo temprano alumbra un horizonte de no conflicto".

En este sentido, Galassi confirmó ayer que abrirá la discusión salarial con los trabajadores estatales "en la mesa paritaria", la cual que será convocada "en la primera semana de febrero", dijo.

"Vamos a evaluar la inflación anualizada, el impacto que ha tenido en los salarios, y en esa mesa de discusiones vamos a definir la política salarial para 2013", señaló, y sostuvo que "como ha sido durante todos estos años, siempre se preservó el poder adquisitivo de los trabajadores provinciales".

El gobernador Antonio Bonfatti había asegurado el viernes pasado que su gestión aún "rasca la olla". También que el aumento salarial que se otorgará a estatales y docentes debe adelantar inflación futura, no compensación de lo ocurrido el último año.

En tanto, el titular de la departamental Rosario del gremio de los docentes públicos, Daniel Couselo, planteó que cualquier discusión salarial debería partir de "un piso del 30 por ciento hacia arriba".

Por su parte, la titular provincial de Amsafé, Sonia Alesso, no lanzó ningún porcentaje, pero advirtió que el sector terminó el 2012 "con un retraso salarial, porque no se reabrió la paritaria cuando lo solicitamos, y se le agrega el gran malestar entre los docentes porque este mes, el grueso cobró después del quinto día hábil".

Si bien desde la provincia evitan hablar de porcentajes, todos los mensajes están en sintonía, con la Nación, de ponerle un "techo" del 20 por ciento a las paritarias.

Sin barreras

Los trabajadores del peaje en la autopista Rosario-Santa Fe mantienen las barreras levantadas de forma intermitente en reclamo de acuerdo salarial. Por su parte, el Sindicato Aceitero de Rosario (Soear) informó que hoy realizarán paro nacional si no llegan a un acuerdo salarial con las patronales.

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Los médicos piden un 35 por ciento de aumento y reclaman un urgente llamado a paritarias
Por Fuente: La Capital - Tuesday, Jan. 08, 2013 at 9:27 PM

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Martes, 08 de enero de 2013 | La Ciudad

Los trabajadores nucleados en el Amra solicitan una recomposición salarial que sea retroactiva a enero.

Los trabajadores de los hospitales anticipan sus reclamos salariales. (Foto: A. Amaya)

Tal como sucediera la semana pasada con los docentes y estatales de ATE y UPCN, hoy los trabajadores nucleados en la delegación provincial de la Asociación Médica de la República Argentina (Amra) anticiparon que pedirán en paritarias un 35 por ciento de aumento.

Eduardo Taboada, titular de Amra, destacó que el pedido "es a partir de un básico de un 35 por ciento de incremento" y destacó que "esto se basa en que la inflación real es mayor a lo que dice tanto el Indec como el Ipec".

"A partir de ahí pedimos empezar la negociación lo antes posible, tratando de que sea a partir de enero o por lo menos retroactivo a enero", señaló el dirigente de Amra a "La que se viene" de La Ocho.

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Los municipales piden un aumento salarial del 30 por ciento
Por Fuente: La Capital - Tuesday, Jan. 08, 2013 at 9:30 PM

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Jueves, 03 de enero de 2013 | Economía

La Festram reclamará un porcentaje similar al que piden los gremios del sector privado. Son 35 mil los empleados de municipios y comunas involucrados en la negociación colectiva en Santa Fe.

Paritarios. Autoridades locales y gremios estatales se volverán a ver las caras a partir de febrero próximo.

La Federación de Trabajadores Municipales (Festram) adelantó ayer que llegarán a las paritarias de febrero con un pedido de aumento salarial del 30 por ciento, en sintonía con la mayoría de los sindicatos del sector privado, tanto los que arrancaron las discusiones —como bancarios y aceiteros— como los que lo harán en el segundo trimestre del año. Así lo reconoció el secretario general de la Festram, Claudio Leoni, quien cree que "ese es el incremento que se necesita para que el salario no pierda valor". Este porcentaje está lejos del deseo oficial de disciplinar los precios vía paritarias. Busca apuntalar un "techo" del 20 por ciento.

Las negociación colectiva de los estatales municipales implica a unos 35.000 empleados en la provincia, de los 43.000 que se de desempeñan en los Estado locales, ya que unos 8.000 son los trabajan bajo una contratación precaria o en negro. La única referencia aproximada sobre el número de empleados registrados por los Estados municipales y comunales surge del Instituto Autárquico Provincial de Obra Social (Iapos).

"Tenemos que discutir una recomposición salarial que garantice que los trabajadores obtengan un salario que los ayude a superar el costo de la canasta familiar y la inflación, que es lo que deteriora el salario", señaló el dirigente gremial al ser consultado por LaCapital.

Leoni puso sobre la mesa el doble estándar discursivo dentro del Frente Progresista. "Por un lado, el gobierno nacional dice que los valores los establece el Indec y por el otro los diputados de la oposición al gobierno dan otra referencia inflacionaria. Entre ellos, están los legisladores que pertenecen al gobierno de Bonfatti. Entonces, el gobierno santafesino debería manejar esas cifras si piensa igual que sus diputados", agregó.

El planteo de los legisladores nacionales del socialismo se asemejan a las cifras de inflación de las consultoras privadas (25 por ciento) y de provincias como San Luis (23,8 por ciento), que no fue intervenida por el gobierno nacional, mientras distan de las cifras de inflación que publica el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) —19 por ciento—, que desde mayo pasado parece converger hacia niveles similares en su índice de precios a los que publica el Indec, en torno al 1 por ciento mensual.

Leoni consideró que en el debate debe considerarse, además, la favorable evolución de la recaudación a partir del segundo semestre en la provincia. En el caso del Estado santafesino, los ingresos crecieron 23,5 por ciento en el acumulado entre enero y octubre.

Desde los gobiernos locales evitaron pronunciarse sobre el planteo de la Festram, entre ellas la intendenta rosarina Mónica Fein.

En cambio, el ministro de Gobierno y Reforma del Estado provincial, Rubén Galassi, consideró que "la negociación salarial va a ser difícil, como fue este año (por 2012). En marzo tuvimos conflicto con los docentes, pero después pudimos revertir esa situación, y se cumplió con los aumentos y los acuerdos. Reconozco que los dirigentes de UPCN, ATE y Amsafé le ponen una cuota de realismo a estas discusiones, porque saben que el mejor acuerdo es aquel que se puede cumplir". A nivel del Estado provincial los involucrados por las paritarias son 123.532 empleados.

"Hoy no podemos hablar de cifras, tenemos que terminar de ver cuál es la inflación interanual, no medida por el Indec porque da la mitad, sino por el Ipec, que al 30 de noviembre nos está dando 19 por ciento", dijo el funcionario, cifra que es coincidente con el "techo" que pretende el gobierno nacional para las paritarias de 2013.

Los privados. El planteo de un aumento salarial 30 por ciento para el 2013 expresado ayer por la Festram está a tono con los planteos de los gremios del sector privado. La Bancaria reclama una mejora salarial en torno a ese porcentaje, más un adelanto de 1.800 pesos a cuenta de futuros aumentos.

En tanto, la paritaria de los aceiteros, que junto a los bancarios marca tendencia para 2013, también elevó un pliego de demandas que incluye un incremento del 23,3 por ciento del salario inicial, para llevarlo a 7.640 pesos, y un aumento para las distintas categorías que promedia el 26 por ciento. Más una gratificación anual de 6.200 pesos.

Entre el sector privado y el público, en Santa Fe unos 672 mil trabajadores registrados que se verán afectados por el resultado de las paritarias en 2013.

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Paritarias: fuerte dispersión salarial en el empleo privado formal
Por Fuente: La Capital - Tuesday, Jan. 08, 2013 at 9:34 PM

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Lunes, 31 de diciembre de 2012 | Economía

La remuneración neta promedio es de $5.796, pero la diferencia entre los que más ganan y los que menos es de casi diez veces. Son más de 6 millones los trabajadores privados registrados.

Foto: Bancarios. Los trabajadores del sector financiero piden un aumento salarial del 30% para el año que mañana se inicia.

Por Marcos Cicchirillo / La Capital

Con las paritarias de los bancarios y los aceiteros se largaron las negociaciones colectivas de 2013. En la Argentina hay 6.209.518 trabajadores registrados en el sector privado, que mayormente se ven involucrados en ese proceso entre los meses de marzo y junio. Medio millón en Santa Fe.

Las paritarias de bancarios, comercio, metalúrgicos, camioneros, construcción, gastronómicos, estatales, que involucran a cerca de la mitad de los empleos formales, definen a trazos gruesos las cifras y porcentaje del resto de las negociaciones colectivas. En 2012, el porcentaje de aumento pactado por estos gremios no salió de la franja del 23 al 25 por ciento.

La discusión en el sector privado formal, que aglutina al 65 por ciento de los trabajadores sumando a los estatales —el resto está en negro o desocupado—, llega al 2013 con una remuneración neta promedio de 5.796 pesos, según el informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) sobre la Evolución de la distribución funcional del ingreso del tercer trimestre publicado a fines de la semana pasada. Por lo que el impuesto a las ganancias —desde los 5.782 pesos en el caso de los solteros— y las asignaciones familiares cobrarán aún más relieve en las discusiones salariales del año que mañana arranca.

Sin embargo, dentro del mundo laboral registrado existe una fuerte dispersión de sueldos. Al punto que la brecha, entre los 23.973 pesos de remuneración neta promedio que perciben trabajadores del petróleo, gas, carbón y uranio en la cima y los 2.549 pesos para los empleados "ornamentales" en el sector agrícola-ganadero, es de casi 10 veces. Esa divergencia incluso se da hacia el interior de un mismo rubro.

►Comercio

Con 1.121.000 de trabajadores es la actividad que más empleados registrados aglutina. La remuneración neta promedio en el sector es de 5.226 pesos, pero el promedio cuando se desglosa para los que se desempeñan en el sector mayorista se eleva a 5.852 pesos, mientras que en el minorista la media baja hasta los 4.882 pesos.

►Industria manufacturera

Este sector suma 1.208.000 de trabajadores registrados en el sector privado. Este es uno de los casos en los que se registra una gran dispersión de salarios según el rubro. En términos generales, la remuneración neta promedio es de 7.123 pesos, pero se incrementa hasta los 13.195 pesos para los fabricantes de radio y TV en el tope de la escala y baja hasta los 3.285 pesos para los que se desempeñan en la industria de productos de la madera excepto muebles.

En el caso del rubro textil, que tiene formalizados unos 108 mil empleados, la remuneración neta media es de 4.963 pesos.

En tanto, los metalúrgicos, con unos 260 mil trabajadores formales, la remuneración promedia los 7.070 pesos, pero con una dispersión que va desde los 11.946 pesos para los operarios de la industria siderúrgica y desciende a 4.689 pesos en el caso de los que están empleados en la producción de las estructuras metálicas - tanques depósitos.

Dentro de la industria automotriz, agrupados en el sindicato de mecánicos (Smata), hay registrados unos 80 mil empleados. En este rubro, la remuneración neta promedio es de 11.841 pesos.

►Agricultura y ganadería

Según el informe del Indec hay unos 334.874 trabajadores registrados, que perciben una remuneración neta de 3.353 pesos, el más bajo de todos los promedios medido por actividad. Sin embargo, hacia su interior están los trabajadores de criaderos de aves y huevos que ganan 4.522 pesos, mientras que se desempeñan en producciones ornamentales cobran unos 2.549 pesos neto promedio.

►Transporte y comunicaciones

Este sector, en el que se encuentra el sindicato de Camioneros, suma alrededor de 521.000 trabajadores, con un sueldo promedio de 7.591 pesos. Al igual que en la industria, hacia el interior del rubro están los empleados del sector aéreo (14 mil trabajadores) que ganan 14.765 pesos, mientras que la media para choferes de pasajeros, ferrocarril, taxi y remises —unos 164 mil empleados— promedian 6.698 pesos mensuales. En tanto, los relacionados con la carga, tanto de camión o ferrocarril (141 mil trabajadores), tienen un sueldo promedio 7.404 pesos.

►Gastronómicos

En este sector figuran 231 mil trabajadores formales, con un sueldo promedio de 3.665 pesos. Pero, en el caso de los empleados de los hoteles (unos 51.000 registrados) su remuneración neta media sube a 4.626 pesos, pero en el caso de los restaurante (179.000 formalizados) el promedio de ingresos baja a 3.391 pesos.

►Intermediación financiera

Tiene 178 mil trabajadores formales registrados, de los cuales 103 mil están en el sector bancario (con un sueldo promedio de 11.164 pesos) y 56 mil en seguro (9.591 pesos). El sueldo inicial de un bancario hoy es de 7.220 pesos, por lo que casi el 100 por ciento de los trabajadores del sector están alcanzados por el impuesto a las ganancias.

►Construcción

El rubro representado por la Uocra tiene 412 mil trabajadores registrados en el sector privado, quienes perciben una remuneración de bolsillo promedio de 5.129 pesos.

►Aceiteros

Hay unos 18.000 trabajadores en esta industria, que cobra un sueldo neto promedio de 10.042 pesos.

►Salud humana, pública y privada:

Tiene un sueldo promedio de 5.229 pesos.

►Servicios de agua, gas y electricidad

La remuneración neta promedio en este sector es de 11.485 pesos.

►Minas y canteras

Este sector cuenta con casi 55.000 trabajadores formalizados que ganan unos 18.044 pesos mensuales promedio de remuneración neta.

Los santafesinos involucrados

Santa Fe hay 505 mil trabajadores formales en el sector privado que se verán afectados los resultados de las paritarias. La remuneración neta promedio para este segmento de empleados es $5.212. Está 11 por ciento por debajo de la media nacional ($5.796) y 27 por ciento respecto al sector público nacional ($6.632).

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Con dureza, arrancó la primera ronda paritaria de 2013
Por Fuente: La Capital - Tuesday, Jan. 08, 2013 at 9:36 PM

Domingo, 30 de diciembre de 2012 | Economía

En Foco. Bancarios y aceiteros largaron la discusión salarial. La pelea por las paritarias 2013 arrancó sin escarceos. Gremios, patronales y gobierno se fueron a las manos en el primer cruce.

La pelea por las paritarias 2013 arrancó sin escarceos. Gremios, patronales y gobierno se fueron a las manos en el primer cruce. Las negociaciones de bancarios y aceiteros adelantan el cronograma de discusión que la mayoría de los sindicatos lleva adelante entre febrero y junio. Involucra, además, a gremios que disputan ingresos en ramas de alta rentabilidad y que están en el podio de ganadores de la estructura económica.

Los bancarios piden un aumento que promedia el 30 por ciento y, como otros años, una suma puente durante los primeros tres meses del año, hasta que se acuerde el porcentaje definitivo. Los aceiteros reclaman un incremento del 23,3 por ciento del salario inicial, una gratificación de fin año y un incremento proporcional según categorías, que promedia un 26 por ciento. El sindicato que discute paritarias con las grandes cerealeras del país y del mundo estableció como piso de discusión el salario mínimo, vital y móvil, calculado por la universidad según los criterios establecidos en el marco de la Constitución. Es decir, no como una canasta "de subsistencia" sino como sustento de derechos plenos de los trabajadores. Ese piso fue el punto de partida, en los últimos años, de negociaciones regionales como las del cordón agroexportador. Este año fue calculado en 7.640 pesos mensuales.

El gobierno salió a operar tempranamente para domesticar las expectativas. Los bancarios iniciaron medidas de fuerza luego de que el Ministerio de Trabajo suspendiera una audiencia para discutir salarios. En la respuesta no hubo dilaciones. El dictado de la conciliación obligatoria fue inmediata. Con una decisión, chicaneó el líder de los bancarios al ministro Tomada, que la cartera laboral no tuvo para evitar los recientes despidos en el sector.

La cámara que agrupa a los aceiteros no aceptó la negociación directa con la federación nacional de los trabajadores del sector. En el Ministerio de Trabajo y contraofertó con una suba de 16 por ciento, que el gremio consideró una provocación. Previamente, las empresas del sector firmaron con un sindicato aceitero, el que nuclea a los trabajadores de las plantas de San Lorenzo, de 19,5 por ciento.

Esa es la pauta que bajó el gobierno informalmente en todas las reuniones vinculadas a las paritarias. Desde la reunión de Guillermo Moreno con empresarios para sondear un pacto social, hasta la reunión de la CGT oficial con el jefe de Gabinete y, como secreto a voces, en cada audiencia que se realiza en el Ministerio de Trabajo. Las patronales privadas y públicas (gobiernos provinciales incluidos) se refugian en la militancia oficial por el 20 por ciento para cristalizar su posición en la disputa distributiva.

Los topes paritarios son para los empresarios la única intervención "virtuosa" del Estado en la economía. Pero aun cuando pensaran esquivar conflictos mayores mejorando sus propuestas, deberían sortear la resistencia del propio Ejecutivo. Porque en 2012 y 2013, además de una convicción ideológica y una ortodoxa receta económica, la discusión salarial es para el gobierno una cuestión política.

Puja. Bancarios y aceiteros son gremios que no están enrolados en la CGT oficialista. Permitir aumentos de magnitud en esos sectores erosiona la ya débil capacidad de disciplinamiento en el conglomerado de dirigentes gremiales afines y alienta una competencia que se sentiría en las cajas de los distintos segmentos de la administración pública y de las empresas que auspician el modelo nacional y popular.

En muchos sentidos, la puja salarial será un conflicto gordiano del político año 2013. El oficialismo usó buena parte del capital político acumulado para domesticar las aspiraciones de su principal base electoral: los trabajadores. A diferencia de otras peleas, esta es especialmente desgastante porque lo tensiona con su propio relato.

El empleo es el núcleo del modelo de la posconvertibilidad. Es la diferencia sustancial con los 90. Pero no el empleo en sí mismo, sino asociado a la posibilidad de una recuperación, aunque sea mínima, del ingreso y el poder adquisitivo. Asustado del propio proceso, el gobierno comenzó a intervenir activamente en los últimos dos años para cristalizar esa disputa. Los discursos de la extorsión sindical fueron fundacionales, seguidos del uso intensivo de las conciliaciones obligatorias en conflictos salariales, la "reducción de la nominalidad en 2012" y las intervenciones públicas para apuntalar resistencia de los gobernadores a dar aumentos de sueldos. La defensa de la porción fiscal de la puja de ingresos, el impuesto a las Ganancias a la cuarta categoría con los actuales pisos, también formó parte de ese ajuste.

La propia Cristina anunció que en 2013 la discusión de Ganancias estará vinculada a las paritarias. A diferencia de los primeros tiempos de la administración kirchnerista, cuando el aumento del mínimo era la frutilla del postre de las negociaciones salariales, el aporte del Estado para mejorar unos puntos y cerrar los acuerdos; es probable que este año forme parte de la negociación misma, como una suerte de flotador que moldee pisos y techos en la puja entre privados.

El objetivo explícito es contener los incrementos en la línea del 20 por ciento. Así lo bajó desde el primer momento el secretario de Comercio Interior en la reunión en la que lanzó el protopacto social. Un pacto al estilo Moreno. Con poco margen de discusión, mucha comunidad de intereses e interlocutores informales, tanto como su duración y contenido. Un protopacto lanzado con la impronta de la política de mesa chica que, no obstante, deberá validarse en un mundo institucionalmente más complejo, como el de los gremios. De hecho, el éxito obtenido en la dispersión sindical tiene un efecto pírrico similar a la destrucción del IPC en el campo de los precios. Elimina una herramienta de negociación centralizada.

La diáspora gremial en 2013 adquiere otra sensibilidad, por la realidad económica y la articulación política del mundo gremial y la interpelación del movimiento obrero al modelo. Poco parecen tener que ver a priori los saqueos con la discusión sobre el mínimo de Ganancias sobre el ingreso salarial. Pero la ilusión de encapsular esta última discusión en el capricho de y supuestas veleidades clasemedieras de una aristrocracia obrera, impide analizarla como el techo de una puja distributiva que hoy tensiona a toda la pirámide laboral.

Empleo. En una década de altísimo crecimiento y rentabilidad empresaria, mejoró el empleo y, en parte, el poder adquisitivo. En un lugar de la escala, esas mejoras fueron más significativas. Pero dentro de una misma clase y una misma identidad, la pirámide de los ocupados se asienta sobre una mediana de ingresos de 3 mil pesos mensuales, un 80 por ciento de la población con ingresos menores a 5 mil pesos y un tercio de trabajo asalariado no registrado, una gran porción de cuentapropismo o distintas formas de autoexplotación. Convive con desempleo juvenil y umbrales de inserción laboral con precariedad y desconocimiento de derechos. En un contexto, además, en el que la creación de empleo se desaceleró. Es en este mundo, que no extraña los noventa, que votó en los últimos años a los representantes políticos del modelo, pero que no logra zafar de la pelea diaria por la inclusión, es donde urge articular un relato político que compita en las expectativas de los jóvenes con la salida de la simple violencia delictiva.

Hace unos meses se realizó una reunión regional de servicios territoriales de empleo en la que se afinaron las estrategias para hacer llegar los muchos y buenos planes de inserción laboral que desde los tres niveles del Estado se instrumentan para acercar el mundo laboral a los sectores más vulnerables. Se ve en esos planes la semilla de un nuevo tipo de asignación universal, de una nueva línea de combate a la exclusión, con algo de sintonía fina. Parece una buena apuesta fortalecerla, pero desde la perspectiva que el trabajo es la base de una identidad que incluye ingreso, derechos y expectativas, con sus consecuentes demandas. Y no la gracia de un gobierno que decretó prematuramente el fin de la historia en la puja distributiva.

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